El Ascenso de los Totalitarismos en Europa
El Fascismo en Italia
Italia salió perjudicada de la Primera Guerra Mundial. A pesar de estar en el bando vencedor, no consiguió los territorios esperados, pero acumuló una gran deuda, un alto índice de paro y una fuerte inflación. Esta situación ocasionó numerosas protestas, y los partidos demócratas se mostraron incapaces de encontrar una solución.
El 23 de marzo de 1919, Benito Mussolini funda los Fasci Italiani di Combattimento. Su programa inicial recogió tanto las reivindicaciones anticapitalistas de los obreros de izquierda como los principios nacionalistas. Proponía:
- Sufragio universal para hombres y mujeres.
- Jubilación a los 55 años.
- Obligación de los terratenientes a cultivar sus campos.
- Escuela laica y gratuita.
- Impuesto fiscal sobre el capital.
Al oponerse a los socialistas, atrajeron a la burguesía, que los financió, e ilusionaron a la clase media. En 1921, los Fasci ya contaban con 200.000 afiliados y se constituyeron en el Partido Nacional Fascista, abandonando sus ideas democráticas, revolucionarias y anticapitalistas.
En 1922 se produjo la “Marcha sobre Roma” de los camisas negras. Ante esta demostración de fuerza, el rey Víctor Manuel III aceptó la dimisión del gobierno y encargó a Mussolini formar uno nuevo.
Al principio, Mussolini fue prudente. Formó un gobierno de coalición con solo dos ministros fascistas, mientras él asumía los cargos de ministro de Interior y de Exteriores. Cambió la ley electoral para conseguir un parlamento sin oposición (con un 25% de los votos se obtenía la mayoría absoluta). Matteotti, jefe de la oposición, denunció esta situación y fue secuestrado y asesinado por un comando fascista.
El Nazismo en Alemania
La crisis económica en Alemania era enorme. Ante esta situación, la burguesía capitalista presionó al presidente Hindenburg para que nombrase canciller a Adolf Hitler, argumentando que él y su partido eran la única solución para Alemania.
Hitler formó parte de un grupo paramilitar de ideología pangermanista (antisemita, nacionalista y antimarxista). En 1920, este grupo se transformó en el Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán (NSDAP), conocido como Partido Nazi, cuyo lema era “Un pueblo, un imperio, un líder”. El partido creció rápidamente con el apoyo de la clase media. A él se afiliaron figuras como Göring, Hess, Rosenberg y Himmler, que ayudaron a Hitler en su ascensión al poder.
En 1924, planeó un golpe de Estado, el Putsch de la Cervecería, por el que fue encarcelado. En la cárcel escribió Mein Kampf (Mi lucha), donde explica su ideología: racismo, violencia, antisemitismo, anticomunismo y pangermanismo.
En 1932, ante el auge del comunismo, Hitler consiguió el apoyo de los grandes capitalistas (Thyssen, Siemens, Krupp, etc.) para que Hindenburg le nombrase canciller de Alemania el 30 de enero de 1933. En febrero, después del incendio del Reichstag, decretó la supresión de los derechos y libertades, acabando con la República de Weimar.
Al morir Hindenburg en 1934, Hitler se convirtió en Jefe de Estado, proclamó el Tercer Reich y comenzó la dictadura nazi, sin encontrar oposición.
Causas de la Segunda Guerra Mundial
Políticas
Las humillantes condiciones impuestas a Alemania por el Tratado de Versalles fueron un factor clave. Hitler, una vez en el poder, buscó aliados en Europa para conseguir sus objetivos expansionistas. Para ello, firmó varios pactos:
- 1936: Pacto Berlín-Roma con Italia, al que más tarde se unió Japón (Eje Roma-Berlín-Tokio).
- 1939: Pacto de Acero con Italia, una alianza militar.
- 1939: Pacto de no agresión con la URSS (Pacto Ribbentrop-Mólotov), con el que se aseguró su neutralidad. Este pacto tenía una cláusula secreta para el reparto de Polonia y los Estados Bálticos.
Económicas
Alemania tenía que pagar una fuerte indemnización a los vencedores de la Primera Guerra Mundial. Esto impidió su recuperación y provocó una grave crisis económica, con un paro masivo y constantes conflictos laborales y políticos que abonaron el terreno para el ascenso del nazismo.
Territoriales
Alemania inició una política de expansión territorial que las potencias europeas no supieron frenar:
- Marzo de 1936: Ocupó Renania (zona desmilitarizada controlada por Francia) y construyó la línea defensiva Sigfrido. Esta acción no fue sancionada.
- 1938: Se anexionó Austria (Anschluss), después de que el canciller austriaco Dollfuss fuera asesinado por los nazis años antes.
- 1938: Ocupó la región de los Sudetes en Checoslovaquia, alegando que vivían allí más de 3 millones de alemanes. Francia y Gran Bretaña aceptaron la ocupación en la Conferencia de Múnich.
