Resumen de la Segunda Parte de Don Quijote
Capítulo 1: El regreso de la locura y la aparición del Bachiller
El cura y el barbero estuvieron casi un mes sin ver a Don Quijote mientras se curaba de su locura. Al fin, fueron a comprobar cómo estaba, y para verificar si su cordura era genuina, el cura le contó que el Turco navegaba con una armada sin destino fijo. Entonces Don Quijote revivió su locura y dijo que él sería capaz de acabar con el Turco. Sancho intentó entrar en la casa, pero ni el ama ni la sobrina le dejaron. Al final, entró. Sancho le cuenta lo que dice la gente sobre él y que llegó de Salamanca Sansón Carrasco, hecho bachiller, y dijo que sus historias estaban escritas en un libro de título “El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha” y que su autor era Cide Hamete Benengeli. Don Quijote desconfía del autor por ser moro y teme que mienta o trate sus amores con alguna indecencia. Sancho fue a buscar a Sansón y cuando llegó, este se arrodilló ante Don Quijote y ensalzó sus hazañas. Don Quijote pregunta si habrá segunda parte y este le dice que sí. Carrasco le recomendó ir a Zaragoza, ya que allí podría ganar fama. Quedaron en que saldrían en ocho días.
Sancho le contó todo a su mujer, Teresa, esta se preocupó, y él dijo que gobernaría una isla y casaría a Mari Sancha con un conde, idea que no le gustó nada a Teresa. Finalmente, Teresa le dice que haga lo que quiera y se puso a llorar. Sancho volvió a casa de Don Quijote y el ama fue a buscar al bachiller pensando que sería el único capaz de evitar la tercera salida. Sancho le pide a Don Quijote un sueldo fijo y este se niega. Sansón se ofrece a ser escudero, y Sancho rectifica y acepta serlo sin sueldo. Pasados tres días, se pusieron en marcha hacia El Toboso.
Capítulo 2: La búsqueda de Dulcinea y el encantamiento
Don Quijote va ilusionado con la idea de ver a su amada Dulcinea. Sancho comenta que él la vio a través de las tapias de un corral y Don Quijote dice que será más bien de un palacio. Tras días, llegaron a El Toboso, entraron de noche y buscaron el hogar de Dulcinea. No lo encontraron y dieron con la iglesia. Don Quijote confiesa que no la ha visto nunca y que está enamorado de oídas, y Sancho le dice que él tampoco la vio. Pararon a un mozo y le preguntaron, y este dijo que no sabía nada, que llegó hace poco y que aun así creía que allí no había princesas. Sancho le propuso a Don Quijote irse de ahí porque iba a amanecer, y le prometió que él volvería de día a buscar la casa de Dulcinea.
Don Quijote le insistió en que se fijase en todo tipo de gestos y andares para saber lo que sentía por él. Y Sancho fue hacia allá. Iba reflexionando sobre qué hacer, ya que no existía ni Dulcinea ni su casa.
Finalmente, como su amo estaba un poco loco, decidió hacerle creer que tres labradoras que iban sobre burros eran Dulcinea y sus doncellas. Al principio Don Quijote no se lo creía y tomaba a Sancho por loco, pero cuando Sancho las paró para hablar con ellas, cayó en la mentira y terminó diciendo que los encantadores habían transformado a su amada en una aldeana fea y sin olor a flores. Después de esto, siguen su camino hacia Zaragoza, donde querían participar en las justas de San Jorge.
Capítulo 4: El Caballero del Bosque y el encuentro con el Verde Gabán
El bachiller había acordado con el cura y el barbero dejar ir a Don Quijote. Sansón batallaría contra él, convertido en caballero andante, y al derrotarlo le pediría que volviese a casa durante dos años a ver si su locura se curaba. No funcionó. Tomé Cecial renegó a seguir siendo su escudero, pero el bachiller seguía empeñado en su labor. Mientras, Sancho, confundido por lo que había pasado, escuchaba a Don Quijote explicarle por qué habían sido los encantadores. Siguiendo su camino, vieron a un hombre a lomos de una yegua. Don Quijote le pidió caminar juntos y así lo hicieron. Se presentó Don Quijote y el hombre hizo lo propio. Dijo ser un hidalgo rico llamado Diego de Miranda, al que llamaban Verde Gabán. Se dedica a la caza y pesca y tiene un hijo al que le gusta la poesía. Sancho se bajó de su asno y le besó los pies al hombre diciendo que era el primer santo que veía.
