La Historia Definitiva del Flamenco: Evolución y Épocas Clave
El flamenco, arte profundo y complejo, ha experimentado una rica evolución a lo largo de los siglos. A continuación, se detallan las etapas fundamentales que han moldeado su forma actual.
I. Orígenes y Consolidación (1765-1860)
En este periodo, se establecieron tres focos geográficos de gran importancia que sentaron las bases del arte flamenco: Cádiz, Jerez de la Frontera y el barrio de Triana, en Sevilla.
Es a partir de esta época cuando el baile flamenco comienza a ganar espacio entre los bailes españoles desarrollados en las escuelas, representándose frecuentemente en patios, ventas y salones privados durante las celebraciones.
En cuanto a la guitarra, al principio no solía acompañar al cante, que normalmente se realizaba a palo seco, sin más acompañamiento que el toque de palmas.
II. La Edad de Oro del Flamenco (1860-1910)
Entre 1860 y 1910, el flamenco ingresa en una época más prolífica, conocida como La Edad de Oro del Flamenco. En este periodo florecen los cafés cantantes, desarrollando el flamenco en todas sus facetas: la instrumental, la de cante y la de baile, hasta fijar definitivamente lo que se considera el clasicismo de lo “jondo”.
El baile adquiere un esplendor sin precedentes, siendo el mayor atractivo para el público de estos cafés cantantes. Además, se da un gran impulso a la guitarra, que se establece como un complemento fundamental e indispensable para el cante y el baile.
III. Ópera Flamenca y Reivindicación del Cante Jondo (1910-1955)
El cante en esta etapa está marcado por lo que se ha llamado la etapa de la Ópera Flamenca, donde predominan los cantes más ligeros, como los fandangos y los cantes de ida y vuelta (de influencia sudamericana, traídos por los cantaores que habían emigrado a Latinoamérica).
Este nuevo camino tomado por el flamenco no fue del agrado de todos. En 1922, un grupo de intelectuales, como Manuel de Falla y otros artistas de la Generación del 27, crearon un Concurso en Granada con la finalidad de buscar nuevos valores que cultivaran el cante jondo auténtico.
A partir de 1915, se produce un ciclo de baile teatral de excepcional calidad, llevando el baile español y flamenco por todos los escenarios del mundo.
IV. El Renacimiento y la Madurez (A partir de 1955)
A partir de 1955, se inicia un Renacimiento del Flamenco, siendo Antonio Mairena su figura principal, destacando por su rigor interpretativo y su afán investigador y de divulgación de la ortodoxia del cante.
El Baile en los Tablaos
El baile en esta época se desarrolla en los tablaos, herederos directos de los cafés cantantes anteriores. Estos espacios contaron con verdaderas personalidades del baile, que alternan sus actuaciones no solo en los tablaos, sino también en teatros, festivales y otros escenarios.
El Protagonismo de la Guitarra
Los guitarristas, acompañando al cante y al baile, adquieren un mayor protagonismo, alcanzando este arte su madurez. El guitarrista es actualmente no solo acompañamiento, sino también solista.
Paco de Lucía marca el inicio de una nueva etapa de esplendor sin precedentes, dando a la guitarra una dimensión universal. Junto a él, es imprescindible citar a otros verdaderos virtuosos de este instrumento, como Manuel Cano, Víctor Monge Serranito y Manolo Sanlúcar.
V. Flamenco, Sociedad y Activismo
El flamenco se convirtió en uno de los símbolos de la identidad nacional española durante el franquismo, ya que el régimen supo apropiarse de un folclore tradicionalmente asociado con Andalucía para promover la unidad nacional y atraer al turismo.
En contraposición a este conservadurismo, el flamenco sufrió el influjo de la ola de activismo que agitó también la universidad contra la represión del régimen, cuando los universitarios entraron en contacto con este arte en recitales que se hacían, por ejemplo, en el Colegio Mayor de San Juan Evangelista.
Cantaores Reivindicativos
A mediados de los años 60 y hasta la Transición, comenzaron a aparecer cantaores que se oponían al régimen con el uso de letras reivindicativas. Entre estos se pueden contar: José Menese, Enrique Morente, Manuel Gerena, El Lebrijano, El Cabrero, Lole y Manuel, El Piki o Luis Marín, entre muchos otros.
VI. Popularización e Internacionalización del Flamenco
Dentro de los palos del flamenco, vemos sus conexiones con distintas regiones de España e Hispanoamérica en los Cantes de Ida y Vuelta.
El trabajo realizado para la popularización e internacionalización del flamenco se ha desarrollado desde distintas áreas a lo largo de los siglos XIX, XX y XXI.
Hitos Clave en la Difusión Global
- El flamenco entra en las academias de baile, a través de piezas de músicos y coreógrafos nacionales e internacionales desde el Romanticismo (ej. Carmen de Bizet).
- El sustrato musical popular que origina la música flamenca como mezcla de estilos.
- El flamenco llega a Madrid: Bailes en los cafés cantantes donde acuden intelectuales y personalidades conectadas con la cultura.
- La primera decantación del baile flamenco ‘clásico’ y el paso hacia los grandes escenarios, donde grandes compañías de danza presentan piezas con conexiones flamencas.
- El papel de los intelectuales y el flamenco: ensayos, críticas y poemas de Lorca.
- El baile flamenco y el Ballet Clásico Español, entidad sufragada desde la época de Franco por el Estado español, que contó entre sus directores con bailarines de prestigio nada afines con el régimen.
- Hitos y artistas en el siglo XX que actuaron con sus propias compañías en salas por todo el mundo.
- El flamenco como primera industria cultural de Andalucía, con origen en su música popular.
- La conexión del flamenco con la copla, permitiendo acercarlo al gran público.
- La fusión del flamenco con el pop, el rock y el jazz, conectándolo con el público joven.
- Los festivales flamencos internacionales, que potencian la aparición y el contacto de figuras del flamenco de distintos orígenes.
Todo ello ha llevado a la popularidad del flamenco en diversos lugares del mundo: Estados Unidos, Iberoamérica, Japón, China, Europa y países árabes del Mediterráneo.
En Japón es tan popular que se dice que en ese país hay más academias de flamenco que en España. Su reconocimiento como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2010 favorece aún más su difusión global.