La Guerra de Sucesión Española (1700-1714)

La muerte sin descendencia de Carlos II en 1700 desencadenó una crisis sucesoria que dividió a Europa y a España. Por un lado, Felipe de Anjou (nieto de Luis XIV de Francia) fue proclamado rey como Felipe V, contando con el apoyo de Castilla que buscaba una monarquía centralizada. Por otro, el archiduque Carlos de Austria recibió el respaldo de la Corona de Aragón, que defendía sus tradiciones pactistas, y de una coalición europea temerosa del poder franco-español.

El conflicto adquirió una doble dimensión: fue una guerra civil entre españoles (felipistas contra austracistas) y una guerra internacional por el equilibrio europeo. Batallas decisivas como Almansa (1707) y Villaviciosa (1710) inclinaron la balanza hacia los Borbones, aunque la resistencia austracista no cesó hasta la caída de Barcelona en 1714.

Los tratados de Utrecht (1713) y Rastatt (1714) pusieron fin a la guerra. Felipe V fue reconocido como rey, pero España perdió sus posesiones europeas. Internamente, los Decretos de Nueva Planta abolieron los fueros de la Corona de Aragón, imponiendo un modelo administrativo centralista. Este conflicto marcó el inicio del reformismo borbónico y el declive de España como potencia hegemónica, mientras Gran Bretaña emergía como nueva potencia colonial.

La Política Exterior Borbónica (1713-1789): De la Pérdida de Hegemonía a la Recuperación Parcial

El Tratado de Utrecht (1713) marcó el declive de España como potencia europea: Felipe V fue reconocido rey, pero perdió los territorios italianos y flamencos, mientras Gran Bretaña obtuvo Gibraltar, Menorca y privilegios comerciales en América (navío de permiso y asiento de negros).

Felipe V (1700-1746)

Intentó revertir estas pérdidas:

• Con Julio Alberoni, invadió Cerdeña y Sicilia (1717-1718), pero la Cuádruple Alianza (Reino Unido, Francia, Austria) frustró sus planes.
• Los Pactos de Familia con Francia (1733, 1743) permitieron colocar a sus hijos en tronos italianos: Carlos (futuro Carlos III) en Nápoles-Sicilia y Felipe en Parma.

Fernando VI (1746-1759)

Optó por la neutralidad, fortaleciendo la Armada para proteger el comercio colonial.

Carlos III (1759-1788)

Más audaz, firmó el Tercer Pacto de Familia (1761):

• Derrota en la Guerra de los Siete Años (1763): España perdió Florida pero ganó Luisiana.
• Revancha en la Independencia de EE.UU. (1779-1783): Con Floridablanca, recuperó Menorca y Florida (Paz de Versalles, 1783), aunque no Gibraltar.

Balance: Los Borbones lograron recuperar parcialmente el prestigio internacional (especialmente en América), pero España ya no fue la potencia hegemónica del siglo anterior. La alianza con Francia resultó costosa y Gibraltar quedó en manos británicas.

Elaboración y Comprensión de Mapas Históricos: Un Enfoque Metodológico

Este mapa conceptual explica el proceso metodológico para crear mapas históricos, destacando cuatro etapas clave:

1. Selección de acontecimientos y zona geográfica: Prioriza la delimitación temática y espacial (ej: rutas comerciales del siglo XVI en el Mediterráneo).
2. Creación del mapa base: Incluye accidentes geográficos (ríos, montañas) que influyeron en hechos históricos (ej: el río Ebro en batallas medievales).
3. Leyenda y representación: Usa símbolos estandarizados (colores para territorios, fechas para movimientos militares) para claridad visual.
4. Título específico: Contextualiza tema y época (ej: “Expansión del Imperio Romano, 27 a.C.-14 d.C.”).

La segunda parte detalla cómo analizar estos mapas:

• Interpretación: Identificar tipo (político/económico) y contexto histórico (ej: mapa de fronteras post-Tratado de Utrecht).
• Análisis: Describir elementos (ej: símbolos de batallas) y relaciones (rutas comerciales vinculadas a ciudades).
• Comentario: Explicar causas/consecuencias (ej: migraciones por guerras).
• Conclusión: Sintetizar el impacto histórico (ej: cómo las fronteras definieron identidades nacionales).

