Arquitectura Italiana del Siglo XVI: Bramante, Miguel Ángel y Palladio
La arquitectura italiana del siglo XVI estuvo influenciada por las iniciativas de los papas de Roma y destacan figuras como Bramante, Rafael y Miguel Ángel. La construcción de la Basílica de San Pedro en el Vaticano marcó esta época y definió la arquitectura de los siglos XVI y XVII. Durante el Clasicismo, se enfatizó el uso riguroso de los órdenes clásicos, se redujo la ornamentación y se dio mayor importancia a la proporción, la simetría y las plantas centralizadas con cúpula como símbolo divino. Además, se combinaron frontones triangulares y semicirculares. El Manierismo prefería la libertad, con una decoración extravagante para destacar la capacidad e inventiva de los arquitectos.
Donato Bramante (Urbino, 1442 – Roma, 1514)
Bramante fue un arquitecto destacado del Renacimiento italiano. En Milán, trabajó en proyectos como la Iglesia de Santa María de las Gracias y la reforma de la Iglesia de San Sátiro, mostrando su preferencia por el diseño de iglesias centralizadas con cúpula central. A los sesenta años, se trasladó a Roma, donde realizó dos proyectos importantes: el Templete de San Pietro in Montorio (inspirado en los tholos griegos, con 16 columnas dóricas, y financiado por los Reyes Católicos) y el inicio de la construcción de la Basílica de San Pedro. En Roma, se inspiró en las ruinas de la antigüedad, convirtiéndose en el creador del Clasicismo en arquitectura. Su estilo predominaba el orden toscano y evitaba concesiones ornamentales. Su proyecto más ambicioso fue la reconstrucción de la Basílica de San Pedro en el Vaticano. Bramante diseñó un edificio cuadrado con planta de cruz griega y una cúpula central, junto con cuatro cúpulas más pequeñas y pórticos clásicos en cada fachada. Otros arquitectos como Rafael y Miguel Ángel continuaron su trabajo, adaptándolo a sus propias visiones.
Miguel Ángel Buonarroti (Arezzo, 1475 – Roma, 1564)
Miguel Ángel Buonarroti fue un artista florentino que se destacó en arquitectura, escultura y pintura bajo la protección de la familia Médici en Florencia.
Trabajó para nueve Papas diferentes a lo largo de su vida. En arquitectura, Miguel Ángel adoptó elementos clásicos pero los distorsionó y colocó fuera de su contexto original, buscando ruptura y tensión en lugar de la armonía y proporción del clasicismo de Bramante. Sus obras más destacadas incluyen el Mausoleo de la familia Médici en la Iglesia de San Lorenzo en Florencia y la Biblioteca Laurenciana, donde su escalera crea una sensación de expansión y claustrofobia. En 1534, se trasladó a Roma y el Papa Pablo IV le encargó reformar la Plaza del Capitolio. Su contribución más importante en arquitectura fue en la Basílica de San Pedro, donde simplificó la planta original y construyó una imponente cúpula en el crucero. Aunque originalmente concebida como una cruz griega, la planta fue modificada más tarde a una cruz latina por el arquitecto Maderno, perdiendo así la visión directa de la cúpula desde la fachada principal.
Andrea di Pietro della Gondola, Palladio (Padua, 1508-Vicenza, 1580)
Palladio fue clave en adaptar las formas clásicas a las necesidades modernas. Destacó en arquitectura religiosa y civil.
Basílica de Vicenza (1549)
Reformó este edificio gótico con una fachada de dos pisos (dórico y jónico) y su característico “tramo rítmico palladiano”, con columnas gigantes y arcos de medio punto.
Villas en el Véneto
- Residenciales, como Villa Rotonda, con cúpula central y cuatro pórticos.
- Agrícolas, como Villa Barbaro, con zona residencial y alas funcionales (almacenes, establos…).
Teatro Olímpico (Vicenza)
Construido tras su éxito con teatros de madera. Es semicircular y decorado con una perspectiva fija que representa las calles de Tebas.
Arquitectura religiosa
En Venecia, usó plantas de cruz latina y fachadas con doble frontón. Destaca San Giorgio Maggiore.
Obra teórica
En 1570 publicó I Quattro Libri dell’Architettura, una obra fundamental en la arquitectura europea.
Escultura: Miguel Ángel
Miguel Ángel Buonarroti fue una figura clave tanto para el Clasicismo como para el Manierismo, aunque él mismo se consideraba sobre todo escultor y firmaba como “Miguel Ángel, escultor florentino”.
