Novela existencialista

TEMA 7 – La novela española desde 1939 hasta 1975

La novela  de este periodo esta muy condicionada por las consecuencias de la Guerra Civil.

La novela Triunfalista y existencialista 1940:


España se caracterizaba por la represión, la censura, el aislamiento internacional… Las pocas novelas publicadas son dadas desde la perspectiva del bando vencedor: Javier Mariño de Torrente Ballester (1943). También hay novelas de corte existencial son aquellas que enfocan a la España derrotada, respecto a esta surge el tremendismo que acentúa los aspectos mas violentos: Nada de Carmen Laforet (1945).

Realismo Social 1950:


A principios de los años 50 surge en España una nueva corriente narrativa de Corte Realista que pretende que el lector tome consciencia de las injusticias y desigualdades, para conseguir ese Realismo carácterístico se opta por el objetivismo mediante el narrador oculto y evitar valoraciones de un narrador, aunque este Realismo a veces evoluciona a una explícita crítica: El camino de Miguel Delibes (1950) donde relata el mundo rural.

Renovación narrativa 1960 – 70:


En este periodo debido a la industrialización y al turismo se suaviza la censura lo que permite una apertura a la influencia exterior, la novela se moderniza y da paso a la innovación narrativa. Este estilo dará uso a un narrador cambiante, el desorden cronológico, a desorden en los capítulos, finales abiertos, empleo de un estilo libre…: Tiempo de Silencio de Luis Martín Santos (1962), La saga/fuga de J.B de Gonzalo Torrente Ballester (1972) o Retahílas de Carmen Martín Gaite estas obras emplean técnicas carácterísticas de la época ya mencionadas.


TEMA 8 – La novela desde 1975 hasta hoy

La eliminación de la censura supuso la publicación de obras prohibidas, conviven en este periodo novelistas de la época de los 50, 60 o incluso anteriores como José Cela, Miguel Delibes, Gonzalo Torrente Ballester… Durante estos años la literatura se mercantiliza.

Carácterísticas: El cansancio de la experimentación hace que  muchos de los autores regresen a la novela tradicional de la generación del 98, el narrador suele ser el protagonista y no hay personajes de envergadura, se popularizan géneros como la novela-reportaje, ponen atención a la formalidad y son obras bien escritas, aunque los aspectos más significativos de la novela española de los últimos 30 años son: El carácter aglutinador; acoge gran parte de las tendencias, modalidades y temas, La individualidad; Cada novelista se orientará hacia un estilo propio en el que expresa su mundo personal y su visión de los hechos.

Estas novelas no se pueden identificar como narrativas, pero si como tendencias: 

Novela policíaca:

Presenta intriga – La reina del sur de Arturo Pérez reverté (2002), Novela histórica: 
Distanciamiento de los hechos con visión paródica – Soldados de Salamina  de Javier Cercas (2001), Novela Íntima: 
Se viaja a lo privado y se analiza a los personajes – Mortal y rosa de Francisco Umbral (1975), Novela de testimonio: 
La memoria de una generación y el compromiso – La fuente de la edad de Luis Mateo Díez (1994), Enfoque realista: 
Los autores vuelven a el arte de narrar – Juegos de la edad Tardía de Luís Landero (1989), Novela culturalista: 
Analizan y explican la cultura occidental.

Eduardo Mendoza:


publico en el 75 La verdad sobre el caso Savolta, fue un punto de partida para la narrativa actual, utilizó técnicas experimentales.
La ciudad de los prodigios (1986), en esta obra habla de la evolución de Barcelona desde 1888 hasta 1929 y refleja y explica el mundo real mientras analiza psicológicamente cada personaje. 

Javier Marías:

sus obras se caracterizan por la presencia de temas obsesivos.

Todas las almas (1989)

Corazón tan blanco (1992), son dos obras suyas que destacan. 

Antonio Muñoz Molina:

El objetivo en sus obras es el rigor en la construcción del relato para atraer así a sus lectores, destaca la calidad de la prosa y un ritmo cuidado. 
El jinete polaco
(1991)
Plenilunio (1997)


Señora de rojo sobre fondo Gris

Esta es una obra escrita por el autor Miguel Delibes, se publicó en el año 1991 y va dirigida a la esposa del Autor, este autor pertenece a la generación del 36.

El relato se enmarca en los acontecimientos de verano a otoño del 1975, momento en el cual España estaba en transición tras el fin de la dictadura a causa de la muerte de Franco, esta transición esta incluida en la novela como referencia histórica.

Esta obra esta dentro de las novelas posteriores a 1975, el desarrollo de la novela es calmado y transmite una sensación de vacío, como es lógico la obra presenta los rasgos y carácterísticas que presentaban otras novelas de la misma época como el Realismo y el entorno social de aquel entonces, la intimidad, juegos literarios…

La novela se narra como si fuera un monólogo, esta no presenta un orden por capítulos esto refuerza la unidad del texto. Esta escrita en 1ª persona, el protagonista es un artista que cuenta las historias mas importantes que ha vivido.

Es una novela pero también es en parte autobiográfica pues existe cierta relación entre Nicolás “prota” y el. La obra tiene ese nombre para hacer referencia a un retrato que pintó Eduardo Gracia sobre su mujer, los temas de la obra son el amor, la muerte, la ausencia y la soledad.

Esta obra toma un discurso íntimo sin interrupción, en la propia obra se desarrollan los sucesos que van a marcar el proceso de la enfermedad que su mujer padece con algunos saltos temporales sobre los que convergen recuerdos y detalles.