Murillo frío cálido vaporoso

LA PINTURA BARROCA ESPAÑOLA


Frente a la imaginería policromada, la pintura de esta época muestra una Gran permeabilidad hacia la iluminación, el color, la técnica y los modelos Extranjeros. Italia y Flandes constituyen el espejo donde el artista hispano se Va a reflejar.Dos corrientes se imponen en la Siglo de Oro de la pintura Española: en la primera mitad del Siglo XVII se impone el Naturalismo tenebrista, donde los pintores imitan a Caravaggio, iluminando modelos con Fuertez contrastes claroscuros; a partir de 1650 se impone el gusto flamenco, Aparatoso y vibrante de Rubens, con rico colorido y composiciones teatrales Flamencas que se funden con la pincelada deshecha y suelta de Tiziano en el Llamado Realismo Barroco. La pintura mitológica apenas tendrá incidencia, en Comparación con la pintura religiosa.EL Naturalismo TENEBRISTA: RIBERA Y ZURBARÁN.José Ribera es una figura Estelar de la pintura barroca europea, pues forjó la gran escuela napolitana y Sus obras alentaron en técnica y modelos iconográficos a los pintores Locales.


Su estilo variará desde el Naturalismo tenebrista caraggiesco hacia Posiciones propias, donde sintetiza su idiosincrasia mediterránea con el color Y la luz de Tiziano y Rubens. Podemos destacar La mujer barbuda o el Patizambo.Francisco de Zurbarán es el prototipo de pintor español que transmite A sus lienzos el mismo amor por los objetos cercanos e idéntica confianza en Los seres celestiales que los imagineros plasmaban en relieves.Por técnica y Espíritu fue escultor de la pintura. Se formó en Sevilla. Se estilo se movíó Dentro de Naturalismo tenebrista de Caravaggio, con figuras muy plásticas de Contorno dibujado y sombras robustas. En la recta final, sus pinturas tienen Influencia de Murillo. Dispuso de un gran taller.Zurbarán pasa a la historia Como el pintor de los frailes, la vida monástica y la tela de su hábitos.EL Realismo Barroco: VELÁZQUEZ Y MURILLO.Diego Rodríguez de Silva Velázquez fue el genio más grande del arte español. Fue retratista, y abarcó Todos los géneros pictóricos. En sus obras capta la naturaleza, la luz y el Movimiento, interpretándolo con equilibrio y serenidad.Aprendíó en el taller de Francisco Pacheco.



Su estilo evoluciona en dos épocas: el periodo sevillano Plasmado de tenebrismo caravaggiesco, con la imitación del natural, colores Terrosos y figuras que presentan contornos muy precisos; el periodo madrileño, En el que descubre que la luz le permite captar el aire interpuesto entre las Figuras y los objetos, perdiendo precisión las formas y ganando intensidad los Colores, además de hacer una pincelada fluida y espontánea, adelantando la Técnica impresionista.Destacamos Las hilanderas y Las meninas.Bartolomé Esteban Murillo renunció a la Corte por vivir en Sevilla. Su estilo puede dividirse en Tres partes: el período frío, correspondiente a su etapa juvenil, se Caracteriza por fuertes contrastes de luz, precisión en el dibujo y pincelada Lisa, con La Sagrada Familia del pajarito; el período cálido se inicia en 1656 Con el San Antonio, donde incorpora efectos de contraluz, desapareciendo el Tenebrismo, volviendo la pincelada más suelta y el colorido brillante; el Período vaporoso de sus últimos años, donde el color se hace transparente y Difuminando, y donde podemos encontrar al San Francisco


LA PINTURA BARROCA ESPAÑOLA


Frente a la imaginería policromada, la pintura de esta época muestra una gran permeabilidad hacia la iluminación, el color, la técnica y los modelos extranjeros. Italia y Flandes constituyen el espejo donde el artista hispano se va a reflejar.Dos corrientes se imponen en la Siglo de Oro de la pintura española: en la primera mitad del Siglo XVII se impone el Naturalismo tenebrista, donde los pintores imitan a Caravaggio, iluminando modelos con fuertez contrastes claroscuros; a partir de 1650 se impone el gusto flamenco, aparatoso y vibrante de Rubens, con rico colorido y composiciones teatrales flamencas que se funden con la pincelada deshecha y suelta de Tiziano en el llamado Realismo Barroco. La pintura mitológica apenas tendrá incidencia, en comparación con la pintura religiosa.EL Naturalismo TENEBRISTA: RIBERA Y ZURBARÁN.José Ribera es una figura estelar de la pintura barroca europea, pues forjó la gran escuela napolitana y sus obras alentaron en técnica y modelos iconográficos a los pintores locales.


Su estilo variará desde el Naturalismo tenebrista caraggiesco hacia posiciones propias, donde sintetiza su idiosincrasia mediterránea con el color y la luz de Tiziano y Rubens. Podemos destacar La mujer barbuda o el Patizambo.Francisco de Zurbarán es el prototipo de pintor español que transmite a sus lienzos el mismo amor por los objetos cercanos e idéntica confianza en los seres celestiales que los imagineros plasmaban en relieves.Por técnica y espíritu fue escultor de la pintura. Se formó en Sevilla. Se estilo se movíó dentro de Naturalismo tenebrista de Caravaggio, con figuras muy plásticas de contorno dibujado y sombras robustas. En la recta final, sus pinturas tienen influencia de Murillo. Dispuso de un gran taller.Zurbarán pasa a la historia como el pintor de los frailes, la vida monástica y la tela de su hábitos.EL Realismo Barroco: VELÁZQUEZ Y MURILLO.Diego Rodríguez de Silva Velázquez fue el genio más grande del arte español. Fue retratista, y abarcó todos los géneros pictóricos. En sus obras capta la naturaleza, la luz y el movimiento, interpretándolo con equilibrio y serenidad.Aprendíó en el taller de Francisco Pacheco.



Su estilo evoluciona en dos épocas: el periodo sevillano plasmado de tenebrismo caravaggiesco, con la imitación del natural, colores terrosos y figuras que presentan contornos muy precisos; el periodo madrileño, en el que descubre que la luz le permite captar el aire interpuesto entre las figuras y los objetos, perdiendo precisión las formas y ganando intensidad los colores, además de hacer una pincelada fluida y espontánea, adelantando la técnica impresionista.Destacamos Las hilanderas y Las meninas.Bartolomé Esteban Murillo renunció a la Corte por vivir en Sevilla. Su estilo puede dividirse en tres partes: el período frío, correspondiente a su etapa juvenil, se caracteriza por fuertes contrastes de luz, precisión en el dibujo y pincelada lisa, con La Sagrada Familia del pajarito; el período cálido se inicia en 1656 con el San Antonio, donde incorpora efectos de contraluz, desapareciendo el tenebrismo, volviendo la pincelada más suelta y el colorido brillante; el período vaporoso de sus últimos años, donde el color se hace transparente y difuminando, y donde podemos encontrar al San Francisco