Historia del Pensamiento Filosófico: De la Grecia Clásica al Siglo XVII

1. Rasgos Generales del Humanismo Griego

El término griego sofista significaba originalmente sabio, tanto como significaba sabio sophos. Sin embargo, a partir de la escuela de Sócrates y la de Platón (sabiendo que Platón es discípulo de Sócrates) el término sophistēs recibirá una connotación peyorativa; a partir de esta escuela socrático-platónica se utilizará para referirse a un tipo humano muy definido: el de una persona presente en el ámbito público (político) que no cree en la verdad (escepticismo) y que por ello emplea el lenguaje como arma política para la captación de poder político y difusión de un programa. En concreto, emplea en el lenguaje la argumentación dialéctica y los recursos de la retórica, como medios para conseguir la convicción de sus oyentes. En este sentido, Platón tiene un diálogo titulado Sofista en el que se trata esta temática. Como crítica a este uso del lenguaje que no busca la verdad sino el poder político y a este amor al poder y la riqueza; Sócrates dice que hay otras personas que no se creen sabios como los sofistas pero son más sabios que ellos, estos otros son amigos de la sabiduría: philo-sophos. En este concepto ya hay una crítica implícita a los sofistas que se presentaban como sabios y a su vez una alabanza a la modestia y humildad del sabio verdadero. Se considera amigo de la sabiduría, por eso la busca.

El humanismo griego se localiza cronológicamente en el siglo V a.C. en torno a Atenas, el siglo de Pericles, cuando se instaura la democracia por encima de los regímenes autocráticos. En este contexto surge la sofística. Son características típicas de estos sofistas una tendencia escéptica, en segundo lugar una suerte de cosmopolitismo nacido del contacto con otras culturas ajenas a la griega. Con este cosmopolitismo asistimos al nacimiento de nuevas formas culturales y actividad política; es aquí donde nace el tipo humano del sofista.

2. Antropología y Ética de Sócrates

Hijo de una comadrona, se compara como filósofo al arte de su madre que ayuda a dar a luz a los hombres, como él ayuda a engendrar la verdad. En segundo lugar, es un caso prototípico de injusto condenado. En concreto, fue condenado por dos delitos: impiedad (sinónimo en la antigüedad de ateísmo) y corrupción de la religión. En realidad, nada más lejos de Sócrates que ser corrupto y alejado de la religión. En realidad, afirmaba que no había muchos dioses como creían los griegos sino uno, por lo que afirmaba el monoteísmo. Panteón: todos los dioses. Además, consideraba un antropomorfismo la idea de los dioses griegos. Por lo que los vicios de estos hombres los proyectaban sobre los dioses. Proponía una nueva forma de reverenciar y adorar a dios, él defendía el monoteísmo.

La filosofía de Sócrates es enteramente ética, así mientras los filósofos anteriores presocráticos habían estudiado la naturaleza y el mundo; Sócrates se limita en su filosofía al hombre y a sus acciones. La primera afirmación de su ética es que el hombre es su alma y que su cuerpo es algo accidental; en este sentido Sócrates afirma en un famoso discurso: “Oh nobles atenienses, ¿por qué os preocupáis solo del cuerpo que es perecedero y no os preocupáis más bien del espíritu?” (que es inmortal). En segundo lugar, la ética de Sócrates identifica la virtud (areté) y la sabiduría (sophia); esta identificación de virtud y sabiduría le ha sido criticada clásicamente a Sócrates: mientras la virtud perfecciona la voluntad, la sabiduría perfecciona el entendimiento, pues los coloca en el mismo plano. Esta identificación de la virtud con la sabiduría se le llama intelectualismo socrático, en el cual hacer el mal es fruto de la ignorancia. Otro aspecto de la ética socrática es que hacer el mal es hacerse a sí mismo el mal, de manera que la primera víctima del obrar injusto es el que lo hace. El mal va comiendo a la persona por dentro, finalmente corrompiendo a la persona por dentro. Último aspecto de su ética; sostiene que una gran virtud es el autodominio (enkrateia), o señorío de las propias acciones, que presupone la libertad verdadera y el dominio sobre los instintos.

3. La Teología de Sócrates

Sócrates fue condenado a muerte por impío/ateo, condena falsa, en realidad él sostiene que hay un solo dios y que este único dios es inteligencia (nous). Más aún, es inteligencia ordenadora, es providente (elige los medios adecuados para alcanzar un fin); dios es providente porque gobierna la realidad en beneficio de los hombres. Una prueba inequívoca de la providencia de dios es la existencia del daimon, un ser espiritual que según Sócrates inspira pensamientos y acciones buenas y que es dado por el dios como ayuda a los hombres.

4. El Método de Sócrates

Sócrates afirma “Solo sé que no sé nada”, esto lo dice en polémica contra los sofistas quienes creían que realmente saben. En realidad, Sócrates es un sabio, y todo sabio siéndolo, sabiendo muchas cosas, desconoce otras muchas; pero es consciente de su ignorancia. Por el contrario, los ignorantes pueden considerarse sabios al no conocer su ignorancia. El sabio verdadero reconoce su propia ignorancia. Esta afirmación fue posteriormente anotada por Agustín de Hipona en el siglo V d.C. y Nicolás de Cusa en el siglo XV d.C. fue llamada una “docta ignorancia”. Sócrates propone contra los sofistas un método con dos pasos:

  1. Ironía: medio por el cual se vence la ignorancia arrogante del sofista (es el momento crítico y descriptivo del método de Sócrates), esta es una burla sutil (no injusta, no hiriente) necesaria para corregir el vicio de los sofistas.
  2. Mayéutica: en segundo lugar (momento positivo del método), una vez que por la ironía ha sido vencida la pretensión del sofista, Sócrates propone proseguir con un diálogo en el cual lo fundamental es una serie de preguntas que conducen al interlocutor a una última más allá de la cual no puede irse, es una pedagogía dialéctica. La mayéutica es una serie encadenada de preguntas en la búsqueda honesta de la verdad, cosa que los sofistas no hacían.

