Panorama de la Literatura Española del Siglo XX: Corrientes y Figuras Clave

Teatro Español Anterior a 1939

Los autores de esta generación deben posicionarse entre el teatro comercial y el innovador.

El Teatro Comercial

El teatro comercial estuvo dominado por varias corrientes:

  • La Comedia Burguesa o Benaventina: Cuyo máximo representante fue Jacinto Benavente, quien obtuvo el Premio Nobel de Literatura y le confirió un toque más realista. Sus obras abordan los conflictos típicos de la burguesía de la época; las más importantes son La malquerida y Los intereses creados.
  • El Teatro en Verso: De carácter evasivo, alude al pasado y se caracteriza por versos grandilocuentes. Los autores más representativos son Eduardo Marquina con Las hijas del Cid y los hermanos Machado con La Lola se va a los puertos.
  • El Teatro Cómico: Que busca el entretenimiento del público. Destacan:
    • Carlos Arniches: Creador de los sainetes que representan lo más pintoresco de Madrid. Destaca su aportación al lenguaje; sus obras más importantes son Los caciques y La señorita Trevélez.
    • Pedro Muñoz Seca: Creador del astracán, un tipo de teatro basado en el juego lingüístico. Su obra más famosa es La venganza de Don Mendo.
    • Los Hermanos Álvarez Quintero: Quienes crearon el teatro andaluz, con su obra más famosa, La malvaloca.

El Teatro Innovador

En el teatro innovador destacan Valle-Inclán y Federico García Lorca.

Ramón María del Valle-Inclán

La obra de Valle-Inclán supuso una renovación del género teatral y del teatro posterior. Su obra teatral pasa por dos épocas:

  • La del Mito: Que sitúa las obras en Galicia y les confiere un toque de atemporalidad. Las obras más famosas son: Comedias Bárbaras y Divinas Palabras.
  • La de la Farsa: Que sitúa las obras en ambientes ridículos de otros siglos; la obra más importante es Farsa y licencia de la Reina Castiza.
  • El Esperpento: La última etapa, que busca deformar la realidad para criticarla. Utiliza la animalización, el humor negro y la ironía. Las obras más destacadas son Luces de Bohemia y Martes de Carnaval.

Federico García Lorca

Federico García Lorca escribía y dirigía sus obras, e incluso fundó una compañía, «La Barraca», para acercar el teatro al pueblo. Su teatro se caracteriza por un alto contenido lírico y dramático. Sus obras pasan por cuatro etapas:

  • La Farsa: Donde incluye, por ejemplo, el teatro de títeres. Algunas de las obras más importantes son El retablillo de Don Cristóbal y La zapatera prodigiosa.
  • El Drama Histórico: Donde se incluye Mariana Pineda, símbolo de la libertad.
  • El Teatro Vanguardista: Que coincide con su viaje a Nueva York y donde escribe sus obras más surrealistas. Las obras más importantes son: El público y Así que pasen cinco años.
  • Las Tragedias Rurales: La última etapa, donde las protagonistas son mujeres y su situación de marginación social. Las obras más importantes son: Yerma, Doña Rosita la Soltera, La casa de Bernarda Alba y Bodas de sangre.

La Novela Española Posterior a 1936

Podemos dividir en cuatro grandes etapas la producción novelística posterior a la Guerra Civil Española.

La Novela de Posguerra (1940-1950)

La novela española de la posguerra inmediata sufre un desorden cultural considerable tras haber roto con las líneas anteriores debido a la guerra y el exilio. Está en una continua búsqueda de estilos y temas. La poesía encuentra con facilidad su nuevo camino, pero la novela halla mayores dificultades. Los inicios del género se dan con dos novelas importantes: La familia de Pascual Duarte (1942) de Cela y Nada (1945) de Carmen Laforet. En esta época ya empezaban a despuntar escritores muy reconocidos posteriormente, como Torrente Ballester y Delibes. La triste realidad cotidiana es un tema frecuente en la novela de posguerra. Esta línea existencial provoca que los grandes temas sean la muerte, la infelicidad, la angustia y la inadaptación. En definitiva, muestra el hondo malestar de ese momento histórico.

