La Constitución de 1812: Pilar del Liberalismo Español
Nos encontramos ante un texto de naturaleza jurídico-constitucional, al tratarse de la Constitución de 1812, la primera de nuestra historia constitucional, que introdujo en España los principios del liberalismo. Se trata de una fuente primaria.
Autoría y Destinatarios
- Autores: Los diputados liberales de las Cortes de Cádiz en 1812, destacando figuras como Agustín Argüelles o Muñoz Torrero.
- Destinatarios: Estaba dirigido al pueblo español, a Fernando VII y, de manera secundaria, a José I.
Idea Principal y Consecuencias
La idea principal del texto es el fin del Antiguo Régimen y el inicio de un Estado Liberal. Se mantenía la monarquía como forma de Estado, pero su poder quedaba limitado. En definitiva, la revolución liberal triunfaba, estableciendo principios fundamentales:
- Separación de poderes.
- Reforma de la Administración del Estado.
- Supresión del orden estamental.
- Introducción de medidas de libertad económica.
Contexto Histórico: La Guerra de Independencia y las Cortes de Cádiz
El levantamiento del pueblo de Madrid el 2 de mayo de 1808 marcó el inicio de la Guerra de Independencia contra los franceses. La inmensa mayoría del país no reconoció a José I como rey de España y la ausencia de Fernando VII provocó el surgimiento de juntas locales que asumieron el poder. Al frente de estas, se formó una Junta Suprema Central, con el fin de dirigir la guerra y estructurar el país mediante normas que pusieran fin a las instituciones del Antiguo Régimen.
El avance del ejército francés obligó a la Junta a trasladarse a Cádiz y, en 1810, esta se autodisolvió, traspasando el poder a un Consejo de Regencia que procedió a la convocatoria de elecciones a Cortes. Estas, según la Junta, debían convocarse según el procedimiento tradicional del Antiguo Régimen; sin embargo, se convocaron como deseaban los partidarios de la revolución: como una cámara única.
En septiembre de 1810, las Cortes se reunieron en Cádiz como una asamblea constituyente y revolucionaria. Durante los debates del proyecto de Constitución, se observó una división en tres grupos ideológicos:
- Absolutistas: Partidarios de la continuidad de la monarquía absoluta.
- Jovellanistas: En su mayoría ilustrados que defendían una vía intermedia entre absolutistas y liberales.
- Liberales: Defendían las libertades, el fin de la monarquía absoluta y una sociedad igual ante la ley.
Las Cortes aprobaron, además, una serie de decretos y leyes que abolían los fundamentos del Antiguo Régimen.
El Manifiesto de Manzanares: Catalizador del Bienio Progresista
Nos encontramos ante un texto de naturaleza narrativa, al tratarse de un manifiesto. Contribuyó a poner fin a la Década Moderada y a permitir el acceso al poder de los progresistas durante el llamado Bienio Progresista. Aunque no hubo tiempo para promulgar una nueva Constitución, sí se aprobó un conjunto de leyes de gran importancia para el desarrollo económico del país. Se trata de una fuente primaria.
Autoría e Intención
- Autores: Fue redactado por Antonio Cánovas del Castillo y firmado por Leopoldo O’Donnell.
- Idea Principal: Unir a los progresistas al movimiento de repulsa contra el gobierno moderado, posibilitar el triunfo de la sublevación y permitir la constitución de un gobierno progresista, marcando el paso de la Década Moderada al Bienio Progresista.
Contexto Histórico: El Pronunciamiento de Vicálvaro y la Revolución de Julio
La Década Moderada había sido monopolizada por los moderados, quienes se encontraban divididos en grupos o facciones. Finalmente, los enfrentamientos por controlar el poder no tuvieron lugar con los progresistas, sino entre ellos mismos. El gobierno respondió recortando las pocas libertades.
El descontento movilizó a un sector del ejército, con generales perseguidos por el gobierno. El mecanismo a favor del cambio se puso en acción con el pronunciamiento militar de los generales O’Donnell y Dulce, que fracasó tras un enfrentamiento contra las tropas del gobierno en Vicálvaro.
Las fuerzas sublevadas, al no poder hacerse con la capital, se retiraron hacia el sur y, en Manzanares, Cánovas del Castillo redactó un manifiesto, que firmó O’Donnell, cuya difusión permitió que la sublevación militar se transformara en una revolución popular. En Madrid se prendió fuego a las viviendas de Sartorius, José Salamanca, al palacio de María Cristina… La Revolución de Julio estaba en marcha.
Los progresistas formaron en distintas ciudades juntas revolucionarias, organizaron la Milicia Nacional… La reina Isabel II solo tenía un camino: formar un gobierno dirigido por un progresista. En efecto, Espartero fue el encargado de presidirlo, con O’Donnell como ministro de la Guerra.
El Manifiesto “España con Honra”: Hacia la Revolución Gloriosa de 1868
Nos encontramos ante un texto de naturaleza narrativa y una fuente primaria. Fue redactado por algunos generales en 1868, entre los que destacan Juan Prim y Francisco Serrano, por lo que su autoría es colectiva. Los destinatarios fueron la Reina Isabel II y el pueblo español.
Propósito e Ideas Clave
Se trata de un pronunciamiento cuya intención era iniciar la revolución que buscaba establecer un auténtico Estado liberal, asentándolo sobre bases democráticas. La idea principal del texto era derrocar a Isabel II y poner fin al gobierno moderado, con la intención de formar un gobierno provisional y convocar elecciones lo antes posible.
El manifiesto incorporaba un compromiso, adquirido en el Pacto de Ostende: constituir un gobierno provisional que representara a todo el país y convocar Cortes mediante sufragio universal masculino. Como ideas secundarias, encontramos las razones que justificaban el pronunciamiento:
- La violación de la Constitución de 1845.
- El fraude electoral.
- La falta de libertades.
También se afirmaba contar con la aprobación de los ciudadanos españoles.
Contexto Histórico: Crisis y Revolución de 1868
Durante los últimos años del reinado de Isabel II (1833-1868) tuvo lugar un periodo de profunda crisis:
- Punto de vista económico: Se frenó la construcción del ferrocarril y descendió la producción industrial, además de una serie de malas cosechas, lo que se tradujo en un periodo de desabastecimiento y hambruna.
- Punto de vista político: Los partidos de oposición al gobierno moderado firmaron el Pacto de Ostende en 1866 (progresistas, demócratas y republicanos), cuyo objetivo era derrocar a Isabel II y convocar elecciones constituyentes, cansados de la escasa representación de estos partidos debido al apoyo de Isabel II a los moderados. A partir de 1867, también se unieron los unionistas.
Debido a ello, se inició la Revolución de 1868 con la sublevación militar de diversos generales como Serrano o Prim, quienes firmaron el manifiesto España con Honra. El pronunciamiento fue apoyado por la población y se formaron juntas revolucionarias en distintas ciudades en apoyo a la Revolución. Serrano, en la Batalla de Alcolea, derrotó a las fuerzas del gobierno. Finalmente, Isabel II tuvo que exiliarse y el gobierno moderado dimitió.
Se disolvieron las juntas revolucionarias, se formó un gobierno provisional entre unionistas y progresistas, que emprendió diversas reformas como el sufragio universal masculino o la libertad de imprenta, y se convocaron las Cortes Constituyentes, que desembocaron en la Constitución de 1869.