5. Aristóteles: Obras de Lógica

Aristóteles llama al conjunto de obras de lógica “Organon”: saber instrumental/instrumento. En el siglo XVII Francis Bacon escribe el “Novum Organum”.

La lógica es la ciencia previa a la filosofía y la razón humana que accede a la verdad.

Escribe muchas obras, entre ellas:

  • Categorías: estudia el lugar lógico de las sustancias (aquello en sí) y accidentes (en otro): toda realidad es alguno de ellos. Hay diez categorías: sustancia/sujeto; cantidad; cualidades; espacio; tiempo.
  • Los Analíticos Primeros: un análisis es descomponer un todo en sus partes.
  • Los Analíticos Segundos: posee dos grandes teorías.

¿Qué es ciencia?

Un conocimiento cuyo sujeto es el intelecto. Si estás cierto/seguro es porque existen causas. Tener ciencia no es saber algo ni conocer un fenómeno, es saber la CAUSA. Por ser causal es también demostrativo.

¿Qué es demostrar?

Proceder racionalmente desde algo conocido (efecto) a algo desconocido (causa). La demostración amplía nuestro conocimiento cierto pero indirecto. Demostrativas/inductivas son las ciencias de la naturaleza, mientras que las matemáticas y la lógica son ciencias de deducción/formales. Mostrar es indicar algo a la vista inmediatamente y llegar a conocerlo mediatamente (razonamiento).

Según Aristóteles: el saber de fenómenos (qué/experiencia) es distinto del saber de las causas (porqué/ciencia) y este último es más grande.

  • Sobre la Interpretación
  • Argumentaciones Sofísticas: revive viejos intereses de Sócrates. Plantea la teoría científica sobre los sofismas (argumentos lógicos viciosos/falsos/incorrectos).
  • Tópicos: teoría lógica sobre lugares comunes.

6. Aristóteles: Obras de Ciencia

Por el padre médico: estudio de los seres vivos.

A. Biología:

  • Sobre las Partes de los Animales (un tratado de morfología animal): semejanzas entre humanos y primates. Sostiene que la gran diferencia entre ellos es que el primate es cuadrúpedo mientras que el hombre es bípedo (erguidos-liberan las manos), por ende, posee la conjunción de inteligencia (comprender del todo) y mano (transformar todo).
  • Sobre la Generación de los Animales: diferencia entre los ovíparos (huevos) y vivíparos (parto) que dependen de la madre.

Conjunto de opúsculos biológicos que la tradición filosófica llamó “Parva Naturalia” (nombre no puesto por Aristóteles): son escritos naturales breves.

  • Sobre la Sensación de los Animales.
  • Sobre el Recuerdo/Memoria de los Animales: relación entre los que recuerdan, los prudentes y los inteligentes. Los que poseen memoria eligen mejor los medios para llegar a un fin (inteligencia práctica).

B. Física:

Estudio de la physis. Expone la teoría del movimiento de seres inertes. Dice que estos al no tener alma se mueven mediante otros, mientras que los seres vivos se mueven por sí mismos (auto movimiento).

¿Qué materia poseen los cuerpos que se mueven?

Utiliza la teoría de Empédocles de los 4 elementos (todos los cuerpos formados por ellos: química elemental).

  • Cuerpos pesados/terrestres (física): constituidos en su mayoría por tierra y agua y se mueven de forma lineal descendente (cayendo). TIERRA.
  • Cuerpos ligeros/terrestres: movimiento lineal ascendente. TIERRA.
  • Cuerpos celestes (astronomía): constituidos por el “quinto elemento” (hipotético) que es el éter y se mueven de forma circular y perpetua. Se mueven distinto porque su naturaleza es distinta. CIELO.

La física y la astronomía son antitéticas y entre ellas hay una antítesis irresoluble para la ciencia.

¿Dónde están los cuerpos?

Lugar o espacio.

Desplazamiento sucesivo de un lugar a otro: movimiento locativo (cambio). En el siglo XVII Galileo, Descartes y Newton contradecirían esta teoría. Siglo en que se produce la revolución científica y la lucha sin cuartel contra Aristóteles.

Acto (completamente ser: final) y potencia (se está desarrollando/proceso intermedio).

C. Astronomía:

Una obra: Sobre el Cielo y el Mundo.

Referencia de la astronomía clásica (Aristotélico-Ptolemaica) que domina desde la Edad Media hasta Copérnico y Kepler.

Ptolomeo: gran astrónomo greco-egipcio (Siglo I) que escribió una síntesis sobre la astronomía antigua de la cual solo se sabe el nombre árabe: ALMAGESTO.

Aristóteles expone la clave intelectual de la antítesis entre la física y la astronomía (más matemáticas que física). Estas ciencias son completamente diferentes y opuestas.

Esta teoría es válida hasta la llegada de Kepler (Siglo XVI/XVII) que en su obra Nova Astronomia Aitiologetos seu Physica Coelestis lo que establece es que la distinción de Aristóteles entre los movimientos de los cuerpos es falsa ya que existe un único sistema de movimiento que unifica la ciencia y que explica todos los fenómenos. De esta forma desautoriza la vieja teoría griega y es de donde Isaac Newton saca consecuencias.

7. Aristóteles: La Metafísica

Este nombre es meramente circunstancial, puesto por Andrónico de Rodas al estar estos libros más allá que los de la física. Aristóteles a esta ciencia le da diversos nombres, pero el más importante y más reiterado es:

  1. Prote Sophía: ciencia primera. Por tanto, sobre esta se fundamentan el resto de ciencias; son deutera sophía.
  2. La tilda de Sophía: porque estudia las causas últimas; la distingue de la ciencia, que estudia las causas próximas.
  3. La califica también de Teología: al estudiar ascendentemente hasta llegar a la causa primera de la realidad, el theos.
  4. También la caracteriza de Ciencia Libre (Eleuthera Episteme): porque para practicarla presupone todas las necesidades urgentes de la vida y solo se cultiva cuando hay ocio intelectual. Su estudio se basa en la búsqueda voluntaria de la verdad (ocio/scholē).
  5. Aristóteles llama a esta ciencia la ciencia que se busca (Tsetoumene Episteme); es un concepto socrático platónico. Philo-sophía, ciencia que se ama, por ello se busca y se presupone que no se tiene.

