Contexto del Realismo en España
Mejora social y cultural: Aumenta el acceso a la cultura entre las clases bajas, surgiendo un nuevo público lector.
Difusión: Crece la literatura popular a través de folletines y novelas por entregas en los periódicos.
Clases dominantes: La burguesía y clase media imponen nuevos gustos culturales.
Influencia en la literatura: Estas condiciones impulsan el desarrollo del Realismo y el Naturalismo, que buscan retratar objetivamente la realidad cotidiana.
Antecedentes del Realismo español:
- La obra de Cervantes y la novela picaresca.
- Las novelas de Stendhal y Balzac.
- Los folletines y novelas por entregas del siglo XIX.
- El cuadro de costumbres, que retrata escenas típicas y personajes sociales.
El Naturalismo (desde 1880)
Movimiento literario originado en Francia con Émile Zola, que lleva al extremo los principios del Realismo. Es a la vez una estética literaria y una visión del mundo.
Determinismo: La conducta humana está condicionada por la herencia biológica y el entorno social.
Materialismo: Niega la libertad individual; todo está determinado.
Narración objetiva: El narrador actúa como observador que no juzga ni interpreta.
Lucha por la vida: Inspirado en Darwin; sobrevive el más fuerte.
Crítica social: Intención moral al denunciar las injusticias y degradaciones sociales.
Personajes colectivos: Se enfoca más en grupos sociales que en individuos.
Autores Destacados del Realismo Español
Pedro Antonio de Alarcón (1833-1891): Evoluciona del liberalismo al conservadurismo católico. Escribió El sombrero de tres picos, narración breve de tema folclórico sobre las intenciones seductoras del corregidor hacia la molinera del pueblo.
José María de Pereda (1833-1906): Defensor de ideas tradicionales y católicas. Sus novelas costumbristas se ambientan en Santander. Obras destacadas: Sotileza, Peñas arriba, El sabor de la tierruca.
Juan Valera (1824-1905): Sus novelas ambientadas en Andalucía destacan por el estudio psicológico de sus personajes. Obras: Pepita Jiménez, Juanita la Larga.
Leopoldo Alas “Clarín” (1852-1901): Liberal, profesor y periodista. Escribió cuentos, novelas cortas y la obra maestra La Regenta, que narra el adulterio de Ana Ozores en Vetusta. Usa técnicas como el monólogo interior y el estilo indirecto libre, junto a detalladas descripciones y narrador omnisciente.
Emilia Pardo Bazán (1851-1921): Liberal, rechaza el determinismo francés y cree que los personajes están más condicionados por circunstancias puntuales. Muestra aspectos crudos de la realidad. Obras destacadas: Los pazos de Ulloa, La madre naturaleza.
Vicente Blasco Ibáñez (1867-1928): Republicano y admirador del naturalismo de Zola. En sus obras el determinismo social y hereditario marca a los personajes, llevándolos a finales trágicos. Obras: La barraca, Cañas y barro.
El Drama Romántico (1834-1844)
Rompe con el teatro neoclásico, con libertad en estructura (tres, cuatro o cinco actos), mezcla de trágico y cómico, prosa y verso, sin respetar unidades de acción, tiempo y lugar. La trama se complica con múltiples episodios. Las acotaciones son largas y detalladas para explicar la acción. Predomina la preocupación social, reflejando conflictos políticos y pasiones humanas. Tiene carácter histórico, situando la acción en épocas pasadas, aunque a veces solo para ambientar. El tema central es el amor absoluto, trágico y destinado al fracaso, junto a temas como el sino y la libertad rebelde. Los protagonistas son héroes mitificados que encarnan la libertad, con belleza física y espiritual, a veces con un lado diabólico, temidos porque conducen a la perdición. La heroína romántica es bella, sacrificada y activa en su lucha por la libertad. Obras clave: Don Álvaro o la fuerza del sino (Duque de Rivas, 1835), que mezcla honor, identidad y fatalidad en escenarios románticos, y Don Juan Tenorio (José Zorrilla, 1844), con influencias de El burlador de Sevilla, donde doña Inés salva a don Juan tras su arrepentimiento; consta de dos partes y siete actos.
El Género Narrativo en el Romanticismo
Destaca la novela histórica, que exalta valores tradicionales y el pasado medieval, con dos tendencias: liberal y tradicionalista, ambas con finales trágicos para el héroe. La narrativa fantástica incluye elementos sobrenaturales y personajes solitarios y misteriosos. La novela costumbrista presenta relatos breves, amenos y con lenguaje popular, centrados en la vida cotidiana, anticipando el realismo. Esta novela tiene dos tendencias: una conservadora y moralizante, y otra satírica, como la de Mariano José de Larra, cuyas críticas pesimistas aparecen en artículos como El castellano viejo y Vuelva usted mañana. Larra usa un estilo claro, directo, irónico y caricaturesco, con perspectivismo que ofrece múltiples puntos de vista. Sus artículos se dividen en crítica literaria y teatral, y en costumbres y política, con intención educativa y correctiva. Posteriormente surge la novela prerrealista, que busca reflejar la realidad con fidelidad, alejándose del costumbrismo romántico; su principal exponente fue Fernán Caballero con La gaviota.
Características del Romanticismo Español
El Romanticismo español surge alrededor de 1830 con la publicación de Don Álvaro o la fuerza del sino y dura unos veinte años hasta La gaviota de Fernán Caballero. Se caracteriza por la influencia de las ideas de libertad que permiten a las mujeres como Gertrudis Gómez de Avellaneda y Rosalía de Castro dedicarse a la literatura. El movimiento hunde sus raíces en la tradición, la patria y la Edad Media buscando los orígenes de las naciones a través de las lenguas vernáculas, los romances y las leyendas. Los artistas románticos buscan evadirse de la realidad refugiándose en su mundo interior revalorizando el sueño, lo sobrenatural y lo fantástico.
También vuelven la vista al pasado medieval y a lo exótico con paisajes naturales salvajes y culturas orientales. El Romanticismo exalta la fuerza del sentimiento valorando lo irracional y el subjetivismo que expresa la individualidad mediante la melancolía, el desengaño y el hastío.
Existe un ansia profunda de libertad y rebeldía que se manifiesta en la admiración por personajes marginados y transgresores como mendigos, piratas y prostitutas.
En literatura los románticos rompen con las normas métricas y en teatro no respetan las unidades clásicas manteniendo sólo la unidad de acción.
Sin embargo, el movimiento también refleja una gran frustración por la imposibilidad de alcanzar sus ideales creando un sentimiento de desengaño, angustia y en algunos casos llevando a la locura o al suicidio conocido como el mal del siglo.
Figuras Clave del Romanticismo Español
GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER
Iniciador de la poesía contemporánea española, vinculado al Simbolismo y Modernismo. Su obra breve pero intensa se publicó póstumamente en Rimas y Leyendas. Sus temas principales son el amor y la poesía. Su estilo destaca por el intimismo, sencillez, estrofas breves, versos cortos y rima asonante, influenciado por la canción popular. Usa encabalgamientos, repeticiones, aliteraciones, anáforas y paralelismos. El libro consta de 76 rimas: I-IX sobre la poesía y su inspiración; X-XXIX sobre el amor alegre y la belleza femenina; XXX-LI sobre el amor como dolor y desengaño; LII-LXXVI expresan angustia y cercanía a la muerte. Leyendas son relatos fantásticos con atmósfera romántica y ambientación medieval.
ROSALÍA DE CASTRO
Escribe en gallego (Follas Novas y Cantares Gallegos) reflejando crítica social y denuncia. En castellano, su obra A las orillas del Sar es más intimista.