Fundamentos y Crisis de la Restauración Borbónica (1875-1923): El Sistema Canovista y el Desastre del 98

I. Los Fundamentos del Sistema Canovista

1. Bases Ideológicas del Sistema Canovista

Los fundamentos del sistema canovista se forjaron mediante una fusión de influencias que dieron como resultado un pensamiento caracterizado por:

  • El pragmatismo en política, alejado de posturas dogmáticas.
  • La defensa de la constitución histórica de España, es decir, de sus costumbres y su historia.
  • La soberanía compartida (Rey y Cortes) frente a la soberanía nacional.
  • Un pesimismo basado en el ex.

2. El Manifiesto de Sandhurst

El manifiesto fue redactado por Cánovas y firmado por don Alfonso en la academia militar donde se formaba. Recogía las ideas básicas del proyecto restaurador:

  • Carácter abierto e integrador de la monarquía constitucional.
  • Necesidad de que la tradición católica fuera compatible con la libertad.
  • Superación de las dos constituciones precedentes (1845 y 1869).

II. Marco Legal y Político de la Restauración

3. La Constitución de 1876

La Constitución de 1876 ha sido hasta el momento la de mayor vigencia en la historia contemporánea de España, pues duró hasta 1923. Su principal logro fue la estabilidad de la que había carecido el país desde 1808. Se trata de un texto breve con solo 89 artículos que surgió como un punto intermedio entre las dos constituciones precedentes, las de 1845 y 1869. El texto del anteproyecto fue aprobado por las Cortes surgidas de las elecciones mediante sufragio universal por amplia mayoría. La forma en que se elaboró mostraba el espíritu de partida: el pacto, lo que explica su durabilidad. Su escasa concreción dejaba en manos del partido gobernante aspectos como el sufragio o la cuestión religiosa.

Rasgos principales:

  • Soberanía compartida Rey-Cortes, porque ambas instituciones son parte de la constitución histórica.
  • El derecho de sufragio se dejaba pendiente al no precisar el sistema de votación.
  • La cuestión religiosa provocó un intenso debate: se declaraba al Estado confesional y se le encomendaba el mantenimiento del culto, pero se introducía la libertad religiosa, aunque limitada a las manifestaciones privadas.

4. El Sistema de Partidos y el Turnismo

Cánovas defendía que los partidos debían ser un instrumento al servicio de la monarquía. Para ello era necesario formar nuevos partidos que creasen un muro de contención frente a los radicalismos republicanos y los carlistas. Acabó imponiéndose un sistema bipartidista dominado por el Partido Conservador, liderado por Cánovas, y el Partido Liberal, liderado por Sagasta.

Partidos Dinásticos:

  • Partido Conservador: Se formó en mayo de 1875 sobre los restos del Partido Moderado y sectores de los Constitucionales.
  • Partido Liberal: Tardó más en formarse. Su origen estaba en el Partido Constitucional de Serrano y Sagasta. Lo integraban progresistas de derechas y la izquierda de la Unión Liberal. Su bandera era la Constitución de 1869. Se unió con el Partido Liberal y se formó el Partido Liberal Fusionista con Sagasta como líder. Este partido representaba al sector reformista de la Restauración.

Partidos Excluidos del Poder:

Al margen de los dos grandes partidos había otros excluidos de alcanzar el poder:

  • Los Republicanos: Divididos en los radicales de Manuel Ruiz Zorrilla, los unitarios de Emilio Castelar y los federales de Pi i Maragall.
  • El Carlismo: Situado a la derecha, dividido tras la derrota de 1876.
  • Movimientos Obreros: Tanto socialista como anarquista. Solo al final de la Restauración consiguieron peso electoral y alguna representación parlamentaria.

El Turnismo:

El turnismo fue un elemento fundamental de la Restauración. Comenzó con la exigencia de Sagasta de que el rey llamase a gobernar. La decisión del rey inauguró el relevo pacífico en el poder de los conservadores y liberales y alejó el riesgo de golpes y motines. Para lograrlo se acordó la manipulación electoral. El rey llamaba a gobernar al partido que estaba en la oposición, es decir, el primer paso era contar con el apoyo de la Corona. El rey disolvía las Cortes y se convocaban elecciones. El nuevo gobierno manipulaba el resultado, creando la mayoría y el respaldo de las Cortes.

