La fallida revolución industrial

Las condiciones de vida de la clase obrera eran muy duras (más de 12 horas de trabajo, mal remuneradas, sin higiene, sin estado de bienestar social…). Se produjo el éxodo rural, bandolerismo y ocupación violenta de tierras. Hasta 1868 el movimiento obrero se centra en Cataluña con episodios de ludismo y en Andalucía con la ocupación de tierras. En el Sexenio se reconocíó la libertad de asociación. En 1868 Bakunin envía a España un representante de la corriente anarquista Giuseppe Farnelli para que organice la Asociación española AIT, en Madrid y Barcelona. En 1871 llegó Paúl Lafarge con la intención de reconducir a los obreros hacia el marxismo. Creó en Madrid la Nueva Federación Madrileña a la que pertenecíó Pablo Iglesias. Hay un predominio de el anarquismo en el movimiento obrero. Desde 1881 la represión se relajó y se legalizan las asociaciones en 1887. Hay asociaciones anarquistas, socialistas y organizaciones católicas. Los anarquistas son mayoritarios, sus principales focos son el campo andaluz y en el proletariado catalán. Rechazan toda acción política por vía parlamentaria y adoptan la propuesta de Kropotkin partidario de la violencia terrorista por la cual fue asesinado Cánovas. En 1879 madrileños y Pablo Iglesias fundan el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), aspiraban a la abolición de clases, la transformación de la propiedad privada en colectiva… En 1888 se creó la Uníón General de Trabajadores (UGT). En 1889 se fundó la 2º internacional donde sólo había marxistas. El 4 de Mayo 1890 se convocaron manifestaciones y mítines. Se despidió a 5 mineros lo que desencadenó una huelga por la jornada de 13 horas, la obligación de albergarse en barracones y el Truck System. Se logró 10 horas de jornada, la libertad de residencia y el fin de Truck System. En 1864 el jesuita Antonio Vicent fundó el primer círculo católico  de obreros en Manresa, es el precedente de los sindicatos católicos , eran una especie de casinos para apartar a los obreros de la taberna. En 1891 la publicación por el Papa León XIII de la Encíclica Rerum Novarum impulsó las organizaciones católicas. En 1895 se constituyó en Madrid el Consejo Nacional de las corporaciones católico obreras. A la muerte de Alfonso XII María Cristina asume la Regencia y se produce el Pacto del Pardo por el cual se mantiene el bipartidismo. Entre 1885-1890 gobiernan los liberales y se le conoce como Parlamento largo. En 1887 se publica la ley de Asociaciones que legaliza las asociaciones obreras y en 1890 se aprueba la ley del sufragio. En 1903 se crea el Instituto de reformas sociales que después se llamará Ministerio de trabajo. 



8.2 La revolución industrial en la España del siglo XIX. El sistema de comunicaciones: el ferrocarril.
Proteccionismo y librecambismo. La aparición de la banca moderna.
En todos los países avanzados de Europa la Revolución Industrial requirió como condición la revolución agrícola que en España no se produjo porque los excedentes eran insuficientes para generar riqueza, además en el Siglo XIX sigue habiendo crisis de subsistencia. La transferencia de la población de la agricultura a la industria fue insignificante, la agricultura no se mecaniza y la industrialización es muy escasa. Cataluña fue la única zona donde la industrialización se originó a partir de capitales autóctonos, siendo el sector más dinámico el algodonero que obtuvo la protección arancelaria y orientó su producción al mercado nacional.
El sector lanero paso a un segundo plano y se trasladó a Barcelona porque favorecía el desarrollo comercial y crediticio de Barcelona. L industria siderometalúrgica necesitaba para desarrollarse yacimientos de hierro y carbón. Esta industria no tenía demanda porque no hay ni desarrollo industrial, ni agrario ni en los transportes. En un primera etapa hasta 1860 se sitúa en Málaga donde había yacimientos de hierro y usaron carbón vegetal pero el procedimiento era muy caro y se agotaron los yacimientos. La segunda etapa 1860-1880 transcurre en la cuevas carbóníferas de Mieres y Langreo y la tercera etapa a partir de 1880 se desarrolla en Vizcaya, era pocas empresas que se fusionan y crean los altos hornos de Vizcaya. En la minería tenemos reservas de hierro, plomo, cobre… y los yacimiento en zonas portuarias. Será unos de los sectores más activos de la economía social. La impulsó la ley de bases sobre minas en 1868 que simplifican la adjudicación de concesiones y ofrecía segundades a los concesionarios. En cuanto a la energía se utilizaba la humana, animal, hidráulica y eólica. Y como combustible doméstico la leña. El consumo de carbón se impulsó por el ferrocarril, la navegación a vapor y la industrialización. El proceso de industrialización en España no se detuvo durante el Siglo XIX pero evoluciónó a un ritmo muy lento. El fracaso se debe a la escasa producción de manufacturas tradicionales, la inexistencia de un mercado nacional con buenas comunicaciones y unificado. Hay una escasez de capitales ya que se prefirió la compra de tierras desamortizadas a crear industrias. Se prefirió vivir de las rentas, aunque no se mejoró la agricultura por lo que no se generan beneficios para invertirlos en la industria. Esta baja industria llevó a los políticos a llevar a cabo una política proteccionista. En las comunicaciones España se encontraba en una clara desventaja en cuanto a las condiciones de transporte y que la peculiar geografía supónía una dificultad añadida. 

