Los Reyes Católicos: La Unión Dinástica y el Inicio del Estado Moderno
La unión dinástica entre Castilla y Aragón se consolidó tras un periodo de crisis política. En 1468, mediante el Tratado de los Toros de Guisando, Enrique IV designó a su hermana Isabel como heredera del trono de Castilla. Sin embargo, el matrimonio secreto de Isabel con Fernando de Aragón en 1469 rompió este compromiso, llevando a Enrique IV a nombrar heredera a su hija Juana, conocida como “la Beltraneja”.
La Guerra de Sucesión Castellana (1475-1479)
Este conflicto civil enfrentó a los partidarios de Isabel (apoyados por Aragón y algunas ciudades castellanas) contra los de Juana (apoyados por Portugal, Francia y otras ciudades castellanas). La balanza se inclinó a favor de Isabel tras la Batalla de Toro (1476). El Tratado de Alcaçovas (1479) confirmó a Isabel I en el trono de Castilla. Ese mismo año, Fernando accedió al trono de la Corona de Aragón tras la muerte de Juan II, formalizando así la unión dinástica.
Antecedentes y Contexto de la Edad Moderna
La unión dinástica de los Reyes Católicos marca el inicio del Estado Moderno en España. La Edad Moderna se sitúa cronológicamente entre el siglo XV y el siglo XVIII (finalizando en 1789 con la Revolución Francesa). El siglo XV fue crucial por varios sucesos:
- Desaparición de la Peste Negra, que había diezmado a gran parte de la población desde 1348.
- 1453: Los turcos otomanos conquistan Constantinopla (Estambul), poniendo fin al Imperio Bizantino.
- 1492: Conquista de Granada, logrando la unidad territorial peninsular.
- 1492: El Descubrimiento de América por Cristóbal Colón, iniciando una nueva era global.
El Legado Dinástico: Austrias y Borbones
La dinastía iniciada por los Reyes Católicos continuó con su nieto, Carlos I (Carlos V como emperador de Europa), quien inauguró la Casa de Austria (Habsburgo).
- Austrias Mayores: Carlos I y su hijo Felipe II.
- Austrias Menores: Felipe III, Felipe IV y Carlos II.
La muerte de Carlos II sin descendencia en 1700 provocó la Guerra de Sucesión Española (1700-1713), que culminó con la llegada de Felipe V (nieto de Luis XIV de Francia), quien trajo el concepto de absolutismo e inauguró la dinastía de los Borbones.
Características de la Unión Dinástica y la Monarquía Autoritaria
La unión de Isabel y Fernando fue dinástica, no unitaria. Se respetó la identidad y las instituciones de cada reino (Castilla, centralista; Aragón, pactista). El objetivo principal fue la creación de una Monarquía Autoritaria. Para ello, implementaron las siguientes medidas:
- Creación de un Ejército Real: Disolución de los ejércitos feudales, fortaleciendo la presencia real.
- Transformación de la Nobleza: La nobleza feudal se convirtió en cortesana, dependiendo de los favores del rey.
- Concentración de Poderes: El rey era la máxima autoridad ejecutiva, legislativa y judicial.
- Reforma Institucional:
- Poder Legislativo: Las Cortes decidían las leyes, pero el rey mantenía el derecho de veto.
- Poder Ejecutivo (Consejos): En Castilla, los Consejos tenían poder consultivo; en Aragón, su carácter era más vinculante.
- Poder Judicial: El rey mantenía el control mediante la elección de jueces.
- El Tribunal de la Inquisición (Santo Oficio): Institución esencial para el poder monárquico. Los reyes obtuvieron una Bula especial (Regalía) que les permitía confirmar el nombramiento de altos cargos eclesiásticos. La Inquisición contribuyó a la unión religiosa, apoyando la expulsión de las minorías judía y musulmana, y persiguiendo el protestantismo.
- Política de Alianzas Matrimoniales: Se buscaron alianzas con Inglaterra, el Imperio Astro-Húngaro y Portugal, con el objetivo estratégico de aislar a la monarquía francesa.
- Conquista de Territorios: Anexión de Navarra y conquista de los territorios americanos, que aportaron recursos para consolidar la monarquía.
