Orígenes del conocimiento: Hume y Descartes

Hume explica q nuestras ideas tienen su origen en la experiencia sensible y la única forma d saber si 1 enuci s verdadero s revisarlo con ls datos d la experiencia. Tbm afirma q solo s real aqueyo q s accesible a ls sentidos. Ay varios postula2 d la teoría del conocimiento, l 1º s l principio empirista q afirma q nuestro cto viene d ls senti2 y niega la existencia d ls ideas innatas. Según ume en nuestra mente, ay 2 tipos d percepciones, ls impresiones q son datos inmediatos d la experiencia y ls Ideas q son copias o imágenes d ls impresiones (principio d copia). Ls impresiones provienen d ls senti2 y son externas si provienen d sensaciones e internas si provienen d la reflexión x la q captamos lo q ocurre en nuestro interior. Tbm son inmediatas, actuales y previas a ls ideas. La diferencia entre ambas s q s reducen a la fuerza y al orden en q aparecen, ls ideas verdaderas son siempre posteriores a las ideas. Estos principios tienen una importante implicación gnoseologica y no tienen contacto directo entre la mente y los objetos. Las ideas a parte de internas o externas, tanto las impresiones como las ideas son simples y compuestas. Puede haber ideas complejas por ser copias de impresiones como por ser del producto de una asociación de ideas simples (principio de asociación). Está realizada por la imaginación y ocurre de dos formas, de modo arbitrario y libre o siguiendo unas pautas generales de asociación de ideas que son tres, la semejanza, contigüidad espacio-temporal y la  relación causa
Efecto. Para Hume niega la existencia de las ideas universales ya que las ideas uní son meros nombres, para él lo que son ideas generales como un hombre o un cabello son ideas particulares a las que se le unen un termino q le da un significado mas extenso y que hace que lo recuerden a las ideas particulares. En definitiva los términos universales son meros nombres que ponemos a un conjunto de ideas simples. Los tipos de cto de H son las relaciones entre ideas,  en las que se obtiene vrds analizando las ideas que guardan una determinada relación.Son vrds. Su negación es imposbile, contradictoria e inconcebible.Son propias de las ciencias formales. El otro tipo son las cuestiones de hecho: que se construyen apartir de los datos obtenidos por la experiencia y su verdad solo es conocida por una comprobación experimental. Su negación es posible y concebible, en el que están las ciencias empíricas.  Hume considera solo legitimas las ideas que se derivan de las impresiones y reflejan cuestiones de hecho o relaciones entre las ideas y si no tiene ese origen es rechazado como irracional. Así afronta la crítica de los conceptos de la metafísica, el concepto de causa: no evidencia empírica de la conexión necesaria entre causa y efecto; concepto de substancia no evidencia de la substancia como sujeto de lascuali s


La idea de casualidad es una idea compleja formada por dos ideas, la de causa y la de efecto, son diferentes xk el análisis apriori de causa permite deducir el efecto. El efecto se descubre por la experiencia a posteriori. La relación entre ambas no es una relación entre ideas. La relación entre efecto y causa se basa en la contigüidad espacio-temporal y la sucecion primero la causa y luego el efecto. Los dos son objeto de una impresión pero no son suficientes para establecer una relación casual entre dos fenómenos. Esos feno solo pueden pasar uno al otro y estar contiguos en el espacio sin que medie entre ellos una relación casual. La idea de causa  debe tener un nexo necesario entre causa y efecto que no viene de ninguna impresión. Así la casualidad es una idea sin fundamento empírico. En conclusión el principio de casualidad es un sentimiento irracional instalado en el hombre y que hace creer en la regularidad de la natu. Esa aplicación del principio de casualidad debe restringirse a la experiencia sensible. La negación de la validez objetiva del principio de casualidad afecta a la naturaleza de las leyes científicas.Nosotros seguimos un razonamiento inductivo: obser que un fenómeno causa-efecto ocurre siempre en el pasado y de esas observacionesparti inducimos el principio universal de que siempre será así. Pues la inducción no puede proporcionar leyes universales, ya que si no podemos afirmar que cierto fenómeno ocurre como resultado de ciertas causas, no podemos decir q vaya a ocurrir en el futu. Las leyes cienti expresan alto grado de probabi pero no de necesidad, no son universales ni necesarias, son solo probables. En todo caso podremos seguir usando el principio de casualidad y seguir suponiendo que las leyes cienti son nece cuando revisemos la ley universal y necesarias cuando econtremos un ejemplo en contra y limitar su aplicación al ámbito de la expereciencia sensible.  Crítica al concepto de substancia corpórea extensa, Hume afirma q si no es posible tener una impresión ni externa ni interna de la substancia no podemos afirmar que en verdad existe. La idea de susbtancia carece de validez objetiva. Al igual que en el caso de la causa, es la costumbre  la creencia o el sentimiento que nos lleva a suponer qye hay algo q da cohesión a las cualidades sensibles, la imaginación es, es una especie de instinto natural a racional. C´ritica a los conceptos de alma y Dios: Hume explica q la impresión en si no existe,solo existen las impresiones de dolores alegrías y placeres, que suceden de manera continua. Por eso la idea del yo no puede provenir de ninguna de esas impresiones. Para el, somos impresiones e ideas en perpetuo flujo así como tampoco podemos probar la existencia de Dios debido a q no podemos 


