La Poesía: Del Modernismo a las Vanguardias
A finales del siglo XIX, se recuperan principios del Romanticismo como la originalidad o la libertad creadora. La situación de crisis en la cultura occidental provocó un cambio artístico. El movimiento literario correspondiente a este período es conocido como Modernismo.
El Modernismo
El Modernismo se inspira en dos movimientos del siglo XIX: el Parnasianismo y el Simbolismo. Los temas centrales del Modernismo son la soledad, el escapismo, el cosmopolitismo, el amor y el erotismo. Rubén Darío es el principal representante del Modernismo. Entre los autores modernistas en España destacan Antonio Machado y Valle-Inclán.
La Generación del 98
Los autores de la Generación del 98 adoptaron una actitud de reflexión y crítica ante la situación política, social y económica de España. Un lugar destacado en la poesía lo ocupa Antonio Machado (con obras como Soledades, galerías).
El Novecentismo
Ya en la segunda década del siglo XX, el Novecentismo defiende el racionalismo, el rigor intelectual y la claridad expositiva. Rechaza lo sentimental y lo pasional. Juan Ramón Jiménez es el máximo representante.
El Vanguardismo y los Ismos
El Vanguardismo nace como un movimiento efímero y rupturista que tendrá en torno a 1920 sus primeras manifestaciones. Su máximo representante y creador es Ramón Gómez de la Serna, creador de sus famosas greguerías, pequeñas composiciones que consistían en la unión de la metáfora y el humor. Por otra parte, hay que reseñar la importancia que desempeñó la obra teórica de Ortega y Gasset.
Los “ismos” más influyentes
El Creacionismo, el Ultraísmo y el Surrealismo son las vanguardias que más importancia tuvieron en nuestro país. El Surrealismo, que entró en España con fuerza influyendo sobre autores como Rafael Alberti o Lorca, exalta la imaginación, el deseo, la infancia o el sueño.
La Novela (Principios del Siglo XX – 1939)
Los primeros años del siglo XX se produce el Regeneracionismo, que pretende encontrar una solución a los “males de la patria”. En ese ambiente, una serie de autores y autoras (Ganivet, Unamuno, Azorín, Machado y Valle-Inclán) manifiestan su angustia existencial, su protesta y afán de reformas, y un deseo de modernidad y europeización.
Temática y Autores de la Novela de Principios de Siglo
La temática se centra en:
- La preocupación social, con intención crítica e influjo regeneracionista.
- Una visión centrada en Castilla como símbolo de España.
- Las inquietudes religiosas y existenciales.
Todos los miembros del grupo escriben novelas:
- Unamuno (Niebla)
- Baroja (El árbol de la ciencia)
- Azorín (La voluntad)
- Valle-Inclán (Sonatas)
- Carmen de Burgos (periodista, Puñal de claveles)
- Concha Espina (Altar mayor)
Hacia 1914: El Novecentismo
Hacia 1914 se percibe el agotamiento de la Generación del 98, y un nuevo grupo toma el relevo: la Generación del 14 o Novecentismo. El Novecentismo se caracteriza ante todo por su intelectualismo: hay que desterrar lo sentimental.
Los Años 30: Rehumanización
En los años 30 se produce, en todos los géneros literarios, una rehumanización de la literatura. Se escribe una novela comprometida.
El Teatro (Principios del Siglo XX – 1939)
El teatro español de principios del siglo XX es bastante pobre, pues no participa en las innovaciones del teatro europeo. En este periodo hay dos modelos teatrales:
- El teatro comercial, que triunfa y goza del favor del público.
- El teatro renovador, que no alcanza éxito.
El Teatro Comercial y de Éxito
Se incluyen tres tendencias:
- El drama burgués, realista y suavemente crítico.
- El teatro costumbrista, sin pretensiones críticas, cuyo propósito era entretener al público (Álvarez Quintero).
- El drama en verso modernista, de ideología conservadora y tradicional (José María Pemán).
El Teatro Renovador
Podemos hablar de:
- El teatro del 98, con Unamuno y Azorín.
- El teatro del 27, con Alberti, Miguel Hernández y Lorca.
Figuras Clave del Teatro Renovador
Valle-Inclán es uno de los autores fundamentales de la escena mundial de la época. Su obra sigue una constante evolución hasta llegar a su gran creación: el esperpento (Luces de bohemia), donde aparece una visión grotesca y deformada de la realidad.
García Lorca es el referente principal del teatro del 27.
El Grupo Poético del 27
A mediados de los años 20, un grupo de jóvenes autores y autoras llevará nuestra poesía a las más altas cotas. De entre los diversos nombres que fueron dados al grupo, el más aceptado fue Generación del 27.