En su primera etapa, antes de estar protegido por los Médici, Miguel Ángel ya mostró su talento en Florencia con obras como el relieve Virgen de la Escalera, donde usó la técnica del schiacciato (un bajorrelieve muy fino y poco profundo que crea sensación de profundidad), y la escultura de Baco, que muestra su interés por el cuerpo humano y el movimiento.
Más adelante, ya bajo la protección de los Médici, su carrera despegó definitivamente. En toda su obra, Miguel Ángel buscaba el realismo, la emoción y el movimiento, usando el contrapposto para dar vida natural a las figuras. Destacaba la terribilitá, que expresa fuerza, intensidad y dramatismo en sus esculturas. Obras como el David o el Moisés transmiten ira, dureza y mucha expresividad, llenas de dinamismo.
Trabajaba principalmente en mármol, tallando bloques únicos, y su perfeccionismo le llevó a dejar muchas obras “inacabadas”, conocidas como non finito. Para Miguel Ángel, esto no era un fallo, sino una forma de mostrar el proceso artístico: la piedra que aún lucha por liberar la figura oculta, una idea que aparece especialmente en sus “variaciones sobre la Piedad“.
En su última etapa, esta forma de dejar las obras a medio acabar fue aún más evidente, y es una de las marcas de su madurez artística.
Recibió grandes encargos, como la decoración de la bóveda de la Capilla Sixtina y el diseño para la Basílica de San Pedro en Roma. También realizó obras importantes como los sepulcros de los Médici.
Otros escultores de la época, como Gianbologna con El rapto de las sabinas y Benvenuto Cellini con su Perseo, también fueron figuras destacadas del Renacimiento.
Arquitectura Española en el Siglo XVI: Del Plateresco a El Escorial
La arquitectura española del siglo XVI experimentó un desarrollo que puede resumirse de esta manera:
- Estilo Reyes Católicos o Isabelino: Transición del gótico al Plateresco.
- Estilo Plateresco (Reinado de Carlos I, 1520-1550).
- Estilo Romanista: Contemporáneo al estilo Plateresco.
- Estilo Purista (Reinado de Felipe II, segunda mitad del siglo XVI).
El Plateresco
El Plateresco surgió en España como una evolución del gótico final, y se caracterizó por su abundante ornamentación en las fachadas de los edificios. Esta ornamentación incluía columnas, medallones, escudos heráldicos y figuras fantásticas entrelazadas con elementos vegetales, conocidas como grutescos.
El interior de los edificios mantuvo la influencia del gótico, con arcos apuntados y bóvedas de crucería. Sin embargo, se empezaron a introducir elementos renacentistas en los patios interiores.
Salamanca era uno de los principales centros del Plateresco, con la Fachada de la Universidad, el Palacio de Monterrey y el Convento de San Esteban.
Otros edificios representativos de este estilo incluyen el Colegio de Santa Cruz en Valladolid, la Fachada de la Universidad de Alcalá de Henares, la Escalera Dorada de la Catedral de Burgos, el Palacio de la Calahorra en Granada y el Ayuntamiento de Sevilla.
Arquitectura Romanista
Este estilo floreció durante el reinado de Carlos V, coincidiendo con el Plateresco. Hace referencia a la pureza de la influencia italiana en estas construcciones, que abandonaron las formas góticas y la ornamentación plateresca, adoptando los modelos clásicos que estaban de moda en Italia en ese momento.
Diego de Siloé, uno de los principales exponentes de este estilo, fue el encargado de las obras de la Catedral de Granada, que bajo su dirección se transformó en un edificio renacentista. La planta de esta catedral combinaba elementos góticos.
Una característica distintiva fueron los pilares de proporciones brunelleschianas, coronados por un trozo de entablamento y pilares más pequeños encima para elevar su altura. De Siloé también inició la construcción de la Catedral de Málaga, donde se repitió el uso de los mismos pilares y se completaron las bóvedas vaídas.
La Arquitectura Purista
Este estilo se desarrolló durante el reinado de Felipe II. Se caracteriza por usar formas simples y sin adornos excesivos, como columnas y frisos básicos, con una decoración mínima.
La obra maestra de este estilo es el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, en Madrid, que también sirvió como biblioteca, palacio y panteón real.
El diseño de Herrera para El Escorial tuvo una influencia considerable en la arquitectura posterior de España.
Pedro Machuca, por su parte, diseñó el Palacio de Carlos V en la Alhambra de Granada, que se considera el edificio más renacentista de España.
Otros proyectos de Herrera incluyen la Catedral de Valladolid y la Lonja de Sevilla, aunque no tuvieron tanto impacto como El Escorial. Este estilo fue popular debido al ambiente de austeridad religiosa que prevalecía en Europa en ese momento.