Sin título 1

“La Chabola” es un cuento escrito por Pedro Lezcano, poeta, dramaturgo y escritor canario. Dicho cuento pertenece al conjunto de relatos “Cuentos sin geografía”, obra publicada en 1968.

Pedro Lezcano, se relaciono con otros escritores de la época como Carlos Buosoño, Gerardo Diego o Carmen Laforet. Él mismo, asfixiado por el ambiente franquista y marcado por el fusilamiento de un maestro de izquierdas, se renueva dando vida a un nuevo hombre determinado por su actitud pacifista, por lo que hace de sus composiciones dentro de la literatura de la posguerra, un compromiso general con el medio ambiente y el regreso a los valores de una sociedad sostenible económica y ecológicamente. Así, se genera la novela social, una narrativa comprometida con conflictos políticos y sociales.Este autor muestra en sus obras la denuncia ante la condición humana y social de lapoblación más humilde, aparte de presentar el paisaje canario. El tema del texto es la crítica social planteada en la ironía del americano. Siguiendo esa trama, el autor nos expone el tema de la humildad y el desarraigo de la familia, presente en la pobreza que se describe en la chabola.
También aparece el contraste entre personas del mundo, exponiendo de tal forma las desigualdades entre ellas, en este caso de su época tras la guerra. Y, por último, la condición humana y el territorio.

En este relato, Pedro Lezcano nos muestra la recogida diaria de una familia chabolista, en contraposición con otro momento de impacto mundial, el lanzamiento de un satélite. La conexión entre ambos viene dada por la visita de un norteamericano para informarles de la inmediata desconexión de todos los electrodomésticos, lo que viene unido a la forma grotesca e irónica que le adjudica Lezcano, ya que el hogar descrito no posee electricidad.

Se puede dividir el cuento acorde a la estructura clásica de introducción-nudo-desenlace. La introducción se corresponde a los dos primeros párrafos, se introduce el tiempo y el espacio (“Cuando anochece…”, “La chabola de Juan el chinchorrero está…”), el nudo abarca el resto del texto salvo la última estrofa y en él se desarrollan los momentos previos a que la familia se acueste, finaliza con la última estrofa en la que los personajes se acuestan.

El narrador, es externo porque no es parte activa del relato, su perspectiva temporal es el presente, y tiene un dominio omnisciente de los acontecimientos dado que conoce sucesos pasados (“A Juanitita la llamaban Juanona cuando niña”, …). También interviene de forma subjetiva en la narración aportando sus impresiones (“que tiene buen humor”, …) al texto que, aparentemente, es objetivo.

Podemos situar la historia en la época de misiones espaciales que se llevaban a cabo en la estación de Maspalomas durante los años 60, de ahí esa presencia del americano. Por aquel entonces se realizaba desde esa estación un seguimiento y apoyo a las misiones Apolo.2.  Esta historia transcurre durante un anochecer.

Parece tener lugar en un enclave de Canarias por el dialecto empleado, además de otros elementos como la gastronomía: “gofio”, “papas” y meteorología : “palidecerán quemadas por el sol de la mañana”, “mareas del pino”. La historia transcurre en una chabola muy pobre ubicada en una playa, construida con diversos elementos reciclados.


Pedro Lezcano da vida a pocos personajes a lo largo de su breve relato, pero presenta tres generaciones marcadas. Por un lado Juan “el chinchorrero”, humilde y pobre. Además, se hace un oculto hincapié en su capacidad de poder leer (“Por eso Juan, que tiene buen humos y sabe leer los periódicos, suele llamar la ONU a su chabola”). Junto a él, su esposa, María, es de la misma condición que Juan. Los hijos, Pepa, Justo, Isabela y el niño, conforman la generación más joven, en contraste con la vieja Juanitita. Aunque es éste un personaje fugaz, tiene cierta importancia en el texto el hombre americano.

El autor nos presenta el escenario de la obra en el momento de anochecer del día en que transcurre la historia, específicamente su duración corresponde a un día completo. Se expone como lugar la playa, llena de estrellas marinas, en la que se sitúa la chabola que se describe como mísera, construida con todo aquello que encontraban, aprovechando las cajas y el plástico de un invernadero de tomates. Además sustituyen las puertas por cortinas, por lo que la suma de ello proporciona la sensación de gran pobreza. Dentro de la simbología que se presenta en el texto podemos encontrar el nombre de “Juanitita”, el cual expresa la vejez de la anciana a causa de su desarrollo de “Juanona” al que posee ahora, lo que muestra su deterioro. Además encontramos el elemento principal, la chabola, con su significado propio de pobreza. Por otro lado, las cajas de las paredes, que correspondían a cajas de tomates de exportación; las mareas del pino, que corresponden específicamente a GC, y el americano, que se vinculaba con la planta espacial que se estaba construyendo en Maspalomas durante los años 60.

Pedro Lezcano emplea una serie de recursos estilísticos. El carácter literario se ve en la expresión bella del lenguaje en la introducción. Utiliza una serie de palabras con uso metafórico como “sembrada ́ ́, “estrellas marinas de color sangre ́ ́, “sus hermanas celestes  ́ ́… En cuanto a “sus hermanas celestes palidecerán ́ ́ vemos una clara personificación. Este uso bello del lenguaje y esta descripción idílica se ve contrastado con la chocante realidad del segundo párrafo. Pedro Lezcano hace esto para llevarnos al tema escogido. Mediante la expresión “una sola pared de piedra seca… ́ ́ nos empieza a mostrar lo precario y decadente de la situación y los elementos descriptivos del espacio. Por otro lado, durante la explicación del nombre menguante de la abuela, aparece un asíndeton “A Juanitita la llamaban Juanona cuando niña, Juana siendo mujer hermosa, Juanita al enviudar ya entrada en años, y ahora, apena hilvanada ya a este mundo, la llaman Juanitita, como si su nombre, menguante año tras año, no fuese el de ella misma, sino el de su futuro cada vez más chico”. Observamos cómo se usa una degradación en el nombre, muy propia del léxico canario. En la expresión “apenas hilvanada ya a este mundo ́ ́ vemos una metáfora que pretende hacernos saber que esta anciana está unida a la vida por un hilo, que su vida es muy delicada y se acerca al final de sus días (“su futuro cada vez más chico ́ ́). Por último, hay una personificación y un símil en “como sus hermanas palidecerán” y un paralelismo en “que Pepa […], que justo […]”. Durante el transcurso de la obra es destacable el uso de lenguaje popular combinado con el irónico, caracterizado por el léxico y expresiones Canarias empleadas, introduciendo aún más la sensación del escenario canario. De esa forma Lezcano se sirve de: las mareas del pino, específicas de la isla, volador, carburo, choza, papas, gofio, arrebujar o berrea entre otros.

A causa de la sensibilidad que poseía Pedro Lezcano se presenta en la obra la idea de desigualdades en la sociedad, transmitida de forma irónica, grotesca y sarcástica, presentando de esta forma un compromiso con la sociedad y realizando una denuncia social.