La Transición Española a la Democracia: Hitos, Actores y Transformaciones (1975-2008)

Alternativas Políticas Tras la Muerte de Franco: Actores y Propuestas

Miembros del Régimen Franquista: Aperturistas e Involucionistas

Por un lado, se encontraban los miembros del régimen franquista, divididos en dos tendencias:

Los Involucionistas o Continuistas (“El Búnker”)

Los involucionistas o continuistas, también conocidos como “el búnker”, no contemplaban otra posibilidad que la continuación de una dictadura similar a la establecida en 1939. Tras la muerte de Franco, este sector controlaba el poder, con Arias Navarro como presidente del Gobierno.

  • Nada debía cambiar políticamente: la dictadura debía continuar (incluso sin Franco).
  • Era la opción defendida por la mayoría de los franquistas.

Los Aperturistas o Reformistas

Los aperturistas o reformistas eran partidarios de conducir el régimen desde la dictadura hacia una democracia homologable a las de Europa Occidental. A este grupo pertenecían el propio príncipe, posteriormente rey Juan Carlos I, y sus hombres de confianza: Torcuato Fernández Miranda y Adolfo Suárez. Eran partidarios de cambiar el régimen, pero siempre desde la legalidad, buscando derogar el franquismo sin rupturas abruptas, bajo el principio de “de la Ley a la Ley a través de la Ley” y utilizando las instituciones ya existentes.

La Postura Rupturista

Por otro lado, se encontraba la postura rupturista, representada por la oposición política, que incluía a los partidos de izquierda y a los nacionalismos periféricos. En un principio, eran partidarios de una “ruptura democrática” total, pero posteriormente optaron por el pragmatismo impulsado por el rey Juan Carlos I y Adolfo Suárez.

  • Para conseguir una verdadera democracia, era necesario romper totalmente con el pasado franquista.
  • Era fundamental devolver la palabra al pueblo español para que decidiera su propio futuro.
  • Este sector, representado por la oposición, reclamaba el fin de la dictadura, el inicio de una democracia y una república como sistema político.

El Papel del Rey Juan Carlos I en la Transición Española

Posición de Partida del Rey

  • El rey Juan Carlos I heredó de Franco todos los poderes que “El Caudillo” detentaba y su posición como rey se fundamentaba en las Leyes Fundamentales del Franquismo. Aunque pudo haber optado por prolongar la dictadura, no deseaba mantener a España como un país diferente y “aislado” de Europa Occidental. Posiblemente tuvo presente la experiencia de su cuñado, el rey de Grecia, quien fue depuesto en 1973 tras apoyar un golpe militar y el posterior regreso de la democracia a su país, o la valoración del fin de la dictadura portuguesa en 1974, que, empecinada en mantenerse a cualquier precio, desapareció de la noche a la mañana tras un golpe militar. En su primer discurso a la nación, anunció su intención de reinar para todos los españoles.
  • El dilema residía en cómo establecer la democracia: si desde el poder que le conferían las leyes franquistas o desmantelando el franquismo desde dentro del propio sistema. Esta última opción, aunque más difícil, podía asegurar un cambio sin llegar a la confrontación civil. Así pues, el rey optó por una postura reformista: el sistema político necesitaba un cambio, pero este debía realizarse desde la legalidad y con las instituciones ya existentes.
  • El rey había mantenido contactos con los partidos políticos ilegales y había transmitido en los foros internacionales su deseo de lograr la democracia para España, lo que generó una amplia expectativa internacional. No obstante, su posición era difícil: los franquistas desconfiaban, y las fuerzas políticas democráticas y los sindicatos, aún ilegales, también lo hacían.

