BLOQUE 11: El Régimen Franquista en España (1936-1975)
A. Grupos Ideológicos y Apoyos Sociales del Franquismo en su Etapa Inicial
La dictadura franquista (1936-1975) estuvo marcada por la personalidad de Franco, quien, tras dirigir el bando vencedor de la Guerra Civil, afianzó su poder. El franquismo evolucionó desde planteamientos fascistas a la autodenominada democracia orgánica, con la que se pretendió ocultar su verdadero carácter dictatorial.
El franquismo se asentó sobre unos principios ideológicos elementales y poco estructurados, procedentes de la Falange, del carlismo, de la Iglesia y de la tradición conservadora española.
Principios Ideológicos Fundamentales:
- Nacionalismo español: Concebía la patria como una comunidad racial, lingüística, religiosa e histórico-cultural (centralista).
- Nacionalcatolicismo: Expresión de la unión entre la Iglesia y el Estado; la jerarquía eclesiástica se integró en las instituciones del Estado.
- Imperialismo: Difusión de los principios espirituales del nacionalcatolicismo por el mundo.
- Anticomunismo y antiliberalismo: El comunismo estaba enfrentado con los valores cristianos y el liberalismo era una doctrina individualista importada.
- Régimen militarista: Además de algunos rasgos fascistas.
El régimen de Franco mantuvo su arraigo entre los grupos sociales que apoyaron a la España nacional de la Guerra Civil: la clase terrateniente y propietaria, los pequeños y medianos agricultores, militares, el clero y las clases medias urbanas, en general bastante despolitizadas. El franquismo intentó atraerse a la clase trabajadora a través de la Organización Sindical y su política social.
Contó con el apoyo de los falangistas a través de dos instituciones clave: la Sección Femenina y el Frente de Juventudes. También colaboraron los católicos, sobre todo al principio.
C. Organización Política del Estado Franquista
El franquismo constituyó un régimen político dictatorial que se institucionalizó a través de las Leyes Fundamentales del Reino, un conjunto de siete leyes promulgadas entre 1938 y 1967. España se configuró como un Estado con las siguientes características:
- Centralista: Significó la supresión de cualquier forma de autonomía y de la unidad lingüística.
- Confesional: La religión católica era la oficial.
- Social: El Estado intervenía para corregir desequilibrios.
- Tradicionalista: Pretendió una determinada interpretación de la historia de España.
España se definió como Reino, aunque el trono permaneció vacante, ya que la Jefatura del Estado se vinculó con carácter vitalicio a la persona de Franco, con derecho a nombrar a su sucesor a título de rey. Franco ostentó el supremo poder político y asumió las Jefaturas del Estado y del Gobierno, y se le facultó para designar al Jefe del Gobierno entre una terna de candidatos propuesta por los miembros del Consejo del Reino. La iniciativa legislativa correspondía al Jefe de Estado; las Cortes nunca fueron democráticas. El catolicismo se convirtió en la religión oficial del Estado y las relaciones entre la Iglesia y el Estado estuvieron reguladas por el Concordato de 1953. La jerarquía católica obtuvo el derecho a ocupar puestos relevantes en los órganos de consulta del Estado y recuperó el derecho de presentación de obispos.
Leyes Fundamentales del Reino (1938-1967):
- Fuero del Trabajo: Establecía los objetivos sociales y laborales del régimen.
- Ley Constitutiva de Cortes: Definía el establecimiento y funciones de las Cortes.
- Fuero de los Españoles: Declaración básica de derechos y deberes.
- Ley de Referéndum Nacional: Establecía el procedimiento de consulta popular.
- Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado: Determinaba la forma de Estado y la forma de sucesión.
- Principios del Movimiento Nacional: Recogía los principios ideológicos de la dictadura.
- Ley Orgánica del Estado: Síntesis y actualización de las leyes anteriores.
El sistema político recibió el nombre de democracia orgánica en la Ley Orgánica del Estado a partir de 1967, y concebía a la sociedad como una unión de entidades (familia, municipio y sindicato). Los sindicatos de clase fueron prohibidos y en su lugar se estableció la Organización Sindical, agrupando a empresarios y trabajadores. La afiliación sindical era obligatoria y los altos cargos sindicales eran designados por el Gobierno. El Movimiento Nacional actuó como partido único y Franco se mantuvo como su Jefe Nacional.
D. Causas de la Crisis Final del Franquismo desde 1973
Franco designó al frente del Gobierno al almirante Carrero Blanco, separando así los cargos de Jefe del Estado y de Presidente, previstos en la Ley Orgánica del Estado. El nuevo Presidente remodeló el Gabinete incorporando a figuras de su línea política inmovilista y favorable al continuismo del régimen. A partir de noviembre, la economía española sufrió los primeros efectos de la crisis del petróleo. En diciembre, Carrero Blanco fue asesinado por un comando de ETA (quinto presidente asesinado).
