Griego.

Primer periodo. La poesía épica: Homero y Hesiodo

Los primitivos habitantes de Grecia, los pueblos de las civilizaciones egea y micénica, poseyeron una literatura oral, compuesta en su mayor parte por canciones referentes a las guerras, cosechas y los ritos funerarios.

Homero, El poeta ciego:

Los griegos de la época clásica consideraban como un hecho absolutamente indiscutible que la Ilíada y la Odisea, los dos grandes poemas épicos, compuestos sin duda en el siglo IX o en el VIII a. de J.C., eran obra de un mismo poeta, de un genio inmenso, al que llamaban Homero(cabe pensar que Homero –si es que existió- era jonio, originario de Esmirna)El historiador Heródoto le hace vivir hacia el 850 a. de J.C., fecha que indudablemente no es exacta, pero que no es incompatible con el conjunto de datos que han podido reunirse en torno a la creación de los dos grandes poemas homéricos. Una tradición muchas veces repetida pretendía que Homero era ciego, y que por lo menos siete ciudades griegas se disputaban el honor de haberlo visto nacer.Desde la más remota Antigüedad se han atribuido a Homero las dos epopeyas tituladas Ilíada y Odisea (alrededor de 28.000 versos) y que, efectivamente, se remontan al siglo IX-VIII a. de J.C., así como diversos himnos dedicados a los dioses, y un poema burlesco, compuesto en realidad  en los siglos VI y IV a. de J.C. por un autor anónimo: La batracomiomaquia.

La cuestión homérica

Se originó en el siglo XVII, con las conjeturas del abate D’Aubignac, escritas en 1674 y publicadas en 1715; este autor llega a la conclusión de que Homero no existió y de que los poemas homéricos no serían más que colecciones, obras colectivas, realizadas en varias etapas.En nuestros días, la cuestión homérica puede resumirse así:- La unidad de composición de la Ilíada y la Odisea apenas se discute. En ambos casos puede ponerse en evidencia un núcleo poético al que se habría sumado una serie de elementos diversos (adiciones, interpolaciones, etc)- En este caso, Homero sería, según unos, el creador del núcleo original; según otros, el poeta-rapsoda únicamente habría reagrupado y unificado el conjunto núcleo+adiciones.- Subsiste una cuestión: la Ilíada y la Odisea presentan, tanto en su fondo como en su forma, unas diferencias importantes. ¿Debe admitirse que existieron dos “Homero”, uno el de la Ilíada y otro el de la Odisea, o bien que el mismo autor es el origen de los dos poemas y que su estilo cambió de uno a otro? Hay que destacar que durante siglos estos dos poemas constituyeron la base de la educación griega, pues Homero atesoraba toda la sabiduría y todo el conocimiento.

La Ilíada:

Es una epopeya de veinticuatro cantos que relata el sitio de Troya (Ilión), en Jonia, por los aqueos. El origen de este conflicto es el rapto de helena, la mujer del rey aqueo Menelao, por Paros, hijo del rey troyano Príamo. El hermano de Menelao, Agamenón, es el jefe de los griegos (de los aqueos), cuyo héroe es Aquiles. El poema no cuenta la totalidad de la guerra de Troya, sino sólo su último año.

Formación del texto

La Ilíada fue compuesta en el siglo IX o en el VIII. El núcleo esencial es la cólera de Aquiles, a quien Agamenón ha arrebatado su esclava Briseida y que, por despecho, se retira del combate. Durante todo el tiempo que dura esta “cólera”, hasta el canto XVII incluido, el desenlace del combate es incierto. Por último, cuando Aquiles se entera de la muerte de Patroclo, su amigo más querido, se reconcilia con Agamenón y vuelve a la lucha; lleva a cabo una verdadera carnicería entre los troyanos y su acción culmina al matar en singular combate a Héctor, hijo de Príamo y el más valeroso de los troyanos (la Ilíada termina con la descripción de los funerales de Héctor en el canto XXIV).En los siglos VII y VI a. de J.C. los homéridas difunden el poma por el mundo griego (recitado por rapsodas y aedos) y desarrollan el tema inicial de la Ilíada. Lo mismo hacen con la Odisea y componen nuevos poemas, de los que nos han llegado algunos fragmentos, que forman lo que se denomina el Ciclo troyano.