Don Quijote divisó un carro lleno de banderas reales y avisó a Sancho para prepararse por si acaso. Sancho, acababa de comprar requesones y al oír a su amo los guardó en la celada que más tarde se puso Don Quijote. Los requesones se le apretaron y exprimieron por toda la cabeza. Sancho escuchó su reprimenda, pero salió de ella aludiendo a los encantadores. Se acercó el carro y Don Quijote los paró para preguntarles quiénes eran. Dijeron llevar dos leones enjaulados para el rey y Don Quijote pidió que le abrieran la jaula. Con mucho pesar, el leonero lo hizo. El león se desperezó, salió y volvió a entrar. El leonero prometió presumir de la valentía de Don Quijote y contar ese hecho. Siguieron su camino y llegaron a casa del Verde Gabán. Les recibieron su mujer y su hijo. Don Quijote se aseó, charló con el hijo sobre poesía y allí pasaron cuatro días servidos de todo.
Capítulo 6: El descenso a la Cueva de Montesinos
Don Quijote, Sancho y el humanista llegaron a la Cueva de Montesinos. Compraron ciento setenta metros de soga y ataron a Don Quijote. Al hundirse hacia el abismo, salieron multitud de murciélagos y cuervos. Don Quijote nombró a Dulcinea y Sancho lo bendijo. Una vez dada toda la soga, esperaron un rato y empezaron a recogerla, asustados por el poco peso. Al fin vieron subir a Don Quijote dormido. No despertaba y le zarandearon hasta que lo hizo. Este les contó lo que vio allí abajo.
Vio una cavidad, entró, se sentó y se quedó dormido. Cuando despertó, apareció en un prado frente a un palacio de cristal. Vio a un anciano, que le abrazó y reconoció su valor como caballero y le dijo que quería mostrarle ese alcázar y que él era Montesinos. Don Quijote le preguntó si era verdad lo de su primo Durandarte, y afirmó. Fueron a una sala, estaba tendido un caballero que le pedía a Montesinos que llevase su corazón a Belerma. Montesinos le dijo que ya lo hizo. Estaban encantados por el diabólico mago Merlín. También estaba encantada Belerma, rota de dolor por tener el corazón de su amado. Montesinos pide confianza en Don Quijote, el único capaz de desencantarlos. Sancho y el humanista dudan de la historia, ya que estuvo poco menos de una hora allí abajo. Los encantados ni comían ni dormían y vio pasar tres amaneceres. También vio a Dulcinea encantada, la cual pasó de él.
Capítulo 12: El vuelo de Clavileño
Llegan unos salvajes y traen al caballo Clavileño. Convencen a Sancho de que suba, que su isla estará igual. Sancho y Don Quijote creían estar volando por el cielo y llegando hasta la esfera del fuego, pero en verdad era una burla de los duques. El caballo lleno de cohetes voló por los aires y acabaron en el mismo jardín de donde partían. Había una carta diciendo que Malambruno se da por contento y que los reyes Clavijo y Antonomasia ya no estaban encantados.
Sancho cuenta que se destapó los ojos y estuvo con unas cabras cuarenta y cinco minutos. Don Quijote le dice que si quiere que le crea, él tiene que creer lo de la Cueva de Montesinos.
Personajes Clave de la Segunda Parte
Dulcinea
Se trataba en realidad de Aldonza Lorenzo, labradora vecina de Don Quijote. Es un personaje imaginario que solo existía en la imaginación del famoso Hidalgo. Para Don Quijote es la más bella doncella sobre la faz de la Tierra y por la que lucha cada día y a la que brinda sus hazañas.
El Cura
Es el Licenciado Pedro Pérez, cura que visitaba a menudo la casa de Don Quijote. Tuvo la idea de quemar los libros de caballerías de Don Quijote. Don Quijote discute con él muchos asuntos relacionados con la caballería.
La Sobrina
Muchacha que vive en la misma casa que Don Quijote, que es su tío. No llega a los veinte años. Es en realidad la primera persona que sugiere la quema de los libros de su tío. Intenta convencer a su tío de que un encantador se ha llevado el aposento con sus libros.
El Barbero
Se llama Maese Nicolás. Es el barbero de la zona y gran amigo de Don Quijote. Suele visitarle a menudo. Participa junto con el ama, el cura y la sobrina en el escrutinio y quema de libros de la biblioteca de Don Quijote. Acompaña al cura a buscar a Don Quijote cuando este se va de aventuras. Quiere participar en la recuperación de su amigo.
El Bachiller
Es uno de los personajes secundarios más importantes del Quijote. El bachiller Sansón Carrasco es un hombre joven, optimista y agradable, que estudia a Aristóteles y se basa en la lógica.