La unión dinástica se completaría con Carlos I, al tener ambos reinos un solo rey, iniciando la transición hacia el absolutismo, que culminaría con Felipe V en 1713.
La Expansión Territorial: Conquista del Reino Nazarí e Incorporación de Navarra
La Conquista del Reino Nazarí de Granada (1481-1492)
El Reino Nazarí de Granada era el último territorio de al-Ándalus independiente. La campaña comenzó en 1481. Las disputas internas en la familia real nazarí (entre el sultán Mulay Hacén, su hijo Boabdil y su hermano El Zagal) facilitaron el avance cristiano. Tras la toma de Málaga, Baza y Almería, los Reyes Católicos iniciaron el asedio de Granada en 1491. La entrada se produjo el 2 de enero de 1492.
Tras la conquista, se firmaron las Capitulaciones de Granada, que inicialmente respetaban la organización social y religiosa de los moriscos (musulmanes que permanecieron en Castilla).
Incorporación del Reino de Navarra (1512-1515)
Tras la muerte de Isabel (1504), se desató una crisis sucesoria en Castilla. Juana la Loca fue nombrada heredera, pero sus problemas mentales hicieron recaer el poder en su esposo, Felipe el Hermoso. Tras la muerte de Felipe en 1506, el Cardenal Cisneros asumió la regencia, entregando finalmente el poder a Fernando el Católico.
Fernando, casado con Germana de Foix (quien tenía derechos sobre Navarra), procedió a la anexión del reino. Navarra fue ocupada militarmente en 1512 y sus derechos al trono fueron obtenidos en 1515, manteniendo sus propios fueros.
Proyección Atlántica: Integración de Canarias y Aproximación a Portugal
La Expansión Atlántica y el Desarrollo Naval
La consolidación de la Reconquista en Andalucía permitió el inicio de la exploración atlántica. Este periodo se caracterizó por un importante desarrollo técnico:
- Portulanos: Cartas de navegación, junto con la brújula y el astrolabio (instrumentos de origen árabe), esenciales para la navegación.
- Desarrollo de Naves: Se pasó de las galeras a las carabelas, más ligeras y rápidas, aptas para el Atlántico.
La Conquista de las Islas Canarias
Durante este periodo se conquistaron las islas Canarias. Los reyes castellanos establecieron dos tipos de dominio:
- Capitulaciones: Beneficios reales otorgados a conquistadores y órdenes mendicantes para la conquista y evangelización.
- Dominio Real Directo: Las islas mayores (Tenerife y Gran Canaria) pasaron a depender directamente del Rey.
El Tratado de Alcaçovas (1479)
Este tratado, firmado entre Castilla y Portugal, fue crucial para definir las esferas de influencia atlántica. Castilla obtuvo la seguridad de que Canarias nunca sería atacada por Portugal. A cambio, se concedió a los portugueses la libertad para emprender la ruta de circunvalación de África, con el objetivo de alcanzar Asia, ya que la Ruta de la Seda había quedado cortada por los imperios musulmanes.
Organización del Estado bajo los Reyes Católicos: Instituciones de Gobierno
Los Reyes Católicos iniciaron una reforma institucional que acentuó el carácter centralizado y monárquico en Castilla, en contraste con el modelo pactista de Aragón, donde el rey debía respetar las instituciones tradicionales y los fueros.
Instituciones Comunes y Diferenciadas
- Cortes: Siguieron existiendo en ambos reinos con poder legislativo.
- Poder Ejecutivo: En Castilla, recaía directamente en los Reyes; en Aragón, en la Generalitat.
- Poder Judicial: En Castilla, a través de las Audiencias. En Aragón, el Rey era vigilado por el Justicia de Aragón, cuya misión era defender los fueros.
Nuevas Instituciones Centrales
Se crearon o reformaron órganos clave para la administración de la Monarquía:
- Consejo de Castilla: Creado en las Cortes de Toledo (1480), con funciones de política interior y exterior.
- Consejo de Aragón: Creado en 1494, con competencias en política, justicia y asuntos aragoneses.
- Virrey: Representante directo del rey en su ausencia.
- Contadurías: Encargadas de la recaudación de impuestos y la Hacienda.
- Corregidores: Representantes del rey en el ámbito municipal.
