Arte Nazarí: Legado y Esplendor Arquitectónico en la Alhambra de Granada

Introducción al Arte Nazarí

La última dinastía musulmana que perduró en suelo peninsular fue la nazarí, nacida de la proclamación como sultán de Muhammad I en 1232. Un pacto con Castilla en 1246 permitió la permanencia pacífica de esta dinastía hasta 1492. Desde 1237, la capital del nuevo reino se estableció en Granada y solo un año después se inició la construcción de la ciudad palatina de La Alhambra.

La Alhambra: Fortaleza y Ciudad Palatina

El conjunto palaciego de La Alhambra está constituido por dos construcciones diferenciadas: por una parte, el Palacio del Generalife, el primero que se construyó (último cuarto del siglo XIII), y por otra, el amplio entorno amurallado conocido como La Alhambra. El Generalife se halla fuera de La Alhambra, concretamente en una colina diferente. La Alhambra se construye sobre una colina rojiza que dará nombre a la fortaleza, la Sabika, sobre el río Darro y frente al Albaicín, conociéndose por ello con el nombre de «Fortaleza Roja».

Orígenes y Construcción

Lo primero que se construyó fue el recinto amurallado protegiendo la colina, obra que inició el propio Muhammad I, así como la Alcazaba o recinto militar que habría de complementar su amurallamiento. La Alcazaba presenta planta trapezoidal irregular, con su vértice angulado dominando desde lo alto la ciudad.

Esplendor bajo Yusuf I y Muhammad V

Será durante el siglo XIV cuando La Alhambra alcance todo su esplendor, bajo el mando de dos sultanes: Yusuf I y Muhammad V. El primero construyó diferentes puertas de acceso, como las de la Justicia y las de las Armas; reformó el Baño Real y construyó el Torreón de Comares. Por su parte, Muhammad V construyó el Palacio de los Leones; completó el Palacio de Comares y remodeló el Mexuar del mismo palacio.

Palacios Emblemáticos de la Alhambra

El Partal: Residencia y Recreo

El Partal es el palacio más antiguo de La Alhambra, construido por Muhammad III. Se trata de una residencia formada por un pabellón cubierto por una cúpula, una torre anexa llamada de las Damas y una amplia alberca frontal. Es un palacio de recreo. Su parte más representativa es su pórtico de entrada, precedido, como es habitual, por un sereno estanque, y formado por cinco amplios arcos angrelados, siendo el central más ancho y alto que el resto. En origen, los soportes de estos arcos serían pilares, aunque en una restauración fueron sustituidos por columnillas nazaríes que resultan anacrónicas. El pórtico se cubre con un alfarje (techumbre plana de madera labrada y ornamentada) con un cupulín central calado. En la parte occidental se eleva una torre observatorio, a la que en época de Muhammad V se adosaron viviendas.

Palacio de Comares: El Patio de los Arrayanes

También conocido como Palacio de los Arrayanes por los arbustos de esa especie que flanquean el estanque del patio central. El Palacio está formado por el famoso Torreón de Comares, obra de Yusuf I, debiéndose el resto del Palacio a la profunda reforma realizada por su hijo Muhammad V. Consta el conjunto palaciego de dos patios:

  • Uno, el llamado del Cuarto Dorado, que comunica con el Mexuar (o Sala de la Administración de Justicia) y en el que se localiza un pequeño oratorio.
  • El otro, que articula la estructura palaciega y es el que denominamos como Patio de los Arrayanes, y que tiene una característica forma rectangular.

En los lados menores de este patio se abren pórticos cuyos soportes son característicos. Los forman columnas sobre basas muy estilizadas, de mármol y de una delicadeza y fragilidad extremas. El capitel combina dos modelos: ambos de forma cúbica, pero mientras uno destaca por sus hojas de acanto muy estilizadas y atauriques, el otro modelo presenta decoración de mocárabes. Los arcos son de medio punto ligeramente apuntados, y presentan dos modelos de decoración: angrelados o arcos de mocárabes, si presentan este ornamento en el intradós. La función de soporte de la estructura arquitectónica la realiza la sucesión de arcos superpuestos.

Salón del Trono o de Embajadores

Se encuentra en el interior de la Torre de Comares. Debido al enorme grosor de las paredes, se abren en los lados norte, este y oeste tres alcobas, una en cada uno. En el lado norte se encontraba el trono de Yusuf I. La decoración presenta un zócalo inferior de alicatados y, sobre este, decoración de yeserías que emplea todo tipo de recursos ornamentales: lacería, ataurique y caligrafía. La sala se cubre con una techumbre de madera con apariencia de bóveda esquifada con decoración de mocárabes en el centro y estrellas de ocho y dieciséis puntas, y siete círculos concéntricos en los faldones. Podría ser una representación de los siete cielos del Paraíso Islámico. En los lados menores del Palacio están las dos estancias más importantes. Las del lado sur fueron destruidas al construirse el Palacio de Carlos V. En el lado norte, la Sala de la Barca, cuya cúpula de madera en forma de casco de barco invertido se incendió, servía como acceso a la Torre de Comares.

Palacio de los Leones: Innovación y Simbolismo

La función de este palacio era similar a la de Comares. La intención de Muhammad V al construirlo sería la de levantar una réplica al Palacio de su padre, colocando su trono en el Mirador de Lindaraja y su despacho en la Sala de las Dos Hermanas. Su construcción data del primer periodo del reinado de Muhammad V. Su estructura es la siguiente: presenta planta rectangular con una fuente central, la Fuente de los Leones, con lo que sigue el esquema de patio crucero. Presenta una estructura cruciforme, con dos templetes en los lados menores que avanzan hacia el patio; la interrelación espacial es notable. En los cuatro lados del patio se abren pórticos a base de arquería sobre columnas de mármol. Los capiteles siguen siendo de dos tipos: de hojas de acanto o de mocárabes. Los arcos siguen actuando como pantallas visuales, siendo de mocárabes o festoneados. La decoración: azulejos en los zócalos y, sobre estos, yeso y madera que reproducen un repertorio ornamental infinito de temas. Alrededor de este patio se disponen las estancias palaciegas: al lado norte, la Sala de las Dos Hermanas; al sur, la de los Abencerrajes; al oeste, la Sala de los Mocárabes; y al este, la Sala de los Reyes.

El Baño Real: Un Espacio de Bienestar

Se localiza al este del Palacio de Comares y contiene inscripciones alusivas a Yusuf I. Desde el Patio de los Arrayanes se accedía a los Baños. Primero a la propia vivienda del sultán y después a las dependencias de una terma o baño, llamado Sala de las Camas, el caldarium o Sala Caliente, y el tepidarium, sala templada de masajes y relajación. En la decoración destacan las claraboyas cenitales en forma de estrella en las bóvedas de la sala caliente, trazadas en forma de cañón apuntado.