¿Cuál es el objeto de esta ciencia?

El objeto de esta ciencia es la realidad en general. En concreto, Aristóteles dice que esta ciencia estudia el ente en cuanto ente (“to on hē on”). El ente es al ser como el cantante al cantar y el corredor es al correr. Ente: es aquello que es. Este ente se compone de dos principios: (1) la existencia o ser y (2) la esencia. Todo lo que es, primero existe y en segundo lugar tiene un modo propio de ser, a lo que llamamos esencia (aquello que un ente es, ¿Qué es?). Estos dos significados constituyen la trama fundamental de la filosofía del siglo XX. La metafísica es pues, la ciencia del ente, sus propiedades y sus causas. Todo ente tiene sus propiedades en virtud de su esencia que se llaman categorías. Las propiedades derivadas de la existencia son trascendentales.

Propiedades trascendentales:

  • Unidad: es el ente en cuanto indiviso. Todo lo real es indiviso.
  • Verdad: es el ente en cuanto relacionado con el entendimiento.
  • Bien: es el ente en cuanto relacionado con la voluntad.

Categorías:

Son 10 pero lo fundamental se reducen a dos:

  • Sustancia
  • Accidentes (9):
    1. Cantidad
    2. Cualidad
    3. Espacio
    4. Tiempo

Las causas de la metafísica según Aristóteles son cuatro:

  1. Causa material: es aquello de lo que algo está hecho (bronce de una estatua).
  2. Causa formal: es aquello que algo es (esencia) (forma de la estatua).
  3. Causa eficiente (agente): aquello que produce algo (quien produce algo).
  4. Causa final: aquello en vista de lo cual se hace algo (para qué produce esa estatua).

8. Aristóteles: La Antropología

Entra en polémica con Platón. Significa estudio del hombre. Pero ¿qué es el hombre? Aristóteles declara que el hombre es un zoon logikon (animal racional). Que el hombre sea un (1) animal significa que es un ser viviente orgánico o dotado de cuerpo; estos cumplen (a) funciones vegetativas (nutrición, crecimiento y reproducción), (b) funciones sensoriales (el conocimiento sensorial, tendencia instintiva y capacidad locomotriz)*. A su vez es (2) racional: (1) intelectual (razón) y (2) voluntad. El hombre vive a la vez en dos mundos: habita en el mundo físico por su cuerpo y su componente animal y a la vez en uno segundo por su espíritu. El hombre para Aristóteles es una síntesis de physis (animalidad), logos (racionalidad) y ethos (carácter/costumbre). *El conocimiento sensorial hace que la tendencia instintiva se mueva y haya un movimiento.

9. Aristóteles: La Ética

Es la ciencia que estudia las acciones humanas como buenas o malas. Las acciones humanas solo son buenas o malas si proceden de la voluntad libre. Hay algunas acciones humanas que no proceden de la libertad, estas no son éticas. La primera frase de Ética a Nicómaco define qué es el bien (agathon), en concreto Aristóteles dice: “El bien es lo que todos apetecen”; es decir, es lo que constituye el fin de las acciones humanas, es aquello lo que se ama, por eso todos tienden a él. Existe el bien sensible: aquello que sacia la sed de una necesidad. Después está el bien honesto: que es el específico del espíritu (no se toca), ej. La libertad.

El bien siempre tiene razón de fin. El fin de nuestros actos tiene una fuerza atractiva sobre nosotros: el bien.

El modo/fuerza estable y racional de dirigirse al bien se llama virtud (areté) (su forma opuesta se llama vicio: camino de la infelicidad). A esta fuerza estable, duradera y consolidada se le llama hábito. Toda la ética es un estudio de las virtudes y los vicios. El resultado de una vida plenamente humana, racional, según la virtud es la felicidad, la eudaimonía; es consecuencia de una vida en la que el hombre virtuosamente hace y ratifica con sus actos lo que él es.

La ética presupone la antropología en cuanto al hombre como ser racional. El comportamiento de los animales es premoral, no puede ser ético, no hay bien ni mal. El bien y el mal es propio únicamente de los seres racionales.

Hay cuatro virtudes esenciales para Aristóteles, ordenadas de esta manera porque la estructura operativa del hombre se corresponde con una facultad:

  • Prudencia (phrónesis): identificada con la racionalidad (práctica), es la virtud de elegir los medios más conducentes para ciertos fines. La razón se llama práctica porque propone motivos a la voluntad para realizar una obra o praxis.
  • Justicia (diké): identificada con la voluntad. Según el jurista romano (s. III d. C.) Ulpiano la justicia es: vivir honestamente, no dañar a nadie y dar a cada uno lo suyo.
  • Fortaleza: disposición necesaria para hacer frente al mal; identificada con el apetito irascible (tendencia irascible).
  • Templanza: identificada con la apetencia concupiscible; nos hace gustar de los bienes del cuerpo. La templanza es la virtud que nos ayuda a moderar el uso de los bienes del cuerpo.

Finalmente dice que el hombre que conduce su vida de acuerdo a la virtud es un hombre que alcanza la felicidad. Prudentemente, justamente, fuertemente y templadamente.

10. Aristóteles: La Política

Aristóteles declara que el hombre es un zoon politikon (animal social) porque es imposible vivir humanamente sin la sociedad en sus diversos niveles (familia, ámbito laboral y amigos, ámbito social y político), todos estos conforman el hábitat natural humano; así como un animal no es viable fuera de su hábitat físico, igualmente es imposible para el hombre hacerlo fuera de las diversas formas de vida social. Solo los dioses y las bestias viven fuera de la sociedad; los hombres no. A propósito de esta sociabilidad natural del hombre, veremos algunos desarrollos a principio de la filosofía moderna: Suárez, Hobbes y Locke; todos estos justifican la profunda sociabilidad del ser humano.

