El Barroco: Movimiento Cultural y Artístico del Siglo XVII
El Barroco designa tanto el movimiento ideológico y cultural como la corriente artística y literaria que se desarrollan en Europa en el siglo XVII.
Contexto Social del Barroco: Decadencia y Contrarreforma
La sociedad barroca está marcada por el sentimiento de decadencia y crisis, por el auge de la nobleza y por el triunfo de la ideología contrarreformista. En el siglo XVII, España sufre una crisis generalizada:
- Crisis demográfica: La población pasa de ocho a seis millones de habitantes por diversas causas.
- Crisis económica: El endeudamiento de la Corona obliga a pedir cantidades elevadas de dinero y a elevar los tributos para mantener el imperio.
- Crisis política: España, tras la derrota de los tercios imperiales en Rocroi, pierde su hegemonía y cede el testigo como potencia dominante a Inglaterra y Francia.
Nos encontramos también con el auge de la nobleza y el retroceso de la burguesía, con lo que los nobles imponen sus valores: el absolutismo monárquico, el inmovilismo social o la importancia de la honra y la limpieza de sangre.
La Mentalidad Barroca: Pesimismo y Nuevas Corrientes
En respuesta al pesimismo generalizado, surgen dos corrientes principales:
- La prudencia y la desconfianza como normas de comportamiento, dado que la maldad es intrínseca al ser humano.
- El neoestoicismo: Desarrollado a partir de escritos de Justo Lipsio, pretende conjugar el estoicismo antiguo con la moral cristiana.
Cultura y Arte Barroco: Desengaño y Exageración
La cultura barroca se centra principalmente en el pesimismo existencial, que se manifiesta con tópicos como tempus fugit o memento mori. Estos subrayan la transitoriedad y vanidad del mundo, entendido como mera apariencia que, al derrumbarse, da lugar al desengaño.
La cultura barroca también refleja y difunde los valores de los estamentos privilegiados. Frente al equilibrio renacentista, el arte barroco pretende conmover o sobrecoger al receptor, lo que se traduce en el gusto por la exageración, la dificultad o el contraste.
La Lírica Barroca: Temas y Estilos Innovadores
En la poesía amorosa, los autores ensayan diversas estrategias de superación de la poesía petrarquista. El amor y la mitología son asuntos predominantes, aunque el tratamiento cambia con respecto al Renacimiento. También se desarrolla la poesía filosófico-moral y la poesía satírica y burlesca.
La poesía se concibe como artificio conceptista, basado en el ingenio, y la lengua poética se sobrecarga de recursos estilísticos. Destacan autores como Andrés Fernández de Andrada (Epístola moral a Fabio) y Rodrigo Caro (Canción a las ruinas de Itálica).
Luis de Góngora: El Innovador del Barroco Español
Luis de Góngora es el poeta más innovador del Barroco español. Sus obras generaron gran polémica. En ellas cultivó todos los subgéneros poéticos de su tiempo:
- Sonetos: De los más de 200, destacan aquellos en los que reelabora motivos de la tradición petrarquista, como el carpe diem o la advertencia de los peligros del amor (ej.”La dulce boca que a gustar convid”,”Descaminado, enfermo, peregrin”).
- Letrillas: Son composiciones festivas o burlescas, formadas por un estribillo de inspiración popular y varias estrofas o glosas en versos octosílabos (ej.”Ándeme yo caliente y ríase la gent”).
- Romances: La mayoría tienen carácter burlesco (ej.”Se nos va la Pascua, moza”).
- Fábula de Polifemo y Galatea: Compuesta por 63 octavas reales, narra los amores del pastor Acis y la ninfa Galatea, a la que también pretende Polifemo.
El Culteranismo Gongorino
En los denominados poemas mayores (Fábula de Polifemo y Galatea y Soledades), Góngora se centra en la búsqueda de la belleza y la evasión de la realidad, la extrema dificultad en la expresión y la renuncia a la expresión de sentimientos.
Francisco de Quevedo: Versatilidad Lírica y Crítica Social
En su obra lírica se distinguen tres bloques:
- La poesía moral y religiosa, influida por el estoicismo y la moral cristiana.
- La poesía amorosa, de tradición petrarquista, a la que añade un sentido trascendente del amor, más allá de la muerte.
