El texto corresponde a un fragmento del manifiesto de sandhurst firmado por Alfonso XII, quien defiende la vuelta de la monarquía borbónica como medio de garantizar las leyes y el progreso de España: es el programa político de la restauración. Docume

COMENTARIO DE TEXTO; MANIFIESTO DE SANDHURST DE 1874


  • Introducción

El texto es un fragmento del Manifiesto de Sandhurst firmado por Alfonso XII, quien defiende la vuelta de la monarquía borbónica cómo único medio de garantizar las leyes y el progreso de España. En definitiva, el comienzo del período histórico de la Restauración. Se trata de una fuente histórica primaria y directa, de naturaleza político-circunstancial y documento público, importante para el conocimiento del ideario político de Alfonso XII y Cánovas del Castillo.
Respecto al autor del documento, el texto está firmado por Alfonso XII. Alfonso XII era hijo de Isabel II de España, destronada en 1868 y exiliada en Francia. Por su parte, Cánovas del Castillo era un hábil político conservador, ideólogo de la Restauración que permitíó la vuelta de los Borbones, e ideó un sistema político de alternancia bipartidista en el gobierno que dotó de cierta estabilidad al país..
El destinatario del documento es el pueblo. Se trata de un documento público al que se le trató de dar la mayor difusión posible para motivar la adhesión a la causa borbónica.

  • Análisis

La idea principal del texto es la defensa de la monarquía como único garante de las libertades del país, e institución representativa de todos los ciudadanos. Lo que se pretende es resaltar la defensa de la institución
monárquica frente al régimen republicano. Tras la defensa de la Monarquía, la intención del joven Alfonso es la de reflejar la legitimidad de su persona al trono salvando el honor de su dinastía, una vez fallida la experiencia de Amadeo I de Saboyá.

Una vez que Alfonso XII se proclama como único candidato de derecho al trono, comienza con la defensa de la institución monárquica, tanto por legalidad histórica, como por los beneficios que de ella se derivan: garante de las instituciones,
 representación de los ciudadanos, y defensa de las libertades. Todo ello contrapuesto con la situación de dejadez que vive el país a raíz de la expulsión de los Borbones.

Para ello hace mención a las dos guerras vividas en España, y cómo dentro de un régimen liberal la monarquía sirve de garante a dichas instituciones. Al contrario, desde 1868 el país vive sumido en una parálisis que le ha llevado a no avanzar en ningún sentido, estando el país en 1874 peor que en el momento de la expulsión. Esto le lleva al futuro monarca a recalcar el estado de aislamiento y desconsideración que sufre el país en el contexto internacional, no siendo achacable a la monarquía.

Para concluir y tranquilizar a la opinión pública, el rey acude al patriotismo de su persona, y a dos pilares básicos, su confesión religiosa manifiesta debería tranquilizar a los conservadores, mientras su convicción de hombre liberal ganaría la confianza de los progresistas.

  • COMENTARIO

El manifiesto de Sandhurst refleja el ideario político de la Restauración. El texto ganó aún más significado tras el golpe de Martínez Campos a finales del año 1874 que permitíó la vuelta de Alfonso XII ya como rey. El manifiesto de Sandhurst dejó de ser propaganda para convertirse en la guía del proyecto de la Restauración.

La idea era conciliar y buscar vías para dar cabida al máximo de posiciones y evitar las exclusiones que pudieran dar lugar a futuros pronunciamientos militares. Este modelo se fundamentó en una soberanía nacional compartida entre el rey y las Cortes. Por ello se redactó una nueva constitución que fue promulgada en 1876.

En cuanto al sistema político ideado para dar estabilidad al país, se establecíó una alternancia de los dos partidos políticos con mayor representación: el conservador, que contaba en sus filas con la aristocracia y terratenientes (dirigido por Canovas); y el partido liberal, formado por comerciantes e industriales (dirigido por Sagasta). Mientras el representante de un partido ocupaba la jefatura del gobierno, el otro ocupaba la presidencia del Congreso.

Se enmarca históricamente entre el final del Sexenio Democrático (1868-1874) y los comienzos de la Restauración (1875-1931). La revolución de 1868 abre un paréntesis de seis años durante los cuales la casa real de los Borbones no reina en España. Se trata de una revolución que pretende transformar el sistema político y preparar la restauración borbónica.
Las Cortes afrontan el reto de una nueva Constitución, y el Gobierno, el de encontrar un rey que asuma la jefatura del nuevo Estado. Podemos considerar la Constitución de 1869 como la primera constitución democrática de la historia de España.
En Octubre de 1870 es elegido rey Amadeo de Saboyá. La situación se hace más difícil con la actitud conspiradora de Cánovas para el restablecimiento de los Borbones.
 
En este contexto se produce la abdicación de Amadeo en 1873. Al mismo tiempo, el Congreso de los Diputados y el Senado se declaran en Asamblea Nacional y proclaman la I República española. La I República nace de una frágil alianza entre radicales y republicanos unitarios. Las sucesivas disputas entre federalismo y unitarismo, en cuanto a la concepción del Estado, caracterizan un periodo afectado por una crisis política generalizada, en el que se suceden cuatro presidentes, en apenas once meses. En 1874, las fuerzas del general Manuel Pavía irrumpen en las Cortes conociendo el resultado de la votación, y con la ayuda de la infantería, disuelve el Congreso de los Diputados.

El nuevo rey, Alfonso XII, había recibido a los 17 años la legitimidad histórica de la casa de los Borbones al abdicar su madre en él en Junio de 1870. Su educación tiene lugar en la corte austriaca y en la academia inglesa de Sandhurst. El 1 de Diciembre de 1874 anuncia su programa político en el Manifiesto de Sandhurst.

  • Conclusión

Podemos afirmar que el texto consiguió ganar para la causa borbónica a buena parte de la clase política del país. Tras este manifiesto se halla una operación política del antiguo unionista Cánovas del Castillo, como hemos mencionado anteriormente. El 31 de Diciembre se constituye un ministerio-regencia a cuyo frente se sitúa Cánovas del Castillo, que se encuentra detenido en Madrid al sobrevenir el pronunciamiento.

El 14 de Enero de 1875 hace su entrada en Madrid el joven rey Alfonso XII, que confirma a Cánovas como presidente del Gobierno. Comenzaría, por tanto, el periodo de la Restauración (1875-1931).