Contexto Histórico: Los Reinos Cristianos durante la Baja Edad Media (Siglos XIV y XV)
Evolución Política de los Reinos Peninsulares
La Baja Edad Media estuvo marcada por la consolidación territorial y los conflictos internos en los reinos peninsulares.
Corona de Aragón
- El Tratado de Corbeil estableció los límites en los Pirineos.
- El Tratado de Almizra repartió territorios.
- Jaime II (siglo XIII) ocupó la isla de Cerdeña.
- Pedro IV “el Ceremonioso” incorporó a la Corona el Rosellón y Mallorca tras derrotar a Jaime III.
- Martín I “el Humano” (siglos XIV-XV) murió sin descendencia, lo que llevó al Compromiso de Caspe (1412), donde fue elegido Fernando de Antequera.
- Su hijo, Alfonso V “el Magnánimo”, ocupó Nápoles. A su muerte, le sucedió en Nápoles su hijo bastardo Fernando, y en Aragón, Juan II (siglo XV), quien se enfrentó al Príncipe de Viana.
- Finalmente, le sucedió Fernando II “el Católico”.
Corona de Castilla
- Fernando IV (siglo XIII) ocupó Gibraltar.
- Alfonso XI fortaleció la autoridad monárquica con el Ordenamiento de Alcalá (1348) y obtuvo la victoria del río Salado (1340).
- Pedro I “el Cruel” (siglo XIV) luchó contra Enrique de Trastámara, hijo ilegítimo de Alfonso XI. Enrique fue desterrado a Aragón (la Guerra de los Dos Pedros). Pedro I fue derrotado por su hermanastro en Montiel (1369).
- Enrique II “el de las Mercedes” cedió grandes concesiones a la nobleza feudal.
- Juan II (siglo XV) tuvo un mandato agitado con enfrentamientos entre el autoritarismo monárquico (representado por Álvaro de Luna) y los nobles que no querían perder privilegios.
- Enrique IV (siglo XV) se apoyó en las clases medias urbanas para su política anti-nobiliaria. Sus problemas sucesorios llevaron a la Liga Nobiliaria a declarar ilegítima a su hija Juana. En la Farsa de Ávila (1465) proclamaron rey a Alfonso. Posteriormente, su hermana Isabel fue reconocida heredera en el Pacto de los Toros de Guisando.
Autoritarismo y Pactismo
La política de los reinos se debatió entre dos modelos:
- Autoritarismo: Lema: “Lo que le place al rey tiene vigor de rey”. El monarca se consideraba señor por derecho propio (típico de Castilla).
- Pactismo: Lema: “Lo que a todos concierne por todos debe ser aprobado”. Implicaba que los nobles más poderosos y las grandes ciudades limitaban el poder real (típico de Aragón).
A largo plazo, aunque los nobles mantuvieron el poder económico, los reyes lograron afianzar la autoridad política.
Las Instituciones de Gobierno
La institución más destacada fueron las Cortes, cuya primera aparición en Europa se data en León (1188). En el siglo XIII, el resto de reinos peninsulares las incorporaron a la Curia Regia (órgano consultivo y asesor). Estaban compuestas por tres brazos: nobiliario, eclesiástico y el de los ciudadanos. Su función principal era recaudar impuestos extraordinarios.
- En Aragón: Las Cortes tenían periodicidad fija y potestad legislativa. Del cumplimiento de las leyes se encargaban la Generalitat y la Diputación General. Cuando un rey era proclamado, debía jurar los fueros de Aragón, Cataluña y Valencia.
- Consejo Real: Creado por Jaime I (1385), asesoraba al rey y colaboraba en el gobierno. Estaba formado por nobles, eclesiásticos y juristas partidarios de la autoridad del monarca. Existía también la figura del Justicia Mayor.
La Administración Territorial y Local
Aunque los señoríos continuaron siendo las células fundamentales, se desarrollaron estructuras administrativas:
- La Corona de Aragón estableció capitales fijas (Zaragoza, Barcelona, Palma de Mallorca, Valencia), mientras que Castilla siguió siendo itinerante.
- El territorio se dividió en unidades más pequeñas para facilitar la administración: Castilla en nueve unidades (cinco por Adelantados Mayores y cuatro por Merinos Mayores); Cataluña en doce (veguerías); Aragón en bailías (gobernadas por bailes); Valencia en gobernaciones; y Navarra en merindades.
