Literatura: Generacion del 98

MODERNISMO Y GENERACIÓN DEL 98

Tradicionalmente,  Modernismo y Generación del 98 han sido consideradas dos grupos distintos, si bien hoy tienden a contemplarse como dos aspectos de un mismo movimiento literario. El término Modernismo, de origen hispanoamericano y en principio usado despectivamente, es anterior al de Generación del 98 (de origen español). Desde finales del siglo XIX se llamó modernistas a todos los autores que querían renovar el panorama literario anterior, oponiéndose al Realismo y a la poesía prosaica de finales del siglo XIX (salvo Bécquer y Rosalía de Castro, que serán tomados como modelos). El Modernismo se origina en Francia: el Parnasianismo, representado por Théophile Gautier, tiene como lema el “Arte por el Arte”, es decir, la búsqueda de la perfección poética desde un punto de vista formal; y el Simbolismo, representado por poetas como Verlaine, Rimbaud o Mallarmé, busca encontrar las significaciones profundas u ocultas de la realidad a través de los símbolos.

Las características comunes de la literatura modernista son los siguientes: el deseo de perfección formal (musicalidad, y recurren a ampliar los ritmos y las formas métricas), esmerada selección del léxico,  culto a la belleza sensorial ( la luz, el color y los efectos sensoriales), gusto por los temas de la mitología griega, el exotismo oriental y las civilizaciones antiguas, actitud de malestar y rechazo hacia el modo de vivir capitalista (sensación constante de soledad, de crisis espiritual en la que se exalta lo irracional, el misterio, la fantasía, el sueño, melancolía, tristeza), el cosmopolitismo (París), temas americanos (cultivo de temas indígenas), la búsqueda del “Arte por el Arte”.

Rubén Darío es el principal representante del Modernismo, aunque no fue el primero que inició este movimiento, pues hubo importantes antecedentes en José Martí (Cuba), Gutiérrez Nájera (México) y José Asunción Silva (Colombia). Pero sin duda sí fue el autor que fijó definitivamente este movimiento a partir de la publicación en 1888 de Azul. A este poemario le siguieron Prosas profanas y Cantos de vida y esperanza.

La poesía de Antonio Machado refleja la evolución de la lírica del momento. Su primera etapa se inscribe en el modernismo simbolista (Soledades, galerías y otros poemas). En general, se trata de una lírica intimista. El tema recurrente es el tiempo y el estilo es sencillo y de una sensorialidad poco estridente. Su segunda etapa (Campos de Castilla) entronca con el noventaiochismo. En algunos poemas líricos se produce la identificación entre el paisaje y el alma del poeta; otras veces, el paisaje provoca una reflexión histórica y crítica sobre la decadencia del presente y sobre el gran pecado hispánico, la envidia o el cainismo. Su estilo antirretórico, busca la palabra esencial.
Destacan también  Nuevas Canciones, Proverbios y cantares, Canciones a Guiomar… En prosa destaca Juan de Mairena, personaje ficticio a través del que reflexiona sobre literatura, filosofía, etc.



Manuel Machado se sitúa en la corriente intimista y melancólica del Modernismo. Entre sus poemas encontramos temáticas ligeras y desenfadadas y folclore andaluz.

LA GENERACIÓN DEL 98

Denominación discutida que engloba a grupo de autores literarios coetáneos (Miguel de Unamuno, Pío Baroja, Ramiro de Maeztu, Ramón Mª del Valle-Inclán y Azorín), con formación intelectual semejante, para los que el Desastre del 98 supone un punto de inflexión que los lleva a analizar en profundidad el problema de España. También desarrollan temas de carácter existencial (la fugacidad de la existencia, la muerte…) y religioso.

Miguel de Unamuno es la figura que se puede considerar guía de este grupo. El problema de España aparece en muchos de sus ensayos (En torno al casticismo). Otros ensayos de temática diferente son Vida de don Quijote y Sancho, sobre la obra cervantina, o Del sentimiento trágico de la vida y La agonía del Cristianismo, de temática existencial que lo emparenta con la filósofía de Kierkergaard. Como narrador, destacó por la creación de sus nivolas, novelas breves en las que predomina la idea sobre la forma y el diálogo sobre la descripción, como Niebla o San Manuel Buen, mártir.

Pío Baroja es el gran novelista de la Generación del 98 y su influencia en la novela española del siglo XX es determinante a causa de la sobriedad de su estilo, la fluidez de su desarrollo y su capacidad de observación. Agrupó sus novelas en Trilogías: “La lucha por la vida” (destaca La busca); “La tierra vasca” (Zalacaín el aventurero); “La raza” (El árbol de la ciencia).

Entre los temas principales que desarrolla José Martínez Ruiz, Azorín, encontramos la descripción de la tierra castellana, así como de figuras españolas históricas o literarias: La ruta de don Quijote y Castilla. Sus novelas prácticamente carecen de argumento y son más un pretexto para que el autor describa ambientes y aporte su punto de vista personal sobre el paisaje: La voluntad.

Ramón María del Valle-Inclán escribió poesía,novela y teatro. Evoluciona desde el estilo modernista hacia el esperpento. La novela de Valle-Inclán parte de la estética modernista con las Sonatas. La etapa intermedia, la representa la trilogía La guerra carlista. Culmina en el esperpento con El ruedo ibérico, que por su contenido,es una novela histórica y por su estética,un esperpento. En cuanto a la poesía, destaca El Pasajero o La pipa de Kif. Respecto al teatro, se inicia como modernista (El marqués de Bradomín). En el período intermedio cultivó un teatro mítico y las farsas. En su última etapa crea el esperpento, una nueva estética basada en la distorsión, que mezcla rasgos trágicos y grotescos con afán crítico (Luces de Bohemia).