El Gobierno de Arias Navarro

  • Entre diciembre de 1975 y julio de 1976, el franquista Arias Navarro dirigió el gobierno. El rey obligó a incluir en el gabinete a personalidades que habían apostado por una evolución hacia un sistema plural: Manuel Fraga y José María de Areilza.
  • Las tímidas reformas que Arias Navarro quiso implementar pretendían ser un mero “maquillaje” para no desmantelar el franquismo. No se hablaba de elecciones ni de autonomías, y la amnistía no se contemplaba. El rey se encontró con la imposibilidad de avanzar en las reformas democráticas con Arias, mientras las huelgas, manifestaciones políticas y protestas aumentaban en el país.
  • Por otra parte, la oposición política se organizó y creó la Coordinación Democrática (conocida como “Platajunta”), que unía a la mayoría de la oposición, excepto a los catalanes. Optaban por una “ruptura democrática” que obligase al gobierno a conceder la amnistía, la legalización de partidos y sindicatos, y la convocatoria de elecciones libres y constituyentes.
  • El dilema del rey en esos meses era que no podía aceptar la tímida reforma de Arias, pero tampoco veía con claridad la ruptura que preconizaba la oposición, pues si bien esta era bien vista en el exterior, también lo era la figura del Rey. Mientras la Coordinación Democrática parecía querer llegar a la negociación, el “búnker” se mantenía más radical que nunca.

Dimisión de Arias Navarro

  • El rey decidió forzar la dimisión de Arias Navarro para elegir a personas que pudieran llevar adelante la difícil tarea de devolver las libertades a España. Juan Carlos I, no sin dificultades, optó por políticos aperturistas procedentes del franquismo para que condujeran a España hacia la democracia: Torcuato Fernández Miranda y Adolfo Suárez, quienes lograrían implantar progresivamente la democracia en España.

Las Actuaciones de Adolfo Suárez: Claves de la Reforma Política Franquista

Suárez, Presidente del Gobierno, y Fernández-Miranda, Presidente de las Cortes

  • El rey Juan Carlos había encontrado a los hombres que le ayudarían en la difícil tarea de desmontar la dictadura franquista: Torcuato Fernández Miranda desde las Cortes y Adolfo Suárez desde la Presidencia del Gobierno. Ambos políticos procedían del franquismo, por lo que la reforma se llevaría a cabo desde dentro del propio sistema. Adolfo Suárez, hasta ese momento, había desempeñado la Secretaría General del Movimiento; sin embargo, su programa político era reformista y buscaba la reinstauración de la democracia. Suárez se enfrentó a serios obstáculos, como las presiones de sectores del ejército y el terrorismo de ETA, GRAPO y la extrema derecha. A pesar de todo, logró llevar a cabo el proceso de transición democrática.
  • Ya en el primer comunicado del nuevo gobierno, en julio de 1976, Suárez hizo hincapié en los pilares de la reforma al señalar que la soberanía residía en el pueblo y que “los gobiernos del futuro serían resultado de la libre voluntad de la mayoría de los españoles”.

Pasos Clave Hacia la Transición Democrática

A) Ley para la Reforma Política (Diciembre de 1976)

La Ley para la Reforma Política, considerada una Ley Fundamental, fue redactada por Torcuato Fernández Miranda. Su aprobación por las Cortes franquistas fue extremadamente difícil, ya que suponía su “suicidio político” (el “harakiri de las Cortes de Franco”). En noviembre de 1976, se aprobó la ley que ponía fin al régimen de Franco, arrancándolo de su propia legalidad y estableciendo la celebración de unas elecciones generales para elegir, por sufragio universal, unas Cortes que derogarían las leyes fundamentales y elaborarían una Constitución democrática. En diciembre, la ley fue aprobada en referéndum, con el apoyo del 94% de los españoles, lo que refrendó el camino hacia la democracia.

Desde esta fecha y hasta la celebración de las primeras elecciones democráticas (junio de 1977), España vivió intensos problemas vinculados a la violencia y al terrorismo que pusieron en peligro la Transición. En este contexto, la oposición no tuvo más remedio que negociar con Suárez (ya que no poseían la fuerza suficiente para tomar el poder), quien, por su parte, se vio obligado a aceptar muchas de las propuestas de la oposición gracias a la presión de las protestas en la calle. La oposición renunció a la República como forma de Estado, aceptando la Monarquía; a la persecución judicial de los responsables de las represiones del franquismo; y aceptó negociar un ajuste en la economía española que implicaba la reducción de sueldos para luchar contra la galopante inflación y el paro de la época (Pactos de la Moncloa). El Gobierno, por su parte, aceptó legalizar a los partidos políticos (incluido el PCE) y negociar la concesión de autonomía en diferentes territorios de España.

