Conceptos Clave en Geografía Económica
A continuación, se definen algunos términos relevantes en el estudio de la geografía económica:
Plataforma Logística: Espacio urbano, delimitado, en el que se desarrollan todas las actividades relativas a la organización de una empresa y a la distribución de mercancías, tanto para transportes internacionales como nacionales. Su proliferación se ha visto favorecida por el aumento de la actividad del comercio electrónico. En España, una de las mayores plataformas logísticas se llama Plaza y se encuentra en Zaragoza, disponiendo de más de 13.000.000 m².
Puerto Seco: Conjunto de terminales intermodales de mercancías situadas en el interior de un país o región económica que conecta, a través de la red ferroviaria, con un puerto marítimo de origen o de destino. Estas plataformas logísticas sirven para la distribución de mercancías. El mayor de España se encuentra en Coslada, municipio situado en el Corredor del Henares, en la Comunidad de Madrid.
Red de Transporte: Sistema de organización espacial del transporte compuesto por los nodos o infraestructuras terminales o puntuales (estaciones, puertos, aeropuertos,…), las rutas, ejes o infraestructuras viales o lineales (calles, carreteras, vías ferroviarias, “autopistas del mar”,…) y los flujos o elementos transportados. Favorece la vertebración del territorio y el desarrollo regional, al interconectar entre sí diversos lugares.
Sector Terciario: Sector económico que abarca aquellas actividades que se basan en la prestación de servicios de todo tipo (actividades que satisfacen las necesidades de la sociedad), por lo que también se conoce como sector servicios. No genera bienes materiales e incluye actividades muy heterogéneas, que se pueden clasificar según su titularidad y fin en servicios privados y públicos, y según su función en servicios administrativos, financieros, de transporte, información y comunicación, comerciales, de ocio y turismo, personales y sociales.
Turismo Cultural: Conjunto de actividades turísticas relacionadas con la cultura. Se trata de una modalidad de turismo que hace referencia a los desplazamientos motivados por conocer, comprender y disfrutar de los elementos propios de una sociedad o grupo social. El turismo cultural se define también por las prácticas realizadas en el destino, tales como visitar museos y monumentos, asistir a conciertos, participar en fiestas, disfrutar de la gastronomía o el paisaje.
Turismo de Sol y Playa: Modalidad de turismo que se practica en espacios costeros en zonas de condiciones climáticas tropicales o templadas, donde la proximidad del mar, las playas y el confort climático, con un tiempo soleado, temperaturas suaves y ausencia de lluvias, son el atractivo. La estacionalidad es el rasgo más distintivo. La motivación principal de quienes realizan este tipo de turismo es el descanso, la diversión y el ocio pasivo. Se asocia con el turismo de masas debido a que suele estar vinculado a un bajo coste para atraer un mayor número de turistas. En España destacan la costa mediterránea y los archipiélagos canario y balear. Se emplea como sinónimo el término turismo litoral.
Turismo Rural: Aquel que crea iniciativas turísticas en municipios rurales con menos de 10.000 habitantes, que suelen corresponder con zonas deprimidas y despobladas. El alojamiento suele hacerse en viviendas antiguas reformadas y adaptadas, casi siempre dirigidas familiarmente (casas rurales). Dentro de este tipo de turismo se desarrollan actividades deportivas, artesanales o agropecuarias.
Turismo Social: Conjunto de actividades turísticas realizadas por los colectivos menos favorecidos gracias al apoyo de las administraciones públicas y otras entidades. Considerada como una modalidad turística específica, parte del reconocimiento de que todos los seres humanos tienen derecho al turismo. Este derecho se recoge en el Código Ético Mundial para el Turismo adoptado en 1999. Los viajes del IMSERSO son un claro ejemplo de este tipo de turismo.
Turismofobia: Término usado por los medios de comunicación para definir el rechazo que los residentes de un lugar tienen de los turistas que lo visitan, debido a las consecuencias negativas del turismo, ya sea a nivel social, ambiental o económico (como por ejemplo procesos de gentrificación, aumento del precio de la vivienda, dificultad en el uso del espacio público). No se recomienda el uso de este término porque culpabiliza a los residentes independientemente de los actos realizados por los turistas y sus secuelas.
