Tema 5. Garcilaso de la Vega

1. SU OBRA (breve): la Oda a la flor de Gnido, una epístola en verso dirigida a Boscán, dos elegías, tres églogas, cuatro canciones, cuarenta sonetos y algunas muestras de poesía tradicional de cancionero. Sus sonetos son generalmente de índole amorosa. Las elegías descubren una influencia directa de los clásicos y una actitud estoica ante los sucesos desgraciados, no exenta, sin embargo, de un cierto vitalismo optimista. Las églogas son composiciones poéticas bucólicas en las que varios pastores dialogan sobre determinados temas, generalmente amorosos. La Égloga II fue la primera que escribíó. Es la más extensa y la única de las tres que presenta una acción dramática. La Égloga I consta de 421 versos distribuidos en estancias. En ella, los pastores Salicio y Nemoroso muestran su pesar. La Égloga III, escrita en octavas reales, cuenta que, a orillas del Tajo, cuatro ninfas bordan en sus telas sendas historias de amor y muerte (la historia de Apolo y Dafne o Venus y Adonis). La inclusión de la historia amorosa de Garcilaso (la historia de Elisa, Isabel Freyre, y Nemoroso Garcilaso)

2. TEMAS


El amor tema predominante en la poesía de Garcilaso. Su concepción es neoplatónica y petrarquista. Indiferencia de la dama y dolor del amante, oscilación entre esperanza y desesperanza, el secreto indispensable en el amor cortés, estados de conciencia analizados con agudeza. Su poesía transmite sinceridad, que se ha relacionado con el carácter autobiográfico de los poemas de Garcilaso y con la “retórica de la sinceridad” propia de la poesía de la época. Se advierte cierta evolución desde sus primeras composiciones, más próximas a la lírica cancioneril y sus tópicos amorosos, hasta sus poemas de madurez impregnados de la nueva sentimentalidad renacentista, más suave y melancólica.

Presencia de la naturaleza como entorno idealizado (tópico del locus amoenus) en el que los personajes se quejan de sus cuitas amorosas y como confidente que escucha y consuela a los pastores en sus quejas. El elogio a la naturaleza primitiva y rústica tiene su antecedente directo en la égloga clásica de Virgilio. La utopía pastoril tiene un innegable carácter idealista.

3. ESTILO


En la lírica española de los siglos XVI y XVII se funde la poesía de cancionero con las influencias procedentes de Italia, se crea un nuevo tipo de poesía. La nueva lengua poética se ajusta a los ideales renacentistas de naturalidad y elegancia. Su lenguaje es aparentemente sencillo, fluido y natural. Busca el equilibrio clásico entre la pasión y la contención. Este deseo de armónía se refleja en la frecuente simetría de sus estructuras poéticas: elementos duplicados, juegos de contrarios, paralelismos. El tono de su poesía es dulce, triste y melancólico, como revelan los adjetivos antepuestos, uno de los rasgos más carácterísticos de su estilo.
Predominio del endecasílabo, frecuentemente asociado al heptasílabo, lo que le proporciona una gran libertad expresiva. Es un verso muy musical por la combinación de acentos y rimas, por sus aliteraciones, hipérbatos…


T6


Los místicos aspiran a comunicarse directamente con Dios y expresan esa experiencia a través de sus textos. La lírica moralista surge como medio para frenar el protestantismo y para manifestar la insatisfacción ante la nueva sociedad individualista. El proceso místico por el que el alma se funde con Dios atraviesa tres vías: – Vía purgativa: el hombre se libera del pecado mediante la penitencia y la práctica de la virtud.- Vía iluminativa: el alma se somete a Dios, renuncia a la razón y a la inteligencia humanas y recibe una sabiduría especial que la ilumina. La culminación de la uníón mística es el éxtasis, que supone la anulación total de los sentidos.- Vía unitiva: supone la fusión, la uníón mística entre el alma y Dios. Las dos primeras vías son comunes a ascetas y místicos; a la tercera solo llegan las almas privilegiadas, los místicos. Como figura representativa de la ascética tenemos a Fray Luis de León y de la mística a San Juan De la Cruz y Santa Teresa de Jesús.