B) Decretos de Amnistía y Reforma del Código Penal (1976-1977)

Ante el gran número de presos políticos heredados del franquismo, en 1976 y 1977 se publicaron dos Decretos de Amnistía y se reformó el Código Penal, lo que supuso la desaparición de uno de los órganos represivos del régimen: el Tribunal de Orden Público (TOP). Además, el gobierno de Suárez autorizó la celebración de la Diada catalana y legalizó la ikurriña o bandera vasca.

C) Decreto de Legalización de Partidos Políticos (Abril de 1977)

El Decreto de Legalización de Partidos Políticos modificó la restrictiva ley anterior para dar cabida a todas las formaciones políticas, ya que la idea del Rey y del presidente era que nadie cuestionara las primeras elecciones libres. Se hizo imprescindible la legalización del Partido Comunista de España (PCE). En abril de 1977, Suárez, de acuerdo con Santiago Carrillo, tomó la arriesgada decisión de la legalización, ya que no se sabía cómo reaccionarían los militares. Se desmanteló el Movimiento Nacional y, en sucesivos decretos, se reguló el régimen electoral, el derecho de huelga, la libertad de expresión y se suprimió la sindicación obligatoria.

D) Convocatoria de Elecciones Generales (15 de Junio de 1977)

Se convocaron elecciones generales para el 15 de junio de 1977. Previamente, el padre del Rey, Don Juan de Borbón, cedió los derechos dinásticos del trono español a su hijo, por lo que la monarquía fue restaurada históricamente. En dichas elecciones, participaron numerosos partidos y fueron ganadas por la Unión de Centro Democrático (UCD), que aglutinaba a liberales, democristianos y socialdemócratas. Esta victoria permitió a Suárez nombrar un gobierno democrático. Después de las elecciones, el Parlamento comenzó a discutir y elaborar el futuro texto constitucional.

E) Inicio de la Reforma Territorial del Estado

El gobierno inició la reforma territorial del Estado al restablecer de forma provisional la Generalitat de Cataluña y nombrar a Josep Tarradellas, entonces en el exilio, como su presidente. También se aprobó el régimen preautonómico del País Vasco y se posibilitó que fuera extensivo a todo el territorio español.

F) Pactos de la Moncloa (1977)

Por otro lado, la dura crisis económica que arrastraba el mundo propició el acuerdo del gobierno con los grupos de la oposición en los Pactos de la Moncloa (1977). Estos incluyeron la devaluación de la peseta, una reforma tributaria (con la creación del IRPF), una reforma de la Seguridad Social y el crecimiento de los salarios al mismo ritmo que los precios.

G) Aprobación de la Constitución (1978)

En octubre de 1978, las cámaras aprobaron, con amplio acuerdo, la Constitución. Fue sometida a referéndum el 6 de diciembre del mismo año y aprobada por la mayoría del pueblo español.

Establecimiento de las Preautonomías: Cataluña y País Vasco

  • Recogiendo el sentir de los nacionalismos catalán y vasco, y mientras se elaboraba la Constitución, el gobierno y la oposición iniciaron el proceso preautonómico. Tras el éxito de la Diada en Cataluña el 11 de septiembre de 1977, Suárez pactó con el líder nacionalista Josep Tarradellas su vuelta del exilio y el restablecimiento provisional de la Generalitat por decreto ley. Tarradellas se convirtió en el primer presidente de la nueva Generalitat, al tiempo que se trabajaba en un proyecto de estatuto de autonomía.
  • En el País Vasco, a pesar de los obstáculos, se aprobó en enero de 1978 el Consejo General Vasco y se elaboró el proyecto de estatuto.
  • Con la aprobación de la Constitución, el Título VIII contempló la existencia de poderes autonómicos en las regiones españolas. En 1979, los estatutos de Cataluña y País Vasco fueron aprobados por las Cortes y refrendados en octubre de 1979 en sus respectivos territorios. En marzo de 1980, Cataluña y País Vasco celebraron sus primeras elecciones autonómicas y, a partir de entonces, disfrutaron de autonomía en numerosas competencias, al igual que el resto de las comunidades que se fueron incorporando a este proceso.

