Alienación e ideología en el materialismo histórico

Alienación e ideología

El trabajo se convierte en una actividad alienada y alienante, cuando los seres humanos producen objetos sobre los cuales ya no ejercen ningún control, ya no les pertenece porque le pertenece a quien haya pagado su salario. Además, el objeto producido se vuelve contra su creador. De este modo la actividad productiva se convierte en una actividad realizada bajo dominación. La humanidad, bajo explotación del trabajo asalariado aparece separada en dos partes: en primer lugar, el capitalista lo explota al apropiarse de la materia prima y de los medios de producción; pero en segundo lugar, lo explota como mercancía, considerándolo un mero apéndice de la maquinaria. Pero la alienación no sólo se da en el terreno de la actividad productiva. Además de la alienación económica, estructural, y radical, derivan de ella otras formas de alienación, como la social. La última fase de la alienación es la ideológica. La ideología es una forma de ver el mundo que satisface los intereses de los explotadores.

El materialismo dialéctico

Ha sido considerado tradicionalmente como la toma de posición filosófica de Marx y Engels frente al idealismo hegeliano. Se opone al idealismo. Considera que no existe más realidad fundamental que la materia, pero la materia es una realidad dinámica que contiene en sí la capacidad de su propio movimiento, como resultado de la lucha de los elementos contrarios. El materialismo dialéctico se opone a toda concepción mecanicista y atomista de la naturaleza. Las propiedades que el materialismo dialéctico atribuye a la materia derivan de su concepción de la misma como única realidad objetiva. Del análisis de la materia se desprende que es infinita, quiere decir que es eterna, increada e indestructible. Se distinguen cuatro formas de conciencia: la conciencia de sí, por la que accedemos al conocimiento de nuestro propio ser; la conciencia psicológica, por la que conocemos nuestra propia identidad y la diferenciamos de las demás; la conciencia de clase, por la que accedemos al conocimiento de los intereses del grupo social al que pertenecemos; y la conciencia social, que se forma en las sociedades humanas como una especie de trasfondo ideológico. El materialismo dialéctico nos propone una interpretación de la realidad concebida como un proceso material en el que se suceden una variedad infinita de fenómenos. LEYES

Materialismo histórico

El materialismo histórico se propone explicar la historia desde la producción práctica de la existencia, invirtiendo la relación entre la existencia real y la idea que los seres humanos se hacen de su existencia. La historia es el resultado del modo en que los seres humanos organizan la producción social de su existencia. La producción real de la vida se revela como algo protohistórico mientras que la historicidad se manifiesta como algo separado de la vida usual. Marx se ha centrado en el análisis de la actividad productiva del ser humano, ofreciendo como resultado sus obras más significativas como “El Capital”. Marx afirma que las relaciones de producción son independientes de la voluntad de los seres humanos, y el modo en que los seres humanos producen la vida material “condiciona el proceso social, político y espiritual de la vida” El modo de producción es el resultado de la síntesis de tres elementos estructurales: la estructura económica, la superestructura jurídico-política y la superestructura ideológica. Podemos distinguir una estructura con dos elementos constitutivos: las fuerzas productivas y las relaciones de producción, entre los que se pueden distinguir dos niveles: la superestructura jurídico-política y la superestructura ideológica. Ambas están condicionadas por la estructura económica de la sociedad.

Estructura económica

Por fuerzas productivas entiende Marx en primer lugar, la materia objeto de transformación de la que se espera obtener un producto. En segundo lugar, la actividad del trabajador, su capacidad de trabajo. En tercer lugar, los medios para realizar el trabajo necesarios para obtener los productos deseados. Los seres humanos entran en determinadas relaciones para llevar a cabo la producción de los bienes. Las relaciones técnicas de producción derivan de la relación entre el agente productivo y el control sobre los medios de trabajo. Las relaciones sociales de producción derivan de la clasificación que podemos establecer entre los agentes que participan en el proceso de producción.

Superestructura jurídico-política

La superestructura jurídico-política está formada por el conjunto de normas, leyes, instituciones y formas de poder político que, condicionadas por la estructura productiva, ordenan y controlan el funcionamiento de la actividad productiva de los ciudadanos. La superestructura jurídico-política e ideológica está condicionada por la estructura económica.

EXTRAÑAMIENTO: Circunstancia en la que vive toda persona que no es dueña de sí misma, ni es la responsable última de sus acciones y pensamientos. Para Marx es la condición en la que vive la clase oprimida en toda sociedad de explotación, en toda sociedad que admite la propiedad privada de los medios de producción. Cuando no se posee a sí mismo, cuando la actividad que realiza le anula, le hace salir de sí mismo y convertirse en otra cosa distinta a la que él mismo propiamente es, decimos que dicho sujeto está alienado; la alienación describe la existencia de una escisión dentro de un sujeto, de un no poseerse totalmente y, como consecuencia de ello, comportarse de un modo contrario a su propio ser. Según Marx en el sistema de producción capitalista el hombre se hace cosa, mercancía, usada por el propietario de los medios de producción sólo como un instrumento más en la cadena de producción de bienes. La propiedad privada convierte los medios y materiales de producción en fines en sí mismos a los que subordina al mismo hombre. La propiedad privada aliena al hombre porque no lo trata como fin en sí mismo, sino como mero medio o instrumento.

OBJETO DEL TRABAJO: En la sociedad industrial el trabajador no controla el producto de su trabajo. Lo producido se convierte en un objeto físico externo al productor que no le pertenece, algo extraño, ajeno a él, que se le enfrenta como un poder independiente. El producto se convierte en mercancía y el trabajo objetivado en él también por lo que el sujeto productor, el obrero, acaba convertido también en una cosa, mercancía.

ACTIVIDAD PRODUCTIVA: Producir es la actividad esencial del ser humano que distingue de otras especies animales. Producir significa transformar la naturaleza, modificarla de ahí que el trabajo sea el concepto fundamental para extender al ser humano en cuanto actividad productiva libre. El problema es que en el capitalismo la actividad productiva, transformadora del trabajador ya no le pertenece, sino que se convierte en propiedad de otro con lo que el trabajador ya no se afirma sino que se niega, se siente desgraciado, arruina su espíritu y mortifica su cuerpo. El trabajo solo es un medio para satisfacer sus necesidades fuera del trabajo.

TRABAJO: Es un proceso entre el hombre y la naturaleza en el que se apodera de los materiales para satisfacer sus necesidades transformando esta. Al hacerlo transforma su propia naturaleza desarrollando sus capacidades. Usa su voluntad orientada a un fin. Producir bienes es la actividad existencial esencial del ser humano en donde expresa su verdadera naturaleza cuando es una actividad productiva libre. El trabajo es la actividad existencial del hombre, su actividad libre y consciente en la cual se realiza el sujeto siempre que produzca de acuerdo a su voluntad y su conciencia y pueda desplegar su naturaleza social y el acto productivo rebase la necesidad de subsistencia. Esto no sucede en el modo de producción capitalista.