De Lenin a Stalin: La Nueva Política Económica (NEP)
Como consecuencia de la Guerra Civil y del “Comunismo de Guerra”, la economía soviética se hundió y el desabastecimiento de las ciudades se hizo general. La Nueva Política Económica (NEP) supuso dar un paso atrás en algunas de las medidas más radicales del “Comunismo de Guerra” (como la desaparición de la propiedad privada y el control estatal de la industria y la agricultura) para permitir una economía mixta, en la que los sectores socializados controlados por el Estado convivieran con la economía de mercado. La NEP cumplió sus objetivos económicos y, en 1926, la economía soviética había superado los niveles anteriores a la Gran Guerra. Sin embargo, la vuelta al mercado hizo subir los precios y las diferencias entre precios agrarios e industriales, lo que generó problemas de desabastecimiento en las ciudades. Los beneficios privados aumentaron las diferencias sociales y propiciaron el resurgimiento de pequeños empresarios industriales.
La Lucha por la Sucesión de Lenin
En 1924, Lenin murió. Su sucesión desencadenó una intensa lucha entre los dirigentes del Partido Bolchevique. El debate se polarizó en torno a dos figuras clave: *León Trotski*, uno de los bolcheviques más destacados, y *Iósif Stalin*, quien desempeñaba la Secretaría General del Partido Comunista.
En 1927, el enfrentamiento se agudizó y Stalin consiguió hacerse con el poder. El resultado fue el establecimiento de un poder autoritario y la imposibilidad de cualquier vía de participación democrática. Stalin optó por poner fin a la economía mixta y forzar la colectivización de la tierra. Además, persiguió a sus oponentes y también a algunos de sus antiguos colaboradores que podían hacerle sombra, llevándolos a la cárcel o a la muerte.
El Legado de la Primera Guerra Mundial: Impacto Económico Global
La guerra tuvo grandes efectos sobre la economía mundial. Debilitó a los contendientes europeos, afectando negativamente a su población. La guerra también puso fin a la estabilidad financiera, lo que resultó en un aumento de las deudas públicas, especialmente las de origen estadounidense, contraídas para financiar el gasto bélico y que empobrecieron las arcas de los estados. Además, la emisión de papel moneda provocó una fuerte *inflación*, y en muchos países europeos los precios de los productos de primera necesidad habían aumentado muchísimo. La economía europea tuvo que hacer frente a la devolución de los préstamos de guerra y, en el caso de Alemania, al pago de las indemnizaciones a Gran Bretaña y Francia. El problema de la deuda fue motivo de disputa permanente entre los países a lo largo de la década de 1920.
Los Felices Años Veinte en Estados Unidos: Una Era de Prosperidad
Hubo un crecimiento económico que se basó en la mejora de la productividad, la disminución de los costes de producción y el uso de nuevos productos. En la década de 1920, se lanzaron nuevos electrodomésticos como el teléfono y la radio, pero sobre todo el automóvil. Aunque el coste de los productos fuera elevado, todo se podía adquirir gracias al crédito y a la venta a plazos. La industria del automóvil, liderada por Ford, impulsó el desarrollo de numerosos sectores industriales. Otro motor de la expansión fue la construcción, que generó mucho empleo. Se comenzó a construir los rascacielos de las grandes ciudades y, a partir del fuerte crecimiento urbano, las ciudades se expandieron y surgieron nuevos barrios obreros. Muchos estaban convencidos de que se había entrado en una época de prosperidad permanente.
Desequilibrios y Desigualdades
Las ganancias no se distribuyeron por igual en la población, por lo que unos tenían más beneficios que otros. Por otra parte, las industrias tradicionales entraron en crisis ante la disminución de la demanda, y los trabajadores (la mayoría afroamericanos) tuvieron que migrar a otras áreas urbanas y cambiar de empleo, casi siempre con un salario inferior.
De este modo, la capacidad adquisitiva de muchos estadounidenses no fue suficiente para absorber el aumento de la producción, resultado de la fabricación masiva. Por otra parte, los agricultores se habían endeudado durante la guerra para aumentar la producción y obtenían menos ingresos debido a la disminución de las exportaciones.
El Crac Bursátil de 1929: El Jueves Negro
Muchos inversores empezaron a poner sus acciones en venta con la esperanza de seguir obteniendo beneficios, y frente a la máxima oferta de títulos, las cotizaciones comenzaron a bajar. El llamado *Jueves Negro* pasó a la historia el 24 de octubre de 1929. El pánico se apoderó de los inversores y muchísimos títulos fueron puestos a la venta sin que encontraran comprador, lo cual provocó una caída en picado de su valor. En apenas unas horas, el mercado perdió millones de dólares. Fue el crac de la Bolsa de Nueva York. A partir de entonces, la furia por comprar lo antes posible para ganar más dio paso a la necesidad de vender cuanto antes para perder lo menos posible. La mayor oleada de ventas tuvo lugar el 29 de octubre, el *Martes Negro*, cuando los bancos exigieron el pago de los préstamos, forzando las ventas a cualquier precio.
Propuestas de Recuperación Económica: El New Deal de Roosevelt
El *New Deal* fue una nueva política que puso en práctica el presidente de Estados Unidos, Franklin D. Roosevelt, a partir de 1933 para superar la crisis económica. Sus principales líneas de actuación fueron:
- La construcción de obras públicas para crear empleo y aumentar la demanda, como grandes presas hidroeléctricas.
- El impulso de acuerdos de precios entre empresas para evitar su quiebra.
- La Ley de Ajuste Agrario, cuya finalidad era reducir la producción agraria.
- Las ayudas para el pago de hipotecas.
- La nueva Ley de Relaciones Laborales, que reconoció la libertad de sindicación y el derecho a la negociación colectiva de los salarios.
- La creación de un seguro de desempleo y subvenciones a los ancianos.
Para prevenir una nueva crisis, se estableció un control estatal sobre los bancos y se creó un nuevo seguro federal para garantizar los depósitos en caso de quiebra bancaria.
Resultados y Críticas del New Deal
Una buena parte de los empresarios y del Partido Republicano no vieron con buenos ojos la propuesta de Roosevelt y criticaron el intervencionismo. El retraimiento de los empresarios comportó que las inversiones privadas fuesen más escasas de lo esperado.