captar los snetidos, ni podemos cocnluir su existencia como causa final. En resumen no puede afirmarse la existencia del mundo fisiico ni del más allá del alma ni de Dios. FEnomismo: los principios epistemologicos conducen a H a conclusiones escépticas ya que no podemos aber como son las cosas, solo lo que se nos manifeista de ellas. No podemos saber si existen esas cosas  por nuestras impresiones e ideas solo sabemos que tenemos esa impresiones. H T.II:

Fundamento de la moral

La mayoría de pensadores ilustradores situaron el fundamento de la moral en la razón, en la que la razón descubría cual es la naturaleza humana y deduce que comportamientos son buenos omalos. Hume, en cambio rechaza este fundamento por tres razones: La primera es que no hayuna conexión lógica entre el ser y el deber. Que un determinado comportamiento sea natural y bueno para el hombre no significa q deducir sea una obligación moral par él.  confunde el “ser” con el “deber-ser” incurre en la llamada falacia naturalista. La moral, el “deber-ser”, no puede deducirse racionalmente del análisis de cómo es el hombre, el “ser. (2) la  razón pueda  ayudarnos a juzgar si un comportamiento es aconsejable, lo que no puede hacer es impulsarnos, motivarnos, a llevarlo a cabo.  Es el deseo, la pasión, la que nos mueve a obrar, no la fría razón (3) los juicios morales, las distinciones entre un comportamiento bueno y otro malo, no son captados o formulados por la razón.  Todos los objetos del conocimiento se reducen a: a.  conocimiento de relaciones entre ideas, y b.  conocimiento de cuestiones de hecho . En conclusión las distinciones morales no pueden ser una relación entre ideas y tmpc sin una cuestión de hecho.Hume concluye que el fundamento de la moral no hay que buscarlo en la razón.  El papel de la razón en la moral es un tanto secundario y auxiliar.  Se limita a ser “esclava de las pasiones”, es decir, una vez que el deseo o pasión busca un objetivo, la motal hos ayuda a elegir los medios más adecuados para conseguirlo;  puede también la razón instruirnos acerca de qué tendencias o acciones resultan perjudiciales o útiles, y con ello tal vez excitar el sentimiento moral apropiado, pero no lo causa. Para H la base de la moral está en el sentimiento.  La moralidad no es objeto de la razón sino del sentimiento.  No es la razón quien capta si una acción es buena o mala, es el corazón quien lo hace y el sentimiento como base de la moralidad es el dolor y placer.La virtud produce un placer de tipo particular, así como el vicio provoca un dolor de tipo particular.

SEntido moral:

lo define como capacidad de apreciar -de sentir- lo que es bueno y lo que es malo,  “un impulso o instinto natural inexplicable, una cualidad original del alma, inseparable de ella, por malo”.  Y lo compara con el sentido estético. Considera que los juicios morales son algo subjetivo y cambiante y sostiene q el sentido moral es universal estable e infalible. Hay unos principios:  La simpatía.  Es la fuente capital de las distinciones morales. 


 Esa comunicación  permite que coincidamos valoraciones morales.   2. La costumbre o el hábito.  Experimentar repetidas veces que determinados actos nos producen un sentimiento de agrado o malestar genera un hábito que nos ayuda a juzgar de la misma manera los mismos hechos.  Se producen así “máximas generales” que nos ayudan a orientar las pasiones, a corregir su variabilidad.  3. La creencia.  El hábito de juzgar algo como bueno o malo alfinal produce la creencia de que algo es bueno o malo.  Esto nos permite tomar la decisión correcta sin tener que esperar a experimentar los sentimientos desencadenados por nuestras acciones.  4. Las convenciones sociales.  Son las normas de conducta que imperan en nuestro entorno, imprescindibles para el orden social.  Actúan como elemento estabilizador y modulador de las pasiones.