Arias Navarro, miembro de la línea inmovilista, fue designado por Franco en sustitución del Presidente asesinado. La alta inflación causada por la subida vertiginosa del precio afectó gravemente. Arias Navarro pronunció ante las Cortes un discurso en el que defendió una apertura controlada del régimen, conocido como el Espíritu del 12 de Febrero.
En julio de 1974 se creó la Junta Democrática, foro auspiciado por el PCE con la participación de CC.OO. Posteriormente, se fundó la Plataforma de Convergencia Democrática, que incluía al PSOE, UGT y PNV. Ambos grupos se decantaron hacia la ruptura democrática.
En septiembre de 1974, un atentado indiscriminado de ETA en una cafetería llevó al régimen a aprovechar la situación para desencadenar una secuencia de represión contra toda la oposición, lo que cerró cualquier atisbo de apertura. El Espíritu del 12 de Febrero se desvaneció definitivamente.
A finales de 1974 entró en vigor la Ley de Asociaciones Políticas, que permitía, con grandes restricciones y conservando lo esencial del régimen, la existencia de grupos políticos. Tras la muerte de Tejedor en un accidente de tráfico a los pocos meses de su nombramiento, fue sustituido por su joven y poco conocido colaborador Adolfo Suárez. Entró en vigor una dura Ley Antiterrorista, al tiempo que se mantenía la censura.
E. Evolución Política del Régimen Franquista y su Contexto Internacional
La política exterior española de los años 40 y hasta 1953 estuvo condicionada por los acontecimientos internacionales. En 1939, al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, España proclamó su neutralidad. En 1940, con los triunfos del Eje, cambió su condición a potencia no beligerante. En 1940, en la estación de Hendaya, se celebró una entrevista entre Hitler y Franco en la que se negociaron las condiciones de entrada de España en la contienda armada al lado del Eje.
España envió al frente oriental de Leningrado a la División Azul con el pretexto de la lucha contra el comunismo. Las victorias aliadas motivaron un nuevo cambio de la condición de España, que de nuevo pasó a ser potencia neutral. El fin de la guerra supuso un momento de aislamiento crítico para el franquismo. La comunidad internacional levantó un cerco en torno a España: Francia cerró la frontera y una resolución de la ONU aconsejó la retirada de los embajadores del territorio español. El régimen se mantuvo incomunicado, aunque no faltaron ayudas exteriores, como el envío de cereal argentino tras el protocolo Franco-Perón.
El comienzo de la Guerra Fría modificó el panorama internacional y el anticomunismo de Franco permitió el acercamiento de España al bloque occidental, marcando en 1953 el fin del aislamiento del régimen. Se firmó el Concordato con la Santa Sede y en 1953 España y Estados Unidos rubricaron el Convenio de Amistad y Cooperación, un acuerdo militar y económico por el cual se cedía a este país el uso de una serie de bases militares. En 1955, España ingresó en la ONU. España también renunció a su Protectorado sobre Marruecos en 1956, y el conflicto finalizó con la cesión del territorio de Ifni, que quedó definitivamente integrado en Marruecos.
La reivindicación de Gibraltar, la dependencia militar de Estados Unidos, la descolonización de Guinea Ecuatorial, y los intentos de adhesión a la Comunidad Económica Europea (CEE), suscitados desde ámbitos tecnócratas, fracasaron debido a la naturaleza dictatorial del franquismo.
F. Política Económica del Franquismo y Evolución Económica del País
La Autarquía (1939-1959)
En 1939, España era un país destruido. En 1940 se impulsó la cartilla de racionamiento para asegurar el reparto de los productos de primera necesidad, manteniéndose hasta 1952. El transporte se vio afectado por la falta de gasolina y la sequía aumentó las penurias. La autarquía fue la política económica seguida por los primeros gobiernos de Franco para reconstruir el país. Se prohibieron las inversiones extranjeras, se propició la explotación de los recursos propios para lograr la autosuficiencia y se practicó el intervencionismo sobre los precios.
Las medidas clave de la autarquía incluyeron la creación del INI (Instituto Nacional de Industria), el aprovechamiento de materias propias, la protección de la agricultura y la fijación de elevadas barreras arancelarias.
La autarquía NO consiguió ninguno de sus objetivos y no logró la autosuficiencia en ningún ámbito. El intervencionismo fomentó la existencia de un mercado negro conocido con el nombre de estraperlo.
El Plan de Estabilización y el Desarrollo (1959-1975)
Los políticos que habían accedido al poder, convencidos de la necesidad de un cambio en la política económica española, pusieron en marcha el Plan de Estabilización de 1959, que incluyó las siguientes medidas:
- Devaluación de la peseta.
