Alma encarcelada Platón

ONTOLOGÍA y EPISTEMOLOGÍA:
Para responder al problema del cambio propuesto por Heráclito y Parménides, Platón recurrirá al dualismo como mejor modelo. El mundo de las ideas (sin cambio) y el mundo sensible (con cambio). Es decir, la esencia de las cosas no cambia. Todas aquellas carácterísticas que Parménides confiere al ser, Platón se las da a las ideas. La verdadera realidad son las ideas, el mundo de lo sensible es una copia. La relación entre las ideas y las cosas es sencilla:
Desde el punto de vista de las cosas : participación o imitación de ideas — Desde el punto de vista de las ideas : estas son presencia de la realidad.
Las ideas son el objeto del concepto, pero no concepto.
Platón explica su teoría de la realidad mediante el mito de la caverna. Carácterísticas que Platón confiere al mundo de las ideas y al mundo Sensible:
– Mundo de las ideas: Es una realidad invisible (no se capta por los sentidos). Eternas, únicamente accesibles a través de la razón. Imperceptible, inmutable, realidades universales (Belleza), auténticamente reales, objetos de la ciencia, son valores…
– Mundo sensible: Es visible (accesible a través de los sentidos). Perceptible, sujeto a cambio. Son realidades particulares (lo bello). Supuestamente real. Objetos de la opinión y carentes de valor.
– Idea como concepto: Existente en sí mismo (no es mental). Eterna, simple e indivisible, inmutable (no cambia). Limitada (determinada). Objetiva. Preexistente. Independiente del mundo físico. Situada en un plano superior al mundo físico… Encierra la esencia de las cosas. Formas de las cosas
Jerarquía de las ideas: El mundo de las ideas se encuentra jerarquizado según Platón. La idea más importante de todas es el Bien que se encuentra acompañada de las ideas de Verdad y Belleza, basada en el equilibrio y la armónía. Las verdades o ideas éticas son las más importantes para Platón. El conocimiento debe avanzar éticamente Justicia= Belleza = Bien.
Para poder comprender la epistemología platónica es necesario tener en cuenta tres premisas principales: 1) Que las ideas están jerarquizadas y por ello, según Platón el conocimiento ha de avanzar éticamente. 2) Que las cosas solo participan o imitan a las ideas 3) Por último, que el alma procede del mundo de las ideas, aunque se encuentre en el mundo sensible.
Platón emplea tres conceptos o procesos sucesivos para explicar el proceso de conocimiento humano. Las ideas son trascendentales, su significación no depende de quién las use ni del objeto al que son aplicadas. Los procesos del conocimiento humano serán:
– El proceso de reminiscencia: Según Platón conocer es recordar. Conocer es un proceso de recuerdo de ideas conocidas en otras vidas. Platón dice que el alma pertenece al mundo de las ideas y que por ello el alma puede llegar a conocer las ideas, pues es de su misma naturaleza. El alma es eterna y por ello, aunque el cuerpo muera, el alma se transmigra. Para Platón conocer consiste en recordar ideas que el alma conocíó en otra vida. Este proceso de reminiscencia solo se puede llevar a cabo mediante el uso de la razón humana. El alma forma ideas a partir de su propia actividad racional. El alma al encontrarse en el cuerpo olvida las ideas y por ello ha de recordarles.
– El proceso de la dialéctica ascendente: Platón adopta el método socrático de preguntas y respuestas en sus diálogos. La idea de la dialéctica no es más que la ascensión al mundo de las ideas, es el procedimiento por el que se accede al mundo de lo inteligible. La vida es una escapada y dura ascensión hacía el Bien (mito de la caverna, ascensión de la caverna).

ANTROPOLOGÍA


Platón, al igual que en la realidad, plantea un dualismo también de manera antropológica, en el que el ser humano se divide en alma y cuerpo. Para Platón la esencia del ser humano se encuentra en el alma. El cuerpo es la cárcel del alma. El alma tiene la misma naturaleza que las ideas. El alma es inmortal y por lo tanto se transmigra. Según Platón la virtud que tengamos en esta vida nos acompañará en la siguiente vida, se transmigra. Es indivisible. El cuerpo impide al alma la contemplación de las ideas y pertenece al mundo sensible.
El alma tiene tres funciones: Función racional: Es una función inmortal, inteligente y de naturaleza divina. Esta función se desarrolla en la cabeza. Se ejerce como entendimiento. Función irascible: Tiene como misión defender. Esta función la sitúa en el tórax. Función concupiscible o apetitiva: Tiene como misión nutrir, y por ello ligada al cuerpo. Platón sitúa esta función en el abdomen.

Ética:



Virtud: Excelencia, Armónía, Purificación Excelencia:
Para Platón el conocimiento debe estar orientado éticamente, es decir, debemos ascender mediante el proceso de la dialéctica para alcanzar como último nivel el conocimiento del Bien. Platón, al igual que Sócrates, tiene una fiel creencia en el intelectualismo moral: quien conoce el bien hará el Bien. Para Platón, cada una de las funciones del alma deben estar orientadas por la virtud. Cada función del alma tiene su respectiva virtud hacia la que ha de apuntar. La virtud es la excelencia en la función de algo. La función racional tiene como principal virtud la sabiduría. Esta virtud es la que debe guiar al alma racional. Es la agudeza para realizar lo conveniente en cada situación. La función irascible o agresiva debe estar guiada por la fortaleza. Requiere esfuerzo y capacidad para sobreponerse Función concupiscible. La virtud que debe guiar esta función es la templanza, capacidad de calmar las pasiones. Se fomenta con el autocontrol.

Armónía


Virtud general que une y armoniza a todas las demás, asignándoles a cada una su función. La racional debe predominar. El orden de todos sus seres y fenómenos es la justicia.

Purificación

Platón afirma que la conducta humana debe estar guiada por la función racional del alma. Todo ello lo explica en el mito del carro alado.

POLÍTICA


Platón afirma que las virtudes que guían las tres funciones del alma deben estar relacionadas con la organización social de un Estado.
El alma racional cuya virtud es la prudencia debe estar relacionada con la clase social de los gobernantes. Un buen gobernante debe ser sabio y prudente. Platón pone como ejemplo de buen gobernante al rey filósofo. Debe ser un aristócrata, es decir, aquél que sea más sabio y posee mayor sabiduría. El alma irascible= cuya virtud es la fortaleza, es la que debe guiar a los guardianes y guerreros que han de sobreponerse al dolor y al pudor de la guerra.  El alma apetitiva, cuya virtud es la templanza debe guiar al pueblo, artesanos y labradores, para que no se revelen contra las decisiones de los gobernantes. La ciudad debe ser justa: Debe estar en armónía/justicia. Debe estar gobernada por una aristocracia de la virtud y el saber. ARISTOCRACIA DEL SABER . La educación como punto de partida y elemento principal. En todos los campos, científico, filosófico, físico y moral “No entre en la academia quien no sepa matemáticas”