La Constitución Española de 1978: Proceso y Características Fundamentales

La Gestación de la Constitución

Las elecciones de junio de 1977 se habían celebrado con el objetivo de dotar a España de una Constitución que asegurara las libertades democráticas. Los principales partidos llegaron a acuerdos previos para que la futura Carta Magna fuera de consenso y pudiera contar con el apoyo desde la derecha hasta los comunistas. La Constitución fue fruto de un largo y laborioso acuerdo (18 meses de trabajo) entre los distintos grupos políticos.

  • Así pues, en la elaboración preliminar participaron personalidades de los principales partidos (posteriormente conocidos como los “Padres de la Constitución”), con un peso importante de la UCD y el PSOE.
  • Suárez consideraba los problemas que podría plantear la forma de Estado monárquico. Sin embargo, socialistas y comunistas no presentaron demasiadas dificultades en este sentido, quizás porque valoraron el papel que desempeñaba el Rey Juan Carlos como moderador del proceso que se estaba llevando a cabo.
  • En el Congreso, Fernando Abril Martorell (por el gobierno) y Alfonso Guerra (por el PSOE) llegaron a los acuerdos necesarios, lo que disminuyó las tensiones en la Comisión Constitucional.
  • En julio de 1978, el Congreso aprobó el nuevo texto constitucional por una amplia mayoría, desde la derecha de Manuel Fraga (Alianza Popular) hasta los comunistas de Santiago Carrillo. Solo la extrema izquierda, los nacionalistas vascos y algunos diputados de la extrema derecha se abstuvieron o votaron en contra.
  • Después de pocas concreciones en el Senado, la Constitución fue aprobada en sesión conjunta por ambas Cámaras en octubre de 1978 y sometida a referéndum del pueblo español el 6 de diciembre del mismo año. En dicha consulta, el “sí” ganó mayoritariamente (votó el 67% del electorado y fue aprobada por el 87% de los votantes), aunque se registró en el País Vasco una amplia abstención.

Características Esenciales de la Constitución de 1978

La Constitución consta de 11 títulos y 169 artículos, además de disposiciones adicionales, transitorias y derogatorias. Incluye un título preliminar que anticipa las características generales del texto.

Carácter de la Constitución:

  • De consenso: Elaborada y pactada por fuerzas políticas dispares.
  • Extensa: Es la más extensa de la historia constitucional española.
  • Rígida: Requiere un amplio acuerdo para su reforma, lo que buscaba dotarla de gran estabilidad.
  • Ambigua: No deja resueltos todos los puntos en los que no hubo acuerdo, remitiendo su desarrollo a leyes posteriores.

Principales Características:

  • Declaración de Derechos: El Título I recoge una amplia declaración de derechos y garantías individuales, estableciendo la abolición de la pena de muerte.
  • Relaciones Iglesia-Estado: No existe religión oficial del Estado, aunque el texto constitucional manifiesta la cooperación del mismo con la Iglesia Católica. Las relaciones Iglesia-Estado se regulan mediante concordato. Se garantiza la libertad de enseñanza y su financiación.
  • Forma de Estado: Restablece la Monarquía Parlamentaria. Se regulan las funciones de la Corona, que son representativas (máxima representación del Estado) y nominales (jefatura de las Fuerzas Armadas). Los actos de la Corona deben ser refrendados por el Gobierno. El rey es inviolable e irresponsable.
  • Sistema de Representación: Quedan establecidas unas Cortes Generales elegidas por sufragio universal entre los españoles mayores de 18 años, compuestas por un Congreso de los Diputados y un Senado con vocación de representación territorial. El referéndum y la iniciativa legislativa popular son formas de participación directa de los ciudadanos en la gestación de las leyes.
  • Poder Ejecutivo: El presidente del Gobierno es propuesto al Congreso por el rey. El candidato debe obtener en primera votación la mayoría absoluta de los votos (actualmente 176).
  • Poder Judicial: Se declara la independencia del poder judicial. El Tribunal Constitucional es el último garante de los derechos constitucionales.
  • Organización Territorial del Estado: Se garantiza la indisoluble unidad de la nación española, así como el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la componen. Se establece la organización del Estado en municipios, provincias y comunidades autónomas.

