Poesía Española de Principios del Siglo XX: Modernismo y Generación del 98

Poesía de principios de siglo: Principales movimientos poéticos

La poesía de principios del siglo XX se caracteriza por la irrupción del Modernismo, con su oposición a la estética anterior y su afán por la innovación artística, y por la Generación del 98, que muestra un profundo interés por los problemas de España.

El Modernismo

Concepto y raíces histórico-sociales

Desde finales del siglo XIX, se llama modernistas a los poetas que buscan renovar el panorama literario. Se oponen al Realismo y a la poesía prosaica decimonónica y toman como modelo a precursores como Bécquer y Rosalía de Castro. El Modernismo literario surge en Hispanoamérica con figuras clave como José Martí y, fundamentalmente, Rubén Darío.

Rubén Darío fue quien le dio sus rasgos definitivos y lo hizo triunfar en España. A él se le unieron nombres importantísimos como Valle-Inclán, Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez.

En su esencia, el Modernismo es un profundo desacuerdo con la vida burguesa y materialista, manifestándose a menudo como una forma de rebeldía espiritual y artística.

Raíces literarias

El Modernismo tiene dos grandes raíces en la literatura europea: el Romanticismo y la poesía francesa de su tiempo.

  • El parnasianismo: Su lema fundamental es «el arte por el arte», es decir, la búsqueda de la perfección formal y la belleza por encima de todo. Sus temas predilectos son los mitológicos, los medievales y los ambientes exóticos.
  • El simbolismo: Busca ir más allá de la realidad aparente para encontrar su significado profundo y oculto, aquello que no vemos. Para ello, recurre a los símbolos. Por ejemplo, el atardecer puede simbolizar la melancolía o la muerte, y el agua, el fluir de la vida.

Temática del Modernismo

Los temas modernistas se pueden clasificar en dos grandes bloques:

  • La literatura de los sentidos: Centrada en la búsqueda de la belleza y el goce sensorial.
  • La literatura de la intimidad: Enfocada en la expresión de los sentimientos más profundos del poeta.

Vinculados con estos bloques, encontramos temas recurrentes:

  • La crisis espiritual y la desazón romántica: Sensación de soledad, melancolía, tristeza y angustia existencial.
  • Evasión o escapismo: Inmerso en una realidad que no le gusta, el poeta manifiesta su disconformidad huyendo a mundos exóticos (orientales, clásicos) o a épocas pasadas.
  • Cosmopolitismo: Como consecuencia de esa necesidad de evasión, se muestra un gran interés por otras culturas y ciudades, especialmente París, símbolo de la bohemia y el arte.
  • Sentimiento amoroso (amor y erotismo): El amor se presenta con dos polos opuestos: desde el amor idealizado e imposible hasta la búsqueda del placer carnal y el erotismo.
  • Búsqueda de las raíces: Se exploran tanto los temas americanos, recuperando el pasado precolombino, como los temas hispánicos, con un sentimiento de solidaridad de los pueblos hispanos frente al imperialismo de Estados Unidos.

El estilo: Renovación del lenguaje poético y la versificación

El esteticismo, que se caracteriza por una búsqueda incesante de la belleza, es una literatura de los sentidos. Sus rasgos estilísticos son:

  • Intento de reflejar con la palabra valores sensoriales (visuales, auditivos, olfativos, táctiles).
  • Abundancia de recursos fónicos (aliteraciones, paronomasias) para conseguir una gran musicalidad.
  • Enriquecimiento del lenguaje mediante el uso de cultismos, neologismos y un vocabulario exótico.
  • Adjetivación abundante, colorista y sorprendente.
  • Utilización de sinestesias (mezcla de sensaciones de distintos sentidos, como «verso azul» o «sonoro verdor»).
  • Creación de metáforas e imágenes originales y audaces.

En cuanto a la métrica:

  • El verso preferido es el alejandrino (14 sílabas), aunque también se recuperan y renuevan otros metros.
  • Se adaptan al castellano formas métricas francesas.
  • Uso de efectos rítmicos especiales mediante la acentuación para crear musicalidad.

Evolución del Modernismo

En una primera etapa, domina el preciosismo formal y el culto a la belleza sensible. Posteriormente, se intensifica la poesía intimista y la exploración de los temas americanos y existenciales.

Plenitud modernista: Rubén Darío

Su verdadero nombre era Félix Rubén García Sarmiento. Sus viajes a Chile, París y España fueron experiencias vitales y decisivas en su formación. Su estilo destaca por la búsqueda de la belleza y la precisión en la utilización de un léxico rico y variado.

Obras fundamentales

  • Azul… (1888): Compuesto por poemas y cuentos, es considerado el libro inaugural del Modernismo hispanoamericano.
  • Prosas profanas (1896): Supone el triunfo de la nueva estética y es, para muchos, su libro más brillante y exuberante. A esta obra pertenece el célebre poema «Sonatina».
  • Cantos de vida y esperanza (1905): Muestra al poeta en su madurez vital y literaria, con temas más profundos como la angustia ante la muerte, el paso del tiempo y las preocupaciones existenciales.

