Historia de España: Reconquista, Prehistoria y Pueblos Prerromanos

La Reconquista: Etapas Clave y Repoblación en la Península Ibérica

Del Siglo VIII al X: Los Inicios y el Avance en Zonas Despobladas

Durante este periodo, los musulmanes no ocuparon de forma efectiva toda la Península. Al norte del Duero y el valle del Ebro apenas trasladaron población y pronto se convirtieron en zonas fuera de control. Esta situación permitió que, hasta el siglo X, los reinos cristianos avanzaran rápidamente sobre estas regiones, ocupando territorios despoblados o con poblaciones cristianas.

En el siglo X, Castilla ya había llegado y repoblado hasta el Duero. Mientras que en los reinos y condados orientales, el avance territorial en estos siglos fue más lento.

Siglo XI y Primera Mitad del XII: El Verdadero Inicio de la Reconquista

Esta fase marca el verdadero inicio de la Reconquista, producido sobre todo por la crisis interna de Al-Ándalus. En este periodo, el califato se desintegra y el territorio musulmán se divide en taifas. Es entonces cuando los reinos cristianos toman el control militar y avanzan rápidamente sobre los territorios islámicos. En 1085, se toma Toledo, lo que provocará la llegada de los Almorávides. En el siglo XI, se produce también la conquista de Valencia por parte de El Cid.

En este mismo siglo, se producirá la unión castellano-leonesa en el oeste y la unión catalano-aragonesa en el este, lo que consolidará dos grandes bloques cristianos para la Reconquista.

Segunda Mitad del Siglo XII: Rivalidades y Acuerdos Territoriales

En este momento, destacan las rivalidades entre reinos cristianos por los territorios a reconquistar. El predominio de Castilla y Aragón se plasma en varios acuerdos, entre los que destaca el Acuerdo de Cazorla (1179), por el cual se dividían los territorios a reconquistar, estableciendo la frontera entre Alicante (para Aragón) y Murcia (para Castilla). Estos tratados dejaron cerrado el avance de Navarra, que terminó en la órbita de linajes franceses. Mientras, en el oeste de Castilla, nacía el reino de Portugal.

Siglo XIII: La Victoria Definitiva y la Expansión Cristiana

La victoria sobre los Almohades en la Batalla de las Navas de Tolosa (1212) supuso el declive definitivo de Al-Ándalus y dejó el camino despejado para el avance de los reinos cristianos. En Aragón, Jaime I el Conquistador toma el reino de Valencia y las Baleares. Portugal alcanza el sur de la Península. En Castilla y León, se produce la unión definitiva del reino con Fernando III; será Alfonso X quien llegue hasta Cádiz, quedando así reconquistado todo el territorio peninsular con la excepción del Reino Nazarí de Granada.

Métodos de Repoblación durante la Reconquista

  • Los inicios de la repoblación.
  • La repoblación concejil y del valle del Ebro. Las órdenes militares.
  • La repoblación por repartimiento.

La Prehistoria en la Península Ibérica: Eras y Evolución Humana

La prehistoria en la Península Ibérica se divide en cuatro periodos principales:

Paleolítico Inferior (800.000-100.000 a.C.)

Durante este periodo, aparecen el Homo Antecessor y el Homo Heidelbergensis. Se trata de grupos nómadas que se dedicaban principalmente a la caza, la pesca, la recolección y el carroñeo. Aquí surgen los instrumentos líticos (de piedra) más antiguos. Los principales restos de este periodo se encuentran en el yacimiento de Atapuerca (Burgos).

Paleolítico Medio (100.000-35.000 a.C.)

Destaca por la presencia del Homo Neanderthal. Se producen importantes avances como la industria lítica Musteriense, el uso del fuego y los enterramientos rituales. Durante este periodo, los yacimientos aparecen distribuidos por toda la Península, destacando los enterramientos de Cueva Morín (Asturias).

Paleolítico Superior (35.000-10.000 a.C.)

Caracterizado por la aparición del Homo Sapiens. Durante este periodo, se mantiene una economía cazadora-recolectora, pero surgen considerables avances como la industria ósea, las herramientas compuestas, los adornos y el arte rupestre. El arte rupestre consiste en pinturas con un carácter religioso, en las que van a destacar dos regiones: la cantábrica (ej. Altamira) y la levantina.

Neolítico (Hace unos 5.000 años)

Este periodo representa el cambio de una economía cazadora-recolectora a una economía productora (agricultura y ganadería). En la Península, se trata de un proceso de aculturación que llega a través del Mediterráneo hace unos 5.000 años.

Pueblos Prerromanos de la Península Ibérica: Íberos e Indoeuropeos

Los pueblos prerromanos son un conjunto diverso de comunidades que habitaban la Península Ibérica antes de la llegada de los romanos. Su existencia se conoce gracias a las fuentes documentales de los historiadores romanos y a un importante conjunto de restos arqueológicos. A grandes rasgos, este conjunto de pueblos puede dividirse en dos zonas diferenciadas: los Pueblos Íberos y los Pueblos Indoeuropeos.

La Zona Íbera

Se trata de un conjunto de pueblos con rasgos materiales y culturales comunes (aunque con variaciones regionales). Se distribuían en la zona sur de la Península y en la franja mediterránea. Eran sociedades jerarquizadas, basadas en la agricultura y la ganadería, con fuertes lazos comerciales con el ámbito mediterráneo. Contaban con un sistema de escritura que aún no ha sido descifrado y con una importante cultura material en la que destaca la escultura (como la Dama de Elche) y la cerámica (como la cerámica de Liria).

La Zona Indoeuropea

Comprende distintos pueblos que se localizaban en el Norte, Centro y Oeste de la Península (como los Lusitanos, Carpetanos, Celtíberos, Vascones, Astures, etc.). Todos ellos cuentan con rasgos comunes y derivan de poblaciones de origen europeo.