Aristóteles dice que toda forma de organización política debe estar regida éticamente por la virtud de la justicia. Hay un autor moderno a inicios del siglo XVI, Maquiavelo, que dice que la política no tiene nada que ver con la justicia.

Aristóteles finalmente propone una teoría sobre las formas de gobierno clasificada por dos criterios: formas justas e injustas y en segundo lugar según el número de gobernantes. Así las formas de gobierno son 6:

  1. Monarquía: gobierna 1 con justicia.
  2. Aristocracia: gobiernan varios con justicia.
  3. Democracia: gobiernan muchos o todos con justicia.
  4. Tiranía: gobierna uno con injusticia (inicial o sobrevenida).
  5. Oligarquía/Plutocracia: gobiernan varios con injusticia (inicial o sobrevenida).
  6. Demagogia (hoy populismo): gobiernan muchos con confusión e injusticia.

No prescribe ninguna, indica que corresponde a cada pueblo según su idiosincrasia elegir su propia forma de gobierno. Para Aristóteles la virtud de la justicia es la verdad de la vida social.

11. Rasgos Generales del Helenismo

Es un ambiente cultural, filosófico y religioso posterior a un hecho político: la expansión de Grecia de la mano de Alejandro Magno hasta la India. Esta expansión militar y política griega favoreció una multitud de intercambios y transferencias culturales y religiosas, en ambas direcciones (de Asia a Grecia y viceversa). En el año 323 a.C. muere Alejandro Magno, quien había sido instruido por Aristóteles, a su muerte sus generales se repartieron el imperio y lo fragmentaron; naciendo así grandes ciudades de la antigüedad en distintos lugares del imperio (Pérgamo, Éfeso, Antioquía, Rodas y Alejandría). En este contexto Atenas pierde la hegemonía. El griego se hace lengua universal pero se vulgariza. Este griego vulgarizado se le llama koiné (común). Desde el año 197 a.C. la presencia y el poder creciente de Roma se deja sentir cada vez más en el Imperio de Alejandro; el poder e influjo de Roma se hará absoluto tras la caída de Alejandría, la mayor ciudad helenista, en el año 47 a.C. a la muerte de Cleopatra. A su vez, el año 43 a.C., fecha de la Batalla de Accio, es la fecha en la que cesa la república y se establece el imperio. En esta época aparece un tercer actor, el cristianismo, que se instaura progresivamente dentro de las fronteras del imperio romano. Durante el imperio romano el poder político se concentra, el senado deja de ser operativo. El Estado se aleja cada vez más del individuo, ya que este no participa en la vida del mismo. Se asiste a un declive político y ético imparable, el pueblo es envilecido: panem et circenses (pan y circo).

En este contexto nacen las últimas cuatro escuelas de pensamiento griego:

  • Estoicismo
  • Epicureísmo
  • Escepticismo
  • Neoplatonismo: última etapa de la filosofía griega, también tendrá importancia en la Edad Media.

12. El Helenismo y Roma

El Helenismo no es lo griego en general, es un preciso fenómeno cultural y político que surge con la expansión griega a la India por parte de Alejandro Magno. Desde entonces se manifestó un aire oriental que domina la filosofía y la religión griega. A la muerte de Alejandro Magno (323 a.C.) su imperio se fragmenta en provincias donde nacen ciudades como centros de vida económica, política y cultural: Pérgamo, Éfeso, Antioquía, Rodas y Alejandría. Atenas pierde la hegemonía. En este mundo griego políticamente fragmentado el elemento de cohesión era la lengua griega común vulgar. Por esto mismo, algunos escritos de la biblia y los del nuevo testamento.

197 a.C.: nace nueva potencia política y militar: ROMA. Estaba en batallas con los fenicios que caen y dejan el paso al dominio romano (año 50). Se hace absoluto tras la caída de Alejandría (47 a.C.) a la muerte de Cleopatra.

43 a.C.: cesa la república y se establece el imperio.

Nuevo actor religioso: cristianismo.

13. El Origen del Cristianismo y el Helenismo

Nace en el contexto de la cultura helenista griega tras la predicación pública de su fundador: Jesucristo. El nombre de su fundador está compuesto por dos palabras distintas: en arameo “Yehoshua” y en griego “Christós”/Massiah (personas elegidas por dios para completar una misión eran ungidas con aceite sagrado).

Jesucristo predicó a los judíos, por lo que el cristianismo nació como un grupo religioso judío.

Religión de clases desfavorecidas/pobres y urbanas.

Los no cristianos eran llamados “paganos”: del campo, paisano.

La difusión de esta religión ocurrió luego de la muerte de su fundador y a manos de Pablo De Tarso (Asia menor) que era un judío de la diáspora. En el siglo IV a.C. los judíos fueron deportados a Babilonia/Irak. Tras 60 años, algunos regresaron a Israel y los que se quedaron fueron llamados “judíos de la diáspora/dispersos”.

Se conocía también con el nombre de Saúl (nombre típico en la Tribu de Benjamín). Esto se debe a que era ciudadano romano y se acostumbraba a llevar dos nombres (uno romano y otro hebreo). De Tarso era ciudadano romano porque le había prestado a Roma sus servicios lo que, años más tarde, lo benefició a la hora de ser ejecutado ya que murió de la forma más honrosa: la decapitación. En cambio, Pedro (otro discípulo no romano) fue crucificado que era la forma de ejecución más deshonrosa, que involucraba la reducción a esclavo y la pérdida de todos los bienes y pertenencias.

El Cristianismo y Roma

  • En Roma el cristianismo era considerado una religión ilícita/prohibida debido a que los cristianos rechazaban ofrecer sacrificios a los dioses romanos y por esto se los consideraba ateos/enemigos del estado.
  • A raíz de esto surgieron las persecuciones religiosas. Emperadores que las ejecutaron: Nerón, Decio, Diocleciano.
  • Fue recién en el año 325 con Constantino al poder y el Edicto de Milán que el cristianismo pasó a ser una religión lícita.
  • Año 370: Teodosio, el emperador, estableció el cristianismo como la religión de estado/obligatoria y la persecución a los paganos.

