¿Qué significa “póngale lógica a lo que está haciendo”?

La lógica es la ciencia que se encarga de exponer las leyes, modos y formas del razonamiento. Se trata de una ciencia formal que no tiene contenido material, pero que se dedica al estudio de las formas válidas de inferencia. Es decir, trata del estudio de los métodos y principios utilizados para distinguir el razonamiento correcto del incorrecto.

En otras palabras, la lógica es:

• El conocimiento que tiene por objeto la enunciación de las leyes que rigen el pensamiento.
• El proceso del pensamiento humano para hacer las cosas con conocimiento y razonamiento propio.
• La capacidad del ser humano para discernir lo correcto y lo incorrecto en sus acciones.

Conceptos Clave: Lógica y Razón

¿Qué es la Lógica?

La lógica es un orden cronológico de ideas que tienen relación entre sí, poseen sentido y una estructura coherente.

¿Qué es la Razón?

La razón es la capacidad de establecer o descartar conceptos aprehendidos de la vida. Es decir, posee una función coherente en relación con otros conceptos.

La Sabiduría y su Vínculo con la Lógica

¿Por qué la lógica debe estar ligada a las personas sabias y no a las ignorantes?

“La verdadera sabiduría es reconocer tu propia ignorancia”, según el filósofo Sócrates.

“El conocimiento viene, la sabiduría se queda”, según el poeta Alfred Tennyson (1809-1892).

“El tonto se cree sabio, pero el sabio sabe que es tonto”, según el dramaturgo William Shakespeare.

Hay cientos de frases conocidas y desconocidas sobre esa preciada cualidad: la sabiduría. Pero, ¿existen realmente personas sabias o la sabiduría depende de la situación?

Y antes de eso, ¿qué es ser sabio?

“Algunos eruditos han conceptualizado la sabiduría como una característica, es decir, algo que tienes o no tienes y que no puedes realmente desarrollar mucho”, le dice a la BBC el psicólogo Igor Grossman.

“Por supuesto que no todos concuerdan con esa visión. Filosofías como el budismo indican que puedes desarrollarla con entrenamiento, pero ciertamente muchos —incluso mucha gente común— piensan que es idiosincrática”, añade.

Y, aunque efectivamente parecería que hay gente más sabia que otra, cuando un equipo de científicos de la Universidad de Waterloo, Inglaterra, dirigidos por Grossman, profundizaron en el tema, obtuvieron resultados intrigantes.

Fenómenos Cotidianos: ¿Por qué el agua moja?

La razón por la cual el agua moja se debe a la existencia de dos fuerzas:

• Fuerzas de cohesión: Son las fuerzas que mantienen unidas a las partículas de agua (H₂O).
• Fuerzas de adherencia: Son aquellas que se manifiestan cuando las moléculas de agua entran en contacto con otra superficie.

Cuando las fuerzas de cohesión son menores que las de adherencia, el líquido “moja” (como el agua); y lógicamente, cuando las fuerzas de cohesión son mayores, el líquido no mojará (como, por ejemplo, el mercurio).

La cohesión es la fuerza que mantiene unidas las partículas de un cuerpo. En los sólidos, la cohesión es mayor; y en los líquidos, menor. Asimismo, dentro de cada estado, las fuerzas varían. (Si un sólido tiene mucha cohesión, se dice que es duro; si no, es blando. Por ejemplo, el carbón grafito de las minas de lápices y cualquier metal. El metal no escribe y el lápiz sí, debido a este concepto).

Volviendo al agua, la cohesión existente entre sus partículas es muy baja. Debido a esto, cuando entra en contacto con otro cuerpo, sus moléculas quedan “pegadas” a esa superficie, produciendo el efecto que conocemos como “mojar”.

Filosofía de Vida: ¿Vives para comer o comes para vivir?

Si comes para vivir, estás cuidando tu salud porque estás pensando en elegir no solo lo sabroso, sino lo adecuado para consumirlo, buscando que los efectos del alimento se basen en beneficios para el cuerpo.

Si vives para comer, no estás cuidando tu salud, solo estás disfrutando de la comida, lo cual es una desventaja para mantenerte saludable y evitar enfermedades. Esto se debe a que las comidas sabrosas suelen ser las que tienen más azúcar y más grasas. Estos son nutrientes básicos y muy importantes que necesitamos a diario, pero es crucial tomar medidas sobre cuáles son los mejores y en qué porciones debemos consumirlos para no enfermar.

La Dinámica de la Vida: El “Sube y Baja” Existencial

¿Por qué no puedes decir hoy en día “todo lo que sube y baja”?

Dicen que lo que hoy es verdad, mañana puede llegar a ser una gran mentira. Y más que un juego de palabras, esa frase parece retratar la vida actual. Ese es, en el fondo, el “sube y baja” de la vida.

En la vida, todo es una escalera: se sube y se baja. Quienes van hacia arriba deben hacerlo peldaño a peldaño, teniendo en cuenta que solo pueden parar para tomar aliento. Y si por alguna razón es preciso bajar, hay que hacerlo con serenidad y dignidad para no resbalar.

Estamos hablando de una escalera sencilla, de esas que no son más que un par de palos unidos por bisagras y levantados con una docena de pedazos de madera.

Ha de saber, eso sí, que la estabilidad de su vida no radica en la clase de escalones que le corresponda subir; tampoco depende de su propio equilibrio.

En esta particular forma de ver la vida, la costumbre de subir y bajar peldaños siempre nos enseña algo importante: que uno no es ni más grande ni más pequeño que nadie.

A alguien orgulloso, por citar un ejemplo, la escalera de la vida le resulta difícil de entender. La razón: su forma soberbia de ver las cosas, con relativa frecuencia, le hace resbalar.

La clave está en entender que, a veces, estamos arriba y otras estamos abajo.

Porque toda esta historia no es solo un asunto de escalar hacia el éxito. El tema también tiene que ver con las cosas duras que nos pasan.

Por ejemplo, nadie se deshace de una costumbre malsana o de un vicio tirándolo de una vez por la ventana; hay que sacarlo por la escalera, peldaño a peldaño, y sobre todo con voluntad.

Eso sí, tenga claro que la vida le recompensará sus esfuerzos. Si hace lo que le corresponde y de una manera transparente, al final Dios le dará una bonificación especial.

Nadie se puede quedar esperando a que el éxito llegue a su encuentro y le cuelgue una medalla en su pecho.

Vaya hacia sus metas pagando las cuotas que se deben asumir para conseguirlas de una manera honrada.

Sepa que el éxito consiste en un deseo vehemente de triunfar, una actividad constante y, sobre todo, un saber aguardar para que, a su debido tiempo, sucedan las cosas. Y cuando ellas llegan es cuando uno, en verdad, alcanza la cima del cielo.

¡Salir a flote!

Uno no puede vivir con el ‘agua hasta el cuello’. Hay que sacar la cabeza y el cuerpo a la superficie para nadar y sobrevivir.

Se debe actuar y, para ello, debe convertir su mundo en algo más atractivo.