El Realismo Social (1950-1962)

Se trata del paso de la angustia existencial a la realidad social. Hay que llegar a 1951 con La colmena de Camilo José Cela y El camino de Delibes para ver una novela donde la sociedad es el personaje central, bien reflejado en estas dos obras que muestran ambientes sociales de distintos lugares. Su narrativa se da como fecha límite del realismo social la publicación de Tiempo de silencio (1962) de Luis Martín-Santos. El Realismo Social se dirige en tres direcciones, donde podemos hablar de tres actitudes principales:

  • Realismo Objetivo

    Realismo objetivo, donde el escritor observa una conducta social y la expone en su novela sin ningún tipo de análisis. Rafael Sánchez Ferlosio en El Jarama emplea esta estética.

  • Realismo Crítico

    Realismo crítico, donde el autor expone la injusticia social. Partidarios de este realismo crítico son autores como Juan Goytisolo y Armando López Salinas.

  • Realismo Lírico

    Realismo lírico, que no deja de observar y mostrar el lado estético y poético de la realidad. Ana María Matute es una gran muestra de este realismo lírico en Primera memoria.

Los temas harán alarde de la realidad circundante: la vida en la ciudad, el campo, la burguesía insolidaria… Las técnicas narrativas se volverán sencillas para estar al alcance de todo el público; también el estilo servirá para mostrar objetivamente esa realidad.

La Novela Española (1962-1975)

Los años 60 narran ya un desgaste de la novela social. Este desgaste se produce por dos vertientes: por una parte, los temas, carentes de imaginación, ya se agotan; y por otra, la técnica del realismo social no admite la creatividad en el lenguaje. Otro de los motivos del abandono de la narrativa social es el empuje que se recibe desde el extranjero, especialmente desde América Latina. Podemos hacer más divisiones en las diversas producciones de estos años, ya que no existe una tendencia unitaria, sino que encontramos distintos estilos y corrientes literarias:

  • Autores de los años 40

    Autores surgidos en los años 40: Cela, Torrente Ballester (Los gozos y las sombras), y Miguel Delibes (Cinco horas con Mario).

  • Autores de la Generación de Medio Siglo

    Autores de la Generación de Medio Siglo: Juan Goytisolo (Señas de identidad), Juan Marsé (Últimas tardes con Teresa).

  • Autores Jóvenes (años 70/80)

    Autores jóvenes que consolidan su obra en los 70/80: José María Guelbenzu.

Por lo que en estos años conviven escritores muy jóvenes con escritores consagrados, quienes juntos siguen el camino de la experimentación. Los temas se vuelven cada vez más diversos y las técnicas más arriesgadas.

La Novela del Exilio

La novela del exilio ha sido poco conocida en nuestro país, debido en gran parte a la censura y prohibiciones de la dictadura. Los escritores exiliados más famosos son Max Aub, Ramón J. Sender, Francisco Ayala y Rosa Chacel. Estos autores producen novelas con influencia española, pero con las vivencias y características de sus nuevos países.

Novecentismo y Vanguardias en la Literatura Española

Los movimientos artísticos del siglo XX se encuentran en una época de contrastes, donde se enfrentan liberales y conservadores, el mundo agrario y el industrial, monárquicos y republicanos, etc. Estos enfrentamientos culminan en la Guerra Civil de 1936.

El Novecentismo

El Novecentismo es la obra de autores fundamentalmente ensayistas que alcanzan su máximo esplendor en 1914 y se caracterizan generalmente por defender el cosmopolitismo; en el arte, son imaginativos y se alejan de la realidad; y por defender la deshumanización del arte y la huida del sentimentalismo y el realismo. Además, creen en una literatura minoritaria.

Autores Novecentistas Destacados

  • Ortega y Gasset: Quien es el guía del grupo y una de las figuras más importantes de la filosofía en España. Destaca por sus ensayos escritos en prosa elegante. Sus temas se basan en el arte de la época y la política del país. Sus obras más importantes son: España invertebrada y La deshumanización del arte.
  • Ramón Pérez de Ayala: Es el más claro representante de la novela intelectual, que se caracteriza por un tono irónico y complejo donde se mezclan la reflexión y la acción. Algunas de sus obras más importantes son: A.M.D.G., Luna de miel y La caída de los Limones.
  • Juan Ramón Jiménez: Obtuvo el Premio Nobel de Literatura. Su obra es exclusivamente poética y está marcada por sus obsesiones: la belleza, la eternidad y la muerte. Además, evoluciona del Modernismo a la poesía pura. Algunas de sus obras más importantes son: Almas de violeta, Platero y yo, Diario de un poeta recién casado y Animal de fondo.