Circunstancias Comunes de los Autores
- Edad cercana y estrecha amistad entre ellos.
- Colaboran con las mismas revistas.
- Proceden en su mayoría de una clase media, liberal y culta, con una sólida formación universitaria.
Rasgos Estéticos
- Depuración del sentimiento.
- Intelectualismo.
- Recuperación de las formas métricas clásicas.
Etapas de la Poesía del 27
En el grupo señalaremos tres grandes etapas:
- Poesía deshumanizada (hasta 1927): Es vanguardista, de poesía pura, intelectual, con un lenguaje poético depurado y elaborado, bajo el modelo de Góngora.
- Poesía rehumanizada (desde 1927 a la Guerra Civil): Es la etapa del surrealismo. Lo humano vuelve a tener cabida en la poesía.
- Poesía tras la Guerra Civil: El grupo se dispersa (Lorca muere y otros se exilian). Los poetas que permanecen sufren las dificultades de la posguerra, de nostalgia y desarraigo.
La Novela de Posguerra (1939 – Años 70)
Tras la guerra, en los años cuarenta, muchos de los escritores partidarios de la República o, en cualquier caso, enemigos del nuevo régimen, se exilian. Esto supondrá en ellos desarraigo, nostalgia y el recuerdo de España como tema central de su obra. Los principales novelistas exiliados son Ramón J. Sender y Francisco Ayala.
La Novela en España (Años 40)
En España, los novelistas se enfrentan a un panorama desolador. Inicialmente, se desarrolla una novela triunfalista, patriótica y de exaltación del régimen.
Sin embargo, La familia de Pascual Duarte de Camilo José Cela y Nada de Carmen Laforet abren un nuevo camino a la novela española: la narrativa existencial y tremendista, en la que los problemas sociales y políticos aparecen como trasfondo. Otros autores destacados son Delibes o Torrente Ballester.
Los Años Cincuenta: La Novela Social
En los años cincuenta, surge una novela más abiertamente social y con una visión crítica. Los conflictos sociales son el tema central. Este cambio, iniciado de nuevo por Cela con La colmena (1952), atraviesa por dos etapas:
- Una primera con enfoques personales.
- Una segunda de carácter más social y hasta político.
Los Años Sesenta: La Experimentación
En los sesenta, comienzan a verse los primeros signos de cansancio del realismo. Este agotamiento, unido a la influencia de las innovaciones de la narrativa extranjera y de la nueva novela hispanoamericana, da lugar a una etapa de novela formalista o experimental. Esta nueva narrativa implica transformaciones en todos sus elementos: acción, personajes, estructura y técnicas. Por ejemplo, Miguel Delibes con Cinco horas con Mario.
Los Años Setenta: Retorno a la Historia
La experimentación continúa en los años setenta, pero se vuelve a ciertos aspectos de la novela tradicional, como a contar historias, en las que reaparecen las preocupaciones individuales y existenciales. Destaca Eduardo Mendoza.
El Teatro de Posguerra y Actual (1939 – Actualidad)
Durante la Guerra Civil, el teatro fue un instrumento utilizado en uno y otro bando como arma de agitación política: las Guerrillas del Teatro republicanas o el Teatro de la Falange son prueba de ello.
Los Años Cuarenta: Continuidad
Los años cuarenta se caracterizan por la continuidad de las tendencias que ya triunfaban antes de la guerra, especialmente el drama burgués al estilo de Benavente, sin apenas sentido crítico y defensor de los valores más conservadores (Pemán, Luca de Tena).
Los Años Cincuenta: La Generación Realista
En los años cincuenta surge y se desarrolla la llamada “generación realista”. Se trata de un grupo coherente, de ideología izquierdista, cuyo objetivo es la crítica de la realidad española de su época. Se trata de un teatro poco innovador. Destaca entre todos ellos Antonio Buero Vallejo, autor de dos de las obras fundamentales del teatro de posguerra: Historia de una escalera y El tragaluz.
Los Años Sesenta: Renovación y Teatro Soterrado
La entrada en los años sesenta marca un movimiento de renovación caracterizado por un acercamiento al teatro extranjero y por la posibilidad de introducir un teatro vanguardista que apenas pudo ver la luz hasta casi el final de la dictadura, por lo que se habla de un teatro soterrado. Destacan autores individuales como Francisco Nieva y grupos independientes (La Fura dels Baus).
Los Años Setenta y la Democracia
El fin de la dictadura trajo consigo una serie de expectativas para el teatro. Devuelta la libertad al creador, se entiende por teatro institucional aquel subvencionado con grandes presupuestos y personal profesional, ofreciendo una oferta muy variada. Por ejemplo, Antonio Gala.