- Reducción del gasto público.
- Liberalización parcial del comercio exterior.
- Reducción de trabas a las inversiones extranjeras.
Muchos de sus objetivos se lograron: la economía se liberalizó con el abandono de la autarquía y con la llegada de tecnología y de créditos extranjeros. Sin embargo, tuvo unos elevados costes sociales, en los que aumentó el paro y se acentuaron los desequilibrios entre la industria y el sector primario.
Los Planes de Desarrollo canalizaron el proceso de crecimiento. A partir de 1964, se establecieron planes cuatrienales con unas previsiones de crecimiento vinculantes para las empresas del sector público. El tercer plan no llegó a completarse.
Tres factores contribuyeron al desarrollo nacional:
- Turismo extranjero: Estimuló, mediante un efecto de arrastre, el fomento de sectores económicos como la construcción, la hostelería o el transporte, e introdujo nuevos hábitos culturales y formas de vida, lo que aportó una gran cantidad de divisas.
- Emigración: Entre 1960 y 1970, más de un millón de trabajadores se desplazaron a países de Europa desarrollada.
- Inversiones extranjeras: Sobre todo las norteamericanas. En la década de los setenta, España era el décimo país más industrializado del mundo. Sin embargo, carecía de tecnología, capital y fuentes de energía propias, y además persistía el atraso agrícola. La crisis del 73 frenó esta expansión.
G. Transformaciones de la Sociedad Española durante el Franquismo y sus Causas
Control Social y Represión
Las autoridades impusieron una estricta moral pública, basada en principios conservadores bajo la influencia de la Iglesia, que afectó a la familia, a la educación y a las costumbres. Se estableció una censura oficial en la prensa diaria y se suprimieron algunas fiestas populares. También hubo una proliferación de prácticas ilícitas como timos, extorsiones, fraudes y tráfico de influencias.
La represión afectó a miles de presos republicanos que fueron juzgados por tribunales militares y condenados a muerte. Un gran número de presos se emplearon como mano de obra forzada en la construcción de obras públicas, por ejemplo, el Valle de los Caídos.
Cambios Socioeconómicos
El desarrollo económico, basado en el gran auge de la industrialización y del turismo, implicó una transformación social de envergadura. Se estableció la sociedad del consumo, con el aumento de unas clases medias volcadas hacia la adquisición de vivienda propia y de bienes como electrodomésticos o coches, que mandaban a sus hijos a la universidad y comenzaban a disfrutar del ocio y del turismo.
El éxodo rural, la emigración masiva desde el campo hacia el medio urbano, fue un fenómeno destacado: hasta cuatro millones de españoles abandonaron el medio rural. El espontáneo crecimiento de las grandes urbes provocó una expansión urbana incontrolada, y mientras tanto, el interior del país padecía un intenso despoblamiento y envejecimiento.
H. Grupos de Oposición Política al Régimen Franquista y su Evolución
Primeros Años (Posguerra hasta los 50)
Tras la Guerra Civil, la oposición apenas se dejó sentir. La guerrilla antifranquista, integrada por los llamados maquis, permaneció emboscada en lugares poco accesibles. Sin armas pesadas, sus acciones no supusieron una verdadera amenaza y se prolongaron hasta mediados de la década de los años cincuenta. Muchos marcharon al exilio y, una vez terminada la guerra, las instituciones de la República se reorganizaron, con la reunión de los restos de las Cortes en México.
Se promovió el regreso de algunos intelectuales exiliados y la renovación de la universidad. Los estudiantes se manifestaron contra la rigidez del sistema y se produjeron algunos incidentes callejeros, lo que llevó a la destitución del ministro. Se reorganizó la oposición en el exilio y el PSOE dejó de ser la fuerza hegemónica de la izquierda, siendo sustituido por el PCE.
Ampliación de la Oposición (Años 60 y 70)
Durante estos años, la oposición se amplió, incluyendo:
- Reunión de Múnich (1962): Se produjo en Múnich el encuentro de representantes de la oposición del interior y del exterior para exigir una democracia.
- Partido Comunista de España (PCE): Desarrolló una importante actividad clandestina en el interior.
- Católicos: Influidos por el espíritu del Concilio Vaticano II, se distinguieron en labores de concienciación social, aglutinando a buena parte de la oposición.
- Sindicatos: Los sindicatos de clase organizaron huelgas y protestas, destacando la UGT y, posteriormente, CC.OO.
- Universitarios: Los estudiantes promovieron paros y manifestaciones. Aranguren fue expulsado de su cátedra y el Gobierno decretó el cierre de algunas facultades y medidas represivas para desactivar las protestas.
- Independentismo vasco: En 1959 nació ETA como una escisión del clandestino PNV y adoptó como estrategia principal el terrorismo.