Padres de la Iglesia

Se entiende por este término a aquellos teólogos, de ordinario obispos o monjes, que elaboraron en fórmulas dogmáticas la fe implícita predicada por Jesucristo. Estas fórmulas fueron realizadas en los concilios ecuménicos (asambleas de teólogos cristianos convocadas por el emperador romano).

  • Nicea (325).
  • Constantinopla (381).
  • Éfeso (431).
  • Calcedonia (451).

Las dos primeras establecieron el dogma trinitario: dios siendo uno en su naturaleza, es trino (3) en sus personas, primer credo cristiano. Padre porque engendra a otro que es hijo y procede otro por expiración amorosa.

Las dos últimas, establecieron el dogma cristológico: dios es una persona excepcional/milagrosa que para realizar dichos milagros requiere de un poder superior no existente en un simple hombre. Jesús posee dos naturalezas, la divina y la humana, pero solo es una persona divina. Esto se denomina unión hipostática.

Roma

  • Nuevo actor político y militar: guerras púnicas.
  • Al derrotar a los fenicios, Roma comienza su dominio.

Los fenicios eran semitas del Líbano (grandes comerciantes) que habían avanzado hacia el mediterráneo y fundado colonias comerciales (Cartago).

  • Hacia el año 70/80, Cartago es vencida y se la apropia Roma.
  • 780 a.C.: nacimiento de Roma en el río Tíber (origen etrusco por la aparición de muchas RM; comercio de la sal).
  • Roma se dividió en tres grandes fases:
  1. Monarquía.
  2. República (senado de ancianos y el pueblo): permisión de matrimonio entre plebeyos y patricios (excanuleia).
  3. Imperio: sustraen el poder del senado y lo concentran en el Princeps. Dos tipos de provincias:
  • Senatoriales: vivían en paz y Romanizadas. Senado (régimen civil). Ej.: Baetica y Tarraconense.
  • Imperiales: rebeldes y opositores a la militancia romana. Estaban en manos del emperador (militar). Ej.: Palestina (el gobierno romano vivía en una fortaleza militar).

14. El Neoplatonismo en Síntesis: Principales Autores y Obras

  1. Amonio Saccas (175–242 d.C.): filósofo de Alejandría, considerado el fundador de la escuela neoplatónica.
  2. Plotino (205-270 d.C.): filósofo igualmente alejandrino, discípulo de Amonio, sistematizador del neoplatonismo. Su obra principal son Las Enéadas. En ellas expone su doctrina de la procesión (salida) de las hipóstasis (las sustancias o cosas) del Uno.
  3. Agustín de Hipona (354-430): filósofo y teólogo, el más importante de los Padres de la Iglesia, tras su conversión al cristianismo y posterior elevación al obispado de Hipona. San Agustín es el último filósofo antiguo y el primer medieval. En efecto, la paradigmática fecha de su muerte, que coincide con el asedio y destrucción de Hipona por los vándalos, mientras Roma ve con impotencia la destrucción de una ciudad de su imperio, es el símbolo de una época que muere y de otra que nace. Roma muere y un mundo nuevo desconocido empieza a emerger. La que muere es la época antigua. La época que nace será la síntesis de: los bárbaros-germanos, el cristianismo que estos asumen y el eco histórico de Grecia y de Roma que perdurará como memoria de una civilización superior precedente, que en buena medida transmitirá el naciente monacato a la posteridad. Se puede decir que Europa nace en esta coyuntura: Carlo Magno funda el Sacro Imperio Romano Germánico el año 800 d.C., él que era cristiano, germano (de la tribu de los francos) y que había acogido con admiración el gran legado de griegos y romanos transmitido por los monjes.
  4. Proclo (412-485): filósofo de Constantinopla, autor de unos Elementos de Teología (Elementatio Theologica). Esta obra en la Edad Media será conocida como el Liber de Causis, es decir, el Libro de las causas (Dios, Creador y Causa primera, y Providente y Causa final). En la Edad Media se olvidará la autoría de Proclo de esta obra y será por ello considerada una obra de autor anónimo. Solo Tomás de Aquino en el siglo XIII descubrirá a su verdadero autor.
  5. Pseudo-Dionisio Areopagita (siglo VI d.C.): monje sirio del siglo VI fuertemente inspirado por Plotino. Se le llama Pseudo porque es un “falso” Dionisio. Es decir, durante mucho tiempo fue erróneamente considerado el discípulo ganado por San Pablo en el Areópago (un promontorio que dominaba Atenas, en el que tenía su sede el tribunal de Atenas y en el que se desarrollaba la vida pública y se intercambiaban ideas). En realidad, este autor es un monje cristiano sirio de finales del siglo V e inicios del VI, fuertemente influido por las doctrinas del neoplatonismo. Al conjunto de sus escritos se le conoce como el Corpus Dionysiacum. El más importante de ellos se titula Liber de Divinis Nominibus (Libro sobre los nombres de Dios). En esta obra se funda en buena medida la llamada teología apofática o teología negativa, según la cual de Dios es mucho más lo que desconocemos que lo que sabemos. Dios es inefable, habita en una luz inaccesible y escapa a la comprensión de la limitada inteligencia humana. De ahí que esta obra marque el inicio de las teologías místicas (mysticas, también mysterium, de mu, mudez e inefabilidad). La mística cristiana hunde sus raíces profundamente en estas ideas.
  6. Escoto Eriúgena (810-877): monje, filósofo neoplatónico de origen irlandés (de donde eriúgena, es decir, de Erín, Eire, Irlanda) de la Corte Palatina de Aquisgrán fundada por Carlo Magno. Autor de la obra titulada Sobre la Naturaleza. La obra trata enteramente de Dios como Creador. Sus ideas son consideradas próximas al panteísmo.
  7. Como última fuente neoplatónica debemos citar el Liber de Causis, del que ya hemos dicho que, en realidad es la Elementatio Theologica de Proclo. En los siglos XII y XIII esta obra tuvo un influjo enorme. Es una de las mayores fuentes de la filosofía y teología medievales, en no pequeña medida neoplatónicas. Esta obra fue ampliamente comentada por los pensadores medievales, entre otros por Tomás de Aquino, quien escribió un Commentum in Librum de Causis (Comentario al Liber de Causis o Libro de las causas).