La Poesía de Posguerra (1939 – Años 70)
Lorca había sido vilmente asesinado, Miguel Hernández morirá encarcelado y la gran mayoría de los poetas parten al exilio, dando lugar a una poesía dolorosamente humanizada.
La Década de los Cuarenta: Tres Tendencias
Durante la inmediata posguerra, la poesía está muy condicionada por la situación histórica: los poetas buscan un sentido a la realidad, que encuentran en la espiritualidad o en la queja. En general, se trata de una poesía fuertemente individualista, aunque conviven tres tendencias:
- Poesía arraigada: Conforme con el régimen de Franco, en la que los autores recuperan temas tradicionales como la religión, el paisaje, el amor y las formas clásicas (Luis Rosales).
- Poesía desarraigada: En desacuerdo con su realidad y que aborda una temática existencial: angustia, duda (Vicente Aleixandre).
- Poesía vanguardista: Ajena a la situación del país y dedicada a la experimentación lingüística y formal. Sus principales representantes son el Grupo Cántico.
Los Años Cincuenta: Poesía Social
En los años cincuenta, la poesía se vuelve más metafísica y profunda, y abiertamente social. Sus temas son la injusticia social, la libertad, la explotación política, el trabajo, el compromiso y la solidaridad. Los autores más importantes son Blas de Otero (Ancia), Gabriel Celaya (Las cosas como son) y José Hierro (Alegría).
Los Años Sesenta: Apertura y Renovación
Con el fin del aislamiento que trajeron consigo los años sesenta, se inicia un leve proceso de apertura y, también, de renovación formal. Se abandona el testimonio crítico, se aborda una transformación del lenguaje, haciéndolo más elaborado y retórico, y se renuevan los temas (la infancia, el amor, la familia).
Finales de los Sesenta: Los Novísimos
Este proceso de renovación y la tímida apertura exterior que se estaba dando en el país son determinantes para que, a finales de los años sesenta, surja un grupo denominado los “novísimos”, que rompe definitivamente con la literatura social para abrazar una poesía estetizante.
La Poesía Contemporánea (Años 70 – Actualidad)
El fin del franquismo y la llegada de la democracia supusieron enormes cambios en la vida de los españoles y en la lengua poética.
Los Años Setenta: La Revolución Cultural
Tras la revolución cultural del “Mayo del 68”, irrumpe el grupo de los novísimos, que aportan nuevos aires a la poesía, llenándola de mitos de la civilización moderna: el cine, la música y la cultura pop, el cómic, el jazz.
Variedad de Tendencias en los Setenta
La poesía española presenta una gran variedad de tendencias, tanto temática como estilística:
- La poesía experimental, que recupera las técnicas vanguardistas.
- El culturalismo, influida por el clasicismo grecolatino y la Edad Media.
- La poesía minimalista, poesía pura y muy depurada.
- La poesía de la conciencia, concebida como acción social y política (Jorge Riechmann).
- El “realismo sucio”, próximo al anterior.
Los Años Ochenta: La Poesía de la Experiencia
El desencanto de los grandes ideales, propio de la posmodernidad, da lugar a un interés por lo íntimo y lo individual, en el que recobra importancia la estética. Sobresale la poesía de la experiencia (Luis García Montero).
La Década de los Noventa
En la década de los noventa destaca la continuidad de la poesía de la experiencia y la poesía del silencio.
La Novela Contemporánea (1975 – Actualidad)
Tras la muerte de Franco, la vida cultural y literaria experimenta una considerable transformación: desaparece la censura, se recuperan a los autores exiliados, y se produce una apertura hacia la literatura extranjera (europea, norteamericana y latinoamericana, fundamentalmente). Destaca la proliferación de autores.
El Realismo Renovado
Se habla de realismo renovado, se reivindica el placer de narrar, es decir, el relato con intriga, la aventura, el enredo, los amoríos. Algunos títulos relevantes son: Las edades de Lulú de Almudena Grandes.
Tendencias Actuales
En la actualidad se observa una gran libertad y diversidad de tendencias:
- Novela de intriga y policíaca: Plenilunio de Antonio Muñoz Molina.
- Novela lírica o poemática: Makbara de Juan Goytisolo.
- Novela histórica: Se trata de un tipo de novela de gran precisión histórica (La voz dormida de Dulce Chacón).
- Metanovela: El narrador reflexiona sobre los aspectos teóricos de la novela (El cuarto de atrás de Carmen Martín Gaite).
- Novela neorrealista: Héroes, de Ray Loriga.
- Novela culturalista: La tempestad de Juan Manuel de Prada.
- Novela reflexiva: Preocupaciones del autor, en un tono cercano a veces a lo autobiográfico (Negra espalda del tiempo de Javier Marías).