Crítica: Aunque útil para principiantes, omite herramientas digitales (GIS) y no ejemplifica con casos concretos.

Tipologías de Mapas Históricos: Clasificación Temática y Ejemplos

Este esquema clasifica mapas históricos por temática, ilustrando su diversidad:

1. Políticos (A y B):
   • Muestran cambios territoriales (ej: Imperio Napoleónico) o eventos puntuales (batallas).
   • Incluyen símbolos como banderas (dominios) o flechas (movimientos bélicos).
2. Económicos (C):
   • Representan recursos (minas, cultivos) y rutas (comercio romano con iconos de oro/trigo).
   • Destacan conexiones entre geografía y economía (ej: Ruta de la Seda).
3. Demográficos:
   • Visualizan migraciones (flechas), densidad poblacional (tramas) o urbanización (puntos).
4. Culturales:
   • Mapean lenguas, religiones (ej: Reforma Protestante) o arte (rutas de peregrinación).

Ejemplos incluidos:

• “Viajes de descubrimiento“: Rutas marítimas (líneas discontinuas) con fechas (1462).
• “Comercio romano“: Símbolos de productos (ánforas para vino) y rutas (líneas rojas).

Fortalezas: Claridad visual y enfoque didáctico.
Limitaciones: Falta escala gráfica y profundidad temporal (ej: evolución demográfica).

Conclusión: Ambos mapas son herramientas esenciales para contextualizar procesos históricos, aunque el primero es metodológico y el segundo temático. Ideal para educación secundaria, pero requieren complementarse con análisis críticos.

El Estado Borbónico en España: Centralización y Reformas del Siglo XVIII

El nuevo Estado borbónico implantado por Felipe V (1700-1746) transformó radicalmente España mediante:

1. Centralización Política

   • Abolición de los fueros de la Corona de Aragón mediante los Decretos de Nueva Planta (1707-1716), eliminando sus instituciones (Cortes, Generalitat) e imponiendo el modelo administrativo castellano. Navarra y provincias vascas mantuvieron sus privilegios por su lealtad a Felipe V.
   • Creación de un sistema de Secretarías de Estado (predecesoras de los ministerios) que concentraban el poder en manos del rey, reduciendo el papel de los Consejos.

2. Uniformidad Administrativa

   • Implantación de una nueva estructura territorial basada en:
     • Capitanías Generales (poder militar y político).
     • Intendencias (control fiscal y económico, origen de las provincias).
     • Corregimientos (gobierno local con menor autonomía).

3. Reformas Militares

   • Modernización del ejército: sustitución de los tercios por regimientos, sistema de quintas para reclutamiento, y creación del cuerpo de ingenieros.
   • Reforzamiento de la Marina para competir con potencias como Gran Bretaña.

4. Política Dinástica

   • Establecimiento de la Ley Sálica (1713) para asegurar la sucesión masculina.
   • Influencia clave de Isabel de Farnesio, segunda esposa de Felipe V, en la política exterior para colocar a sus hijos en tronos italianos (Carlos III en Nápoles).

Consecuencias:

• España adoptó un absolutismo centralista al estilo francés, eliminando particularismos históricos.
• Se sentaron las bases del Estado moderno, aunque con tensiones entre reformismo y resistencia local.
• Las reformas continuaron con Fernando VI (política de neutralidad) y Carlos III (despotismo ilustrado).

La Ilustración en España: Ideas y Reformas del Siglo XVIII

La Ilustración española, influida por el racionalismo europeo, se desarrolló en dos fases:

1. Primera Ilustración (1700-1750)

   • Protagonizada por novatores como Benito Feijoo (crítico del atraso universitario) y científicos como Jorge Juan y Antonio de Ulloa (expediciones americanas).
   • Los proyectistas (como Jerónimo de Ustáriz) propusieron reformas económicas para modernizar el país.

2. Plena Ilustración (reinado de Carlos III, 1759-1788)

   • Despotismo ilustrado: “Todo para el pueblo, pero sin el pueblo”. Reformas desde el poder:
     • Expulsión de los jesuitas (1767) para controlar la educación y reducir el poder eclesiástico.
     • Reforma educativa: Creación de colegios reales (San Isidro) y academias científicas (Real Academia de la Lengua, 1713).
     • Modernización urbana (Madrid, Barcelona) y proyectos económicos (colonización de Sierra Morena).
   • Sociedades Económicas de Amigos del País: Focos ilustrados en Guipúzcoa (primera en 1765), Valencia (Cavanilles) y Barcelona (Campmany).

