Contexto Histórico de Santo Tomás de Aquino
La caída del Imperio Romano y la expansión del cristianismo dieron lugar a una época histórica nueva: la Edad Media. Los pueblos bárbaros asolaron Europa después de la caída del Imperio Romano, y con ello, la cultura, el derecho, las obras de arte y los avances científicos desaparecieron a su vez. El cristianismo pasó de ser una religión perseguida a expandirse por todo el imperio y convertirse en la religión oficial.
Debido a la desaparición del poder político romano, la Iglesia asumió el papel organizador de la vida social. Los nuevos reyes bárbaros se convirtieron al cristianismo y, como resultado, toda Europa fue cristiana. Con el cambio de milenio, Europa fue recuperándose de esos años de crisis. Las condiciones de vida mejoraron y la cultura se reactivó.
El Orden Social y Político Medieval
El feudalismo y la Iglesia habían conseguido instaurar un orden social que, aunque imperfecto, proporcionaba cierta estabilidad. Europa estaba dividida en feudos que se aliaban y luchaban entre sí. Poco a poco, fueron surgiendo las monarquías, cada vez más poderosas:
- Francia (con Carlomagno)
- Inglaterra
- España
- Alemania
Este fortalecimiento de los reinos cristianos supuso un freno para los conquistadores musulmanes. El sistema feudal permitió un orden que generó riqueza y reactivó el comercio en Europa y también con Oriente Medio.
La Sociedad Teocéntrica
Europa era una sociedad teocéntrica, y el cristianismo se convirtió en un elemento cultural de unión de todos los pueblos. La estructura social también estaba marcada por el cristianismo. Los obispos ocupaban puestos importantes y el Papa era un rey más, con su ejército, su corte y su reino.
Las manifestaciones artísticas también se vieron afectadas. El ser humano no se veía solo en su dimensión terrenal, sino como un ser destinado a la vida eterna. La ciencia y las artes estaban orientadas a la finalidad del hombre: la moral, la realización de lo humano en Dios, más allá de esta vida.
El Resurgimiento Urbano y las Universidades
Después de una primera época rural, gracias al fortalecimiento del comercio en manos de los burgueses (habitantes de los burgos), fueron apareciendo las ciudades como centros de poder. Como símbolo de la unión del desarrollo económico y la cultura religiosa, aparece la figura del obispo, que también encarnaba esta mezcla de poder entre lo religioso y lo civil. Estos crearon a su alrededor cortes, que serían centros culturales importantes.
Las Escuelas Catedralicias
En estas cortes surgieron las *escuelas catedralicias*, donde se fijaba y enseñaba la doctrina católica. Hasta el siglo XI, los conventos habían sido los encargados de preservar el conocimiento, pero ahora el saber pasó también a las bibliotecas de las escuelas catedralicias. En el siglo XIII, estas escuelas darían lugar a las universidades para el desarrollo intelectual en todos los campos. Se enseñaba el trivium y el quadrivium. Los alumnos no disponían de libros propios y, por ello, las bibliotecas eran fundamentales. Destacan las universidades de:
- La Sorbona (París)
- Oxford
- Bolonia
- Salamanca
Contexto Filosófico: La Tradición y la Novedad
San Agustín y la Patrística
San Agustín de Hipona fue un cristiano converso que, después de una larga búsqueda, acabó en el neoplatonismo y el cristianismo. Es el principal representante de la Patrística. Para él, fe y razón no eran incompatibles, sino dos modos de buscar la verdad. Sin embargo, la razón debía estar subordinada a la fe. El ser humano tiene la capacidad para razonar correctamente si lo hace desde la fe. A esto se le llama la Teoría de la Iluminación.
También es importante su concepto de la creación del mundo por parte de Dios, frente a la concepción cíclica griega. Por lo tanto, hay un comienzo de una historia lineal que tiene un sentido trascendente. Además, al existir este sentido, el hombre, como es libre, puede elegir si realiza los mandatos de Dios o si se aleja de él.
El Problema del Mal
San Agustín se preguntaba por el problema del mal en el mundo, que parecía incompatible con un Dios bueno y omnipotente como el cristiano. Para San Agustín, es el hombre quien decide desequilibrar el mundo por egoísmo y, por lo tanto, introducir el mal. La libertad es un postulado fundamental para la existencia de Dios.
La Alta Escolástica y San Anselmo
Podríamos citar también a otros pensadores importantes que podemos situar en la antigua escolástica, como Isidoro de Sevilla y Juan Escoto, pero la figura más relevante de esta época es San Anselmo. Es conocido sobre todo por su Argumento Ontológico sobre la existencia de Dios.
La idea de Dios es la de un ser que tiene todas las perfecciones, y la existencia debería ser una perfección; luego, Dios debe existir, ya que es más perfecto existir que no existir. Este argumento es a priori y se construye analizando la idea de Dios, inspirado en la tradición de Platón y Agustín.
La Influencia de Aristóteles y Averroes
En último lugar, hay que comentar la influencia que tuvo en Santo Tomás el pensamiento de Averroes, ya que sus comentarios a Aristóteles, que llegaron a Europa a través de la Escuela de Traductores de Toledo, revolucionaron la filosofía de la época. Fue fundamental para la Escolástica rescatar la obra de Aristóteles, que había estado olvidada en la Europa occidental. Sin este pensador (Aristóteles), no hubiera sido posible el pensamiento del Aquinate.