15. El Neoplatonismo en Síntesis: Las Tres Corrientes de la Mística Cristiana

  1. Mística Renana (s. XIV): difundida por la zona del Rin. El autor más importante es Meister Eckhart. Su legado fue continuado por sus discípulos: los dominicos Johannes Tauler (1300-1361) y Heinrich Seuse (1300-1366), latinizado en Suso.
  2. Mística Flamenca (de Flandes, Bélgica-Países Bajos) (s. XV): nacida tras la recepción en Flandes de la mística renana. Su autor principal es Jan van Ruysbroeck (1293-1381).
  3. Mística Castellana (s. XVI): Nacida del influjo de las dos precedentes escuelas y del nuevo aire de la teología nominalista (menos especulativa y más dedicada a la práctica de la piedad). Entre los místicos castellanos destacan Juan de Ávila, autor del Audi Filia (Escucha hija). Teresa de Jesús, en cuya obra principal, Las Moradas (título inspirado en Ruysbroeck), se presenta al alma como un castillo con muchas moradas, en el cual la morada más interior y secreta es aquella donde Dios y el alma viven unidos. Finalmente, Juan de la Cruz, filósofo y poeta de altísimo valor, de neto acento neoplatónico, autor del Cántico Espiritual, Noche Oscura, Subida al Monte Carmelo. Su doctrina principal es la doctrina de la nada mística, muy relacionada con la teología apofática o negativa, cuando dice: “Si quieres saber todo, no quieras saber nada”. Así, la fe nos conduce de noche, sin que sepamos cómo, hasta Dios, porque es Dios mismo quien, por medio de la fe oscura, conduce al cristiano hasta Él. Pero también: “Si quieres ser todo, no quieras ser nada”, y así no siendo nada, Dios que ama dar y darse con generosidad se te dará y así vendrás a ser uno con Dios. Es la doctrina de la divinización del alma, que otros teólogos neoplatónicos orientales (especialmente los llamados Padres capadocios y en particular, Gregorio de Nisa) habían difundido siglos atrás.

16. Agustín de Hipona: Rasgos Biográficos

Agustín de Hipona (354-430 d.C.) nacido en Tagaste, de madre cristiana, Mónica, y padre pagano, Patricio. De personalidad inquieta y ardiente, es una personalidad cargada de anhelo y deseo. Su vida es, por ello, un itinerario lleno de inquietud en la búsqueda de la verdad y la felicidad. En un primer momento se interesa por las doctrinas de los escépticos, pero tras un tiempo las rechazará. Posteriormente se adhirió a la escuela de los maniqueos. Finalmente tras la lectura de Mario Victorino, traductor de Las Enéadas de Plotino, se hace neoplatónico. Finalmente por influjo de su madre Mónica, pero sobre todo del obispo de Milán donde vivía, San Ambrosio, Agustín, predispuesto favorablemente por el neoplatonismo, se convierte al cristianismo. Poco tiempo después es consagrado obispo de Hipona, una gran ciudad del norte de África. Agustín muere cuando en el 430 d.C. los vándalos saquean e incendian la ciudad de Hipona. La muerte de san Agustín es considerada frecuentemente el término de la Edad Antigua y el comienzo de la Edad Media. Las destrucciones de los bárbaros son, en efecto, el símbolo del ocaso de esta época, a la que sucedió un sistema mucho más tosco y pobre (cultural y económicamente) que el grecolatino: el feudalismo. A partir del siglo V d.C. solo los monjes y los monasterios preservan la cultura antigua y la transmiten a la posterioridad en los códices escritos por amanuenses. En este contexto es decisivo Casiodoro, monje fundador de Vivarium (monasterio calabrés, en el sur de Italia), en el cual el trabajo de los monjes consistía en la transcripción de las grandes obras de la Antigüedad clásica en códices conservados en las bibliotecas monásticas. Se puede decir con verdad que la única institución que veló por la permanencia de la cultura antigua fueron los monjes cristianos.

17. Agustín de Hipona: Obras Principales

  • Las Confesiones: Se trata de una obra en la que Agustín, ya avanzado en años, abre su alma y alaba a Dios que ha conducido secretamente sus pasos en la vida. Las Confesiones son uno de los libros más leídos y de más alto valor de la literatura universal. El primer capítulo concluye con la siguiente afirmación, que es el mejor retrato de su autor: “Fecisti nos, Domine, ad te et inquietum est cor nostrum donec requiescat in Te” (“Nos hiciste, Señor, para ti e inquieto está nuestro corazón hasta que descanse en ti”).
  • Las Retractaciones: una obra en la que ya obispo, corrige algunas afirmaciones de sus obras anteriores.
  • Contra los Escépticos (Contra Academicos): los académicos referidos en el título son los escépticos. Agustín critica a los escépticos porque, rechazando la verdad, impiden al corazón del hombre alcanzar la felicidad, por la que el corazón de Agustín suspira.
  • Sobre la Trinidad de Dios (De Trinitate Dei): En esta obra Agustín indaga en la profundidad del misterio del Dios cristiano, que es Uno en su esencia (una sola Divinidad) y Trino en sus personas (tres Personas realmente distintas: El que engendra, Padre; El que es engendrado, Hijo; y El que procede de ambos por vía de amor, Espíritu Santo). De manera que una Única Divinidad se realiza en tres Personas distintas. Agustín cree que toda la realidad está marcada con esta estructura trinitaria, especialmente el hombre, hecho a imagen y semejanza de Dios. Por eso, el psiquismo humano reproduce la imagen de la Trinidad Santa: la memoria, imagen del Padre; la inteligencia, imagen del Hijo; la voluntad y el amor, imagen del Espíritu Santo.
  • La Ciudad de Dios (De Civitate Dei): Es una obra de teología de la historia. El bien y el mal luchan en el interior de cada hombre desde el inicio de la historia. La Providencia divina guía los designios de los hombres y los pueblos: “Dos amores fundaron dos ciudades: el amor de sí hasta el desprecio de Dios fundó la ciudad de los hombres; el amor de Dios hasta el desprecio de sí fundó la ciudad de Dios”. Son dos disposiciones profundas del corazón humano, no instituciones sociales. Roma no era la ciudad de los hombres, ni la Iglesia la ciudad de Dios. En el campo de la historia el trigo y la cizaña crecen juntos. El amor de Dios y del prójimo y el amor egoísta de sí combaten de continuo dentro de cada hombre. Es el drama de la existencia humana, en el que Dios se hace presente con su gracia. Precisamente, por la importancia de la doctrina de la gracia en toda la obra de san Agustín será conocido como doctor gratiae, el doctor de la gracia.