- Se reformaron las Haciendas Reales, elaborando presupuestos e implementando impuestos como la Alcabala, los aduaneros y el servicio.
- Se desarrolló un ejército dinástico.
- En la administración local, los reyes fortalecieron su poder mediante la imposición de regidores y corregidores, agentes clave de la centralización monárquica.
Economía y Crisis en los Reinos Peninsulares
Economía
En Castilla, la ganadería era más atractiva que la agricultura debido a la menor necesidad de mano de obra y a que la lana era un producto muy cotizado. Los problemas de pastos y trashumancia llevaron a la creación del Honrado Concejo de la Mesta (Alfonso X, 1273) para proteger los intereses ganaderos, regular las cañadas y resolver conflictos (disuelto en las Cortes de Cádiz).
El aumento del proceso urbano potenció la burguesía. El comercio marítimo se aseguró con la toma de Gibraltar, abriendo rutas hacia el Mar del Norte y el Atlántico. Se exportaban materias primas (lana), manufacturas y productos comerciales. Las transacciones se realizaban en lugares concretos, como las ferias (Medina del Campo en Castilla) o los mercados permanentes (lonjas).
Crisis Demográfica, Social y Económica
Crisis Demográfica: En el siglo XIII, la población era de unos 5,5 millones de habitantes. La Peste Negra, que llegó a Mallorca en 1348 y se extendió por Levante y el Camino de Santiago, provocó un descenso drástico. La recuperación fue lenta; mientras que Mallorca, Navarra y Castilla se recuperaron hacia 1480, Cataluña perdió la mitad de su población.
Crisis Económica: La depresión agraria aumentó los despoblados, generando un desequilibrio entre precios y salarios y disminuyendo las rentas señoriales. Esto dejó tierras vacías que se dedicaron a pastos o caza. A finales de la Edad Media, se observó una recuperación del comercio, impulsada por las ferias y lonjas.
Crisis Social: Aumentó la presión señorial. Los nobles consiguieron de los reyes facultades jurisdiccionales criminales y civiles. Para asegurar la continuidad de su linaje, se estableció el mayorazgo, que garantizaba la transmisión de la fortuna al hijo primogénito y hacía las tierras inalienables.
Se produjeron numerosos conflictos, incluidos fuertes sentimientos antijudíos. La Peste sirvió de excusa para iniciar persecuciones. En Cataluña, los remensas (campesinos adscritos a la tierra) se rebelaron, exigiendo la abolición de los malos usos (resuelto por Fernando II con la Sentencia Arbitral de Guadalupe en 1486). También hubo revueltas en Galicia por el abuso de la nobleza.
La Formación del Estado Español y la Monarquía de los Reyes Católicos
En 1494, el Pontífice Alejandro VI otorgó a Isabel y a su esposo Fernando el título de Reyes Católicos (RR.CC.). Su reinado supuso la unidad dinástica, ideológica y religiosa, siendo el punto de arranque de la España moderna. Sin embargo, esta unión no implicó la fusión de los dos reinos.
6.1 Unión Dinástica: La Integración de las Coronas de Aragón y Castilla
Isabel fue declarada heredera por su hermano Enrique IV en el Pacto de los Toros de Guisando (1468), excluyendo a Juana ‘la Beltraneja’. El matrimonio clandestino de los RR.CC. (1469) no contó con la aprobación de Enrique IV, lo que rompió el pacto.
Guerra de Sucesión Castellana (1474-1479)
Tras el fallecimiento de Enrique IV en 1474, los partidarios de Juana buscaron el apoyo de Alfonso V, rey de Portugal. La guerra se decidió en la Batalla de Toro (1476), favorable a Fernando. Isabel fue reconocida como reina en las Cortes de Madrigal.
El Tratado de Alcaçobas (1479) puso fin a la guerra, estableciendo:
- El mantenimiento de la frontera entre Castilla y Portugal.
- El reparto de la expansión atlántica.
- Una aproximación matrimonial futura.
- El retiro de Juana a un monasterio de las Clarisas.
Una Monarquía Dual: Dos Reyes, Dos Reinos
Tras la muerte de Juan II de Aragón (1479), Fernando II asumió el trono. Isabel reinaba solo en Castilla y Fernando solo en Aragón. La unión era meramente dinástica, manteniendo cada reino sus propias leyes, instituciones, fronteras y monedas.