- La poesía satírica y burlesca, basada en juegos de palabras y metáforas caricaturescas, en la que predominan las sátiras de tipos o vicios de la época.
Sor Juana Inés de la Cruz: La Voz Femenina del Barroco
Sor Juana Inés de la Cruz es considerada la primera gran poeta en lengua castellana. De su obra destacan:
- Primero sueño, un ejemplo extremo de culteranismo.
- Poemas filosófico-morales, sobre temas habituales del Barroco.
- Poemas satíricos, en los que censura la actitud hacia las mujeres.
Lope de Vega como Poeta: Autobiografía y Sentimiento
De estilo llano y accesible, y marcado carácter confesional, la lírica lopesca se caracteriza por su autobiografismo:
- Las Rimas ofrecen testimonio de sus amores.
- La elegía A la muerte de Carlos Félix, del dolor por la muerte de su hijo preferido.
- Las Rimas sacras, de sus crisis espirituales, de la que surgen versos de arrepentimiento y religiosidad auténtica.
La Prosa Barroca: Transformación de Géneros y Nuevas Formas
Los autores barrocos ensayan nuevas formulaciones de los subgéneros renacentistas que conducen a su transformación o desaparición. Las principales manifestaciones de la prosa barroca son la novela picaresca, la novela corta y la prosa de ideas.
La Novela Corta Barroca
En la novela corta destaca el predominio de la temática amorosa y la importancia concedida a la acción, la búsqueda del entretenimiento y, a menudo, la presencia de un marco narrativo. Destacan obras como las de Salas Barbadillo, de Gonzalo de Céspedes y Meneses, y autores como María de Zayas, autora de Novelas amorosas y ejemplares (1637).
La Prosa de Ideas
La prosa de ideas da paso a una reflexión moral o política. Ello se traduce en el auge de la prosa doctrinal o prosa de ideas, cuya figura central es el aragonés Baltasar Gracián.
Guzmán de Alfarache: La Picaresca de Mateo Alemán
Guzmán de Alfarache, escrita por Mateo Alemán, es una confesión narrada en primera persona de un condenado a galeras. Se diferencia del Lazarillo por sus digresiones morales, en las que se refleja un pesimismo radical que convive con la creencia en una posible salvación del hombre, víctima de la soledad.
El Buscón: La Novela Picaresca de Quevedo
Aspectos Estructurales y Estilísticos
Como en el Lazarillo, en El Buscón hay un narrador protagonista que cuenta sus andanzas en primera persona y un destinatario explícito. A diferencia de Lázaro o de Guzmán, el protagonista no experimenta una evolución interna.
Fundamentos Ideológicos
En El Buscón, el pícaro aparece reflejado como un personaje negativo a quien el autor censura moral y socialmente por aspirar a un estatus que no le corresponde. La obra presenta una ideología conservadora e inmovilista, combinada con un escepticismo radical, y muestra a seres envilecidos por el hambre y la miseria.
Principales Novelas Picarescas: Comparativa
Semejanzas
- Escritas en primera persona.
- El protagonista tiene orígenes infames.
- Sirve a distintos amos.
- El motor de sus actos es el afán de medrar.
Diferencias
- Lazarillo de Tormes: Se dirige a vuestra merced, hay un caso final, no incluye digresiones morales, el pícaro es víctima de un orden social injusto.
- Guzmán de Alfarache: Es una confesión general, hay una conversión final, presenta extensas digresiones morales, el pícaro es una víctima cuya salvación personal es posible.
- Historia de la vida del Buscón: Se dirige a una segunda persona indeterminada, no hay caso ni conversión final, no tiene propósito moral, el pícaro es expulsado justamente de la sociedad.
Baltasar Gracián: El Maestro de la Prosa de Ideas
Baltasar Gracián es el principal cultivador de la prosa de ideas. Las obras de este jesuita —como Agudeza y arte de ingenio u Oráculo manual y arte de prudencia— se caracterizan por un profundo pesimismo que solo se puede sortear gracias a la prudencia. En El Criticón, cuenta la salvación del náufrago Critilo por el joven Andrenio, personajes simbólicos en busca de la felicidad y la inmortalidad.