- Marzo de 1939: Ocupó el resto de Checoslovaquia y proclamó el Protectorado de Bohemia y Moravia. Eslovaquia solicitó la protección del Tercer Reich.
La pretensión final de anexionarse la ciudad de Danzig y unir por carretera y ferrocarril las dos partes de Prusia motivó la invasión de Polonia el 1 de septiembre de 1939, dando inicio a la guerra.
Organización y Conferencias Clave de los Aliados
Durante la guerra, los países aliados se reunieron en varias ocasiones para unificar y planificar estrategias militares y políticas.
- Conferencia de Casablanca (enero de 1943): Roosevelt y Churchill decidieron la campaña del norte de África y la invasión de Italia.
- Conferencia de Quebec (agosto de 1943): Se trató la rendición de Italia.
- Conferencia de Moscú (octubre de 1943): Se decidió sustituir la Sociedad de Naciones por otra organización mundial y se estudió el desembarco de tropas en Francia.
- Conferencia de Teherán (noviembre de 1943): Roosevelt, Stalin y Churchill decidieron que Japón debía devolver a China todos los territorios ocupados y acordaron poner en marcha la Operación Overlord (el desembarco de Normandía).
- Conferencia de Yalta (febrero de 1945): Se decidió la división de Alemania en cuatro zonas de ocupación. Alemania pagaría 20.000 millones de dólares en diez años, la mitad para compensar a la URSS.
- Conferencia de Potsdam (agosto de 1945): Con la asistencia del nuevo presidente de EE. UU., Harry Truman, se planteó la estrategia para derrotar a Japón y se decidió la creación de un tribunal internacional para juzgar los crímenes de guerra y a los líderes nazis.
El Holocausto y los Campos de Exterminio
A partir de 1938, con la promulgación de las Leyes de Núremberg, se construyeron campos para deportar a los judíos y a quienes se oponían al régimen nazi. Algunos de estos se convirtieron en campos de exterminio, como Auschwitz, Treblinka y Sobibor. Dependían de las SS y su jefe era Himmler.
En los campos de trabajo, los deportados eran mano de obra esclava. Se trabajaba hasta 16 horas diarias y la alimentación consistía en un trozo de pan y sopa aguada. Cuando ya no eran útiles para el trabajo, eran incinerados en los hornos.
Los campos de exterminio fueron creados para el asesinato masivo de judíos. El más mortífero fue Auschwitz, a 60 km de Cracovia (Polonia), donde murieron aproximadamente 1.300.000 personas, de las cuales un millón eran judíos (1940-1945). Llegaban en tren, en vagones de carga que entraban hasta el mismo campo. Desde finales de 1939 hasta 1945, fueron asesinados 6 millones de judíos, además de gitanos, prisioneros comunistas y otros colectivos.
El 20 de noviembre de 1945, para castigar estos crímenes, 199 dirigentes nazis y colaboradores fueron juzgados en un tribunal especial en los Juicios de Núremberg.
Consecuencias de la Segunda Guerra Mundial
Humanas
La guerra dejó un saldo de más de 50 millones de muertos, de los cuales más de la mitad eran civiles, incluyendo mujeres y niños. El país con mayor porcentaje de muertos (20% de su población) fue Polonia, seguida de la URSS y Yugoslavia. Parte de estas muertes se deben a la “Solución Final”, el Holocausto judío. Hubo más de 30 millones de repatriados y personas desplazadas por la guerra, como los supervivientes de los campos, de quienes los Aliados tuvieron que hacerse cargo.
Económicas
Ciudades, puertos, ferrocarriles, carreteras y campos de cultivo quedaron destrozados. El coste total de la guerra se calculó en unos tres billones de dólares. Para solucionar los problemas de abastecimiento de materias primas y reconstruir Europa, el político francés Robert Schuman propuso en 1950 la creación de un organismo para el intercambio de carbón y acero. Así se creó la Comunidad Económica del Carbón y del Acero (CECA), precursora de la actual Unión Europea.
Políticas e Ideológicas
Estados Unidos se convirtió en la potencia hegemónica mundial. Se aceleró la pérdida de las colonias en África y Asia por parte de las potencias europeas. Surgieron nuevas repúblicas en Italia, Yugoslavia, Bulgaria, Rumanía y Albania. Ideológicamente, el mundo quedó dividido en dos bloques: el comunista, liderado por la URSS, y el capitalista, liderado por EE. UU., dando inicio a la Guerra Fría. La URSS se anexionó los Estados Bálticos y mantuvo bajo su influencia a los países liberados por el Ejército Rojo: Polonia, Bulgaria, Checoslovaquia, Hungría, Rumanía y Alemania Oriental. En estos países se suprimieron los partidos democráticos y se impuso el sistema político soviético.
Territoriales
La URSS recuperó los territorios que había perdido en 1914. Bulgaria cedió Macedonia a Yugoslavia y Tracia a Grecia. Alemania fue dividida en cuatro zonas de ocupación, que posteriormente darían lugar a dos estados: la República Federal Alemana (RFA) y la República Democrática Alemana (RDA).