La virtud:

H define la virtud como cualquier acción o cualidad mental que  da a quien lo ve un sentimeitno agradable o de aprobación. Sus elementos son la utilidad y el placer. Clasifica las virtudes en útiles:  para el prójimo y la comunidad: benevolencia, simpatía, justicia b.  para nosotros mismos: inteligencia, fuerza de voluntad, diligencia, frugalidad; y agradables: para los demás: modestia, urbanidad, cortesía, ingenio b.  para nosotros mismos: alegría, valor audacia, bondad, sosiego. Y tmbn las clasifica en  virtudes naturales: tienen su origen en la naturaleza humana y son más universales.  Algunos ejemplos son: la compasión, la generosidad, la caridad, la gratitud, la amistad, la clemencia, la prudencia, el orgullo, la perseverancia, la paciencia. Dentro de ellas distingue las: voluntarias: como el orgullo ;  involuntarias: el sentido común;  virtudes artificiales: son las que dependen de las estructuras sociales y pueden variar de una sociedad a otra.  Hume considera que son más necesarios que las naturales para el buen funcionamiento de la sociedad, por eso las define y analiza con detenimiento.  Las principales son: la justicia, la fidelidad a las promesas, la lealtad, la castidad y la modestia

. Sociedad y política de H:

Su teoría política esta basada en el análisis  el análisis de los hechos, con el correspondiente rechazo de hipótesis filosóficas y de toda explicación que no sea congruente con los hechos, y 2- la noción de utilidad, en el sentimiento de interés o de ventaja, el fundamento explicativo de la  vida social y de la comprensión de sus instituciones y de las leyes por las que se regula.  1- Este carácter empírico de la política es lo que le permite, precisamente, considerarla como una ciencia, llegando a incluirla, en ocasiones, en el grupo de la física y la química.  Hume está convencido de que las formas de gobierno no depende de los “humores y temperamentos” de los seres humanos, por lo que, analizando adecuadamente la experiencia, se pueden extraer conocimientos generales y seguros sobre la sociedad, semejantes a los que nos ofrecen las  ciencias empíricas.  El carácter empírico y científico que confiere una filosofía política le aleja de consideraciones descriptivas acerca de lo que debe ser la sociedad


así como de toda consideración basada en “principios” eternos  y abstractos, a partir de los que explicar y / o justificar la legitimidad de ciertas formas de poder, o los fundamentos de las formas de gobierno.  La filosofía política, dado su carácter de ciencia empírica, no versa sobre el “deber ser”, ni puede deducir de tales supuestos “principios” filosóficos conocimiento deductivo alguno sobre la realidad social.  Si Hume reflexiona sobre lo que podría mejorar esta o aquella forma de organización social, lo hace exclusivamente desde el análisis de las ventajas y la utilidad que podrían informar determinadas medidas (como la reforma de la constitución).  2- Las teorías políticas del contrato o pacto social supónían una existencia previa a la existencia social del ser humano, a la que dieron en llamar “estado natural o de naturaleza”.  En dicho estado de naturaleza cada cual sobrevivía utilizando sus propios recursos, de forma individual, sin ningún tipo de existencia social, por lo tanto, de relación comunitaria con los demás.  La sociedad surgiría merced a un contrato o pacto establecido por los individuos mediante el que abandonaban el estado de naturaleza y se integraban en la comunidad, comprometíéndose a renunciar a su propio poder y a acatar las normas sociales.  Hume, por el contrario, considera que la existencia de un estado de naturaleza no es más que una ficción filosófica, que no tuvo nunca lugar ni puede tener realidad alguna.  La “sociedad” no puede deslindarse de la vida del ser humano, al haber un deseo natural que empuja a unirse a los seres de ambos sexos y mantenerse unidos para criar a sus descendientes.  La familia constituye el núcleo básico de la sociedad, que se va ampliando al constatar los beneficios que derivan de tal asociación natural.  La sociedad no se genera, pues, gracias a la reflexión que los seres humanos, en el supuesto estado de naturaleza, realiza sobre su situación y las ventajas de asociarse, sino que es el resultado de un deseo natural (apetito sexual) de uníón que  se plasma entonces en la familia.  Eso no quiere decir, sin embargo, que las instituciones sociales y el estado derivado su legitimidad de la naturaleza de la sociedad, que sean lo que son “por naturaleza”, sino que derivan su legitimidad de una convencíón.  La base de tal convencíón radica enacer la utilidad que las instituciones reportan a la sociedad, al margen de la cual no tendrían sentido. 


