La Red Fluvial, Lagos y Humedales en España: Vertiente Mediterránea y Zonas Palustres
Una vertiente hidrográfica es el conjunto de cuencas cuyas aguas vierten en el mismo mar. La vertiente mediterránea presenta una serie de factores y características distintivas.
1. Factores Físicos que Definen la Vertiente Mediterránea
La vertiente mediterránea de España se caracteriza por un relieve, un clima y una litología que influyen directamente en su red fluvial.
Relieve
El relieve es diverso, incluyendo montañas, llanuras y sierras. La presencia de cordilleras como Sierra Nevada, la Cordillera Penibética y los sistemas montañosos de la costa levantina influye en la red fluvial. Los ríos generalmente tienen trayectos cortos y desequilibrados, ya que fluyen rápidamente desde las montañas hacia el mar Mediterráneo, lo que les confiere una alta tasa de escorrentía.
Clima
El clima mediterráneo se distingue por sus veranos cálidos y secos e inviernos suaves y lluviosos. Esta estacionalidad en las precipitaciones afecta significativamente al régimen de los ríos, ya que la mayor parte del agua dulce es captada durante los meses de otoño e invierno. La escasez de lluvias en verano produce estiajes, donde los niveles de agua disminuyen drásticamente.
Litología
La geología de la vertiente mediterránea es mayormente sedimentaria, con zonas kársticas que han dado lugar a fenómenos como fuentes y manantiales. Estos elementos geológicos son clave para la formación de humedales y lagos, ya que las formaciones kársticas pueden retener agua y crear ecosistemas únicos.
2. Tipo de Régimen y Características Fluviales
Los ríos de la vertiente mediterránea presentan un régimen fluvial irregular, marcado por la estacionalidad climática.
Régimen Fluvial por Cuencas
- Cuencas de los ríos catalanes (Ter y Llobregat): Régimen pluvial y pluvionival.
- Cuenca del Ebro: Régimen pluvial y nivopluvial en cabecera (Pirineos). Es el río más caudaloso de España.
- Cuencas del Levante (Júcar, Turia y Segura): Régimen pluvial.
- Cuencas del Sur (Guadalhorce, Guadalfeo, Andarax): Régimen pluvial, con una agudizada sequía en verano.
Características Generales
- Presentan un acusado estiaje en verano (prolongado en los ríos más meridionales).
- Sufren crecidas en otoño (torrentes) debido al aumento de precipitaciones y al contraste entre las aguas cálidas del Mediterráneo y el enfriamiento rápido de la costa (fenómeno conocido como «Gota fría»).
- Sus cauces o ramblas permanecen secos gran parte del año, exceptuando el Ebro.
3. Zonas Palustres y Lacustres: Lagos y Humedales
Lagos
Los lagos son masas naturales de agua, dulce o salobre, acumuladas en zonas deprimidas que alcanzan cierta profundidad (10-15 m) y extensión (>50 ha). Se forman de manera natural por el aporte de precipitaciones, ríos o corrientes subterráneas. Según su origen, se distinguen dos tipos:
Lagos Endógenos
Son los originados por fuerzas del interior de la Tierra:
- Lagos tectónicos: Se forman en terrenos hundidos por la acción de pliegues o de fallas, como la laguna de La Janda en Cádiz.
- Lagos volcánicos: Se alojan en el cráter de un volcán apagado, como los del Campo de Calatrava en Ciudad Real.
Lagos Exógenos
Son originados por fuerzas externas, como la acción del hielo, el agua o el viento:
- Lagos glaciares: Se forman en las cubetas excavadas por el hielo en el circo del glaciar, como los lagos de Sanabria, Peñalara, Gredos, Enol y Ercina.
- Lagos cársticos: Se alojan en las cubetas creadas por la disolución de la caliza o del yeso, como las Lagunas de Ruidera.
- Lagos endorreicos: Son el tipo de lago exógeno más extendido en España. Se forman en zonas áridas o semiáridas donde las escasas aguas no tienen fuerza para llegar al mar y se acumulan en zonas deprimidas, como las lagunas manchegas de las Tablas de Daimiel y la laguna de Gallocanta (entre Zaragoza y Teruel).
- Lagos eólicos: Ocupan depresiones excavadas por la acción del viento sobre materiales blandos, como las closes del Ampurdán.
- Lagos litorales o albuferas: Son lagos salados separados del mar por un cordón de arena, como las albuferas del Mar Menor y de Valencia.
Humedales (Aguas Palustres)
Los humedales son extensiones de terreno cubiertas por aguas poco profundas, en muchos casos de manera intermitente, pues durante el verano baja su nivel e incluso pueden llegar a desaparecer. Pueden ser interiores (lagunas, charcas, turberas) o costeros (deltas, marismas, esteros, salinas, marjales).
Entre los humedales más destacados de España se encuentran:
- El Parque Nacional de las Tablas de Daimiel (Ciudad Real).
- Las marismas del Guadalquivir (Parque Nacional de Doñana).
- El delta del Ebro.
4. Aprovechamientos Hídricos, Impacto y Políticas de Gestión
Aprovechamientos Hídricos
Los recursos hídricos se aprovechan principalmente para el regadío, muy por encima del consumo de los hogares, siendo uno de los sectores económicos más importantes del litoral.
- Regadío Agrario: Es el aprovechamiento más tradicional y el más importante, pues ocupa el 80% del total. Debido a la escasez de agua en muchas áreas mediterráneas, la agricultura intensiva recurre a sistemas de riego. La producción de cultivos como frutas y verduras es especialmente relevante en zonas como Almería y Murcia.
- Consumo Turístico: Junto al consumo agrario, industrial y de los hogares, se añade el uso turístico, que aumenta en periodo estival, generando desequilibrios entre la disponibilidad del recurso y su demanda. Los humedales y lagos también atraen al turismo, lo que puede generar ingresos, pero conlleva riesgos de impacto ambiental si no se gestionan adecuadamente.
Impacto de la Actividad Humana
- Contaminación: La agricultura intensiva ha provocado una notable contaminación de los ríos y los acuíferos. Productos químicos, residuos y aguas residuales afectan la calidad del agua y, por ende, la salud de los ecosistemas acuáticos.
- Sobreexplotación: Se debe a la extensión de los cultivos de regadío y a las demandas derivadas del turismo, sobre todo en el área mediterránea. El abuso de determinados acuíferos está poniendo en riesgo los humedales españoles, que se dan en zonas en las que el nivel freático se halla en la superficie o muy cerca de ella.
Políticas Aplicadas y Gestión del Agua
Se han implementado diversas políticas para la planificación y gestión de los recursos hídricos (planificación hidrológica, planes de cuenca, etc.):
- Regulación del Caudal: Destacan los trasvases entre cuencas, así como la construcción de embalses para regularizar el caudal.
- Gestión Sostenible del Agua: Se han desarrollado políticas para promover prácticas de riego más eficientes y sostenibles, así como la conservación de humedales.
- Directivas de la UE: La Directiva Marco del Agua de la Unión Europea implica un enfoque integrado para la gestión de los recursos hídricos, buscando mejorar la calidad del agua y restaurar ecosistemas acuáticos.
- Conservación de Humedales: El Plan Estratégico de Humedales a 2030 ha establecido áreas protegidas para humedales y lagos, promoviendo la investigación y conservación de la biodiversidad en estos entornos.