Porque los criollos estaban a favor del libre comercio

55- En 1788 ascendíó al trono de España, Carlos IV. Su reinado estuvo condicionado, desde el comienzo hasta el final, por el estallido, en 1789, de la Revolución Francesa y por los cambios y vaivenes políticos que, como consecuencia, se sucedieron en el país vecino. Las relaciones con la Francia de la Revolución atravesaron por tres fases: Entre 1789 y 1792, bajo la dirección del Conde de Floridablanca, se establecíó una política de neutralidad que rompía la tradicional alianza de los Pactos de Familia. El hecho de que, inicialmente, Luis XVI, emparentado con el monarca español, se mantuviese como monarca constitucional, y posteriormente, tras su detención, el intento de salvarle la vida, impidió la declaración de guerra.
En el interior de España, se llevó a cabo una política represiva para impedir el contagio de las ideas revolucionarias: se inspeccionaba la correspondencia, incautando todo lo que pudiera servir de propaganda revolucionaria; se censuraba la prensa prohibiendo publicar noticias de Francia y suprimiendo algunos medios; se prohibíó a los estudiantes salir al extranjero; se ejercíó un rígido control sobre extranjeros residentes o de paso; y se revitalizó la Inquisición como aparato represivo contra las nuevas ideas. Entre 1793 y 1795 se entró en guerra con Francia. La política española pasó a estar dirigida por Manuel Godoy, como primer ministro o Secretario de Estado, siendo éste el verdadero gobernante de España desde 1792 a 1808 (con un breve paréntesis de 1798 a 1800). Tras el intento fracasado de Godoy de salvar la vida a Luis XVI, que fue guillotinado, se desató la guerra con la Francia republicana de la Convencíón jacobina (dentro del conflicto general que enfrentó a ésta a la Primera Coalición). En España, la contienda fue presentada como una cruzada contra las fuerzas del mal, pero la inferioridad militar española, demostrada por la ocupación francesa de las vascongadas y el Norte de Cataluña, obligó a finalizar la guerra mediante la Paz de Basilea, en 1795, firmada con la República moderada de Termidor. Por esta Paz, Francia devolvía los territorios ocupados y España le cedía la parte española de la isla de Santo Domingo., Godoy recibiría el título de Príncipe de la Paz, al considerarle el monarca artífice de la misma. Entre 1796 y 1808, la política española se caracterizó por la alianza con la Francia revolucionaria. Godoy siguió siendo el principal impulsor de la misma. En 1796 se firmó el primer Tratado de San Ildefonso, con la república moderada del Directorio. Era una alianza militar ofensiva y defensiva que implicaba, fundamentalmente, el enfrentamiento con Inglaterra y su aliado Portugal, principales enemigos de Francia. En 1801, se renovaría esta alianza, ya con la Francia napoleónica. La rivalidad con Inglaterra tuvo para España graves consecuencias, como los ataques ingleses a barcos españoles en el comercio con América o, muy especialmente, la derrota.


56-Las causas de la guerra se producen dentro del proceso general de crisis del Antiguo Régimen, con el fin del reinado de Carlos IV y del gobierno de Godoy. Esta crisis se aceleró con la invasión de las tropas napoleónicas, en virtud del Tratado de Fontainebleau (1807) y las abdicaciones de Bayona de Carlos IV y Fernando VII, que dejaron el trono en manos de José Bonaparte. Mientras se desarrollaban esos hechos en Bayona, el pueblo de Madrid primero y luego en otros muchos puntos de España se levantan contra el invasor francés.-La guerra se planteó en varios escenarios: la guerrilla, la resistencia de las ciudades (“sitios”) y el ejército anglo-español. De modo genérico, se puede decir que entre los españoles hubo dos bandos: una minoría que formaba parte de los llamados “afrancesados” o colaboracionistas de los franceses, y una mayoría, que serían los “patriotas”, los cuales se opondrían a los franceses.-Desarrollo: los españoles vencerán a los franceses al inicio de la guerra en Bailén (1808); pero a partir de entonces las tropas francesas ocuparán casi toda la península (a excepción de Cádiz). Desde 1910 buena parte del ejército francés se desplazó a la campaña de Rusia, por lo que el ejército anglo-español, a partir de 1812 va a ir derrotando y expulsándolo de la península hasta hacerle firmar a Napoleón el Tratado de Valençay en 1813, que supónía el fin de la guerra y la vuelta a España de Fernando VII.


