Filosofía Helenística: Cínicos, Hedonismo y Estoicismo

Filosofía Helenística: Cínicos

Diógenes no es el fundador de los cínicos, pero resulta ser el más importante.

Rasgos Fundamentales

Oposición entre Naturaleza y Cultura

Rechazan lo convencional y artificial, para defender lo universal de la physis. Rechazan las instituciones sociales: el estado, la religión, etc.

La Autosuficiencia, Eutarquía

Para los cínicos, el objetivo final es vivir de acuerdo con la virtud, y solo eso depende la felicidad. La virtud puede enseñarse, y una vez aprendida no se olvida. Las pasiones y deseos han de ser controlados por los filósofos, que debe ser modelo de autodominio, sufrido y apático. Esto representa el ideal de autarkeia.

El Cosmopolitismo

Predican también la libertad radical del individual, que no debe someterse a otras normas que las de su propia naturaleza. En esto consiste la virtud, que no reconoce otra patria que el mundo entero. Las leyes particulares dividen al hombre y lo fragmentan. Todos somos integrantes de la physis, en virtud de esto predican el cosmopolitismo.

Hedonismo

La escuela hedonista fue creada por Epicuro. Epicuro compró una casa con un pequeño jardín (kepos). El “jardín” era más bien un huerto, donde convivían los miembros de esta escuela y elaboraban los escritos que luego compartían con el exterior. Una de las características fundamentales de la doctrina epicúrea es la de la subordinación de todo su sistema filosófico a conclusiones de carácter moral, que se encuentran recogidos en: La carta a Meneceo y las máximas capitales.

La Virtud como Placer

El hedonismo identifica la virtud como placer. Epicuro, en su carta a Meneceo, señala que el objetivo de la ética es buscar aquello que produce placer y evitar lo que nos conduce al dolor, porque el placer es el principio y el fin de una vida feliz.

La Distinción de los Placeres. El Camino hacia la Felicidad

El verdadero placer consiste en la ausencia de dolor en el cuerpo (aponía) y la carencia de perturbación en el alma (ataraxia). Para garantizar esto los distinguieron entre:

  1. Placeres Naturales y Necesarios: ligados con la conservación de la vida del individuo.
  2. Placeres Naturales pero no Necesarios: constituyen variaciones superfluas de los placeres naturales.
  3. Placeres no Naturales y no Necesarios: son todos aquellos placeres vinculados al deseo de riqueza, poderío, honores y cosas semejantes.

Estoicismo

El fundador de la escuela es Zanón de Citio, es casi coetáneo de Epicuro. Para los estoicos, como para los hedonistas, la filosofía es un camino hacia la felicidad. La función del filósofo es igual para una u otra escuela, así como la estructura de sus enseñanzas, sin embargo, las soluciones y tesis de ambas son divergentes y opuestas.

Tesis Fundamentales

a) El Cosmos es un Todo: se trata de un postulado básico que hay que asumir para edificar todo el sistema de la física y de la ética de esta escuela. Para ellos habitamos en un cosmos cuyos planes se identifican con un logos inmanente y divino, cuyo orden cuida, a través de la cadena indefectible de las causas y los efectos, de conducirlo por un rumbo predeterminado.

b) Concepción Intelectual de una Moral Autónoma. El Destino y el Amor Fati: el precepto fundamental y más amplio de la ética estoica es el de vivir en acuerdo razonable. Este precepto insiste en que el actuar del hombre debe quedar integrado en el curso del acontecer universal, y estar de acuerdo con la naturaleza humana. La razón es la guía segura de la actuación moral, y esta debe guiar al hombre hacia la realización y a la felicidad. El primer impulso de todo ser vivo es la preservación de su propia realidad, el segundo será el de aceptar los fenómenos acordes a la naturaleza y a rechazar las contrarias. Así, aceptando lo que el devenir le presenta, el estoico planta cara al destino y no reconoce la queja, ni temor al futuro ni el pesar por el pasado. Y los estoicos consideran que es inútil la protesta contra lo evidente. Por eso lo que Séneca denomina amor fati es uno de los rasgos más firmes y admirables de la conducta del sabio, inalterable en medio de las aparentes desgracias, inmune a los sufrimientos.

La Virtud

Para los estoicos, los bienes reales, lo bueno, lo malo, no residen en el ámbito natural sino en el ámbito propio de la actividad humana, que es el ámbito moral. El intelectualismo estoico prolonga el socrático y admite que existe una virtud única que es la phronesis (prudencia). Para ellos existen acciones preferibles, otras contrarias y otras indiferentes.