18. Anselmo de Canterbury: Apuntes Biográficos

Anselmo nació en el valle de Aosta, en los Alpes italianos. Escapó del hogar paterno y halló refugio en la abadía benedictina de Bec en la Normandía francesa, donde fue acogido por el abad Lanfranco. Posteriormente abrazó la vida monástica y vistió el hábito benedictino. Anselmo fue, ante todo, un cristiano y un monje benedictino. Su vida itinerante hace de él un personaje típico del Medievo, una época en la que existía una Cristiandad sin Estados como los actuales. Había nacido en Aosta (Italia). Vivió en la Normandía francesa en el monasterio benedictino de Bec, donde después de monje llegó a ser abad de gran prestigio. Tras la batalla de Hastings (1066) entre los normandos franceses y los anglosajones ingleses, con victoria de los primeros, se comienza el dominio cultural franco-normando en Inglaterra. Con la nobleza, ahora normanda, se impone en Inglaterra el francés como lengua culta. El inglés antiguo comienza a admitir muchas palabras francesas. Los nobles hablan francés y las clases populares hablan la lengua sajona (germánica). A partir de entonces el pueblo británico tendrá dos almas: el noble, de inspiración francesa; y el alma sajona de las clases populares. En esta nueva situación, el rey franco-normando, Guillermo II el Conquistador, ahora rey de Inglaterra, rapta a Anselmo de su monasterio en Francia y lo hace consagrar, contra su voluntad, obispo de Canterbury, la diócesis primada (por ser la más antigua de las diócesis inglesas) de Inglaterra. Tras esta consagración inválida, un tiempo después, buscando el bien de los cristianos de Inglaterra, Anselmo convalidó la consagración nula.

19. Anselmo de Canterbury: Principales Obras

La primera y más importante de las obras de Anselmo es el Proslogion, una obra de teología racional, conocida sobre todo, porque presenta una nueva prueba de la existencia de Dios. Del Proslogion interesa, sobre todo, el proemio (la introducción) y el primer libro. En este primer libro presenta la novedosa prueba racional de la existencia de Dios. En el proemio pone de manifiesto claramente las raíces agustinianas de su formación. El Proslogion es una teología racional escrita por un monje en el contexto de una vida de retiro y de oración, con claros tonos místicos.

Además del Proslogion merece ser destacado el tratado Sobre la Verdad (De Veritate). En esta obra Anselmo propone la primera noción de verdad de la filosofía europea. Anselmo dice en concreto que la verdad es una “rectitudo intellectus”, “una rectitud del intelecto”. Ahora bien, con esta breve descripción Anselmo supone que el intelecto es recto en virtud de una relación con alguna cosa. En otras palabras, Anselmo llama la atención sobre el hecho de que la verdad se da en el intelecto pero en cuanto guarda una proporción (o rectitud) con la realidad. Más adelante, Tomás de Aquino, inspirándose en San Anselmo entre otros, dirá que la verdad es una “adecuación del intelecto a la realidad”.

Finalmente, destacamos una última obra, el Cur Deus Homo (Por qué Dios se hizo hombre), un tratado sobre los motivos de la Encarnación divina. La encarnación de Dios tiene como motivo fundamental la redención del hombre del pecado, según san Anselmo. La redención se realizó principalmente por medio del sacrificio redentor de Jesús, el Hombre-Dios. Redención (de re-d-emptio, recompra o re-adquisición) significa que lo que era de Dios por la creación, se perdió por el pecado y posteriormente fue nuevamente adquirido (redimido, recomprado) por medio del sacrificio de Cristo. El motivo de la encarnación de Dios en Jesucristo fue sobre todo el sacrificio de Jesús, tras el cual la humanidad vuelve a adquirir la imagen y semejanza divinas perdidas por causa de la rebeldía y caída ocurridas en el paraíso.

20. Contexto Filosófico y Cultural de Francia en el Siglo XVII

En la Francia del siglo XVII se dan unas peculiaridades que de un modo u otro se hacen presentes también en el espíritu de Descartes.

a) Tendencia al Escepticismo

Una tendencia al escepticismo presente en Francia desde el Renacimiento. Los autores principales del escepticismo francés son:

  • Michel de Montaigne: autor de Ensayos, cuyo lema es ¿Qué sé yo? Respondido por un Nada con certeza.
  • Pierre Charron: autor de De la Sagesse.
  • Francisco Sánchez: autor de una obra latina titulada Quod Nihil Scitur.

b) Renacer del Pensamiento Agustiniano

En la Francia del siglo XVII se asiste a un renacer del pensamiento de San Agustín y con él de la llamada a la interioridad y a la introspección. Agustín había dicho: “Noli foras ire. In te ipsum redde. In interiori homine habitat veritas” (“No salgas fuera. Entra dentro de ti mismo. En el interior del hombre habita la verdad”, De Vera Religione, 39, 72). Efecto de esta interioridad agustiniana buscada en la Francia del siglo XVII es la doctrina cartesiana del yo como autoconciencia como resultado de la introspección. El corazón de la filosofía cartesiana es la autoconciencia, la comprensión del yo como autoconciencia. A la autoconciencia se llega suspendiendo la realidad exterior (o poniéndola entre paréntesis) para adentrarse en el abismo de la interioridad del alma.