FRAY Luis DE LEÓN:


Los poemas de fray Luis suelen agruparse en tres periodos a) Poemas escritos antes de la prisión: Oda a la vida retirada, La profecía del Tajo. Nos encontramos con un escritor moralista dentro de la tradición clásica: deseo de soledad, desprecio de los placeres mundanos… b) Poemas escritos en prisión: Noche serena o En la Ascensión; Estos textos dan cabida a contenidos religiosos, así como a las quejas por la injusticia cometida con él. C) Poemas escritos después de prisión: Oda a Francisco Salinas. Se nos presenta el espíritu de un escritor más apaciguado, anhelo de armónía e infinitud, nostalgia del paraíso evocado, cierto misticismo intelectual. TEMAS La poesía permite a Fray Luis olvidar sus desgracias y calmar sus tormentos interiores. De ahí los temas predilectos de sus poemas: la naturaleza, la añoranza del campo y de la vida de la aldea, su predilección por la noche y la música. La mayor parte de los motivos de su poesía se relacionan con el tópico latino Beatus ille. Este anhelo de la vida sencilla lo conduce de modo natural, dentro de un concepto cristiano del mundo, a la añoranza del cielo como suprema liberación. Se suele hablar de la poesía de fray Luis como expresión de la nostalgia del desterrado en la tierra. De ahí su ansia de perfección, su anhelo de uníón con la divinidad, un anhelo que lo acerca a la experiencia mística, aunque su poesía celebra un éxtasis intelectual en el que se intuye la armónía universal, pero del que se vuelve a caer en la tierra, vista como dolorosa visión. ESTILO es deudora de las tradiciones literarias de las que parte: la Antigüedad grecolatina, los textos bíblicos y la poesía renacentista, especialmente la de Garcilaso. Su poesía es de una simplicidad aparente, se puede observar una trabajada construcción poética, siempre dentro de la norma renacentista de la elegancia y de la sencillez. Dicha elaboración se comprueba en el uso de abundantes figuras retóricas. Un rasgo peculiar de este autor es que sus poesías están dirigidas a una segunda persona, esto explica el carácter conversacional que suelen tener.


SAN Juan DE LA CRUZ:
OBRA Compuso tres grandes poemas: – Cántico espiritual. Obra influida por el Cantar de los Cantares, Noche oscura, Llama de amor viva. TEMAS aparecen: El amor que saca de sí al enamorado y lo transporta a la uníón inefable, la luz como representación de la divinidad, la caza del amor. Sin salir de los textos poéticos mismos, estos pueden entenderse perfectamente como poemas amorosos dentro de su contexto poético, pero tal como su autor intentó explicar, estos textos van más allá del obvio contenido erótico e intenta expresar un contenido espiritual trascendente. Intenta comunicar la inefable uníón mística y para ello el único término de comparación es el del amor humano. El concibe la fe como tiniebla, ello nos da la clave del símbolo de la “noche oscura”, central en su poesía. ESTILO: La literatura del amor cortés, La tradición de la poesía culta renacentista: utilización del endecasílabo, de la lira y de determinadas imágenes, La tradición castellana de la poesía popular y de los cancioneros: de ella toma temas, vocabulario, estribillos, La tradición de la poesía bíblica del Cantar de los Cantares. San Juan se sirve de estas tradiciones para componer una poesía simbolista. Carácterísticas estilísticas de san Juan: Predominio del sustantivo, Escasez del verbo y del adjetivo. En cuanto al léxico, es deudora de sus fuentes y en ella conviven vocablos de origen popular, los de origen bíblico y los de raíz latinizante.

SANTA TERESA DE JESÚS:


OBRAS Las principales obras de esta poeta mística son: Camino de perfección, Las moradas y Castillo interior. RASGOS POÉTICOS Uso de alegorías: el castillo con siete moradas en cuyo centro se encuentra Dios representa el alma; a su vez, el alma misma penetra en él y recorre las estancias hasta alcanzar en la última el matrimonio místico. Uso inaudito de términos con creación de nuevas palabras. Transformación de un elemento en su contrario, borrando así la oposición. Uso de un lenguaje que necesita explicación, un lenguaje místico que necesita un espacio, el castillo o la morada.