La España del siglo XVIII: Cambio dinástico y reformas en la organización del estado

10.2. La España del s. XVIII. Cambio dinástico. Los primeros Borbones.

En España, el ascenso de una nueva dinastía de origen francés trajo cambios importantes en la estructura del estado. Felipe V tuvo un largo reinado interrumpido por la abdicación en su hijo Luis I en 1724, pero éste murió obligando a su padre a volver al trono. Unificó la organización del estado mediante los Decretos de Nueva Planta y tuvo que hacer muchos esfuerzos para recuperar la marina de guerra. La nueva política exterior que desarrolló, bastante agresiva, fue debido a su matrimonio con Isabel de Farnesio, quien tenía una obsesión con tener reinos para sus hijos. Fernando VI inauguró una nueva época de neutralidad en la política exterior. Su secretario más importante fue el marqués de la Ensenada, quien puso en marcha un programa político que comprendía: 1) la reordenación de hacienda: planteó un estudio sobre la situación económica de los territorios (Catastro de Ensenada) que perseguía implantar un único impuesto, pero los privilegiados se opusieron. 2) un programa de construcción de barcos 3) crea la Academia de Medicina, el Observatorio Astronómico y realiza un mapa más exacto de España.

10.3. España en el siglo XVIII: Reformas en la organización del estado. Monarquía centralista

Felipe V había aceptado las leyes e instituciones de los reinos que había en España en ese momento, pero después de la guerra de sucesión y el levantamiento contra él de la Corona de Aragón, procede a su unificación por los Decretos de Nueva Planta, asimilando leyes e instituciones a las que poseía Castilla. País Vasco y Navarra mantienen sus instituciones y leyes por seguir siendo fieles a Felipe V durante la guerra. Las Cortes de Castilla y Aragón se unen y pierden ciertos privilegios. Ahora la unificación dinástica de los RRCC se convierte en política y administrativa. Madrid se convierte en el centro desde se gobierna España. Se introduce la Ley Sálica, de tradición francesa, según la cual las mujeres no pueden reinar, es decir, no optan a heredar el trono. La Ley Sálica sustituyó a las Leyes de Partidas en las que permitían reinar a las mujeres pero dando prioridad a los hombres. Los monarcas borbones establecen unas Cortes únicas y prescinden de los consejos, algunos de los cuales desaparecieron con la pérdida de territorios o de la unificación de Aragón. La nueva dinastía va a conseguir un saneamiento de la hacienda pública debido a la aplicación de algunas reformas y a la eliminación del gasto que suponían los territorios poseídos por los Austrias. En cuanto a la iglesia se intentó una política de control o regalismo que se redujo a la expulsión de los jesuitas.

10.4. Práctica del despotismo ilustrado: Carlos III.

El despotismo ilustrado era una práctica política cuya finalidad era introducir reformas destinadas a fortalecer el poder del estado mediante una administración más racional, centralizada y eficaz, y el objetivo que se perseguía era mejorar las condiciones de vida del pueblo. El rey Carlos III, junto con sus ministros Campomanes y Aranda, fueron quienes mejor representaron el despotismo en España. De las medidas adoptadas destacan: 1) la autorización del libre comercio con América. 2) la industria se estimuló mediante la creación de fábricas reales de artículos de lujo para evitar que vinieran de otros países, ya que eran productos con un valor muy elevado. 3) se encarga a Jovellanos “El informe sobre la ley agraria“, sobre la situación de la agricultura, sus problemas y posibles soluciones en el que se hacía énfasis en la mala distribución de la tierra y en el problema de la amortización o de las “manos muertas.” El informe fue publicado e ignorado debido al estallido de la Revolución Francesa. Se creó la Sociedad Económica de Amigos del País que sirvió para mejorar las prácticas agrícolas. 4) se hizo bastante énfasis en la educación, considerada por los ilustrados como el motor del progreso. Se crearon Reales Academias, museos y centros de investigación.



10.5. Evolución de la política exterior en Europa.

Tras la Paz de Utrecht, España perdió sus territorios europeos (Países Bajos e Italia), ahora su centro de interés estaba en América. Se produjo un acercamiento con Francia, primero porque en ambos países reinaba la misma monarquía y segundo porque ambos países tenían como rival a Gran Bretaña, que quería expandirse a costa de estos países. Este acercamiento, alianza, quedó plasmada en los Pactos de Familia que fueron firmados en 1733, 1743, 1761, por los cuales España participó en el conflicto entre Gran Bretaña y sus colonias americanas, apoyadas por España. Debido a la guerra de coalición 1793-95 por la que se intentaba acabar con la Francia revolucionaria y devolver el trono a los Borbones, la alianza entre España y Francia se suspende. Pero tras la Paz de Basilea, España vuelve a su alianza con Francia, que se encuentra ahora gobernada por Napoleón Bonaparte (primer Tratado de San Ildefonso 1796, segundo 1800). La consecuencia fue el desastre de Trafalgar (1805) y la destrucción de la flota franco española a manos de los británicos, esto tuvo sus consecuencias. Debido a que España no puede controlar el monopolio comercial americano, Gran Bretaña comienza su contrabando a gran escala; Napoleón, sin flota, no puede aspirar a derrotar a Gran Bretaña y emprende el bloqueo continental. En 1807 se firma el Tratado de Fontainebleau por el cual España se adhiere al bloqueo y permite la entrada de tropas francesas para la ocupación de Portugal, aliada de Gran Bretaña.

10.6. Política borbónica en América.

La nueva dinastía borbónica impuso cambios administrativos en América, con el fin de controlar las colonias y obtener de ellas un mejor rendimiento económico. El Consejo de Indias fue perdiendo competencias, al igual que la Casa de Contratación que se disolvió en 1790. Se añadieron dos virreinatos más: Nueva Granada y Río de la Plata, a los ya existentes Nueva España y Perú. Se adoptaron medidas económicas como la creación de compañías comerciales, como la Compañía Guipuzcoana de Caracas. En 1735 se suprimió el sistema de flotas y galeones por el sistema de registros. Los decretos de 1765 y 1778 autorizaron el libre comercio suprimiendo el monopolio de Cádiz, el comercio con América aumentó como consecuencia de esto, pero el mercado era excesivo para la industria peninsular, por lo que la mayoría de las manufacturas enviadas a América eran extranjeras y el volumen de contrabando era mayor al comercio legal.

10.7. La Ilustración en España.

La Ilustración llega a España de la mano del rey Carlos III, anteriormente rey de Nápoles, a mediados del siglo XVIII. Carlos III se va a encontrar con muchos obstáculos para introducir las ideas ilustradas, ya que la universidad estaba en manos de personas que defendían la antigua enseñanza de teología y derecho canónico y rechazaban la introducción de nuevas disciplinas que podían serle más útiles a la sociedad. Por esta razón se crean academias reales (historia, lengua, arte), colegios, museos y centros de investigación. Gracias a esto, se publican tratados sobre todas las disciplinas. La Inquisición pierde influencia, pero no desaparece. Los escritores y pensadores españoles imitan a los franceses, critican las instituciones del antiguo régimen, consideran la razón como fuente de progreso y defienden el liberalismo. Como ejemplos de la Ilustración podemos nombrar a Feijoo, Moratín, Cadalso, Jovellanos, entre otros.