El transporte marítimo en el Siglo XIX asistíó a la mejora de los puertos y de la navegación, aunque en España hay poco puertos naturales. Sobresalen los de Barcelona y Bilbao. Hasta 1860 los barcos eran de vela hasta que se les empezó a aplicar el motor de vapor. La auténtica revolución de los transportes terrestres fue con el ferrocarril. Su desarrollo vino con la Ley de ferrocarriles en 1855, con ella se pretendía imitar el ejemplo de países europeos que ya lo tenían desarrollado. La ley de 1855 también estuvo conectada con la Ley de baldíos y la de sociedades de crédito que facilitaban la financiación del ferrocarril. La ley propició la creación de sociedades anónimas para dar subvenciones y permitir la importación de material ferroviario. Con todo esto hubo un rápido ritmo de construcción porque afluyeron capitales, vino tecnología y material extranjero. Fue un impulso hasta la crisis de 1866. El último impulso constructor comenzó en 1876, que coincidíó con el desarrollo de la minería y conectó las zonas mineras con el resto del país.El ferrocarril fue un medio de comunicación muy importante, pero se construyó muy rápido y se otorgó a compañías extranjeras la importación del material, no estimulando la siderurgia nacional. No había ni mercancías ni personas que trasladar por lo que las compañías no recuperan lo invertido, quebraron y arrastraron a la quiebra a bancos y sociedades de créditos. El comercio se centraba en las colonias americanas. Desde 1824 las exportaciones caen y la balanza comercial española va a ser deficitaria ya que exportamos materias primas y productos semielaborados e importamos manufacturas. En España todos los gobiernos proteccionistas sobretodo del algodón catalán, cereal castellano y siderurgia vasca. La política española fue muy proteccionista en los aranceles de 1826, 1841 y 1849. Una política casi librecambista la llevó a cabo en 1869 el ministro de Hacienda Figueroa, bajo las tarifas de aranceles y se podía importar y exportar todo pero con la Restauración se volvíó al proteccionismo. Hasta los años 30 del Siglo XIX circulaban es España monedas de distintas épocas y regiones, a parte de abundantes monedas extranjeras. En 1869 aparece la moneda para todo el territorio nacional; la peseta. El primer Banco Nacional se llamó San Carlos pero en 1829 quebró y se sutituyó por el de San Fernando cuya función era prestar dinero al Estado. En el reinado de Isabel II se fundaron el banco de Isabel II y el Banco de Barcelona. El primero organizaba las finanzas del Estado en competencia con el de San Fernando. En 1856 se crea el Banco de España. En la década de los años 50 y relacionada con la ley de ferrocarriles hubo una serie de leyes bancarias que propiciaron la aparición de bancos y sociedades de créditos. Un segundo empuje a la banca fue en 1898 con la repatriación de capitales de las colonias ya que se fundó el Banco hispanoamericano