La Prehistoria: Un Viaje por la Evolución Humana y sus Períodos Fundamentales

La Prehistoria: Orígenes, Períodos y Conceptos Clave

La Prehistoria se refiere al período de la historia humana anterior a la utilización de la escritura. Por lo tanto, para conocer este periodo, se deben usar otras fuentes como la arqueología, la antropología, la paleontología y otras ciencias naturales aplicadas al conocimiento del pasado. Tradicionalmente, la Prehistoria se divide en dos grandes períodos o edades: la Edad de Piedra y la Edad de los Metales.

Períodos Principales de la Prehistoria

La Edad de Piedra

La Edad de Piedra se subdivide a su vez en tres etapas:

  • El Paleolítico
  • El Mesolítico o Epipaleolítico
  • El Neolítico

La Edad de los Metales

La Edad de los Metales se subdivide en:

  • El Calcolítico o Edad del Cobre (periodo de transición)
  • La Edad del Bronce
  • La Edad del Hierro

El Paleolítico: La Era de la Piedra Tallada

El Paleolítico abarca desde la aparición de los primeros utensilios de piedra tallada (hace aproximadamente 2.5 millones de años, con la aparición de los primeros primates del género Homo en África) hasta el desarrollo de la agricultura y la ganadería. Este periodo se puede dividir en tres grandes etapas:

Paleolítico Inferior

Los útiles son simples y fabricados con un solo núcleo de piedra, y sus usos pueden ser múltiples. En Europa, este tipo de artefactos se asocia al Homo erectus y sus sucesores. En la península Ibérica, abarca desde hace 1.300.000 hasta hace 125.000 años.

Paleolítico Medio

Los útiles son fabricados a partir de lascas o trozos de talla de núcleos de mayor tamaño, y son más estandarizados y adaptados para tareas concretas. Esta industria se asocia al Homo neanderthalensis y abarca desde hace 125.000 hasta unos 35.000 años.

Paleolítico Superior

Los útiles son muy sofisticados y especializados, fabricados a partir de láminas de piedra o lascas muy finas y elaboradas, y también en otros materiales como hueso, marfil, asta de ciervo o madera. Esta industria se asocia al Homo sapiens, que comenzó a colonizar Europa desde África hace 70.000 años, conviviendo con los neandertales hasta la extinción de estos. Abarca desde hace 35.000 hasta hace solo unos 8000 años.

Durante el Paleolítico, la economía era depredadora: el ser humano se alimentaba de los recursos naturales sin producirlos por sí mismo, mediante la caza, la pesca y la recolección de frutos. Se organizaban en grupos no muy numerosos y llevaban una vida nómada o seminómada, desplazándose por territorios más o menos amplios al ritmo de las estaciones y las migraciones de los animales que cazaban. En el Paleolítico superior, el grado de sofisticación cultural alcanzado se manifiesta en el arte rupestre, como el de Altamira, que representa animales (bisontes, caballos, etc.) de forma realista y evidencia un pensamiento simbólico.

Conceptos Clave de la Prehistoria

Economía Depredadora

Modo o sistema económico propio de las sociedades humanas que desconocen o no utilizan la agricultura o la ganadería, y basan su subsistencia en la explotación directa de la naturaleza mediante la caza, la pesca o la recolección de frutos silvestres. Era el modo de vida propio de las sociedades del Paleolítico, así como de algunas sociedades aisladas actuales. Las sociedades paleolíticas formaban grupos no muy numerosos (apenas unos pocos miembros o familias), poco jerarquizados, y la dependencia de los recursos naturales los obligaba a practicar una vida nómada o seminómada, desplazándose siguiendo el ritmo de las estaciones. El Paleolítico en la península Ibérica abarca desde la llegada de los primeros Homo erectus procedentes de África hace 1,2 millones de años, hasta la aparición de la agricultura hacia el 6000 a.C. Conocemos esto gracias a los hallazgos arqueológicos de útiles y fósiles en yacimientos como Atapuerca, Altamira o, en Galicia, Cova Eirós.

Megalitismo

Fenómeno cultural de la Prehistoria, común en toda la Europa atlántica y el Mediterráneo occidental, que surge en el Neolítico y se extiende durante la Edad del Bronce, consistente en la construcción de monumentos hechos con grandes piedras o megálitos. Las construcciones más características son las grandes tumbas colectivas, llamadas dólmenes, consistentes en una cámara adintelada con grandes losas y un corredor de entrada, generalmente enterradas bajo grandes túmulos de tierra (llamados en gallego mámoas o medoñas). Por otra parte, las piedrafitas o menhires, son monolitos de piedra que pueden formar alineamientos o círculos (cromlechs o henges) y que son interpretados como lugares de culto solar (como el de Stonehenge, en Inglaterra).

Castro

Asentamiento o poblado fortificado propio de la Edad del Hierro. Sus orígenes se remontan al final de la Edad del Bronce, a principios del primer milenio a.C., y perviven aún después de la conquista romana. Los castros son los yacimientos más representativos de la cultura galaica del noroeste de la península Ibérica, llamada por algunos castrexa por este motivo, y que comparte muchas características en común con otras culturas europeas denominadas comúnmente como celtas. Se caracterizan por ubicarse en lugares de fácil defensa y con un amplio control del territorio circundante, como cumbres de colinas o promontorios costeros; y por su peculiar arquitectura en la que predominan las casas de planta circular. Algunos de los castros más conocidos son el de Santa Tegra, Baroña, la ciudad de Lansbrica (Lás) o la Citânia de Briteiros, en Portugal.