Aumento demográfico retroceso del bosque

Evolución de los índices de natalidad y mortalidad en España, 1940 – 2019


Me  encuentro  ante  el  gráfico  de  la  evolución  de  natalidad  y  mortalidad  en España  entre  1940  y  2019.  Este  gráfico  es  un gráfico  lineal  formado  por  un  eje  vertical  que  representa  las  cantidades  de tantos  por  mil,  y  un  eje  horizontal  que representa los años. La línea azul representa la natalidad y la naranja la mortalidad. Su fuente es INE, y está elaborado por la Subcomisión EBAU de Geografía. Aunque el gráfico no lo refleje, en la etapa previa a 1940, sabemos que España fue un país  de  altos  índices  de  natalidad,  pero  también  de  mortalidad,  debido  a  la  Guerra  Civil  española,  que  duró  desde  1936 hasta 1939. 

Con  respecto  a  la  natalidad,  en  este  gráfico  podemos  diferenciar  cuatro  etapas:  la  primera  va  desde  1940  hasta  1960,  la cual es descendente debido a la Guerra Civil española y a las grandes emigraciones. La segunda etapa va desde 1960 hasta 1995,  que  sigue  en  descendencia  ya  que  las  mujeres  comienzan  a  trabajar, comienzan  a  utilizarse  anticonceptivos  y  las familias empiezan a ser monoparentales. La tercera etapa va desde 1995 hasta 2010: la línea azul comienza a aumentar ya que  comienza  el  proceso  inmigratorio  con  muchas  mujeres  en  edad  fértil.  La  cuarta  y  última  etapa  va  desde  2010  hasta 2019, en donde vuelve a haber descendencia, y en donde se refleja un cambio ya que son tiempos con el menor número de nacidos  en  España,  ya  que  estamos  ante  una  población  envejecida  y  con  menos  números  de  inmigraciones  debido  a  la causa española surgida en 2008

No obstante, en lo referente a la mortalidad, podemos diferenciar tres etapas: la primera va desde 1940 hasta 1960, en la cual  hay  descendencia  de  mortalidad  por  el  periodo  de  postguerra,  ligadas  a  una mejoría  de  higiene  sanitaria  y  de alimentación.   La   segunda   etapa   va   desde   1960   hasta   2010,   en   la   cual   hay   un   periodo   de   estabilidad   debido   al envejecimiento  de  la  población.  La  tercera  y  última  etapa  va  desde  2010  hasta  2019,  en  la  cual  hay  una  etapa  de estabilidad  general,  pero  en  el  periodo  2010 –  2015  hay  un  aumento  de  mortalidad  debido  al  envejecimiento  de  la población. 

Por último, con respecto al crecimiento vegetativo/natural de esta época podemos señalar dos etapas: la primera va desde 1940 hasta 2010. Es un periodo de crecimiento positivo de la población, aunque debemos aclarar que en 2008 desciende la natalidad  y  la  mortalidad  se  estabiliza,  por  lo  que  el  crecimiento  vegetativo  desciende.  La  segunda  etapa  va  desde  2015 hasta 2019, en la que vemos como la mortalidad supera en casos a la natalidad, lo que supone un crecimiento descendiente o negativo. Entre los dos últimos años, se retoman las inmigraciones, lo que conlleva que en un futuro próximo aumente la natalidad.

 A raíz del 2019, provocado por la pandemia de la COVID-19, aumenta la mortalidad. Como consecuencia, aparecería lo que es una estabilidad del crecimiento de la población.


Influencia de la actividad humana en el medio natural

La acción del hombre sobre  el planeta ha sido tan  notable, especialmente en el último siglo,  que se puede afirmar que no existe  ecosistema  que  no  esté  afectado  por  su  actividad.  De  la  naturaleza  se  obtienen  los  alimentos  y a la  naturaleza  se devuelven los residuos que generamos con nuestra actividad. La energía que empleamos la obtenemos, en su mayoría, de la combustión de reservas de compuestos de carbono (petróleo, carbón, gas) almacenados por el trabajo de los productores del ecosistema a lo largo de muchos millones de años. En la actualidad no se puede entender el funcionamiento de la mayor parte de los ecosistemas si no se tiene en cuenta la acción humana. 

a) Agricultura y ganadería: cuando se cultivan los campos, se talan los bosques, se pesca o se cría ganado, se explota al resto de la naturaleza y se provoca su regresión en el sentido ecológico; es decir, el ecosistema se rejuvenece y deja de seguir el proceso de sucesión natural. Se disminuye la diversidad eliminando otros animales competidores mediante la caza, el uso de venenos, etc. El trabajo agrícola afecta también al ecosistema suelo. Al arar se mezclan los horizontes del suelo y se rompe la estructura para liberar nutrientes que puedan usar las plantas.

