Valor de adquisición: El precio pagado por el bien, más los costes adicionales necesarios para ponerlo en funcionamiento (como instalaciones, transporte, etc.).
Valor razonable: El precio de mercado o una estimación realizada siguiendo criterios objetivos (por ejemplo, comparando con bienes similares).
Valor neto contable: El valor de adquisición menos la amortización (la pérdida de valor por uso o tiempo) y los deterioros (pérdidas de valor no previstas).