Orígenes del Conflicto: La Alemania de Entreguerras
La República de Weimar
Proclamada en 1918 tras la abdicación del káiser Guillermo II, la República de Weimar surgió en un contexto político y económico muy difícil. Desde su inicio, sufrió insurrecciones tanto de la derecha como de la izquierda.
Problemas clave
- Insurrección obrera: La Liga Espartaquista (comunista) intentó proclamar un gobierno de consejos al estilo soviético.
- Radicalización nacionalista y golpes fallidos: Los grupos nacionalistas radicales, que tachaban al gobierno de traidor por aceptar el armisticio y el Tratado de Versalles, protagonizaron varios intentos de golpe, como el fallido Putsch de Múnich (de carácter nacionalista) protagonizado por Hitler.
- Crisis económica e hiperinflación: La situación económica era muy complicada. La hiperinflación y la caída del valor del marco alemán provocaron el cierre de numerosas empresas y un aumento drástico del desempleo. El Plan Dawes estabilizó la situación, pero la retirada de créditos estadounidenses tras la crisis de 1929 provocó una profunda recesión económica. En el ámbito político, los partidos gubernamentales de la Coalición de Weimar perdieron apoyo ante la incapacidad de resolver la crisis.
El Ascenso del Nazismo al Poder
El malestar social hizo que el discurso radical del NSDAP (Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán) ganara fuerza. En las elecciones de 1932, las fuerzas conservadoras llegaron a un acuerdo con Hitler para nombrarlo canciller en un gobierno de coalición.
En 1933, Hitler logró que el presidente Hindenburg convocara nuevas elecciones. El partido nazi no obtuvo la mayoría absoluta, pero con el apoyo del Centro Católico, el Parlamento aprobó la Ley de Plenos Poderes, que permitió a Hitler gobernar durante cuatro años sin el control parlamentario. Tras la muerte de Hindenburg, Hitler acumuló las funciones de presidente y canciller, proclamándose Führer y Canciller del Reich (Reichsführer).
Apoyos del Partido Nazi
El partido nazi obtuvo el apoyo de clases medias empobrecidas, campesinos arruinados y obreros desesperados ante la miseria y el paro. Su nacionalismo radical atrajo a militares, antiguos combatientes y a una burguesía que deseaba un poder fuerte. Hitler contaba con el apoyo de personalidades destacadas de la industria y las finanzas que ayudaban económicamente al partido.
La Ofensiva del Eje (1939-1941)
La Guerra Relámpago y la Invasión de Polonia
La primera etapa de la guerra se denominó Guerra Relámpago (Blitzkrieg). La invasión de Polonia duró tres semanas y mostró el nuevo tipo de guerra iniciada por Alemania para imponer su “nuevo orden”: una acción rápida y por sorpresa basada en la superioridad militar del ejército nazi, que destruía ciudades y devastaba el territorio. Esta estrategia se mantuvo hasta finales de 1941, cuando fue frenada por la URSS.
En 1939, la ocupación de la Polonia occidental significó la destrucción del país y el asesinato y trato brutal de la población, reducida a la condición de mano de obra esclava.
Expansión hacia el Norte y el Oeste
Invasión de Dinamarca y Noruega
En 1940, el siguiente paso fue hacia el norte, donde Suecia, neutral, tenía un trato preferente con Alemania y le facilitaba el abastecimiento de hierro. Al considerar que este suministro se veía amenazado por los británicos, Hitler invadió Dinamarca y Noruega.
Ocupación de Francia
Alemania necesitaba incorporar a Francia en su “nuevo orden”. Por este motivo, comenzó a invadirla a través de Luxemburgo, Bélgica y los Países Bajos, ocupados en 48 horas. Los nazis llegaron a París el 14 de junio de 1940. El gobierno de Pétain capituló y firmó el armisticio que dividió Francia en dos:
- El norte, bajo dominio directo nazi.
- El sur, con un gobierno colaboracionista con los nazis, presidido por Pétain y con capital en Vichy.
La Formación del Eje y el Frente Balcánico
Mussolini quiso invadir Grecia, pero fracasó. Hitler puso su atención hacia el este y convirtió a Rumanía, Eslovaquia, Hungría y Bulgaria en estados satélites, pero se encontró con la resistencia de Yugoslavia y decidió bombardear Belgrado, destruyéndola.
El Frente del Norte de África
En el norte de África, las tropas del Eje intentaron acceder al petróleo del Próximo Oriente, enfrentándose a los británicos. El verano de ese año, Hitler atacó el Reino Unido con intensos bombardeos, pero los británicos resistieron y frustraron las aspiraciones nazis de invadir las islas. Estos ataques duraron hasta la primavera de 1941.
La Guerra se Globaliza (1940-1942)
La Batalla de Inglaterra
En 1940, Hitler atacó el Reino Unido con intensos bombardeos, pero los británicos resistieron, frustrando las aspiraciones nazis de invadir las islas. Estos ataques duraron hasta la primavera de 1941.
Operación Barbarroja: Invasión de la URSS
En 1941 se produjo la invasión de la URSS. Hitler ya había decidido la Operación Barbarroja, es decir, la invasión de la URSS contraviniendo el pacto de no agresión. La URSS, por su parte, había invadido la Polonia occidental y había procedido a la conquista de Finlandia y las repúblicas bálticas (Estonia, Letonia y Lituania).
Avance y Resistencia Soviética
La obsesión por exterminar las “razas eslavas” y el bolchevismo, así como por acceder a recursos naturales y mano de obra para la industria alemana, provocaron un ataque relámpago en tres direcciones: Moscú, Ucrania y Leningrado. El avance fue muy rápido; las ciudades quedaron arrasadas, los prisioneros soviéticos exterminados en el terreno y las masacres de población civil fueron constantes. El Ejército Rojo consiguió frenar a las tropas nazis a las puertas de Moscú, mientras Leningrado había resistido un asedio de casi 900 días.
La Batalla de Stalingrado
Mientras tanto, Hitler invadió Ucrania y comenzó la Batalla de Stalingrado, donde, después de siete meses de asedio, la derrota del ejército nazi fue un hecho sin precedentes, quedando el ejército completamente destruido. Fue la primera gran derrota de Hitler.
La Entrada de Estados Unidos y la Batalla del Pacífico
En el Pacífico, en diciembre de 1941, el gobierno japonés decidió atacar por sorpresa la base de EE. UU. de Pearl Harbor, en Hawái. Esta acción provocó la entrada estadounidense en la guerra a favor de los Aliados: Francia, Reino Unido y la URSS. Mientras tanto, Japón se incorporaba activamente al Eje.
La Batalla del Pacífico comenzó con el avance de Japón, que conquistó numerosas colonias holandesas, francesas e inglesas (Hong Kong, Malasia, Singapur, Birmania e Indochina) y llegó a las Filipinas. A mediados de 1942, EE. UU. frenó el expansionismo japonés, eliminando su pretensión de ocupar Nueva Guinea y Australia.