 b)  Obtención  de  energía  y  materias  primas:  la  explotación  del  petróleo  y  del  gas,  la  minería  del  carbón  y  del  resto  de minerales  y  el  transporte  de  materias  primas  y  productos  terminados  suponen  también,  un  fuerte  impacto  sobre  los ecosistemas.   Traen   consigo   carreteras,   grandes   movimientos   de   tierra,   sobre   todo   en   la   minería   a   cielo   abierto, concentración y producción de sustancias tóxicas, en todos los lugares de la tierra y los océanos. 

c) Reciclado de residuos: el hombre siempre ha confiado en los sistemas naturales para limpiar y depurar sus residuos y los ha vertido a ríos, mares y vertederos terrestres. La capacidad de la naturaleza para reciclar los materiales, diluir los tóxicos y limpiar el aire y el agua es muy grande, pero la actividad industrial genera tan gran variedad y cantidad de contaminación que sobrepasa la capacidad equilibradora y depuradora de la atmósfera. 

d)  Destrucción  de  ecosistemas  naturales:  el  uso  de  recursos  por  el  hombre deja  en  ocasiones  a  los  ecosistemas  sin componentes  que  les  son  imprescindibles.  Así  sucede  cuando  desviamos  cursos de  agua  para  usarlos  en  regadío  o abastecimiento  de  ciudades  y  el  cauce  de  los  ríos  queda  sin  caudal  suficiente para  mantener  el  ecosistema,  o  cuando  se construye en las zonas del litoral sobre marismas. 

e) Introducción de organismos ajenos al ecosistema: la actividad humana mueve muchas especies de unos lugares a otros. A veces conscientemente y otras sin querer. Muchas de estas especies son beneficiosas por su aprovechamiento agrícola o ganadero, como las papas y el millo que fueron introducidas en Europa y son un importantísimo recurso alimenticio. Otras sirven  para  controlar  plagas.  Pero  algunas  son  muy  perjudiciales,  porque  no  tienen  depredadores  que  las  controlen  y  se convierten en plaga


LAS MIGRACIONES EXTERIORES EN ESPAÑA A PARTIR DE 2008 MIGRACIONES

Los movimientos migratorios han existido durante toda la historia de la humanidad.  Sin embargo, España ha sido uno de los países con más movimiento migratorio, debido a su localización “costera” con respecto al resto de Europa y sus relaciones con el exterior.  En el año 2008, la crisis económica provocó, a su vez, una crisis migratoria en nuestro país.  

Desde mediados de la década de 1980, las migraciones interiores alcanzaron cifras muy elevadas, promovidas por motivaciones laborales, residenciales, estudiantiles, protagonizadas por personas muy de ocio, etc., diversas.

Desde finales de los años 90 hasta la crisis de 2008 la emigración exterior tiene un volumen reducido por la mejora del nivel de vida.  Sin embargo, la considerablemente, pasando de 500. 000 inmigrantes a 5.3 millones en 2008, la migración aumentó impulsada por la necesidad de mano de obra, el reagrupamiento familiar, los lazos histórico-culturales con Latinoamérica y el clima suave.

El perfil de los inmigrantes varían según su procedencia: los inmigrantes europeos, son mayormente jubilados o adultos de otros países en busca de trabajo;  y los inmigrantes de África (Marruecos), Iberoamérica (Ecuador y Colombia) y Asía (China), son jóvenes en busca de trabajos de baja cualificación.

El destino principal de los inmigrantes son los grandes centros urbanos y de servicios: Madrid, Cataluña, Andalucía, Canarias, Baleares …

La inmigración ha tenido una serie de consecuencias en España, como el crecimiento poblacional, que aportó población activa y contribuyó al  crecimiento del PIB.  Pero también aumentó el déficit anterior, aumentaron las actitudes xenófobas y racistas y las malas condiciones laborales. 

La crisis de 2008, en concreto, el paro, produjo una salida masiva de extranjeros residentes, debido a que el nivel de paro es mayor entre ellos que entre los españoles.  También la cifra de residentes españoles en el extranjero no ha parado de crecer, hasta situarse en 2,4 millones.  El destino favorito es la Uníón Europea, y se cree (ya que no hay registros) que es población cualificada de las áreas de la sanidad, arquitectura e ingeniería.