Etapas Políticas de España (1979-Actualidad): Gobiernos y Acontecimientos Clave

Consolidación y Asentamiento de la Democracia (1979-1982): Los Gobiernos de la UCD

Tras la aprobación de la Constitución, se disolvieron las Cortes que habían tenido un carácter constituyente y se convocaron nuevas elecciones, que volvió a ganar la UCD.

a. La Democracia en Ayuntamientos y el Desarrollo Autonómico

  • En abril de 1979 se celebraron las primeras elecciones municipales democráticas, con la victoria de la izquierda. Tal como se recogía en la Constitución, se fue diseñando y desarrollando el Estado de las autonomías con la aprobación de los diferentes Estatutos de Autonomía y la celebración de elecciones entre 1979 y 1983 para constituir los respectivos parlamentos autonómicos.

b. Importante Labor Legislativa

  • Se desarrolló una importante labor legislativa: aprobación del Estatuto de los Trabajadores (1980) y la Ley del Divorcio (1981). España ingresó en la OTAN (1982).

c. Perfeccionamiento del Sistema de Partidos

  • Los nuevos partidos fueron madurando. Los partidos tradicionales moderaron sus discursos, especialmente el PSOE, que renunció a su ideología marxista y adoptó posiciones de centro-izquierda para atraer el voto de la clase media, con un fuerte liderazgo de Felipe González. El PCE entró en crisis y muchos de sus miembros lo abandonaron. Alianza Popular acogió a los disidentes de la UCD tras su desaparición en 1982.

d. La Descomposición de la UCD

  • El partido que gobernaba hasta ese momento, la UCD, decayó. Era muy heterogéneo y, a partir de 1980, el liderazgo de Suárez comenzó a ser discutido, las críticas internas aumentaron y el partido se dividió en dos grupos: el centro-derecha y el centro-izquierda. Suárez dimitió en enero de 1981. Su sucesor en el gobierno, Leopoldo Calvo-Sotelo, no pudo detener la descomposición del partido, que se hundió en las elecciones de 1982. La UCD desapareció como partido.

e. El Golpe de Estado del 23-F de 1981

  • El golpe de Estado fue protagonizado por un sector del ejército que no aceptaba la evolución política de España tras la muerte de Franco. Antonio Tejero, Jaime Milans del Bosch y Alfonso Armada fueron sus cabezas más visibles. Durante unas 18 horas, mantuvieron secuestrados al gobierno y a las Cortes, reunidos en el Congreso de los Diputados para la votación de investidura de Calvo-Sotelo como nuevo presidente del gobierno. La falta de apoyo al golpe de Estado por parte de los altos mandos militares y la postura contraria del rey, que desautorizó a los golpistas ante las cámaras de televisión, frustró el golpe. Este fracaso fue decisivo para afianzar la democracia en España frente a las amenazas de algunos sectores del ejército.

f. El Terrorismo

  • El terrorismo fue una constante y diaria amenaza en la vida española. ETA y GRAPO multiplicaron sus acciones terroristas durante los primeros años de la democracia.

Los Gobiernos Democráticos a Partir de 1982 y la Integración Europea

A) El Compromiso por el Cambio: El Triunfo del PSOE en 1982

El triunfo por mayoría absoluta del PSOE en las elecciones de 1982 se considera el punto final de la Transición democrática iniciada en 1975 y el inicio de la normalidad política.

a. La Victoria Socialista

  • La victoria socialista fue una gran novedad: por primera vez en la España democrática, un partido obtenía la mayoría absoluta, y era un partido de izquierda apartado del poder tras la Guerra Civil. Esta mayoría absoluta permitió al PSOE estabilizar y consolidar el Estado democrático. Desde ese momento, la política de acuerdos y consenso entre partidos fue sustituida por las decisiones de un solo partido homogéneo que dirigió el país durante 13 años, tras cuatro victorias electorales consecutivas (1982, 1986, 1989 y 1993), con Felipe González como líder. Con gran pragmatismo, combinó políticas socialdemócratas con ajustes económicos y reconversión industrial.