En sus últimas obras, continuó el camino abierto por Cantos de vida y esperanza, combinando la preocupación existencial con la perfección formal de raíz parnasiana.

El Modernismo en España

Entre sus representantes destacan Salvador Rueda y, sobre todo, Manuel Machado. El Modernismo español presenta peculiaridades: es menos exuberante (con menos princesas y cisnes), predomina el intimismo, tiene menos sonoridades y escasa influencia del parnasianismo. Se centra más en el simbolismo y en la influencia de Bécquer.

La Generación del 98

Concepto y rasgos generacionales

El término fue acuñado por Azorín. Esta generación está formada por autores como Unamuno, el propio Azorín, Baroja y Maeztu, quienes compartían un espíritu de protesta y un profundo amor por el arte.

  • A raíz del Desastre del 98 (la pérdida de las últimas colonias), surge una profunda necesidad de cambio. De aquí nace el «Grupo de los Tres» (Azorín, Baroja y Maeztu), que redacta un manifiesto denunciando la situación del país. Esta preocupación por España invade también a otros autores como Unamuno.
  • Todos comparten el deseo de la regeneración política y social de España, un nuevo interés por el paisaje castellano como símbolo del alma nacional y la búsqueda de un nuevo estilo literario.
  • Frente al objetivismo del Realismo, los escritores del 98 ofrecen una visión subjetiva y meditada de la realidad.

Etapas

Juventud

En esta primera etapa, estos escritores reflejan un espíritu de protesta y rebeldía. Fue una de las primeras generaciones que intentó romper con las convenciones burguesas.

El «Grupo de los Tres»

Baroja, Azorín y Maeztu se conocieron en Madrid y colaboraron en los mismos periódicos. En 1901 publicaron su manifiesto, donde expresaban su voluntad de cooperar en la regeneración del país. Sin embargo, su campaña fue un fracaso, lo que les condujo a un profundo desengaño. A partir de entonces, abordarán la situación de España desde una actitud más contemplativa e individualista.

Madurez

La mentalidad de esta etapa se caracteriza por los siguientes rasgos:

  • Neorromanticismo: Un retorno al subjetivismo y la emoción.
  • Preocupaciones existenciales: Reflexiones sobre el sentido de la vida, el destino del hombre, la religión, etc.
  • El tema de España: Se aborda desde una perspectiva subjetiva, buscando la «intrahistoria» (el alma del pueblo) en el paisaje y las gentes de Castilla.

Características literarias: El estilo

  1. Fueron el primer grupo que analizó en profundidad la crisis de valores de la sociedad española.
  2. Se rebelaron contra la literatura anterior y la oficial. Sus esfuerzos por renovar la prosa y la poesía fueron simultáneos a los de los modernistas, aunque su interés era más ético y filosófico que puramente estético.
  3. Innovaron en los géneros literarios, configurando el ensayo moderno como un vehículo para la reflexión personal.
  4. Modificaron la novela, introduciendo profundas novedades técnicas como el subjetivismo y la ruptura de la trama tradicional.
  5. Su poesía se preocupa por lo humano y lo trascendental, y no busca únicamente el placer estético.
  6. Se percibe una voluntad antirretórica y un estilo sobrio y cuidado, con un gusto por las palabras tradicionales y castizas.
  7. El subjetivismo es un rasgo fundamental de su estética, lo que explica el intenso lirismo presente en sus obras, incluso en la prosa.

Antonio Machado

Biografía

Nació en Sevilla en el seno de una familia culta y vivió desde joven en Madrid. En 1909 se casó con Leonor Izquierdo, quien murió trágicamente poco después, un hecho que marcó profundamente su vida y su obra.

Contexto y estilo

Su obra hereda el legado del Romanticismo tardío (Bécquer) y del Simbolismo francés. Para Machado, el poeta debe expresar con palabras sencillas los sentimientos universales que todos los seres humanos poseen, pero no siempre pueden expresar.

Obra fundamental: Soledades, galerías y otros poemas (1907)

Movimiento: Esta obra se enmarca dentro del Modernismo, con una clara influencia de la raíz simbolista e intimista.

Temas: Los poemas suelen ser monólogos o diálogos del poeta con su propia alma, en una continua introspección. Trata temas universales como la soledad, la melancolía, el paso del tiempo, la infancia perdida, los sueños y la muerte.

Símbolos: El paisaje que describe no es real, sino un reflejo del alma del poeta, lleno de símbolos recurrentes: el jardín (la intimidad), la fuente (las ilusiones y el fluir de la vida), el camino (la vida), la tarde (la melancolía y la muerte), etc.