Las consecuencias de los saldos migratorios negativos son varias: la reducción de la demanda de empleo, la formación con esas experiencias de aprendizaje, pérdida en desarrollo, con la salida de personas cualificadas, la reducción de la natalidad, el cambio de pirámide envejecimiento generalizado de  la población y el misma

La emigración canaria hacia Europa (especialmente la grancanaria) es toda una paradoja. Una isla que no contaba con universidad hace 30 años, es ahora exportadora de universitarios

El trauma de la emigración, sin embargo, hunde sus raíces en las mismas causas, en Canarias y en el resto de España. El modelo económico español (y sobre todo el canario) sigue siendo el mismo. Los distintos gobiernos se resisten a cambiar ese modelo turístico de sol, playa y construcción de hoteles. Es necesario diversificar nuestro tejido productivo: invertir en I+D+I, energías renovables, nuevas tecnologías, servicios financieros y otros de alto valor añadido.

Si no será complicado que nuestros jóvenes vuelvan..



PISOS DE VEGETACIÓN EN Canarias

Esta gráfica en forma de triángulo o montaña nos muestra de forma visual la organización de la vegetación canaria en cinco pisos bioclimáticos atendiendo a la altitud y a las variaciones de temperatura y humedad que se modifican a medida que ascendemos hacia la cumbre. La distribución de los pisos también varía según la vertiente: vertiente norte o de barlovento, representada en la imagen con una nube. Es más humera por la influencia de los vientos alisios y la vegetación es más abundante; o vertiente sur o de sotavento, donde crecen plantas adaptadas a un ambiente más seco.

El primer piso va desde el nivel del mar hasta los 300 metros en la vertiente de barlovento y hasta 500 en la cara de sotavento, y las especies dominantes son el Cardonal Tabaibal. Le sigue el piso del Bosque, que se sitúa entre los 300 y los 700 metros en la cara de barlovento, ascendiendo hasta los 1000 metros en la de sotavento. El Monteverde se da exclusivamente en la fachada de barlovento, situándose entre los 800 y los 1200 metros, mientras que en la de sotavento ya comienza el pinar, que en la cara de barlovento se sitúa por encima del Monteverde, hasta los 2200 metros de altitud. Por último encontramos el matorral de cumbre.

Las Islas Canarias pertenecen a la regíón biogeográfica macaronésica junto con los archipiélagos atlánticos situados en la costa noroccidental de África: Madeira, Azores y Cabo Verde, con los que comparte una fauna y flora con numerosas afinidades.

El archipiélago canario, debido a su posición geográfica, tiene un clima subtropical diferente al del resto de España. Asimismo, el carácter insular y el vulcanismo proporcionan unas particularidades especiales a su vegetación, que se caracteriza por su gran riqueza y originalidad, la presencia de muchos endemismos y reliquias o formaciones vegetales propias de la Europa del Plioceno, como es la laurisilva. Todo ello convierte a las Islas en una regíón con una gran riqueza botánica con más de 500 especies endémicas, desde helechos, hongos y líquenes, hasta el drago, el pino canario o la violeta del Teide.

1.-Piso basal o cardonal tabaibal. Abarca desde el nivel del mar hasta los 300 o 500 metros. Está marcado por la aridez y las altas temperaturas, y las especies vegetales que predominan son las tabaibas y cardones, intercalados con balos, berodes, bejeques y magarzas

2.-Piso intermedio, de transición o bosque termófilo. Se extiende entre los 300 y 800 metros. El descenso moderado de la temperatura y el aumento de la humedad permiten el crecimiento de dragos, palmeras y sabinas. Estas especies han sufrido la acción antrópica (del hombre), llegando en algunos casos a casi desaparecer, como consecuencia de los asentamientos humanos y el intenso aprovechamiento de esta franja de bosque termófilo para la explotación ganadera y la roturación de tierras para el cultivo.

3.-Piso termocanario o Monteverde. Se sitúa entre los 800 y los 1 200 metros. La ve­getación se adapta a las nieblas causadas por el alisio, al mayor refresca­miento y a la menor insolación. Está constituida por dos originales for­maciones boscosas: el bosque de laurisilva, muy denso y compuesto por más de 20 especies y el fayal-brezal, que es el resultado de la de­gradación de la laurisilva por la acción humana.

4.-Piso canario o pinar. Se extiende entre los 1200 y 2200 metros y se distribuye en la vertiente de sotavento en la franja correspondiente al Monteverde y por encima de este hasta los 2300 metros en barlovento. Su especie principal es el pino canario que, al quedar fuera del mar de nubes, debe adaptarse a unas especiales condiciones de aridez y de frío. En las zonas más altas de este piso pue­den hallarse otras especies, como el cedro canario.

5.- Piso supracanario o matorral de cumbre.Se sitúa por encima de los 2200 metros , solo está presente en Tenerife y La Palma. Se caracteriza por una acusada des­nudez, con maúllas dispersas, pero de gran riqueza florística (violetas del Teide).