58- La revolución liberal, que se inició al mismo tiempo que la Guerra de la Independencia, contemplaba una convocatoria de cortes “generales y extraordinarias”, que finalmente se reunieron en Cádiz. Tras año y medio de discusión, se promulgó el 19 de Marzo de 1812, por eso se le conoce como “La Pepa”. Los diputados quisieron aunar la tradición española con el nuevo espíritu revolucionario liberal, ya que entre sus autores estas eran las sensibilidades que se advertían. Los principios de la constitución vinieron a ser los siguientes:1-Afirmación de la soberanía nacional: el poder residía en la nacíón.2-División de poderes: el poder legislativo correspondía a las Cortes, de una única Cámara; el poder ejecutivo quedaba en manos del rey y del gobierno por él designado; y el poder judicial era independiente.3-Elección de los representantes en las Cortes por sufragio universal masculino.4-Reconocimiento de los derechos y libertades individuales, así como la igualdad ante la ley. La constitución apenas pudo aplicarse debido al contexto de la guerra. La restauración absolutista de 1814 la abolíó. Pero su espíritu y programa fueron una referencia durante la mayor parte del Siglo XIX. Y se convirtió en un mito para el liberalismo universal y modelo para las revoluciones liberales.


59- El Sexenio Absolutista (1814 – 1820): A partir de 1814, derrotado Napoleón, se produce un contexto favorable al absolutismo y las monarquías europeas a través de la Santa Alianza se unen contra cualquier brote liberal. Tras el Tratado de Valençay (1813), Fernando VII regresó a España, pero no aceptó las reformas legislativas de Cádiz; restaura el absolutismo y depura y persigue a quienes participaron en la obra legislativa de Cádiz. Resultado de ello fue el primer exilio de la España contemporánea que afectó a afrancesados y a liberales. Finalmente, Fernando VII termino por decidirse y el 4 de Mayo de 1814 emite en Valencia un decreto por el que disolvía las Cortes, abolía la Constitución de 1812 y toda la labor legislativa de las Cortes de Cádiz y restablecía el absolutismo. El decreto de 4 de Mayo inicio un triste periodo caracterizado por la sistemática anulación de las reformas de las reformas de las Cortes gaditanas y la vuelta al antiguo régimen y al absolutismo. El Trienio Liberal (1820 – 1823): Entre 1814 y 1820 hubo hasta ocho pronunciamientos militares, aunque solo el de Riego en 1820 tuvo éxito. Tras el pronunciamiento de Riego, Fernando VII juró la Constitución de 1812, formó un gobierno integrado por destacados liberales y se recupera parte de la obra legislativa de Cádiz. Esta fase acaba con la intervención de la Santa Alianza a través del ejército francés llamado los Cien Mil Hijos de San Luis, los cuales invaden España y terminan restaurando a Fernando VII en el trono. Por primera vez, se aplicaba la Constitución de 1812 en una situación de paz y con el monarca en el país, Fernando VII, convencido absolutista, trató de obstruir desde un principio la labor de los gobiernos liberales y el normal funcionamiento constitucional. Esta actitud del rey va a provocar una fractura política que se extenderá durante década: los liberales en el poder durante el Trienio van a aplicar una política claramente anticlerical: expulsión de los jesuitas, abolición del diezmo, supresión de la Inquisición, desamortización de los bienes de las órdenes religiosas. Todas estas medidas trataban de debilitar a una poderosísima institución opuesta al desmantelamiento del Antiguo Régimen. El enfrentamiento con la iglesia será un elemento clave de la revolución liberal española. La década Ominosa (1823-1833): El mismo día en que Fernando VII fue liberado por los Cien Mil Hijos de San Luis promulgo un decreto por el que anulaba todo lo legislado durante el Trienio. El monarca pidió a Francia que se mantuvieron los Cien Mil Hijos de San Luis mientras se reorganizaban las fuerzas armadas. En torno a 22.000 soldados franceses se mantuvieron en nuestro país hasta 1828. Paralelamente, el régimen absolutista abordo la depuración de la administración, lo que llevo a la expulsión de miles de funcionarios, especialmente docentes.


