Retórica y Oratoria en la República Romana
La oratoria es el arte de la persuasión por medio de la palabra, el arte de hablar bien. La oratoria en Roma era el medio más eficaz de conseguir votos y puestos políticos, e imprescindible para causas judiciales donde el orador debía inclinar a los jueces a favor de su cliente.
La oratoria tenía dos vertientes democráticas (política y forense). En el Imperio, esta función desapareció y se convirtió en un mero ejercicio de escuela. Los romanos eran un pueblo dotado de la palabra, aunque no se dieron cuenta de su potencial hasta el Helenismo. Tomaron ejemplo de los griegos. Apio Claudio el Ciego fue el primer orador romano del que se tiene registro.
En el siglo II a.C. se consolida la oratoria en Roma gracias a las aportaciones griegas y se crearon escuelas. Entre los oradores más destacados de este periodo se encuentran:
- Marco Porcio Catón: Enemigo de los griegos, preocupado por la moralidad de sus contemporáneos. Para él, era más importante el contenido que la forma.
- Publio Cornelio Escipión: Representa la influencia griega en la oratoria.
- Tiberio y Cayo Graco: Propusieron la polémica reforma agraria, lo que hizo resurgir la elocuencia popular.
- Quinto Hortensio: Máximo competidor de Cicerón, fue derrotado en el juicio contra Verres, en el que actuaba como defensor.
Tipos y Partes del Discurso Retórico
Cicerón, en su obra De Oratore, afirma que el deber del orador es persuadir. Es importante diferenciar entre oratoria y retórica:
- Oratoria: Producto elaborado con reglas retóricas.
- Retórica: Conjunto de normas encaminadas a la elaboración de una obra literaria.
Fases de la Elaboración del Discurso
- Inventio: Búsqueda de argumentos.
- Dispositio: Distribución y ordenación de esos argumentos.
- Elocutio: Utilización de la expresión formal (estilo).
- Memoria: Recordar cuándo usar cada elemento.
- Actio: Cuidado del aspecto físico y la puesta en escena.
Partes del Discurso
Cada parte exigía un método y una técnica para alcanzar la finalidad del discurso, que era instruir.
- Exordium: Introducción, cuyo objetivo es captar la atención del público y exponer los motivos.
- Narratio: Exposición del tema.
- Argumentatio: Presentación de las pruebas, que podía ser de dos tipos: Probatio (pruebas a favor) o Refutatio (refutación de argumentos contrarios).
- Peroratio: Conclusión.
Clases de Discursos y Estilos Oratorios
Géneros de Discursos
Se distinguen tres géneros principales de discursos:
- Judicial: Utilizado en procesos legales para defender o acusar en un tribunal.
- Deliberativo: Empleado en asambleas y el Senado para tomar decisiones y proponer soluciones.
- Demostrativo: Utilizado para alabar o censurar a alguien (panegíricos o vituperios).
Estilos Oratorios
Existían tres escuelas o estilos principales:
- Escuela Aticista: Estilo sobrio y sencillo. El máximo representante del Aticismo en Roma fue Licinio Calvo.
- Escuela Asianica: Estilo que tiende a lo exuberante y ornamental. Su máximo representante fue Hortensio.
- Escuela Rodia: Estilo intermedio entre los dos anteriores.
Marco Tulio Cicerón: El Orador Perfecto
Vida
Cicerón nació en Arpino, en el seno de una familia acomodada. Estudió retórica en Roma y completó su formación en Grecia. Regresó a Roma y comenzó su carrera política, siendo cuestor en Sicilia en el 76 a.C. El juicio de defensa a los sicilianos le hizo popular y se consolidó como abogado.
Llegó al consulado, pero su vida se vio amenazada por la conspiración de Catilina. Catilina fue acusado y Cicerón ordenó su muerte. Por este motivo, Clodio le exilió en Macedonia, donde escribió cartas a su familia. Regresó a Roma en el 57 a.C., aunque ya sin la influencia política que había tenido.
Durante la Guerra Civil, apoyó a Pompeyo. Tras la victoria de César, este lo perdonó, y Cicerón optó por retirarse de la vida pública para dedicarse a escribir obras filosóficas. Tras el asesinato de César, Cicerón volvió a la política, pero su enfrentamiento con Marco Antonio y la publicación de las Filípicas le costaron la vida.
Discursos de Cicerón
Los discursos de Cicerón se dividen en judiciales y políticos:
- In C. Verrem: Siete discursos contra Cayo Verres. Los sicilianos le acusaron de robo de bienes mientras era propretor de la isla.
- Pro Murena: Defensa de Murena, elegido cónsul y acusado de fraude electoral.
- Pro Sulla: Defensa de Sila, pariente del dictador, acusado de participar en la conjuración de Catilina.
- Pro Archia Poeta: Defensa de Arquías, acusado de usurpar el derecho de ciudadano romano.
- Pro Milone: Defensa de Milón, acusado del asesinato de Clodio.
- Pro Marcello, Pro Ligario y Pro Deiatoro: Discursos en los que apela a la clemencia de César defendiendo a estos personajes.
- In L. Catilinam (Catilinarias): Cuatro discursos denunciando la conspiración de Catilina. En el primero, acusa a Catilina de ser un peligro público; en el segundo, informa de su huida; en el tercero, informa del arresto de los conjurados; y en el cuarto, pide la pena de muerte. El hecho de ordenar la muerte sin un proceso judicial le valió el destierro y la confiscación de sus bienes, devueltos más tarde por revisión de los hechos.
- In M. Antonium Orationes Philippicae (Filípicas): Catorce discursos violentos en los que arremete contra Marco Antonio, y que finalmente causaron su muerte.
Estilo de Cicerón
Cicerón participó de joven en la corriente Asiática, pero evolucionó hacia un estilo sobrio y elegante. Se preocupó por la pureza de la lengua y la simetría en la frase. Sus discursos ofrecen un dominio absoluto de la técnica y de los recursos retóricos.
Producción Retórica de Cicerón
- De Oratore: Diálogo entre oradores de la época. Trata sobre la formación del orador, las características que debe poseer y la técnica. Cicerón argumenta que las técnicas deben ser naturales y adquiridas. Para él, el orador perfecto se distingue por poseer una formación integral.
- Brutus: Diálogo entre Cicerón, Ático y Bruto. Es una historia de la oratoria en Roma desde sus orígenes hasta su época. Después de referirse a los oradores primitivos, estudia las figuras que más han contribuido al género. Cierra la obra hablando de sí mismo y de su evolución.
- Orator: Desarrolla la teoría de los tres estilos: sencillo, moderado y sublime. Para Cicerón, el orador perfecto es el que domina los tres estilos y sabe usarlos adecuadamente, además de explicar los conocimientos que debe tener y el comportamiento durante el discurso.