- Santa Hermandad: Creada en 1476 para mantener el orden público.
- Santo Oficio o Inquisición: Institución común a ambos reinos (fundada en 1479), encargada de perseguir la herejía.
Proyección Exterior: Política Italiana y Norteafricana
Política Italiana
Continuando la expansión mediterránea iniciada por Aragón, Italia se convirtió en la pieza clave de la política exterior de Fernando el Católico, lo que llevó a enfrentamientos directos con Francia.
La victoria final fue para Aragón, que derrotó a los franceses en las decisivas batallas de Ceriñola y Garellano (1503), asegurando el control aragonés sobre Nápoles y Sicilia.
Expansión Norteafricana
La expansión en el Norte de África fue una continuación de la Reconquista, con un doble objetivo: religioso (lucha contra el Islam) y estratégico (control de las rutas comerciales y eliminación de los piratas berberiscos).
Gran parte de esta expansión se llevó a cabo tras la muerte de Isabel, bajo la regencia del Cardenal Cisneros y el gobierno de Fernando, ocupando plazas importantes como Orán (1509) y Trípoli (1510).
El Descubrimiento de América
Tras la consolidación en Canarias, Castilla culminó su proyección atlántica con el Descubrimiento de América. El Tratado de Alcaçovas (1479) había limitado la expansión castellana al dejar las costas africanas bajo control portugués, impulsando la búsqueda de una ruta occidental.
Causas del Descubrimiento
Las causas fueron políticas (competir con Portugal), técnicas (uso de brújula, nuevas embarcaciones) y religiosas (evangelización). Colón, basándose en la idea de la Tierra redonda, buscó una ruta hacia el oeste hasta las Indias, cuyo comercio estaba colapsado por el Imperio Otomano.
Tras el rechazo de Portugal, Colón expuso su teoría a Isabel I de Castilla. Se firmaron las Capitulaciones de Santa Fe (abril de 1492), donde Colón fue nombrado virrey de las tierras conquistadas y se le otorgó la décima parte de los beneficios. Castilla se comprometió a financiar la expedición.
Colón partió del Puerto de Palos el 3 de agosto de 1492 con tres naves, haciendo escala en Canarias. El 12 de octubre de 1492, llegó a la isla de Guanahaní (San Salvador).
El Tratado de Tordesillas (1494)
Para evitar conflictos, Castilla y Portugal firmaron el Tratado de Tordesillas, que dividió el mundo conocido en dos esferas de influencia.
Exploración y Conquista de América
Las exploraciones continuaron intensamente desde comienzos del siglo XVI:
- Yáñez Pinzón: Llegó a la costa brasileña en 1500.
- Núñez de Balboa: Atravesó el istmo de Panamá en 1513, descubriendo el Océano Pacífico.
- Ponce de León: Ocupó Florida en 1513.
- Díaz de Solís: Exploró la desembocadura del Río de la Plata (1516).
- Magallanes y Elcano: Realizaron la primera vuelta al mundo (1519-1522), asegurando la posesión de Filipinas.
Las Grandes Conquistas (1519-1550)
La conquista se dividió en fases principales:
- Primera Fase (Hernán Cortés): Conquista del Imperio Azteca (México) entre 1519 y 1521. Fue crucial la superioridad del armamento europeo y el empleo de caballos.
- Segunda Fase (Francisco Pizarro y Diego de Almagro): Conquista del Imperio Inca (actuales Perú, Ecuador y Bolivia) entre 1531 y 1532. La ocupación fue difícil y cruel.
- Tercera Fase: Exploración y ocupación de la parte norte de las actuales Argentina y Uruguay.
En la primera mitad del siglo XVI, la Corona española había conquistado las zonas más ricas y pobladas. En la segunda mitad, se exploraron el interior de Argentina, la cuenca del río Orinoco y el suroeste de Norteamérica. Las expediciones llegaron hasta Filipinas, incorporada a la Corona por López de Legazpi en 1571.
Gobierno y Administración de América
Los nuevos territorios americanos fueron incorporados a la Corona de Castilla. Para su gestión, se crearon órganos específicos:
- Consejo de Indias (1524): Órgano político-consultivo que gestionaba todos los asuntos relacionados con América.