Existía un gran desequilibrio territorial, demográfico y económico: Castilla era tres veces más grande, tenía acceso al Atlántico, y su población (4,5 millones) superaba ampliamente a la de Aragón (850.000 habitantes). Además, Aragón mantenía un fuerte pactismo, lo que implicaba duras negociaciones con sus Cortes.
6.2 La Expansión Territorial
Conquista del Reino Nazarí de Granada (1482-1492)
La guerra, que duró once años, se inició en Zahara en 1481 por una incursión granadina. Los motivos de los RR.CC. fueron:
- La protección que los nazaríes daban a los piratas berberiscos (apoyados también por los turcos de Constantinopla).
- El deseo de acabar con el islam en la península y lograr la unificación territorial.
- La potenciación de la monarquía y la ayuda de Aragón.
La guerra comenzó con la toma de Alhama (1482). La fase occidental (primavera y verano) culminó con las Capitulaciones de Ronda. Hubo grandes resistencias, como la de Málaga, donde la población fue esclavizada. La fase oriental (1488) se centró en Almería. En 1490, solo quedaban las Alpujarras y Granada capital. Se pactó la rendición el 25 de noviembre de 1491, y Boabdil entregó las llaves el 2 de enero de 1492. Granada quedó incorporada a Castilla.
Inicialmente, se prometió a los musulmanes libertad personal, respeto a sus propiedades y costumbres, pero esto cambió con la conversión forzosa a partir de 1500.
Incorporación de Navarra (1512)
Debido a una alianza secreta entre la casa de Albret (reyes de Navarra) y Francia contra Castilla, Fernando II envió al Duque de Alba. Navarra fue conquistada en 1512 y, por las Cortes de Burgos en 1515, se incorporó a la Corona de Castilla.
6.3 Organización del Estado: Instituciones de Gobierno
El objetivo principal de los RR.CC. fue imponer la autoridad real, especialmente en Castilla.
Pacificación y Reorganización de Castilla
- En las Cortes de Madrigal (1476) se instauró la Santa Hermandad (policía rural) con el fin de mantener el orden público, reprimiendo el bandidaje y los crímenes.
- Se reorganizó el Consejo Real (órgano consultivo). Las grandes familias nobiliarias perdieron poder en favor de funcionarios preparados en Derecho y seguidores de la monarquía, formados en universidades como Salamanca y Alcalá.
- Se reformaron las Audiencias o Chancillerías, divididas en Valladolid y Ciudad Real. El jurista Díaz de Montalvo hizo una recopilación de la legislación para incorporar las leyes posteriores al Ordenamiento, conocidas como “Ordenanzas Reales”.
- Los municipios fueron sometidos al corregidor, un delegado real encargado de resolver conflictos locales. Las Cortes de Castilla fueron sometidas al poder real y solo reconocían al monarca.
- Hacienda: Se revisaron las mercedes (concesiones) y se obtuvieron recursos del Estado, como la Bula de la Santa Cruzada, concedida para guerrear contra los infieles.
- Ejército Real: Nació durante la Guerra de Granada y fue la base de los futuros Tercios en Europa, destacando la caballería ligera y la infantería.
Pacificación y Reorganización de la Corona de Aragón
Fernando II tuvo que combinar el autoritarismo con el pactismo. La Constitución de Observança (1481) fue la base del pactismo, aunque se reconoció la autoridad real. Una muestra de la autoridad de Fernando fue la Sentencia Arbitral de Guadalupe (1486), donde resolvió el conflicto de los remensas sin convocar a las Cortes.
6.4 La Unificación Religiosa
Los RR.CC. buscaron someter la Iglesia al poder real, obteniendo el derecho regio de presentación de Obispos a las sedes vacantes (Patronato Regio) y reformando las Órdenes religiosas. También lograron que el cargo de Maestre de las Órdenes Militares recayera en Fernando II.
- Implantación del Tribunal de la Inquisición: Previamente creada por el Papa Gregorio IX contra los herejes en Francia, se estableció en Castilla con la bula de Sixto IV (1478). Fue dirigida por la orden dominica y su objetivo era defender la ortodoxia cristiana.