Aspecto formal de la Ilíada: El término epopeya procede del griego epos, que significa “el verso por excelencia”. La Ilíada y la Odisea están escritas en hexámetros dactílicos.Es frecuente destacar como un signo del genio literario de Homero la forma de precipitarse en el tema: directamente, in media res, al decir de Horacio.Esta peculiaridad, que deja de lado las vicisitudes de la larga Guerra de Troya sin siquiera llegar a la toma de Troya, limitándose sólo a una fase de ella, deriva de la estructura más profunda y característica del arte homérico: no se trata de escribir sobre la guerra sino sobre el asunto que se expone en los primeros versos, es decir, la concepción trágica de que una pelea entre dos hombres, el enfrentamiento de la “perversa arrogancia” de Agamenón y la “funesta ira” de Aquiles, acarreará dolor, muerte y deshonor a muchos otros. Así “cumplíase el plan de Zeus”.Sin embargo, no ha de concluirse de ello que todo estaba dispuesto por los designios de Zeus. Por el contrario, a pesar de que los dioses participan en los asuntos humanos, la Ilíada es fundamentalmente un poema sobre los hombres, y el suceso narrado por Homero lo que hace es mostrar algo que proviene de la verdadera índole de las cosas. La Odisea: Este poema, dividido en veinticuatro cantos, narra las peripecias vividas por Ulises –uno de los jefes aqueos- y sus compañeros durante su largo viaje por el Mediterráneo (viaje que debe llevarlos a Itaca, patria de Ulises) tras la caída de Troya. La composición de este poema es más compleja que la de la Ilíada por dos razones:- La historia de los viajes de Ulises está narrada retrospectivamente.- Al relato de las aventuras de Ulises y de sus compañeros se superponen las aventuras de su hijo Telémaco, que ocupan los cuatro primeros cantos (constituyendo la Telemaquia)Telémaco, cuyo porvenir está amenazado por los pretendientes de Penélope, su madre, a la que se cree viuda, parte desesperadamente en busca de su padre. Cuando Ulises regresa a Ítaca, no es reconocido de inmediato por los pretendientes; acaba con ellos –ayudado por Telémaco- tras darse a conocer por ser elúnico que puede tensar su propio arco.Observación crítica. La Odisea fue compuesta a finales del siglo VIII a. de J.C., y puede que incluso a principios del siglo VII.Es indudable que la Odisea fue escrita después de la gran ola de colonización griega, mientras que la Ilíada, con toda certeza, es anterior a esta expansión.El héroe de la Odisea, Ulises, es un personaje infinitamente más próximo al hombre común que los héroes de la Ilíada. Ulises es “el hombre se las mil mentiras”, el “astuto”, el “sutil”. Durante sus aventuras prodigiosas –puesto que, de hecho, la Odisea es antes que nada un cuento fantástico en el que abundan los monstruos, los personajes extraños, las hechiceras, etc.-, Ulises siempre triunfa de las asechanzas que halla en su camino.En la Odisea el diseño de la intriga es de una factura notable y compleja, concebida con el fin de hacer resaltar una idea: ll desobediencia es contraria a la voluntad de los dioses y, por consiguiente, castigada. Por último, y en relación con el otro gran poema, la Ilíada, conviene recordar la observación del crítico más sutil de la Antigüedad, Longino, según la cual “Homero en la Odisea es como el sol poniente; posee aún más grandeza no más intensidad”.