- Casa de Contratación (1503): Situada en Sevilla, regulaba el monopolio comercial con América, controlaba el flujo de personas y mercancías, y cobraba impuestos.
Administración Política Territorial
La administración política en América fue una réplica del modelo castellano:
- Cabildos: Administración a nivel municipal.
- Virreinatos: Unidades territoriales mayores, dirigidas por virreyes con gran poder. Se crearon el Virreinato de Nueva España (1535) y el Virreinato del Perú (1542).
- Gobernaciones: Subdivisiones de los virreinatos, dirigidas por gobernadores.
- Audiencias: Órganos judiciales que, en América, también asumieron tareas de gobierno y control de los virreyes.
El Imperio de Carlos V: Conflictos Internos y Externos
Carlos V heredó los territorios peninsulares en 1517 y se convirtió en Emperador de Alemania (Carlos V) en 1519. Su reinado estuvo marcado por importantes conflictos internos y la defensa de la hegemonía europea.
Conflictos Internos en la Península
Carlos V tuvo que enfrentarse a la oposición generada por las nuevas imposiciones fiscales y la presencia de cortesanos flamencos.
- Sublevación de los Comuneros (Castilla, 1520-1521): Liderada por el patriciado urbano y parte de la Iglesia, defendía la oposición a la regencia de Adriano de Utrecht y la legitimidad de Juana la Loca. Juan de Padilla lideró la Junta Santa. Carlos V derrotó a los comuneros en la Batalla de Villalar (1521), ejecutando a sus líderes (Padilla, Bravo y Maldonado).
- Las Germanías (Aragón, Valencia y Mallorca, 1519-1523): Revueltas de los gremios debido a la presión fiscal y la ausencia del rey. Fueron sofocadas con el apoyo de la nobleza y la virreina Germana de Foix.
Conflictos Exteriores en Europa
Carlos V mantuvo tres grandes frentes de conflicto:
- Contra Francia (Francisco I): Guerra por el control del Milanesado, Flandes y Borgoña. El conflicto más destacado fue la Batalla de Pavía (1525). La tensión con el Papado llevó al Saqueo de Roma (1527) por las tropas imperiales.
- Contra el Imperio Otomano (Turcos): Amenaza constante en el Mediterráneo. Carlos V respondió tomando bases otomanas como Túnez. Este conflicto continuaría con Felipe II, culminando en la victoria de la Liga Santa en la Batalla de Lepanto (1571).
- El Auge del Protestantismo: La difusión de las ideas de Lutero y Calvino supuso una ruptura religiosa y política que Carlos V no pudo resolver, llevando a la Paz de Augsburgo (1555).
La Monarquía Hispánica de Felipe II: La Defensa de la Hegemonía
Tras la abdicación de Carlos V en 1556, su hijo Felipe II heredó los territorios españoles, italianos, americanos y los Países Bajos. Felipe II se centró en la defensa del catolicismo y la lucha por la hegemonía europea.
Política Exterior: La Defensa del Catolicismo
- Francia: Derrotada en la Batalla de San Quintín, obligando a firmar la Paz de Cateau-Cambrésis (1559).
- Imperio Otomano: Organización de la Santa Liga (Papado, Venecia y España), que derrotó a los turcos en la decisiva Batalla de Lepanto (1571).
- Países Bajos (Flandes): Conflicto contra los holandeses calvinistas (dirigidos por Guillermo de Orange), apoyados por Inglaterra. El conflicto se mantuvo hasta su independencia en 1648.
- Inglaterra: La guerra se desató por el apoyo inglés a los rebeldes holandeses y la ejecución de María Estuardo. El intento de invasión con la Armada Invencible (1588) terminó en desastre, marcando el inicio de la decadencia hispánica en Europa.
Política Interior
- Capitalidad: Felipe II estableció Madrid como capital de la Monarquía.
- Rebelión de los Moriscos: Tuvo que hacer frente a la rebelión de los moriscos en las Alpujarras (1568).
- Problema Aragonés: Conflicto con el Justicia Mayor de Aragón (Juan de Lanuza) por proteger a Antonio Pérez, lo que llevó a Felipe II a intervenir en Aragón, buscando disminuir el valor político de los fueros y avanzar hacia el absolutismo.
