Rasgos Distintivos de la Pintura Renacentista Italiana: Del Quattrocento al Cinquecento

Características Generales de la Pintura Renacentista Italiana

La pintura italiana de los siglos XV y XVI se distingue por su **variedad**, resultado de la individualidad de los artistas y la multiplicidad de escuelas. No obstante, comparten características comunes:

Principales Elementos Comunes

  • Temática Diversa: La iconografía religiosa sigue siendo fundamental, pero experimenta un tratamiento secularizador. La belleza formal adquiere mayor importancia que el sentimiento religioso. También se incorporan temas de mitología pagana, alegorías y retratos.
  • Variedad de Técnicas: Se mantiene la tradición de la pintura mural al fresco. La pintura de caballete se realiza al temple sobre tabla, especialmente en el siglo XV. A partir de mediados de siglo, se introduce la pintura al óleo, primero sobre tabla y luego sobre lienzo en el siglo XVI.
  • Realismo Idealizado: Es una pintura realista que busca la captación de la realidad, intentando imitar a la naturaleza. Sin embargo, no aspira a ser una mera copia, sino a sublimarla mediante la racionalización y la idealización.
  • Valoración de la Expresión: Se busca reflejar los estados de ánimo, el temperamento y los valores humanos.
  • Concepción Unitaria: La obra se concibe como una unidad indivisible, lograda a través de la armonía y el equilibrio de sus partes. El artista obliga al espectador a abarcar la totalidad de la obra simultáneamente, conjugando composición, luz y espacio hacia un fin común.
  • Dominio de la Perspectiva Lineal: Fue una de las mayores aportaciones del Renacimiento. Se entiende como una forma de representar el espacio captado desde una visión monocular y estática. Consiste en seleccionar un punto de fuga único, cuya altura marca el horizonte del espectador, y al que confluyen todas las líneas de la composición espacial. Las figuras disminuyen progresivamente en los planos más profundos, creando la ilusión óptica tridimensional y otorgando unidad al cuadro. El descubrimiento se atribuye a Brunelleschi, la formulación a Alberti, y se considera a Da Vinci como el creador definitivo de su representación espacial.
  • Nuevo Tratamiento de la Luz: Se representa la luz natural, distribuida de manera uniforme, que crea volumen en las figuras y otorga sensación de profundidad. Piero della Francesca personifica mejor los valores lumínicos.
  • Interés por el Movimiento: Se considera que el movimiento corporal refleja el equilibrio interior, por lo que se busca que sea majestuoso y equilibrado. Para lograr soluciones verosímiles, se estudian y representan los escorzos. Andrea Mantegna llevó el escorzo al extremo en obras como Cristo muerto.
  • Composición Estructural: El estudio compositivo se realiza en función de la unidad de la obra. La composición establece el nexo entre todos los elementos, creando una sensación de equilibrio y armonía. Los pintores aplican esquemas geométricos en los que inscriben las formas.

Pintores Destacados por Periodo

En el Quattrocento destacaron pintores como Massaccio, Fray Angélico, Piero della Francesca y Botticelli.

En el Cinquecento sobresalieron Leonardo da Vinci, Rafael y Miguel Ángel.

PUNTO 6. La Pintura Veneciana: El Triunfo del Color

Desde el Quattrocento, los pintores venecianos mostraron una verdadera devoción por el color, elemento que prevalece sobre el dibujo. Es un arte sensual que se complace en la captación de las calidades, de los cuerpos femeninos desnudos y de los brillos de los objetos lujosos, deteniéndose en temas que pueden considerarse secundarios y anecdóticos.

Maestros Venecianos del Siglo XV y XVI

En el siglo XV destacaron:

  • Giorgione: Desarrolló una pintura suelta donde el color juega un papel primordial. Su obra más importante es La Tempestad, donde una mujer desnuda amamanta a un niño en medio de la naturaleza.
  • Tiziano: Es un gran retratista. Pinturas como el Retrato ecuestre de Carlos V en Mühlberg y el de su esposa Isabel son fundamentales. Puede considerarse el iniciador del retrato de aparato. Es uno de los pintores que mejor supo plasmar los temas mitológicos y la desnudez del cuerpo femenino de formas blandas y redondeadas, como demuestran sus Venus y el cuadro Dánae recibiendo la lluvia de oro. A medida que su pincelada evolucionaba, creó su última obra, un autorretrato de contornos borrosos y desmenuzados que preconiza la pintura impresionista.
  • Veronés: Es el pintor de las grandes arquitecturas inspiradas en obras de Palladio, de las fiestas, del exótico mundo veneciano, del colorido de los ricos ropajes y joyas de las mujeres de esta ciudad, y de lo anecdótico. Entre sus obras destaca Las bodas de Caná.
  • Tintoretto: Prefiere los colores fríos frente a los cálidos. En su obra confluyen la violencia y las anatomías rotundas de Miguel Ángel, la distorsión y el movimiento del Parmigianino, y la capacidad narrativa del Veronés. Sus fuertes contrastes de luz y su manera de entender el espacio anuncian la proximidad del Barroco. Pinta, entre otras, El lavatorio de los pies, y su estilo influyó en El Greco.