60- El carlismo fue un movimiento político español de carácter tradicionalista y legitimista surgido, como oposición al liberalismo, en los últimos años del reinado de Fernando VII, en la primera mitad del Siglo XIX. Defendía los valores tradicionales del Antiguo Régimen y pretendía el establecimiento en el trono de una rama colateral de los Borbones, la representada inicialmente por el hermano de Fernando VII, el infante don Carlos, de ahí la denominación del movimiento. El origen está en el grupo de los apostólicos, los absolutistas o realistas más intransigentes y radicales, constituidos como oposición política a Fernando VII en la Década Absolutista ante las tímidas reformas emprendidas por éste y sus ministros, que incluían la moderación de la represión hacia los liberales. Los apostólicos encontraron un líder dotado de legitimidad dinástica en la persona del hermano del rey, el infante don Carlos María Isidro, que se consideraba legítimo heredero al trono, rechazando la legalidad de la Pragmática Sanción que anulaba la ley de sucesión de Felipe V y permitía reinar a la hija de Fernando VII, Isabel. El problema sucesorio acabaría de configurar el movimiento carlista que desencadenaría una cruenta Guerra Civil a la muerte de Fernando VII. Desde un punto de vista social, el carlismo estaba integrado, principalmente, por sectores de la nobleza, en especial de la baja nobleza rural, y del clero y apoyado por un importante número de pequeños propietarios y arrendatarios campesinos y artesanos del Norte del país que, con las reformas liberales (libertad de arrendamientos, desamortización de tierras comunales, supresión de gremios…), veían desaparecer su modo de vida tradicional.


61- 1788-1808: Reinado de Carlos I ;; 1808: levantamiento de Madrid y abdicaciones de bayona;; -1808-1814: Guerra de independencia y reinado de José Bonaparte;; 1810: Inicio de la independencia de la América española//1812: promulgación de la constitución de Cádiz ;; – 1814-1833: 1814-1820: sexenio absolutista y restauración absolutista de Fernando VII// 1820: pronunciamiento de Riego// 1820-23: trienio liberal// 1823: Invasión de los Cien Mil Hijos de San Luis// 1823-1833: década ominosa// 1830: Derogación de la Ley Sálica.


63- Como indica la leyenda del mapa, podemos explicar el proceso de independencia de las colonias americanas a partir de periodo de la Regencia (1810-1813), el Sexenio Absolutista (1814-1819), El Trienio Liberal (1820-1823) y la Década Ominosa (1823-1833). Durante la regencia Paraguay será la pionera en proclamar su independencia en 1811 durante el Sexenio Absolutista lo hará Argentina en 1816, Chile en 1818, y Colombia en 1819. En el periodo de Trienio Liberal es cuando más territorios alcanzarán la independencia prácticamente cada Centro América en 1821, es el caso de Honduras, Guatemala, Nicaragua, Costa Rica y El Salvador. También México y Perú en 1821. Brasil y Ecuador lo harán en 1822. Para finalizar en la década ominosa alcanzarán la independencia Venezuela en 1823, Bolivia en 1825 y Uruguay en 1828. 

Diversas causas explican el comienzo del movimiento independentista: 

-el creciente descontento de los criollos, descendientes de españoles nacidos en América, quien expresa su riqueza y cultura tenían Prohibido el acceso a los grandes cargos políticos en las colonias, reservados para los peninsulares. Esta burguésía criolla estaba impregnada de las ideas ilustradas y en ellas surgieron los proyectos de independencia.

-Las limitaciones al libre comercio el desarrollo económico de las colonias impuestas por el régimen colonial. Estas limitaciones perjudicaba económicamente a la burguésía criolla, sometida a fuertes impuestos y el control que España ejercía sobre el comercio. 

-La influencia de las ideas ilustradas y ejemplo de la independencia los Estados Unidos de América en 1776, fue crucial para mostrar que era posible independizarse de la metrópoli.

-El respaldo de Gran Bretaña a los movimientos secesionistas con el objetivo, que una fuesen independientes acceder al control del comercio de las nuevas naciones.

-La crisis política producida por la invasión napoleónica, que privó de legitimidad a las autoridades que presentaban la monarquía de José I en las colonias. A partir de 1808 en la guerra de independencia, los criollos optaron por no reconocer la autoridad de José Bonaparte y crearon juntas que a imitación de las españolas asumieron el poder en sus territorios.


64- Al finalizar el reinado de Fernando VII, el inmenso Imperio colonial española había quedado reducido a Cuba, Puerto Rico y Filipinas. La negativa consecuencia fueron, sobre todo, económica: Inglaterra y Estados Unidos sustituyeron a España en el control del mercado americano (fin del monopolio).

Importante reducción del comercio con América, afectando especialmente a zonas de España que orientaban gran parte de su producción a la exportación a las colonias, como Cataluña (vinos, aguardientes, textiles). Desaparición de las caudales de indias, remesas de plata y oro procedente del cobro de impuestos en América, una fuente fundamental de ingresos para la hacienda real, que quedó al borde de la quiebra.