Las Vanguardias

En cuanto a las vanguardias, surgen en Europa y América a principios del siglo XX y buscan nuevos lenguajes y objetos artísticos para renovar el arte. También se les denomina «ismos» y expresaban sus principios a través de manifiestos. Algunas de las más importantes son:

  • El Futurismo: Que surge a través de un manifiesto firmado por Marinetti y defendía que el arte debía buscar nuevos objetos de inspiración basados en la modernidad.
  • El Dadaísmo: Que surge de un manifiesto escrito por Tristan Tzara y defendía la ruptura de las normas del arte, buscando que la obra no significara nada. Es la inspiración del surrealismo, la vanguardia que más influencia ha tenido sobre el arte posterior.
  • El Surrealismo: Nace en 1920 y el manifiesto lo firman Breton, Aragon y Éluard, quienes defienden la libertad del arte. Proponen la escritura automática, la liberación del subconsciente.
  • El Cubismo: Que defiende la necesidad de aplicar al arte principios geométricos. El máximo representante del cubismo literario fue Apollinaire, quien creó caligramas, poesía visual que relaciona la forma y el contenido.

Estas vanguardias en España llegaron gracias a la difusión que les dio Ramón Gómez de la Serna. En este país crearon sus propios movimientos: el ultraísmo y el creacionismo. Autores tan importantes como Rafael Alberti y Federico García Lorca escribieron obras surrealistas.

Modernismo y Generación del 98 en la Literatura Española

En el siglo XIX se crea un movimiento de renovación en el arte y el pensamiento, que se opone al realismo y a las instituciones políticas y religiosas. Los artistas buscan crear una realidad más atractiva. Se recupera el subjetivismo y la búsqueda de la perfección formal. En España, el Modernismo coexiste con la Generación del 98.

El Modernismo

En cuanto al Modernismo, se busca la evasión mediante lo fantástico y lo sensual. Las obras tienen un tono cosmopolita, retórico y extravagante, y los autores se expresan generalmente a través de la poesía lírica.

Poesía Modernista

La poesía modernista está influenciada por el parnasianismo y el simbolismo; huye de la realidad mediante la imaginación y el goce de los sentidos. Se caracteriza por la plasticidad, la musicalidad y la diversidad métrica; además, en los temas se expresa el estado de ánimo del poeta y se crean mundos exóticos. Destaca Rubén Darío, quien pasa por dos etapas: en la primera, su tono es sensual, fantástico, de ambientación exótica y suntuosa. Las obras más destacadas son Azul y Prosas profanas. En la segunda etapa, el tono es reflexivo y la obra más importante es Cantos de vida y esperanza.

La Generación del 98

En la Generación del 98 se tratan temas de actualidad española con un estilo más sobrio; se busca la sencillez, la claridad, la autenticidad y un tono popular.

Poesía de la Generación del 98

La Generación del 98 reflexiona sobre temas filosóficos y la existencia humana. Los autores se inspiran en paisajes castellanos y tienen la esperanza de superar la crisis que vive España. El autor que destaca es Antonio Machado, quien adquiere un tono más intimista en su obra Soledades, galerías y otros poemas, y en Campos de Castilla reflexiona sobre el sentido de la vida.

Narrativa del 98

En cuanto a la narrativa, se busca el subjetivismo. Destacan Pío Baroja y Miguel de Unamuno. Baroja se basa en la descripción breve y el diálogo. En sus obras recoge acontecimientos históricos y retrata aspectos de la sociedad, como por ejemplo en El árbol de la ciencia o Zalacaín el aventurero. Unamuno muestra el conflicto entre razón y fe y reflexiona sobre el sentido de la vida, como en Amor y pedagogía o Niebla. También destacan sus ensayos.

Teatro del 98

En el teatro encontramos dos tendencias: el teatro comercial, que tiene rasgos de Realismo y Romanticismo (teatro poético, costumbrista y comedia burguesa). La otra tendencia es el teatro renovador, que critica la sociedad. Destaca Ramón María del Valle-Inclán, quien crea el esperpento, renueva el arte dramático y utiliza un lenguaje irónico y de gran dureza que resulta conmovedor. Su obra más representativa es Luces de Bohemia.