5. ¿En qué consistía el Caciquismo?

Un grupo formado por la burguesía y la aristocracia dominaba el sistema, mientras que la España real quedaba excluida del poder político. El poder político estaba en manos de los altos cargos de Madrid, los gobernadores civiles en las provincias y los caciques en los pueblos y pequeñas ciudades. Cada uno, en su ámbito, concedía favores a cambio de votos y apoyo político. Así, el clientelismo y el populismo fueron los instrumentos de participación en la política. El pueblo se sentía parte del sistema a través del cobro de favores, la compra de votos o la fidelidad al patrono, por eso pervivió durante tanto tiempo.

III. Fases de la Restauración

6. El Reinado de Alfonso XII: Dominio del Partido Conservador (1876-1881)

La presidencia de Cánovas, conocida como dictadura canovista, tuvo como objetivo garantizar la consolidación de la monarquía restaurada y construir un sistema político de orden autoritario muy centralizado. El recorte de libertades o la censura de prensa, sobre todo la republicana, trataron de acallar las protestas. La libertad de reunión, que establecía una división de partidos en legales e ilegales, fue derogada.

En esta etapa se concluyeron conflictos pendientes:

  • El conflicto carlista se saldó con la derrota de Carlos VII y la abolición de los fueros de las provincias vascas. El carlismo entró en decadencia.
  • La guerra cubana acabó con la firma de la Paz de Zanjón. Hubo mejoras (amnistía, libertad de colonos…), pero Cuba mantuvo su estatus colonial, por lo que el problema resurgió de forma definitiva.

7. El Gobierno Largo Liberal (1885-1890)

El gobierno de Sagasta fue el de mayor duración de la Restauración, con una serie de reformas legislativas de carácter liberal:

  • La Ley de Asociaciones de 1887, que regulaba el derecho de asociación reconocido por la Constitución de 1876, legalizó los sindicatos obreros y reguló la presencia pública de las órdenes religiosas.
  • La Ley de Imprenta favoreció la libertad de prensa al suprimir la censura previa e impedir que la jurisdicción militar actuara.
  • La Ley de Sufragio Universal permitió integrar en el sistema a los republicanos, pero se mantuvo el fraude electoral.
  • El Código Civil y la Ley de Procedimiento Administrativo mejoraron el funcionamiento del Estado liberal.
  • La reforma del ejército modernizó las fuerzas armadas, pero la ley fue retirada y el ministro dimitió.

IV. Contexto Económico y Social

8. Definiciones Económicas Clave

Proteccionismo:

Doctrina económica que intenta favorecer la producción nacional frente a la competencia extranjera haciendo pagar impuestos por la importación de productos extranjeros.

Librecambismo:

Doctrina económica según la cual la actividad económica debe desenvolverse sin la intervención del Estado, basada únicamente en el interés individual y en el principio de la oferta y demanda. Cree en la libertad del comercio internacional.

12. El Nacionalismo Vasco

La literatura foral fue la base del primer nacionalismo vasco. Tras la derrota del carlismo, los juristas se dividieron en dos grupos políticos: unos defendían la unión vasco-navarra para reivindicar los fueros, mientras que los segundos evolucionaron al autonomismo. La burguesía industrial, enriquecida por el desarrollo de la siderurgia y el comercio, optó por apoyar el sistema canovista. La clase obrera se distanció del nacionalismo, al que vincularon con los sectores reaccionarios y tradicionalistas.

Sabino Arana fue su máximo líder e ideólogo. Militó en el carlismo en su juventud. En 1895 fundó el Partido Nacionalista Vasco (PNV). Arana, de ideología clerical y tradicionalista, reivindicaba la raza, la lengua y las costumbres con un carácter xenófobo y racista. Fue moderando sus ideas al ser elegido diputado provincial y se acercó a los postulados moderados del catalanismo burgués.