Infraestructura de Transporte: Construcciones (vías e instalaciones) que se integran en un sistema de transporte al ser necesarias para la correcta y segura circulación de vehículos de transporte aéreo, ferroviario, por carretera o por vía navegable. Contribuyen significativamente al crecimiento económico y al bienestar de la sociedad.
Comercio y Transporte en España
El Comercio
El comercio interior, esto es, el intercambio de mercancías y servicios entre productores y consumidores dentro de las fronteras de un estado, ha experimentado cambios profundos desde 1980.
Cambios en la Oferta y la Demanda del Comercio Interior
- Respecto a la oferta: Se han diversificado los productos, se han generalizado nuevas formas de venta (como el autoservicio) y se ha difundido la aplicación de nuevas tecnologías (tarjetas, máquinas automáticas, Internet, …).
- En cuanto a la demanda: Se ha incrementado la capacidad de compra al subir las rentas familiares, se ha diversificado la clientela (por el envejecimiento y la inmigración), se han dispersado los consumidores, y se han cambiado los hábitos de compra al reducirse el gasto en alimentación a favor del ocio y disminuir la frecuencia de compra (al incorporarse la mujer al trabajo, usarse el coche para las compras, y generalizarse los frigoríficos).
Por su parte, el comercio exterior o intercambio de mercancías y servicios de un país con el resto del mundo ha vivido un gran crecimiento desde 1960 debido a:
- La apertura a la economía internacional (Plan de Estabilización de 1959).
- La entrada en la Comunidad Europea (1986).
- La incorporación a la globalización económica mundial.
- La mejora del nivel de vida interior que ha impulsado las importaciones.
El Transporte
El transporte marítimo ha sido el principal en largas distancias y mercancías, destacando en el comercio con América Sevilla (siglos XVI y XVII) y después Cádiz (siglo XVIII), sustituidos ahora por Algeciras, Valencia, Barcelona, Bilbao y Las Palmas.
La red de carreteras peninsular iniciada en el siglo XVIII con los Borbones adoptó un diseño radial, con centro en Madrid y ejes hacia las principales ciudades de la periferia, donde se concentra la población y actividad económica. La difusión del automóvil y camión desde 1960 y el desarrollo de ejes transversales y vías modernas de gran capacidad (autopistas y autovías) ha provocado que el tráfico interior de viajeros y mercancías se concentre en este modo de transporte.
El ferrocarril revolucionó en el siglo XIX (desde 1848) el transporte terrestre, adoptando también un carácter radial, entrando en decadencia en la segunda mitad del siglo XX, aunque ha mantenido su importancia en las cercanías metropolitanas y se ha relanzado con la inauguración de la Alta Velocidad Española a partir de 1992.
El transporte aéreo se ha impulsado desde 1960 creando una red aeroportuaria extensa, radial y jerárquica en torno al aeropuerto de Madrid Barajas, dominando el tráfico de pasajeros en distancias largas.
Las Telecomunicaciones
Las telecomunicaciones, o transmisión de información a distancia entre un emisor y un receptor, han ido desplazando a las comunicaciones tradicionales, como el correo postal. Desde mediados del siglo XIX se han desarrollado sucesivamente el telégrafo (primero óptico y luego eléctrico), el teléfono, la radio, la televisión y por último Internet.
Situación Actual del Comercio y el Transporte
El comercio interior cuenta con 850.000 establecimientos, emplea a 3,1 millones de personas y aporta el 12 % del PIB. El comercio mayorista, que compra productos al fabricante o a otro mayorista y los vende al minorista, tiene mayor peso en Cataluña, Comunidad de Madrid y Andalucía, destacando la red de Mercas gestionada por la empresa pública Mercasa. El comercio minorista, que vende al consumidor final, ha desarrollado nuevas formas, destacando las grandes superficies (supermercados, hipermercados, grandes almacenes, centros comerciales,…) y el comercio electrónico, aunque en cuanto a generación de empleo sigue destacando el comercio tradicional.