b. Política Reformista y Desarrollo Económico

  • Los socialistas se propusieron implantar el Estado del Bienestar en España. Se generalizó la Seguridad Social. Las reformas educativas impulsaron la autonomía universitaria y un nuevo sistema educativo en primaria y secundaria (LOGSE) que extendió la escolaridad obligatoria hasta los 16 años, con financiación pública de la escuela privada concertada. Las reformas en el ejército buscaron hacerlo más reducido, profesionalizado y comprometido con la democracia. La reforma fiscal supuso un aumento de los impuestos, una mayor capacidad de recaudación del Estado y la lucha contra el fraude fiscal. Para dar una respuesta eficaz a la crisis económica que se arrastraba desde 1973, aplicaron una política económica dirigida a controlar el déficit y la inflación, siendo necesario moderar el aumento salarial y aplicar medidas de austeridad económica. La reconversión industrial afectó a actividades poco competitivas y protegidas por el Estado. Estas medidas provocaron el aumento del paro. Se consolidó el régimen democrático y el Estado de las autonomías. Se culminó el proceso de integración en Europa (OTAN, CEE, Maastricht). El terrorismo siguió golpeando a la sociedad española.

c. El Fin de la Hegemonía Socialista

  • En 1993, el PSOE perdió la mayoría absoluta y se hizo evidente su declive, afectado por los problemas económicos y los escándalos políticos (el GAL y la guerra sucia contra ETA, la financiación irregular del partido, casos de corrupción). La economía sufrió una recesión, se elevó el desempleo y se redujeron las políticas sociales. La necesidad de convergencia económica con Europa obligó a adoptar medidas de austeridad muy impopulares (contención del gasto público y congelación de los salarios de los funcionarios). En las elecciones de 1996, el PP ganó las elecciones.

El Relevo Popular: Triunfo del PP (1996-2004)

a. Primeros Años de Gobierno del PP

  • En los primeros cuatro años, los populares, liderados por José María Aznar, gobernaron sin mayoría absoluta, con el apoyo de los nacionalistas, y desarrollaron una política dialogante; en la segunda legislatura, la mayoría absoluta les permitió gobernar sin el apoyo de los nacionalistas.

b. Bonanza Económica e Integración Europea

  • Los primeros años fueron de bonanza económica. España cumplió las condiciones exigidas en el Tratado de Maastricht y pudo entrar en la Unión Económica y Monetaria europea, adoptando la moneda única, el euro, que entró en circulación el 1 de enero de 2002. En la segunda legislatura, el crecimiento se frenó.

d. Política Antiterrorista

  • Se lograron avances significativos en la lucha antiterrorista a través de la desarticulación de comandos terroristas y la movilización social en el País Vasco y el resto de España.

e. Política Exterior y Atentados del 11-M

  • En política exterior, se produjo un alineamiento de España con la política del presidente de EE. UU., George W. Bush. La postura de España ante la guerra de Irak provocó protestas populares. Los atentados del 11 de marzo de 2004 (11-M) arreciaron las críticas contra el gobierno de Aznar. En las elecciones de 2004, el PP perdió las elecciones y el PSOE ganó, aunque sin mayoría absoluta.

Segunda Etapa de Gobierno Socialista (2004-2011)

  • Esta nueva etapa de gobierno socialista, presidida por José Luis Rodríguez Zapatero, supuso cambios en políticas sociales, algunas envueltas en gran polémica, como la de las uniones homosexuales o la regulación de los inmigrantes; la actualización de diversos estatutos de autonomía; y el inicio de un nuevo proceso de contactos con ETA. En octubre de 2011, la banda anunció el cese definitivo de su actividad armada. La gestión de la crisis económica hizo que el PSOE perdiera las elecciones anticipadas de noviembre de 2011 ante el PP, liderado por Mariano Rajoy.

Segunda Etapa de Gobierno Popular (2011-Actualidad)

  • Con mayoría absoluta en el Congreso, Mariano Rajoy y su gobierno se enfrentaron al reto de salir de la crisis económica internacional que se inició en 2008. Para ello, recurrieron a políticas de ajuste presupuestario y control del déficit.

