La Evolución de la Narrativa Hispanoamericana: Del Realismo Mágico al Post-Boom (1950-2000)

La Novela y el Cuento Hispanoamericanos en la Segunda Mitad del Siglo XX

En los años 40 y 50, la literatura hispanoamericana da muestras de superación de los modelos narrativos de las décadas anteriores. Las transformaciones en la vida social (el crecimiento de las ciudades, el mayor acceso a la enseñanza, la mejora de la industria editorial) y la influencia del surrealismo, del psicoanálisis y de los renovadores de la literatura europea y norteamericana (Faulkner, Joyce, Proust, *Kafka* y Dos Passos, especialmente) favorecerán el nacimiento de la llamada Nueva Novela.

Características de la Nueva Novela

Esta “Nueva Novela” (que se consolidará definitivamente en el *Boom* de los años 60) se caracteriza porque lo local irá dejando paso a los temas y símbolos de alcance universal. La característica más señalada es la incorporación de elementos fantásticos o maravillosos, a través de dos técnicas principales:

  • La poetización de la realidad (ver lo extraordinario que se esconde tras lo cotidiano).
  • La naturalización narrativa de lo maravilloso (tratar los hechos maravillosos como si fueran normales).

Temática

La temática en estas novelas es muy variada, pero destacan en ella dos compromisos:

  • Con el ser humano y sus problemas (Onetti y Sábato).
  • Con la historia convulsa del continente americano: destacan la corriente de “novelas de dictador”, iniciada por Miguel Ángel Asturias (*El Señor Presidente*), y continuada por obras como *El otoño del patriarca* de Gabriel García Márquez.

Otros autores reflexionan sobre la historia del continente (*El siglo de las luces* de Carpentier o *La guerra del fin del mundo* de Vargas Llosa). La metaficción (reflexión sobre el proceso creativo dentro de la obra) es también motivo recurrente (*Rayuela* de Julio Cortázar). Cabe destacar también una corriente humorística y otra erótica.

Técnicas Narrativas

Se produce la ruptura de la estructura tradicional de la novela (ruptura de la linealidad temporal, la introducción de un tiempo subjetivo de la memoria o de los sueños y la combinación de voces narrativas y puntos de vista diferentes). Otra característica es la sugerencia y el ritmo. Los autores experimentan con el idioma y rescatan los coloquialismos.

Autores Precursores y Tendencias Iniciales

Suelen señalarse a tres autores como aquellos que abrirán el camino a esta nueva narrativa:

  • Miguel Ángel Asturias (cuya obra *El Señor Presidente* aborda las injusticias sociales de su país a partir de la figura del dictador).
  • Alejo Carpentier (*Los pasos perdidos*, trata los conflictos entre la cultura indígena y las europeas).
  • Jorge Luis Borges, cuyas obras *Ficciones* y *El Aleph* cuestionan los límites de la realidad e indagaron, a través de lo ilógico y lo extraordinario, en los enigmas de la existencia.

La obra de estos primeros autores revelaba la existencia de dos tendencias principales en la Nueva Novela:

  1. El Realismo Mágico de Asturias, Carpentier o Rulfo (continuado luego por García Márquez o Vargas Llosa): ambos mundos —real y maravilloso— conviven en el discurso narrativo sin extrañeza (lo que produce el encantamiento en el lector).
  2. El Realismo Fantástico de Borges (y más tarde de Cortázar): los dos mundos resultan irreconciliables y la realidad se vuelve incomprensible y caótica (lo que provoca desazón y terror).

El Fenómeno del Boom (Años 60)

En los años 60 se produce el fenómeno llamado Boom de la novela hispanoamericana. Se trata del periodo de máximo esplendor de esta narrativa y supone la integración definitiva de lo fantástico y lo real. Causas que se añaden a las explicadas arriba son el apoyo que la Nueva Novela recibió por parte de editoriales españolas (Seix-Barral) y latinoamericanas (Losada), y la coincidencia en pocos años de muchas novelas magistrales.

De todas ellas, quizá sea Cien años de soledad (García Márquez) la que ha alcanzado mayor visibilidad internacional (es la novela más leída en castellano después de *El Quijote*). La obra es considerada el culmen del Realismo Mágico.

El Post-Boom y los Autores Novísimos (Años 70 y 80)

A mediados de la década de los 70, en el llamado Post-Boom, se observa un cambio de rumbo que predominará durante los 80. Sus protagonistas son los llamados autores novísimos. En líneas generales, se observa una mayor confianza en la capacidad del hombre para percibir la realidad, la presencia de vivencias cotidianas, la recuperación del realismo y el auge de la literatura testimonial y de la narrativa femenina (Isabel Allende, Laura Esquivel o Zoe Valdés).

Temática del Post-Boom

En cuanto a la temática, destacan:

  • La denuncia social, ideológica y política, donde cabe señalar la literatura testimonial (Rigoberta Menchú).
  • El exilio (*Primavera con una esquina rota* de Mario Benedetti).
  • El tema histórico (*Gringo viejo*, de Carlos Fuentes).
  • La incorporación en la novela de la cultura popular (el cine, la música, la televisión), las drogas y el sexo (*El beso de la mujer araña* de Manuel Puig).
  • El amor y el erotismo en Isabel Allende o García Márquez (*El amor en los tiempos del cólera*).
  • La temática ecologista, abordada por el chileno Luis Sepúlveda (*Un viejo que leía novelas de amor*).

Técnicas Narrativas del Post-Boom

Destaca la convivencia de la tendencia representada por las novelas realistas, de fácil lectura, con predominio de la trama, y la tendencia representada por la experimentación con la ausencia de la trama argumental.

Panorama Actual

El mapa actual es muy difícil de sintetizar dada la cantidad de países, autores y tendencias, y la falta de perspectiva histórica. Siguen escribiendo autores del *Boom* y del *Post-Boom*, con reconocidos premios (Vargas Llosa recibió el Nobel de Literatura en el 2010), pero comienzan a asomarse nuevas voces como el argentino Andrés Neuman o el mexicano Jorge Volpi.