Campos de Castill

(Apartado A) La naturaleza, la preocupación patriótica y Castilla no son temas excluyentes o distantes, pueden darse simultáneamente o de forma sucesiva en un mismo poema.
Pensemos, por ejemplo en “A orillas del Duero” o “Por tierras de España”, donde hay un primera parte descriptiva, de investigación sobre el paisaje, para pasar después a una interpretación de lo descrito, a la crítica hacia el desdén y la ignorancia y a las preguntas inquietantes: “Castilla miserable, ayer dominadora, envuelta en sus andrajos, desprecia cuanto ignora. ¿Espera, duerme o sueña? ¿La sangre derramada recuerda, cuando tuvo la fiebre de la espada?

(Apartado A1) La naturaleza: Observación y descripción del paisaje castellano a través de una reacción personal, anímica, de afecto. (“Al máximo grado de objetivación llega Antonio Machado en su poemas. Nada de reflexiones o incisos e intromisiones personales hay en esos versos; el poete describe minuciosa e impersonalmente la Naturaleza. Sus paisajes no son más que una colección de detalles. Y sin embargo, en esos versos sentimos palpitar, vibrar todo el espíritu de poeta”. “El paisaje en la poesía”. Azorín)  

“El paisaje, no como pretexto para fijar una situación anímica, sino como substancia objetiva, si bien teñida nerviosamente de connotaciones espirituales –visión y sentimiento, meditación y esperanza- es uno de los grandes logros de Antonio Machado en Campos de Castilla”. Carlos Beceiro.
Desde Baeza, a donde se había trasladado a la muerte de Leonor, pertenecen los últimos poemas de este libro, referidos al paisaje andaluz con evocaciones del castellano: En estos campos de la tierra mía, Los olivos, Poema de un día
(Apartado A2) Preocupación patriótica: reacción dolorida ante el problema de España. (Por tierras de España, A orillas del Duero, Del pasado efímero. El mañana efímero. Llanto de las virtudes y coplas por la muerte de Don Guido) “Llamaréis patria a los calcáreos montes, hoy desnudos y antaño cubiertos de espesos bosques, que rodean esta vieja y noble ciudad? Eso es un pedazo de planeta por donde los hombres han pasado, no para hacer patria, sino para deshacerla: no sois patriotas pensando que algún día sabréis morir para defender estos pelados cascotes; lo seréis acudiendo con el árbol o la semilla, con la reja del arado o con el pico del minero a esos parajes sombríos y desolados donde la patria está por hacer… Luchamos por libertarnos del culto supersticioso del pasado…No creemos ya en los milagros de la leyenda heroica… Somos los hijos de una tierra pobre e ignorante, de una tierra donde todo está por hacer…Sabemos que la patria es algo que se hace constantemente y se conserva sólo por la cultura y el trabajo” (Antonio Machado. “Nuestro patriotismo y la marcha de Cádiz”. 1908. Ensayo)

(Apartado A3) Castilla: Recuerdos; Las encinas. Soria: Campos de Soria: formado por nueve secciones, las cinco primeras recorren el paso de la estaciones desde de la primavera a la primavera siguiente; la VI dedicada a Soria; las tres últimas son una apropiación personal del paisaje anterior: “conmigo vais”. Además de la identificación hay otra posición crítica frente a la realidad de un país empobrecido, despoblado, embrutecido: Orillas del Duero.
(Apartado B) Leonor: el dolor y el recuerdo. (A un olmo seco, Señor, Ya me arrancaste lo que más quería, Soñé que tú me llevabas, Una noche de verano, Al borrarse la nieve, se alejaron, A José María Palacio, Allá en las altas tierras, Otro viaje…)
(Apartado C) Poesía gnómica: Proverbios y cantares, parábolas. “La poesía gnómica es una de las más antiguas formas de expresión literaria y está presente en todas las culturas, bien como documento de la sabiduría o de la experiencia popular (los refranes, tantas veces en forma rimada), bien como un testimonio de un determinado mundo ideal o de una ideología. En la literatura española son ejemplos de poesía gnómica los “Proverbios” de Don Sem Tob y los del Marqués de Santillana; en la literatura contemporánea podríamos citar los “Proverbios y cantares” de Machado o algunos poemas de ética estética (No le toquéis ya más…) de Juan Ramón Jiménez.” (Diccionario de retórica, crítica y terminología literaria”. Angelo Marchese y Joaquín Forradellas.
“De reducido tamaño y variada métrica, estos proverbios y cantares son, como lo da a entender el título, definitorios y sentenciosamente didácticos, su ordenación no parece obedecer a un hilo consecuente, aunque visto más de cerca, se muestran como variaciones, aproximaciones, repeticiones y, a grandes rasgos, como uno más entre los múltiples resúmenes de la poesía de Machado.” (Rafael Gutiérrez)
Temática: los enigmas de la vida (Caminante son tus huellas…), preocupaciones religiosas (Anoche soñé que veía…), patrióticas (Españolito que vienes…; Nuestro español bosteza), existenciales (Bueno es saber que los vasos…) humorísticas… La forma más frecuente es el cantar, con asonancia o rima en los versos 2 y 4, alguna vez con rimas pareadas o alternas. También hay poemillas más extensos.
(Apartado D) La tierra de Alvargonzález “Y pensé que la misión del poeta era inventar nuevos poemas de lo eterno humano, historias animadasque, siendo suyas, viviesen, no obstante, por sí mismas. Me pareció el romance la suprema expresión de la poesía y quise escribir un nuevo Romancero. A este propósito responde La tierra de Alvargonzález…; pero mis romances no emanan de las heroicas gestas, sino del pueblo que las compuso y de la tierra donde se cantaron; mis romances miran a lo elemental humano, al campo de Castilla y al Libro Primero de Moises, llamado Génesis”. (Antonio Machado. Prólogo de Campos de Castilla. 1917)
“Por aquel sendero –me dijo el campesino, señalando a su diestra- se va a las tierras de Alvargonzález; campos malditos hoy; los mejores, antaño, de esta comarca. – ¿Alvargonzález es el nombre de su dueño? –le pregunté. – Alvargonzález –me respondió- fue un rico labrador; mas nadie lleva ese nombre por estos contornos. La aldea donde vivió se llama como él se llamaba: Alvargonzález, y las tierras de Alvargonzález a los páramos que la rodean. Tomando esa vereda llegaríamos allá antes que a Vinuesa por este camino. Los lobos, en invierno, cuando el hambre les echa de los bosques, cruzan esa aldea y se les oye aullar al pasar por la majadas que fueron de Alvargonzález, hoy vacías y arruinadas. Siendo niño, oí cantar a un pastor la historia de Alvargonzález, y sé que anda escrita en papeles y que los ciegos la cantan por tierras de Berlanga. Roguéle que me narrase aquella historia, y el campesino comenzó así su relato:…” (Antonio Machado: “Mundial Magazine, núm. 9, enero de 1912, págs. 213-20)
Machado toma como referencia, no el romance histórico, como el Duque de Rivas o Zorrilla, sino el romance de ciegos; y fue un precursor en cuanto a la nueva potencialidad del romance, que después conocerá un nuevo florecimiento con García Lorca, Miguel Hernández y el extenso romancero de la guerra civil.