España y la Integración Europea: Hitos y Consecuencias

  • Las negociaciones para la entrada de España en la actual Unión Europea (UE), entonces Mercado Común Europeo (MCE), se iniciaron en los años sesenta, siempre con una respuesta negativa desde Europa y vinculadas al fin de la dictadura. Tras la muerte de Franco, las negociaciones continuaron, pero no fructificaron durante los gobiernos de la UCD y se dilataron hasta 1986.
  • El principal problema para la adhesión de España a la CEE era la oposición de Francia, país que temía la competencia agrícola española. En cambio, Alemania era partidaria de la incorporación de España y Portugal, ya que estos suponían un nuevo mercado para sus productos industriales. La llegada a la presidencia francesa del socialista François Mitterrand y el carácter gradual de la entrada de los países ibéricos propiciaron el avance de las conversaciones. En la Cumbre Europea de Stuttgart (1983), la presidencia alemana condicionó la ampliación del presupuesto comunitario al ingreso de los países ibéricos. Finalmente, se produjo la firma del Tratado de Adhesión de España y Portugal a la CEE el 12 de junio de 1985. Sin embargo, no entró en vigor hasta el 1 de enero del año siguiente. Además, para realizar las reformas precisas en la economía española, la plena incorporación no se produjo hasta varios años después (1993), limitándose durante este periodo las exportaciones españolas a la CEE, según los deseos franceses.
  • España ha sido testigo del desarrollo institucional de esta organización, incluyendo el Tratado de la Unión Europea, firmado en Maastricht en 1992, que puso fin a las barreras fronterizas para personas y mercancías, y la Unión Económica y Monetaria, que estableció el euro como moneda única desde el 1 de enero de 2002.
  • Las consecuencias han sido, en líneas generales, positivas, ya que España se ha convertido en un país democráticamente normalizado con un Estado del Bienestar. La liberalización de la economía y la eliminación de los aranceles perjudicaron, en principio, al sector primario, y el aumento de las importaciones desequilibró la balanza comercial. Sin embargo, los beneficios posteriores compensaron los efectos negativos gracias a los fondos de cohesión, como las subvenciones a la agricultura y las ayudas para el desarrollo regional, lo que supuso la definitiva superación del aislamiento y una base importante para nuestro desarrollo económico. No obstante, la entrada de países de Europa del Este a partir de 2004 ha reducido las cantidades que España percibe.

Evolución Económica y Social de España (1979-2008): De la Crisis del Petróleo a la Crisis Financiera Global

Evolución Económica

  • Alternancia de crisis y expansión: Entre 1974 y 2018, la economía española conoció una alternancia de años de crisis y de expansión.
  • Periodo de crisis (1974-1984): España se vio afectada por la crisis mundial del petróleo (1979), que repercutió en el aumento del paro, la conflictividad laboral y, en definitiva, en el empeoramiento de las condiciones laborales y la inflación. Todo ello se vio agravado por la inestabilidad política que vivía el país. Los índices de paro e inflación se situaron en estos años entre los más altos de Europa. Los Pactos de la Moncloa adoptaron las primeras medidas sociales y económicas para salir de la crisis.
  • Solo la mayoría absoluta del PSOE, a partir de las elecciones de 1982, permitió tomar las medidas necesarias, aunque impopulares, para relanzar la economía. Se llevó a cabo la reconversión industrial, que afectó especialmente a la siderurgia y a la construcción naval, industrias envejecidas, costosas y poco rentables. Para reducir estos efectos, se crearon las ZUR (Zonas de Urgente Reindustrialización).
  • Crecimiento y expansión (1985-1992): Entre 1985 y 1992, la economía española logró relanzarse y experimentó un crecimiento espectacular dentro del mundo occidental, con un gran desarrollo de la producción, la ocupación y la inversión, aunque la inflación aumentó, así como el gasto público. En estos años, el país experimentó altas tasas de crecimiento que se acompañaron de medidas sociales que consolidaron el Estado del Bienestar. En este periodo, España ingresó en la CEE el 1 de enero de 1986.
  • El punto culminante del crecimiento de este periodo (1992) coincidió con el inicio de una crisis económica mundial que elevó el paro al 24% de la población activa en 1994, produciéndose un nuevo frenazo en la economía española. Volvió a crecer a partir de 1996, de modo que entre 1994 y el año 2000 fueron años de bonanza económica, en los que el paro descendió hasta el 15%.
  • A partir de 2008, una profunda crisis de dimensiones mundiales, aún mayor que las anteriores, afectó a la economía española. Los distintos gobiernos tomaron medidas de ajuste presupuestario y control del déficit.