Conflictos y límites:

• Motín de Esquilache (1766): Revuelta popular contra reformas “extranjerizantes” (prohibición de capas y sombreros). Forzó un giro hacia ministros españoles (Floridablanca, Campomanes).
• Resistencia conservadora: Nobleza y clero frenaron cambios profundos. La Inquisición persistió, aunque debilitada.

Figuras clave:

• Carlos III: Máximo exponente del despotismo ilustrado. Promovió obras públicas, libre comercio con América y alianzas con Francia (Pactos de Familia).
• Jovellanos: Símbolo del reformismo agrario y educativo.
• Pablo de Olavide: Reformador universitario y urbanista.

Legado:
La Ilustración sentó bases para el liberalismo del siglo XIX, pero su impacto fue limitado por la falta de burguesía y el peso de las estructuras tradicionales. Destacó en ciencia (expediciones botánicas), cultura (academias) y administración (burocracia centralizada).

Los Partidos Políticos en el Reinado de Isabel II (1833-1868)

El reinado de Isabel II presenció la consolidación del sistema liberal en España, aunque marcado por la inestabilidad política y la división ideológica. Los principales partidos y movimientos políticos fueron:

1. Partido Moderado

Ideología:

• Soberanía compartida (Cortes + Corona).
• Estado centralizado: Control de ayuntamientos mediante gobernadores civiles.
• Sufragio censitario muy restringido (13% de la población).
• Reconciliación con la Iglesia: Frenó las desamortizaciones.
• Orden social: Priorizaron la estabilidad sobre las libertades.

Apoyos: Aristocracia terrateniente y burguesía financiera.
Líder: General Narváez.

2. Partido Progresista

Ideología:

• Soberanía nacional (poder en las Cortes).
• Descentralización: Mayor autonomía municipal.
• Sufragio censitario ampliado (aún excluyente).
• Reformismo radical: Continuó las desamortizaciones y defendió la Milicia Nacional.
• Libertades públicas: Prensa, reunión y asociación.

Apoyos: Pequeña y mediana burguesía industrial.
Líder: General Espartero.
Problema: Solo accedían al poder mediante pronunciamientos militares.

3. Unión Liberal (1854-1868)

Ideología:

• Centrismo: Fusión de moderados “progresistas” y progresistas “moderados”.
• Soberanía compartida y orden social.
• Política pragmática: Alternativa a los extremismos.

Apoyos: Clases acomodadas.
Líder: General O’Donnell.

4. Partido Demócrata (1849)

Escisión del progresismo:

• Sufragio universal masculino.
• Limitación del poder real.
• Derechos sociales: Instrucción pública gratuita, libertades amplias.
• Apoyos: Clases medias y populares.

Escisión republicana:

• Antimonarquismo: Divididos entre centralistas (unitarios) y federalistas (Pi y Margall).

5. Carlismo

Ideología:

• Absolutismo: Soberanía real y defensa del Antiguo Régimen.
• Foralismo: Mantenimiento de fueros (Navarra, País Vasco).
• Catolicismo ultraconservador: Restauración de la Inquisición.

Apoyos: Nobleza rural, clero y campesinos tradicionalistas.
Conflicto: Tres guerras civiles (1833-40, 1846-49, 1872-76).

Análisis de la Caricatura Política “La Flaca” (1869)

1. Identificación (1.5 puntos)

• Ámbito geográfico: España, tras el exilio de Isabel II.
• Cronología: 1869, durante el Gobierno Provisional del Sexenio Democrático (1868-1874).
• Personajes/Fenómenos:
  • Isabel II: Exiliada tras la Revolución Gloriosa (1868), representada como una figura en decadencia.
  • Familia real borbónica: Simboliza el fin de su reinado.
  • Pretendiente carlista (Carlos VII): Aspirante al trono, ridiculizado como un candidato fracasado.
  • Agencia de empleo (“Se colocan reyes”): Crítica a la inestabilidad monárquica y a los intentos de restaurar la corona.
• Contexto: La revista La Flaca, de tendencia republicana y satírica, refleja el clima político posrevolucionario, donde monárquicos y carlistas pierden relevancia frente a las opciones democráticas.