- Expulsión de los Judíos: Algunos judíos decidieron bautizarse (generando el problema de los conversos). En las Cortes de Madrigal se impusieron marcas distintivas. Finalmente, el 31 de marzo de 1492 se firmó el decreto de expulsión de los judíos, dándoles cuatro meses para abandonar el reino.
- Conversión de los Mudéjares: Tras la capitulación de Granada, el Cardenal Cisneros, ocho años más tarde, obligó a los mudéjares a bautizarse, lo que desencadenó la rebelión de las Alpujarras (1500-1502).
6.5 La Proyección Exterior: Política Italiana y Norteafricana
Los RR.CC. casaron a sus hijos con miembros de las principales casas reales europeas: Isabel y María con Portugal; Catalina con Arturo (y luego con Enrique VIII) de Inglaterra; Juana con Felipe el Hermoso (Habsburgo); y Juan (que murió) con Margarita de Austria. La sucesión recayó en Juana, debido a la muerte de Juan.
Guerra en Italia
Fernando II buscó la expansión en el Mediterráneo. Nápoles estaba gobernado por Fernando, hijo de Alfonso V. Cuando Carlos VIII de Francia invadió Nápoles (con derechos de Anjou), Fernando II formó la Liga Santa (España, Milán, Venecia, el Imperio Alemán y el Papa). Gracias a Gonzalo Fernández de Córdoba (el Gran Capitán), los franceses se retiraron.
Fernando II y Luis XII de Francia firmaron un tratado de repartición que pronto rompieron. Los Tercios españoles derrotaron a Francia en 1502 en Seminara, Ceriñola, Garellano y Gaeta, asegurando el control español sobre Nápoles hasta el Tratado de Utrecht (1713).
Política Norteafricana
El interés se centró en la cruzada y el control geopolítico, ya que la presencia de 300.000 granadinos y berberiscos generaba inseguridad. En 1497, el Duque de Medina Sidonia ocupó Melilla. Fernando II tomó el Peñón de Vélez de la Gomera, Orán y estableció protectorados en Argel y Túnez. La expansión se detuvo tras el desastre de Los Gelves (1510).
El Descubrimiento de América
Cristóbal Colón, un marino de origen genovés, intentaba llegar a las tierras de Oriente siguiendo la ruta del oeste. Tras ser rechazado por el rey portugués y el rey inglés, presentó su proyecto a la reina Isabel (1486) en Alcalá de Henares. La Guerra de Granada, las altas exigencias de Colón y una Junta de expertos de Salamanca pusieron en duda la viabilidad del proyecto.
Una vez terminada la Guerra de Granada, y con la mediación de los monjes del monasterio de La Rábida, Colón se entrevistó con los RR.CC. en 1492. Se firmaron las Capitulaciones de Santa Fe, que estipulaban:
- La provisión de una nao y dos carabelas.
- La concesión a Colón de los títulos de Virrey, Almirante y Gobernador.
- La décima parte de las riquezas obtenidas.
Colón partió de Palos de Moguer (Huelva) el 3 de agosto de 1492. Iba al mando de la nao Santa María, pilotada por Juan de la Cosa, mientras que las carabelas estaban dirigidas por los hermanos Pinzón. Llegaron el 12 de octubre de 1492 a las islas del Caribe (San Salvador, Cuba, Haití).
Los Viajes de Colón
- Segundo Viaje (1493): Llevó 17 barcos y 1200 hombres hasta las Antillas, Puerto Rico, Cuba y Jamaica.
- Tercer Viaje (1498): Tocó tierras del continente. Su gestión como virrey fue desafortunada, lo que obligó a los Reyes a enviar a Francisco de Bobadilla para destituirlo.
- Cuarto Viaje (1502): Exploró Honduras y Nicaragua.
Hasta su muerte en 1506 en Valladolid, Colón defendió que había llegado a Asia (Japón), aunque Américo Vespucio ya había admitido que se trataba de un nuevo continente.
Regulación Territorial
Los Reyes Católicos intentaron obtener garantías legales sobre las Indias. El Papa Alejandro VI concedió a Castilla la posesión de las tierras situadas a 100 leguas al oeste de las Azores. Ante las protestas de Portugal (basadas en el Tratado de Alcaçobas), se firmó el Tratado de Tordesillas (1494), que estableció una nueva línea divisoria a 370 leguas al oeste de Cabo Verde, asegurando a Portugal la posesión de Brasil.