Una Sociedad Moderna y Desarrollada

La evolución de la sociedad española continuó el proceso de transformación iniciado en los años 60 hasta alcanzar las características propias de los países de su entorno.

a. Una Población Envejecida y Mal Repartida

  • La Transición coincidió con un cambio radical en los hábitos demográficos de los españoles, que se mantiene en la actualidad. La natalidad descendió y se situó entre las más bajas del mundo, debido a la incorporación de la mujer al mercado laboral, la inseguridad laboral, el retraso en la edad de los matrimonios y el límite voluntario del número de hijos. La mortalidad sufrió un leve ascenso debido al envejecimiento de la población. El crecimiento vegetativo de la población española es bajo, y solo se compensó con la llegada de inmigrantes en los últimos años. El envejecimiento de la población supone la disminución de la población activa y el aumento de la población dependiente en un futuro próximo. La población está mal repartida, con alta densidad en el litoral (excepto Madrid), mientras que el interior, y sobre todo el medio rural, se vacía. Este es uno de los graves problemas de Castilla y León, cuyo reto es lograr fijar población.

b. De País de Emigración a País de Inmigración

  • España ha sido tradicionalmente un país de emigrantes, pero en las últimas décadas cambió la tendencia y pasó a recibir inmigrantes. Dicha tendencia se ha frenado en la actualidad. Actualmente, quienes salen a trabajar fuera de España son jóvenes con altos niveles de cualificación, al no encontrar empleo dentro del país.

c. Una Sociedad de Clases Medias

  • Las clases medias (más del 60% de la población) constituyen el sector mayoritario de la estructura social. La población activa española tiene una distribución económica muy semejante a la europea: un sector primario pequeño (5%), un sector secundario estabilizado (30%) y un claro predominio del terciario (60%). El nivel de vida de los españoles ha mejorado en paralelo con el Estado del Bienestar, semejante al de los países más avanzados del entorno, aunque actualmente ese nivel de vida se ha visto disminuido por la crisis. Las mujeres han conseguido el pleno reconocimiento de sus derechos, aunque aún queda camino por recorrer.

El Impacto del Terrorismo en la Normalización Democrática Española

  • La Transición española no fue pacífica. La violencia estuvo presente durante todo el proceso a través de grupos terroristas de extrema derecha y de extrema izquierda que intentaban impedir su desarrollo pacífico. Quizás el problema mayor fue el terrorismo, que contaba en esos años con la comprensión de parte de la oposición y de algún país extranjero.
  • Este terrorismo fue especialmente grave entre 1976 y 1980 y, en ocasiones, estuvo a punto de hacer fracasar todo el intento de cambio político que se estaba llevando a cabo en España.
  • El terrorismo más sangriento estaba representado por ETA (nacida en la década anterior), que batió récords de muertos en esos años, pasando de una treintena anual a multiplicarlos casi por cuatro (alcanzando una cifra cercana al millar de muertos a lo largo de cuatro décadas).
  • Existió otro terrorismo de menor presencia, representado por el GRAPO o el FRAP (grupos nacidos en esos años desde el mundo comunista), que, sin embargo, consiguió poner al país al borde de la quiebra con varias acciones simultáneas y paralelas: en enero de 1977, secuestró a dos altos cargos del Régimen, justo cuando se estaba discutiendo en las Cortes la Ley para la Reforma Política que ponía fin al franquismo.
  • Existió también un terrorismo de extrema derecha, ligado a sectores del franquismo que no aceptaban ningún tipo de cambio y pretendían bloquear las reformas con actos de violencia (su proyecto consistía en generar tal caos que obligara al ejército a intervenir para poner orden mediante un golpe de Estado).
  • Por su parte, ETA no solo asesinó, sino que también extorsionaba a los empresarios (mediante el “impuesto revolucionario”) y amenazaba en el País Vasco a los miembros de otras formaciones políticas. Surgió en este tiempo una Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) con el fin de coordinar actuaciones para aminorar el daño causado por la banda terrorista.