c) Auge de las Matemáticas

Por otro lado, en esta época Francia se convierte en la patria de la mayor parte de los matemáticos de la Europa Moderna, entre los cuales seguramente el más destacado es el propio Descartes. Había un gusto generalizado por esta ciencia. Por ello fue cultivada por muchos pensadores: Viete, Fermat, Roberval. En realidad, el gusto por las matemáticas obedecía a una razón: la certeza, de la cual las matemáticas son la ciencia reina, era el antídoto del escepticismo. Además, la matemática no estudia cuerpos dados en la naturaleza, sino figuras y leyes ideales que solo se conocen en la perspectiva interior (o agustiniana) de la autoconciencia. Los entes matemáticos no existen en la naturaleza, solo existen en la mente del matemático. Respecto de este gusto de las matemáticas, en Descartes aparece el concepto de método more geometrico (o método al modo de la geometría) como aquel método racional que procede al modo de la geometría, ciencia que parte de axiomas y procede deductivamente hasta alcanzar juicios particulares. Este era, pues, el camino, el método racional para buscar la verdad y escapar del escepticismo.

21. El Árbol de la Ciencia, Según Descartes

Descartes en la carta-prefacio a Picot de la edición francesa de los Principios de Filosofía compara la ciencia, que es una sola ciencia, con un árbol. Dice así: “Hay una sola ciencia, aunque compuesta de diversas partes, del mismo modo que un árbol es único pero está compuesto de diversas partes”. En efecto, un árbol consta en lo esencial de tres partes:

a) Las Raíces: La Filosofía

En primer lugar, un árbol tiene unas raíces que le procuran el alimento y le dan sujeción al suelo. Pues bien, las raíces del árbol de la ciencia son la filosofía. Así, Descartes sugiere que la filosofía es la raíz de la que se nutre, intelectualmente hablando, la ciencia experimental. Pero la raíz de este árbol es triple: idea de mundo, idea del yo e idea de Dios.

b) El Tronco: La Física

El tronco del árbol, en segundo lugar, es la física. El tronco es la parte compacta y vigorosa de un árbol. Pues eso precisamente es para la ciencia la física entendida matemáticamente por Descartes.

c) Las Ramas: Las Ciencias Prácticas

Finalmente, como todo árbol, también el árbol de la ciencia tiene ramas, de las que nacen los frutos, que son aquello de lo que el hombre recibe provecho y utilidad, es decir, los frutos. Por eso, así como las partes anteriores (raíces y tronco) son de naturaleza teórica, y son por ello ciencias teóricas, las ramas del árbol de la ciencia son las diversas ciencias prácticas. Las principales ramas del árbol de la ciencia son las siguientes:

  • La Mecánica: que es la ciencia general del movimiento de los cuerpos inertes.
  • La Medicina: ciencia referida a la salud del cuerpo humano. Pues bien, para Descartes la medicina no es sino una aplicación de la mecánica al cuerpo humano como cuerpo vivo. Descartes creía, como hemos referido ya, que “por medio de esta nueva ciencia médica se conseguirá alejar indefinidamente la vejez y derrotar finalmente la muerte” (Discurso del Método, VI).
  • La Ética: finalmente, la última ciencia práctica (o mejor, la última parte práctica de la única ciencia humana), que es, según Descartes, una sabiduría que enseña a vivir de acuerdo con la virtud y de este modo alcanzar la felicidad. Descartes distingue en la ética dos momentos (no dos partes): un primer momento es la llamada ética provisional (literalmente, ética por provisión), carente aún de una completa fundamentación racional, consistente en una serie de reglas sencillas, pero útiles y necesarias para la vida; en segundo lugar, una ética definitiva, que Descartes empieza a desarrollar (tanto en la correspondencia con la reina Isabel de Bohemia y la reina Cristina de Suecia, así como en el Tratado de las Pasiones del Alma) pero que desafortunadamente quedará inconclusa.

22. Baruch Spinoza: Sus Principales Obras

  • Ethica More Geometrico Demonstrata (1653, publicada post mortem) (Ética demostrada al modo geométrico, es decir, al modo de las matemáticas). Se trata de una obra dominada por una orientación estoica (mejor, neo-estoica) que es característica de la filosofía de Spinoza. De ahí que Spinoza titule su principal obra de filosofía con el nombre de Ética (que es una parte de la filosofía). En breve, para Spinoza como para los estoicos la filosofía se reduce a la ética.
  • Tractatus de Emendatione Intellectus (1663) (Tratado sobre la corrección [o incluso, sobre la curación] del intelecto). En esta obra sostiene Spinoza que el intelecto de la mayor parte de los hombres está enfermo. Es ciego y por eso no ve. Por ello debe ser curado por una suerte de medicina que le devuelva la vista y la luz. Tal medicina es la filosofía. De su luz surge inevitablemente la felicidad.

Spinoza, por otro lado, fue expulsado de la sinagoga (por medio de un herem, es decir, el documento empleado habitualmente por los rabinos para poner en práctica la excomunión judaica) por haber sostenido que la Biblia no es palabra de Dios sino producto de la fantasía y del fanatismo de los profetas (nebi’im), unos pobres e ilusos visionarios hebreos. Por esta opinión los rabinos de la sinagoga de Ámsterdam dictaron un durísimo herem o documento de excomunión contra Spinoza. La tercera obra de Spinoza que se presenta aquí fue escrita precisamente en este contexto para justificar su posición teológica. Se sabe que inicialmente recibió el título en castellano antiguo de Apología para se justificar de la sua abdicación de la sinagoga. Posteriormente, modificada, Spinoza cambió el título por este otro: Tractatus Theologico-Politicus (Tratado teológico-político, publicado en 1670). La obra se caracteriza por sostener algunas tesis comunes con el deísmo teológico europeo y por sostener y por presentar una defensa y una justificación de la tolerancia religiosa, único camino, según Spinoza, de la paz en las sociedades divididas en diversas confesiones religiosas.