Respecto al comercio exterior, la balanza comercial (diferencia entre el valor de las exportaciones y las importaciones) es negativa. En las exportaciones destacan los bienes de equipo, alimentos y automóviles y en las importaciones los bienes de equipo, productos energéticos y químicos. El comercio se desarrolla principalmente con la UE. Con el resto del mundo, destacan las importaciones de Asia, principalmente de China y los países productores de petróleo.
Los transportes son importantes por las múltiples funciones que desempeñan y porque condicionan la organización territorial. Tienen funciones políticas (defensa y control del territorio), demográficas (influyen en el asentamiento de la población), económicas (permiten intercambio de bienes y trabajadores), sociales (posibilitan movimientos de personas), culturales (facilitan la difusión cultural) e internacionales (favorecen las relaciones internacionales y la globalización). Además, los transportes reflejan los desequilibrios demográficos y económicos, pero también pueden incitar cambios en el territorio al facilitar la accesibilidad.
Las telecomunicaciones, cuyas competencias son exclusivas del Estado, permiten acceder, procesar y almacenar grandes cantidades de información, impulsando el actual proceso de globalización (al eliminar la importancia del espacio físico y del transporte) y ocasionando numerosos cambios. En economía han propiciado sistemas inteligentes de trabajo, comercio electrónico, cursos online,…; en la sociedad impulsan el teletrabajo y las redes sociales; y en la cultura facilitan el intercambio.
El Sector Servicios en España
En España se vive desde 1960 un aumento de la importancia a nivel productivo y de empleo del sector servicios, superando el 70 % del PIB y de la ocupación. Esto supone una evidente terciarización de la economía española causada por:
- El aumento del nivel de vida (ingresos por familia) ha generado un aumento del consumo, exigiéndose servicios numerosos y especializados.
- Cambios económicos como: mejoras técnicas agrícolas (mecanización) a partir de 1960, que provocaron éxodo rural y trasvase de la población agraria al sector terciario; evolución de la industria potenciando servicios como el transporte y las finanzas, recolocando a parados desde 1975 y terciarizando la actividad industrial; el desarrollo de servicios como el turismo ha impulsado a otros servicios (hostelería, comercio, transporte,…).
- Los cambios políticos, por la creación de la administración autonómica y europea y la implantación del Estado del bienestar han promovido servicios administrativos, sanitarios, educativos,…
- Los cambios sociales también han impulsado los servicios: el envejecimiento los servicios asistenciales, la población extranjera los servicios sociales, el mayor tiempo libre el turismo, la incorporación de la mujer al mercado laboral servicios de cuidados (guarderías, servicio doméstico,…), y la demanda de calidad los servicios de control de calidad y atención al cliente.
- La difusión de nuevas tecnologías ha creado nuevos servicios a distancia (telecompra, teleenseñanza,…).
El Turismo en España
Desarrollo Histórico del Turismo
En la década de 1960 se inició un rápido y gran desarrollo turístico en España basado en el turismo de masas de sol y playa. Se basó en una oferta turística abundante y barata, dirigida a una demanda masiva de clases medias, concentrada en verano y en los archipiélagos españoles y el litoral mediterráneo. Este tipo de turismo fue comercializado por tour-operadores o agencias de viajes internacionales y se despreocupó de sus impactos ambientales.
Este gran desarrollo turístico se basó en factores externos e internos, destacando entre los externos el desarrollo económico de Europa occidental y septentrional (que consolidó una clase media con tiempo libre y dinero para el ocio) y el desarrollo del transporte (que abarató y facilitó los desplazamientos). Como factores internos hay que mencionar la proximidad geográfica de España a la demanda europea, los recursos naturales basados en el clima y las playas, los recursos culturales, el comparativo bajo coste de la vida en España, la existencia de infraestructuras y servicios (hoteles, restauración,…) y la política estatal franquista que normalizó las relaciones exteriores, construyó infraestructuras y potenció la imagen de España como destino turístico bajo el lema “Spain is different”.
Durante las décadas de los 70 y 80 el turismo español siguió creciendo en visitantes e ingresos, pero se ralentizó iniciando la crisis del turismo de masas de sol y playa. Esto se debió a causas coyunturales como la crisis económica mundial provocada por la subida del precio del petróleo, que redujo la demanda turística, y a causas estructurales como el encarecimiento de la oferta turística española sin mejorar la calidad y la aparición de nuevos destinos turísticos competidores tanto en áreas próximas (norte de África, Balcanes) como alejadas (Caribe, sureste asiático, Oceanía).