La Unidad Ibérica y el Modelo Político de los Austrias Mayores
La Unidad Ibérica (1580)
La unión de las coronas de España y Portugal fue el mayor éxito político de Felipe II, facilitado por la política matrimonial de los Reyes Católicos. Tras la muerte sin descendencia del rey portugués Sebastián de Avís (1578), Felipe II reivindicó sus derechos dinásticos.
Felipe II envió un ejército encabezado por el Duque de Alba. En las Cortes de Tomar (1581), Felipe II fue reconocido Rey de Portugal, a cambio de jurar y respetar las leyes e instituciones portuguesas. Portugal permaneció unido a España hasta su independencia definitiva en 1640.
Modelo Político de los Austrias Mayores
La monarquía de los Austrias Mayores evolucionó hacia el absolutismo al reforzar la autoridad real. Sus características principales fueron la defensa intransigente del catolicismo y el respeto formal a las instituciones de los diferentes reinos (modelo polisinodial), aunque con un creciente autoritarismo.
Instrumentos de Gobierno (Sistema Polisinodial)
Para mantener la complejidad del imperio, se desarrolló un sistema de Consejos:
- El Rey: Cima del poder.
- Virreyes o Gobernadores: Máxima autoridad política y judicial en cada reino.
- Consejos: Órganos consultivos que asesoraban al monarca.
- Consejo de Estado: Encargado de la política exterior.
- Consejos Territoriales: (Castilla, Aragón, Indias, etc.).
- Consejos Temáticos: (Hacienda, Guerra).
- Secretarios: Funcionarios que actuaban como canal de comunicación entre el Rey y los Consejos.
- Instituciones Religiosas: La Regalía (poder del monarca para nombrar la alta jerarquía eclesiástica) y la Inquisición (instrumento de control religioso y político).
Economía y Sociedad en la España del Siglo XVI
El Modelo Económico: Mercantilismo y Hacienda
La economía de las monarquías absolutas se basaba en el Mercantilismo, que implicaba un control total de la producción y los impuestos por parte del Estado (Consejo de Hacienda). La recaudación se basaba en la diferencia estamental:
- Impuestos Directos: Gravaban la riqueza familiar.
- Impuestos Indirectos: Gravaban servicios y transacciones. Los más importantes eran el Quinto Real (la quinta parte de los beneficios de América), el Portazgo y la Alcabala.
La Hacienda obtenía dinero en metálico por tres vías principales: la Deuda Pública (emisión de bonos), el Monopolio Estatal del Oro Americano y los Préstamos de banqueros importantes (como los Fugger y los Grimaldi).
Crisis y Sociedad
La economía española del siglo XVI seguía siendo característica del Antiguo Régimen, con predominio del sector primario. La llegada masiva de oro americano, en lugar de fomentar la industria, favoreció la especulación y la importación de productos, provocando una decadencia industrial.
Los continuos conflictos exteriores llevaron a la Monarquía a importantes periodos de bancarrota. Sumado a las epidemias de peste, esto condujo a Castilla y Aragón a un periodo de crisis al finalizar el reinado de Felipe II. La sociedad se mantuvo rígidamente estamental.
El Renacimiento en España: Cultura y Mentalidades en el Siglo XVI
El Renacimiento fue un estilo importado de Italia, con influencias flamencas, que se desarrolló desde finales del siglo XV. Se caracterizó por el antropocentrismo, la proporción y el estudio de la antigüedad clásica, sin renunciar al carácter profundamente religioso español.
Arquitectura
La arquitectura evolucionó a través de varias fases:
- Plateresco: Estilo decorativista de principios del XVI (ej. Fachada de la Universidad de Salamanca).
- Clasicismo: Búsqueda de la proporción (ej. Palacio de Carlos V, por Machuca).
- Herreriano: Estilo de finales del XVI, caracterizado por la sobriedad y la estricta geometría (ej. Monasterio de El Escorial, por Juan de Herrera).
Escultura y Pintura
- Escultura: Predominó la talla en madera policromada, con influencias de Miguel Ángel en artistas como Alonso Berruguete o Juan de Juni.
- Pintura: La figura cumbre fue El Greco, quien se instaló en Toledo y desarrolló un estilo único, realizando obras maestras como El Entierro del Conde de Orgaz.