HesiodoBiografía: Su vida transcurre en Beocia a finales del siglo VIII y principios del VII a.C. Su mundo era el de los pequeños campesinos, libres, pero que tenían que mantener una dura lucha por su existencia. Su iniciación poética tuvo lugar en las laderas del Helicón, en contacto con la naturaleza. Su inspiración es atribuida a las Musas que habitan el lugar. Posteriormente participa como aedo en ciertos certámenes poéticos.Obra: Su obra, si bien está compuesta en hexámetros como la épica, es de muy diferente carácter. Su finalidad es expresamente didáctica y presentan un carácter general profundamente moral. Las principales obras de Hesíodo son: Teogonía, Trabajos y días, y Escudo.En la Teogonía manifiesta su espíritu organizador, su voluntad moralizante, su conciencia didáctica, y el empeño humano que lo anima a enfrentarse a la realidad en su conjunto. Hesíodo quiere dar a conocer a los hombres, en su complejidad y con sus leyes, el mundo que les rodea, todo poblado de dioses. En el desorden de las tradiciones, cultos y rituales, quiere aclarar la “verdad”, estableciendo las relaciones genealógicas divinas, la actividad de cada divinidad y sus características. Quiere demostrar, además, que el mundo actual, bajo la égida de Zeus y su prole olímpica, es el mejor de cuantos fueron, pues ya todo está organizado, equilibrado y pacificado.En los Trabajos y días se hace evidente el espíritu reflexivo y profundamente moral de Hesíodo, que unificando tradiciones poéticas diferentes, presenta un panorama general sobre el modo de actuar del hombre frente a la tierra, de acuerdo con las leyes propias de su naturaleza. Ante la desorientación del hombre de la época de Hesíodo propone un claro sistema de valores: la justicia igual para todos, los derechos individuales, la estimación del trabajo manual, la piedad hacia los dioses, etc. En suma es la historia del hombre, de su lucha por sobrevivir, y de la esperanza de que, siguiendo una serie de pautas morales consigo mismo, con la tierra y con los dioses, las cosas marcharán bien.La Teogonía y los Trabajos, a pesar de la diferencia sustancial de tema (mundo de los dioses, mundo de los hombres), presentan gran número de elementos comunes: carácter didáctico, moral; un alto concepto de la divinidad; hegemonía de Zeus; orden del mundo; realismo pero con optimismo; interés por los hombres; así como diversas características de lengua y estilo.Para la elaboración de la Teogonía Hesíodo cuenta con una rica tradición cultural que arranca de época micénica, pero que incluye tradiciones aisladas de épocas anteriores, así como de culturas orientales. Así, por ejemplo, tanto en la tradición Hetita, como Babilónica o Fenicia, encontramos diversos mitos en los que se presenta una cronología de sucesión de dioses con rasgos parecidos a la griega: Urano-Cronos-Zeus, así como otros episodios complementarios.La estructura


fundamental de la Teogonía es la genealógica y diacrónica. Las grandes familias se suceden representando el proceso evolutivo y de transformación del mundo que, en fin, encuentra un orden justo y equitativo bajo el reinado de Zeus.La Teogonía no está formada por un simple elenco de nombres, no es un catálogo. Además encontramos una serie de elementos digresivos que se presentan en forma de himnos o de mitos secundarios y cerrados, o de excursus de carácter etimológico, etiológico, geográfico o personal. Todo este material se armoniza y compenetra en el cuadro general del poema, cuya finalidad no consiste únicamente en proporcionar los elementos de un gigantesco árbol genealógico, sino también en definir las características de las diversas divinidades, sus respectivas esferas de influencia en el mundo de los hombres, su mayor o menor importancia para la vida humana. Junto a esto, la finalidad fundamental es el principio moralizante de organizar el mundo bajo la justicia de Zeus.En lo que respecta a los Trabajos y días, también pueden rastrearse influencias orientales a diversas partes de la obra (egipcias, babilónicas, hetitas, etc.). Esta obra presenta una gran variedad de temas, a veces difíciles de relacionar entre sí (la justicia, el trabajo, consejos diversos, el calendario del labrador, el calendario de la navegación, los días buenos y malos). No obstante, se trata de un poema formalmente unitario: es un único y prolongado discurso exhortativo y didascálico, introducido por un breve himno y una apelación a la divinidad. Dentro de este discurso hay cabida para formas diferentes, en función del tema y del público al que va dirigido.Escudo es una obra de autenticidad discutida. El tema es también la justicia de Zeus, que se vale de Heracles como instrumento para limpiar el mundo de violencias e injusticias.Estilo:Hesíodo no compuso sus obras en el dialecto que hablaba, sino en el de la poesía épica tradicional (en hexámetros), con una base fundamentalmente jonia. No obstante existen algunas diferencias. Si bien, en general, presenta las características de la poesía oral tradicional: el uso de fórmulas organizadas dentro de un completo sistema constructivo, parece ser que esto en Hesíodo es una intención estilística que señala la dependencia formal con la tradición épica. Hesíodo utiliza en la construcción de su obra estos elementos que ayudaban a la memorización y composición oral de los poemas, pero es muy probable que fijara los textos por escrito.