Comentario carta de Carlos IV a Napoleón

7 PREGUNTA

Define que fueron los decretos de Nueva Planta

Tras la Guerra de Sucesión (1701-1703), Felipe V es aceptado como rey de España y plantea la Reforma institucional y administrativa del Estado según los cánones franceses: Poder central decisorio y absolutismo, con unas mismas leyes para todo el Reino. Fue un centralismo contrario a las singularidades de la anterior Monarquía de los Austrias, pero favorecedor de la homogeneidad del conjunto del territorio.

Debido a esto, por lo Tanto, se publicarán los Decretos de Nueva Planta, que suponen el fin del ordenamiento Jurídico e institucional histórico de los reinos de la Corona de Aragón, al Quedar abolidos los fueros de los reinos de Aragón y Valencia (1707); los de Mallorca (1715); y finalmente los de Cataluña (1716). Felipe V procedíó también a Eliminar las Cortes de esas zonas, dejando únicamente las de Castilla, válidas Ahora para todo el territorio. Además, establecíó el Castellano como lengua Oficial y suprimíó las fronteras.

Solo se hizo una Excepción: los territorios vascos y navarros conservaron sus fueros como premio A la lealtad a Felipe V durante la guerra.

8 PREGUNTA

Describe la Guerra de la Independencia: sus causas, la composición de los bandos en conflicto y el desarrollo de los acontecimientos.

En 1807, Godoy firmaba con Napoleón el Tratado de Fontainebleau, dejando vía libre a las tropas francesas que se dispónían a invadir Portugal. Sumándose a la impopularidad de Godoy, al convertirse el paso de tropas en una incómoda ocupación del territorio, estalló en Marzo de 1808 el Motín de Aranjuez urdido por los partidarios de Fernando VII en quien se vería obligado de abdicar su padre Carlos IV. Ante la debilidad de la monarquía española, su miseria e incapacidad políticas, Napoleón, reuniendo padre e hijo en Bayona a primeros de Mayo, conseguiría mediante engaño que ambos abdicarán en su persona. Finalmente, sentaría en el trono de España a su hermano José I. En Madrid, mientras tanto, ante los abusos de las tropas de ocupación, estallaría el 2 de Mayo un motín popular brutalmente reprimido que, extendíéndose al conjunto del país, daría inicio a la Guerra de Independencia.

En un primer momento, a nivel institucional, ante el vacío de poder creado por la ausencia de Fernando VII y la colaboración del gobierno en funciones con los invasores, asumiendo la soberanía, se organizarían de forma espontánea unas Juntas de Defensa Locales que pronto se convertirían en provinciales. Más adelante, desde Aranjuez y presidida por Floridablanca, una Junta Central Suprema las coordinaría todas, asegurando la dirección militar del conflicto y el gobierno de las zonas no ocupadas.

Por otra parte, a nivel político, la guerra evidenció muy diversas sensibilidades. Por un lado, los afrancesados, muy minoritarios, sostuvieron la monarquía bonapartista, por otro, se perfilaría un Frente Patriótico muy heterogéneo.

Los afrancesados, pese a lo despectivo del término, a su manera, también fueron patriotas. Intelectuales, altos funcionarios y parte de la alta nobleza, sinceramente comprometidos con los intereses de España, vieron en José I un déspota ilustrado con el que, por fin, ahorrándose una revolución, se podrían implementar las profundas reformas políticas, económicas y sociales necesarias a la modernización del país.

La diversidad de Frente Patriótico fue tanto política como social al congregar una inmensa mayoría de la población que solo unía su total rechazo al invasor. Por tanto, de izquierda a derecha, los liberales aspiraban a una revolución que pusiera fin al Antiguo Régimen instaurando un régimen liberal parlamentario; los Ilustrados, como Jovellanos, confiaban ellos en la capacidad reformadora de Fernando VII “el deseado”; por último, los absolutistas, apoyados por el clero, gran parte de la nobleza y de las clases populares, reivindicando los valores de la tradición, esperaban la vuelta del Antiguo Régimen.

Antes de considerar las sucesivas etapas del conflicto, cabe señalar que más allá de su dimensión doméstica, la Guerra de Independencia fue también un conflicto internacional, escenario de las guerras napoleónicas en el que se enfrentaron Francia e Inglaterra. Asimismo, a nivel militar, cabe destacar el protagonismo de la “guerra de guerrillas” que desde sus inicios caracterizó al conflicto, dando incluso origen a la expresión.

Etapas del conflicto:

Hasta Noviembre 1808: Sumándose a una fuerte resistencia popular en todo el territorio, en Julio, el ejército de independencia derrotaba a las tropas francesas en Bailén, impidiendo la ocupación de Andalucía y forzando el repliegue de los franceses al norte.

Hasta Julio 1812: Con la intervención personal de Napoleón y de la “Grande Armée”, los franceses, tras largos sitios como los de Zaragoza o Gerona, recuperarían Madrid, así como el control sobre el conjunto del territorio. Sin embargo, entre el hostigamiento continuo de la guerrilla y el apoyo británico, no llegarían nunca a pacificarlo del todo.

Hasta Diciembre 1813: En el verano de 1812, la guerra daría un vuelco al tener Napoleón que retirar tropas de la Península para mandarlas de refuerzo a Rusia. Tras las batallas de Arapiles (Julio 1812), de Vitoria y San Marcial (1813), las tropas españolas, portuguesas e inglesas al mando de Wellington expulsarían definitivamente a los franceses.

En Diciembre de 1813, Napoleón firmaba el tratado de Valençay reconociendo a Fernando VII como rey de España. Así se ponía fin a un conflicto cuyas pérdidas humanas y económicas lastrarían el país durante décadas.