A finales del siglo XX e inicios del siglo XXI se recuperó el ascenso del número de turistas e ingresos turísticos, salvo durante la crisis. Las causas de este nuevo auge fueron el ingreso de España en la Comunidad Europea (1986), el crecimiento del turismo interno y la reconversión hacia un nuevo modelo turístico, basado en una oferta de calidad dirigida a una demanda más elitista, más diversificada en el tiempo y el espacio, con menor uso de los tour-operadores y mayor sensibilidad hacia los problemas ambientales.
El Nuevo Modelo Turístico y su Importancia
Este nuevo modelo turístico depende de factores como la calidad de la oferta (basada en la mejora del servicio y las infraestructuras), la diversificación de la oferta (promocionando nuevos tipos de turismo), la promoción política del turismo (por los gobiernos central, autonómico y municipal) y la búsqueda de un desarrollo turístico sostenible con la conservación medioambiental.
España es una gran potencia turística. En 2024 ocupó la segunda posición tras Francia en cuanto a número de visitantes (93,8 millones) y tras EEUU en ingresos (126 mil millones de euros). En el ámbito económico el turismo crea en torno al 12 % del PIB y frena el endeudamiento externo compensando la deficitaria balanza comercial. Además genera en torno al 12 % de la ocupación, aunque un tercio al menos es estacional. El turismo estimula otras actividades económicas (agricultura, industria, construcción, transporte, comercio,…), e impulsa el transporte (al exigir una buena accesibilidad a los núcleos turísticos, por lo que se crean autopistas, se promueve el desarrollo de aeropuertos y vuelos chárter, y se incrementan los puertos deportivos).
A nivel social, el turismo aumenta la población en las áreas litorales con adultos que acuden buscando trabajo o con jubilados en busca de ocio. En los puntos turísticos (montañas, áreas rurales, ciudades históricas) el turismo frena el despoblamiento. En el poblamiento, el turismo extiende el poblamiento urbano y las conurbaciones en el litoral y en ciudades históricas el turismo contribuye a la rehabilitación del patrimonio edificado. Por otra parte, el turismo fomenta el acercamiento entre pueblos de culturas diversas, facilita las relaciones políticas y potencia la visibilidad internacional de España. Además, el turismo impulsa el cambio y la modernización social.
Problemas y Retos del Turismo Español
El turismo español se enfrenta a problemas y retos. Ha mostrado que es un sector muy sensible a las crisis económicas y sanitarias (la pandemia de COVID-19 redujo en tres cuartos los turistas e ingresos recibidos en 2020). El turismo además ha ocasionado una excesiva especialización provocando conflictos con otras actividades, como las agrarias, por el uso de recursos naturales como el agua o el suelo. Preocupa también entre los residentes de las áreas turísticas la subida excesiva de los precios, especialmente de la vivienda. La precariedad laboral asociada a la estacionalidad y a empleos poco cualificados es otro problema de la actividad turística.
En el ámbito social el turismo ha generado pérdida de costumbres e identidad propia y ha empeorado la calidad de vida de los residentes por la saturación de servicios (sanidad, recogida de residuos,…) e infraestructuras (atascos). La masificación turística ha generado rechazo social de los residentes hacia los turistas (turismofobia).
En el medio ambiente, el turismo ha generado:
- La destrucción de costas (al construirse hoteles y apartamentos junto a las playas sin respetar el dominio público marítimo terrestre).
- La urbanización de espacios naturales de gran valor (acabando con bosques y ecosistemas, erosionando zonas de montaña,…).
- El aumento de la contaminación atmosférica, de las aguas y playas.
- El exceso de ruido.
- El incremento del volumen de los residuos.
Frente a estos problemas la política turística busca la preservación de los valores naturales y culturales de los destinos y diversificar la oferta buscando la desconcentración espacial y temporal para evitar la masificación que genera las peores consecuencias sobre los residentes.