“El motivo esencial de los crímenes es, en el aspecto personal, la envidia y, en el aspecto social, la apetencia de tierra, la propiedad. Envidia y sed de tierra: temas universales: la herencia de Caín, tan fuerte en la visión machadiana como en la de Unamuno, en la dura meseta castellana.” (Geoffrey Ribbans)
(Apartado E) Elogios Son un grupo de poemas dedicados a figuras admiradas por Machado y encabezadas por el poema a Giner, su maestro venerado. Tienen también su “elogio” Ortega y Gasset (de quien se espera la construcción de un nuevo escorial europeizante); Unamuno(quijotesco fundador); dos a Azorín (uno enlaza con el tema de Castilla y el otro con la regeneración venidera); otros dos a Rubén Darío (en lenguaje modernista); dos a Juan Ramón Jiménez (con motivo de la publicación de Platero y yo y de Arias tristes); a Valle-Inclán, Berceo y otros poetas antiguos y modernos. Destacan otros poemas, Una España joven y España en paz, que retoman el tema patriótico.
Varia Hay otras composiciones que no podemos integrar en los apartados anteriores y que responden a diferentes momentos creativos y diversas intenciones: Un loco, Fantasía iconográfica, Un criminal, En tren, La saeta…
Métrica “Las forma métricas que predominan son los alejandrinos y los octosílabos populares, de tendencia narrativa (el romance), y lírica (el cantar)…
El alejandrino produce ese efecto sereno, reposado, característico de Machado; los versos largos se dividen en dos hemistiquios de hexasílabos y se disponen, bien en cuartetos con rimas cruzadas (ABBA), como Retrato, El hospicio; o bien en pareados, (A orillas del Duero, Al maestro Azorín). No faltan tampoco combinaciones clásicas de endecasílabos y heptasílabos, en silva asonantada, como El Dios ibero, Orillas del Duero, A un olmo seco o Del pasado efímero. Se ve que a pesar de su predilección por la asonancia, la rima consonántica es muy frecuente y ocurre en poemas altamente caracterizados. Entre los octosílabos destaca por supuesto el romance, utilizado, con gran surtido de asonancias, en La tierra de Alvargonzález. Hay también otras combinaciones sobre base octosilábica (Parábolas); o una serie de excelentes poemas rimados que introducen algún verso de pie quebrado entre los octosílabos y emplean frecuentes encabalgamientos (Las encinas, Los olivos, Poema de un día, Llanto por don Guido…) Otra forma clave es el cantar: un cuarteto en asonancia alterna (sílabas 2 y 4), pero dentro de los cantares, consejos y proverbios ocurren modificaciones y diferencias que multiplican sus variantes. Para temas que necesitan más desarrollo acude de vez en cuando a octavas o composiciones de diez o doce versos. Aun en estas formas esencialmente populares no escasea la rima, y con cierta frecuencia se emplean alejandrinos, invariablemente rimados.” (Geoffrey Ribbans)