13. El Movimiento Obrero

Pablo Iglesias fundó el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) como partido de clase que defendía los derechos del proletariado. A partir de 1883 combinó el ideario revolucionario marxista con medidas más realistas: la participación en la vida política, la creación de sociedades de producción y consumo o la mutualidad obrera de Madrid. Se fundó la Unión General de Trabajadores (UGT).

El anarquismo fue la ideología obrera más influyente en la Restauración. Fue introducido durante el Sexenio por el italiano Giuseppe Fanelli. En esta etapa se centró en la captación de seguidores y la acción terrorista, por lo que fueron clandestinos y perseguidos. La mayor difusión se dio durante la regencia de María Cristina, sobre todo en el campesinado andaluz y los obreros catalanes. La organización La Mano Negra sembró el terror en la década de 1880. Andalucía y Barcelona fueron los principales centros del anarquismo español.

V. La Crisis del 98 y el Fin del Imperio

9. La Pérdida de las Colonias

En 1895 se produjo la insurrección nacionalista que dio lugar a la última guerra cubana, que primero enfrentó al ejército español. La guerra hispano-cubana se desarrolló en cuatro etapas:

  1. Primera fase: Desde la sublevación en 1895 hasta la muerte del líder de la Independencia, José Martí.
  2. Segunda fase: Octubre de 1895. Fue el momento de mayor avance de los sublevados. El General Martínez Campos se vio incapaz.
  3. Tercera fase: El General Weyler sustituyó a Martínez Campos. Aunque fracasó, se intensificó en este momento la interferencia de Estados Unidos en el conflicto.
  4. Cuarta fase: Con el General Blanco al frente, en un ambiente hostil, desembocó en la intervención directa de Estados Unidos.

10. El Pacto del Pardo

Se acordó entre Cánovas y Sagasta, quienes se comprometieron a apoyar la Regencia para defender la monarquía de las amenazas carlistas y republicanas.

11. La Guerra Hispano-Estadounidense

Estados Unidos, interesada en el Caribe desde tiempo atrás, intentó varias veces comprar la isla de Cuba a España. Además, la guerra hispano-cubana coincidió con la expansión del imperialismo norteamericano en el propio continente. Durante la presencia demócrata, la ayuda a los insurrectos cubanos fue constante a través de la Junta Cubana. Las reformas introducidas en la isla por el gobierno de Sagasta no satisfacieron las exigencias del nuevo presidente, que abogaba por la compra o la anexión.

La explosión del acorazado estadounidense Maine en La Habana provocó la declaración de la guerra. En medio de una fuerte campaña contra el gobierno español, el embajador de Estados Unidos presentó un plan de compra que España rechazó. La prensa y la diplomacia estadounidenses acusaban a los españoles de haber provocado el hundimiento, lo que exaltó el fervor patriótico de ambos países. Estados Unidos declaró la guerra a España.

A la guerra se opusieron parte de los carlistas, republicanos, anarquistas, socialistas y sectores populares, ya que estos soportaban el conflicto de forma directa como soldados, mientras que los jóvenes de clase alta se libraban mediante el pago de alistamiento. Aun conscientes de la inferioridad militar, la flota española se enfrentó a la poderosa armada de Estados Unidos. El resultado fueron las derrotas estrepitosas, una en Cavite y otra en Santiago de Cuba.

El 10 de diciembre se firmó el Tratado de París por el que España reconocía la independencia de Cuba y cedía Puerto Rico, Filipinas y la isla de Guam a Estados Unidos. La delegación española apenas pudo negociar, ya que le fueron impuestas condiciones. Entregó al imperio alemán las islas Carolinas, las Marianas y Palaos, quedando así liquidado el imperio español.

15. ¿Cuál fue el pretexto para que comenzara la guerra hispano-estadounidense?

Estados Unidos, interesada en el Caribe desde tiempo atrás, había intentado varias veces comprar la isla de Cuba a España. Además, la guerra hispano-cubana coincidió con la expansión del imperialismo norteamericano en el propio continente.