El Foro Romano: Un Viaje por la Arquitectura y la Historia de la Ciudad Eterna

El Foro Republicano: Orígenes y Evolución

El Foro Republicano, ubicado entre la colina Palatina y la colina Capitolina, era un espacio propenso a las inundaciones del Tíber y del Velabro. Su ocupación fue continua hasta la última obra erigida en el Foro Romano: la Columna de Focas, dedicada por el emperador bizantino al Imperio Romano en el 609 d.C. A lo largo de los siglos, se produjo una sucesiva incorporación de nuevas construcciones y remodelaciones.

Este primer foro contaba con espacios importantes como:

  • El Sacellum Cloacinae: Un pequeño sagrario vinculado a la divinidad tutelar de la Cloaca Maxima. Esta última permitía drenar el río Velabro, desecar el foro y hacer posible su utilización.
  • La Curia y el Comitium: Primeros edificios públicos del siglo VI a.C., en uso hasta la época cesariana, cuando fueron derruidos y sustituidos por la Curia Iulia.

Edificios Emblemáticos del Foro Romano

Tabularium

Edificio que cierra el foro, formalizando su límite en la colina Capitolina. Construido en época de Sila, constituyó el archivo de la ciudad de Roma, donde se conservaban la Ley de las Doce Tablas, así como los archivos y documentos para el gobierno de la ciudad.

Templo de la Concordia

Templo del siglo IV a.C. que experimentó muchas transformaciones; la planta actual data de la época de Tiberio. Debido al poco espacio disponible por el Tabularium, adoptó una planta original: la cella se giró 90 grados, siendo uno de los lados largos el que está en contacto con la pronaos y el que permite la entrada al templo. Esto se debe a la limitación del espacio y constituye una tipología denominada cella barlonga.

Pórtico de los Dioses Consejeros

Una porticus consagrada a una divinidad griega, de época republicana, que se rehízo en época Flavia.

Templo de Saturno

Sufrió restauraciones. Es uno de los más antiguos, de inicios del siglo V a.C. Después del Templo Capitolino, es de los más importantes. Desempeñó un papel crucial hasta finales de la República, siendo el lugar donde se custodiaba el dinero de la ciudad, el erario. También se archivaban documentos oficiales, hasta que se construyó el Tabularium.

La Rostra

Podio donde magistrados y senadores daban sus discursos. Se reunían primero en la Curia Hostilia y el Comitium, y luego pronunciaban el discurso.

Arco de Septimio Severo

Se erige sobre la Via Sacra y marca el inicio del circuito procesional de la vía. En el extremo contrario se encontraba el Arco de Tito, que cierra el circuito y da paso a la zona del Coliseo.

Basílica Emilia

Centro jurídico y comercial, junto a la Basílica Iulia. Marco Fulvio Nobilior la comenzó en el 179 a.C., pero Emilio Lépido la terminó. Posee la estructura típica de las basílicas romanas, con las naves divididas por distintas columnas. La nave central es la más alta, permitiendo la iluminación. Contaba con terrazas que, entre planta y planta, permitían observar los combates de gladiadores.

Basílica Iulia

Sustituye una basílica anterior de principios del siglo II, la Basílica Sempronia. Julio César la inició, Octavio la terminó. Sufrió un incendio en época de Carino y fue restaurada por Diocleciano.

Templo del Divo Julio (o César)

Hexástilo, construido donde fue incinerado César. Es un típico templo romano que no tiene escalera axial delante de la pronaos, sino que allí se encuentra una exedra semicircular, conmemorando el lugar donde se dispuso la pira funeraria de Julio César. El acceso se realiza mediante dos escalinatas a los laterales del podio.

Templo de los Cástores

Fundado a inicios del siglo V a.C., ha tenido varias remodelaciones, la principal en época augustea, concluyendo en época de Tiberio. Solo se conservan tres columnas. Su origen se debe al agradecimiento de Roma por la intervención de Cástor y Pólux en la Batalla del Lago Regilo, donde se habían aparecido para ayudar a los romanos. Más tarde, se aparecieron en la Fuente de Juturna para anunciar la victoria de la batalla y, en agradecimiento, se erigió este edificio en su honor. El templo desapareció durante la época de Calígula, pues la construcción de la Domus Gai lo absorbió. El palacio se amplió hasta la colina Palatina y se decía que los Cástores que decoraban el templo eran una especie de porteros de esta domus. Esto fue una grandísima ofensa porque el témenos del templo es un espacio sagrado que no se puede tocar. Tras la muerte de Calígula, Claudio, debido a la naturaleza sagrada del templo, decidió devolverlo a la ciudad de Roma.

Templo de Vesta

Modelo de templo griego, de pequeñas dimensiones, donde se custodiaba el fuego de Vesta, que no se podía apagar. Además, custodiaba el Paladio, una escultura arcaica de madera de Minerva, que Eneas supuestamente había traído tras su huida de Troya. Las Vestales eran las encargadas de llevar a cabo estas tareas. Este orden sacerdotal era el único femenino que había en Roma y estaba conformado por mujeres de la más selecta aristocracia romana. Solían ingresar desde pequeñas, y llevaban a cabo, entre otros votos, el de castidad; si no cumplían, las enterraban vivas.

Casa de las Vestales

Junto al templo, parecida a una casa romana, con un peristilo central y, en la cabecera a un lado, un triclinium.

Templo de Antonino y Faustina

Al otro lado de la Via Sacra, dedicado por Antonino a su mujer tras su muerte para ser divinizada. Solo se conserva la fachada.

Tumba de Rómulo

Se creía que era la tumba del hijo de Majencio, Rómulo. Hoy se piensa que es una incorporación tardía que permite conectar la Via Sacra y el Templum Pacis.

Basílica de Majencio o Constantino

Comenzada por Majencio y terminada por Constantino. Se sustituyó la arquitectura adintelada por la abovedada. Solo se conserva una nave menor.

Templo de Venus y Roma

Cierra el foro y se erige sobre un alto podio que da al Coliseo. Fue construido por Adriano y terminado por Antonino Pío, dedicado a dos divinidades.