T.II D. La teoría de la realidad de Descartes está ligada a su teoría del conocimiento, y gira en torno al concepto de substancia. Substancia es lo real, lo que existe fuera de la mente*, lo autosuficiente y no es un concepto unívoco sino análogo. La substancia en sentido propio es Dios, pues “por substancia no podemos entender ninguna otra cosa sino la que existe de tal manera que no necesita de ninguna otra cosa para existir”. Si substancia es lo que es auto-subsistente, lo que no sólo es en sí –como decía Aristóteles- sino también por sí, es claro que sólo puede aplicarse en sentido propio a Dios.Pero Descartes aplica también el concepto substancia a lo que no necesita más que de Dios para existir, lleva a incluir  la res cogitans y a la res extensa.  En la substancia Descartes distingue entre atributos y modos: Los atributos son las propiedades esenciales de las substancias, lo que nos hace distinguir un tipo de substancia de otro tipo de substancia. Son tres: La infinitud, El pensamiento, La extensión .Los modos son propiedades no esenciales de las substancias, modificaciones variables de los atributos, manera distintas de darse los atributos. Ejemplo: el pensamiento es el atributo de la res cogitans, imaginar, recordar, razón son modos del pensamiento. El movimiento es un modo de la res extensa.  Así  Descartes deduce, tres tipos de substancias conocidas por sus respectivos atributos: La res cogitans(atributo: pensamiento);La res infinita o Dios( atributo: infinitud), La res extensa atributo: extensión.  La existencia de la res cogitans es la primera verdad q se obtiene  aplicando el método, pues lo primero que capto con evidencia es que pienso, luego soy un ser o substancia pensante: res cogitans. El atributo de la mente o alma es el pensamiento porque he conocido que soy en el hecho de pensar. Si la esencia de la res cogitans es pensar  significa que el yo está siempre pensando, aunque no lo recuerde. La res cogitans es una substancia distinta de la res extensa, el alma es distinta del cuerpo su existencia es evidente. Descartes vuelve al dualismo platónico y no conseguirá dar una explicación convincente de la manera en que cuerpo y alma están unidos.

Las res infinita

Trata sobre la existencia de Dios, Le interesa este tema  por las implicaciones para la teoría del conocimiento, El atributo de Dios es la infinitud, entendida como omniperfección: Dios posee todas las cualidades positivas en grado sumo, ilimitado. Pero Descartes se fija en dos: La causalidad divina: es infinita luego: Dios es causa, su esencia produce su existencia, Dios causa continuamente: está creando el mundo desde siempre, con todas sus leyes, que son constantes puesto que y Él es inmutable, no puede cambiar lo que crea.  La veracidad divina es una  cualidad importante de  Dios en el sistema cartesiano, que permite descartar la existencia del genio maligno y avanzar en la aplicación del método más allá del cogito. Dios no puede engañarnos porque la mentira es una imperfección. Descartes cae en un círculo vicioso: utiliza su método para llegar a Dios, a la vez que Dios es la garantía de que las ideas claras y distintas que obtenemos gracias al método son verdaderas.

La res Extensa:

esta


Unidas a la idea de lo corpóreo o material están la idea de extensión y la del movimiento. La extensión es una idea clara y distinta, evidente. No puedo pensar en cuerpos inextensos, luego la extensión parece ser el atributo de la materia. No es una idea ficticia porque se me impone, No puede ser un engaño pues hemos descartado que Dios sea engañador, Luego tiene que ser una idea innata, garantizada por la veracidad divina. Descartes distingue entre: CUALIDADES PRIMARIAS: aquellas que se derivan de la extensión: forma (cuadrado, redondo, etc), tamaño, cantidad, número. Las capto de manera inmediata e evidente. Son las cualidades que resultan matematizables, cuantificables, y por tanto, fuente segura de conocimiento. CUALIDADES SECUNDARIAS: son las impresiones que los cuerpos producen en nosotros*: color, sonido, textura, sabor… Son subjetivas y pueden ser engañosas. Dice Descartes que pueden tener su fundamento en las cualidades primarias, aunque no se puede saber con seguridad. Una vez tenemos una metafísica o teoría de la realidad  podemos desarrollar los distintos saberes. El siguiente sería la Física (el tronco), que podemos deducir a priori de lo que ya sabemos de la res extensa.  De la concepción de la materia como extensión y movimiento deduce Descartes que: No existe el vacío, pues no tiene sentido hablar de espacio (extensión) sin materia, todo está lleno de materia. El universo es infinito, no puede tener límites; sólo podría ser limitado por el vacío, que ya vemos que no existe No hay átomos, la materia es siempre divisible ya que es extensión. Si divido algo extenso, obtengo partes que también son extensas El movimiento es sólo local, de traslación, resultado del choque de partículas entre sí. Los cuerpos no se mueven desde sí mismos, sino que son movidos por otro. El principio de su movimiento es extrínseco.  se deriva una visión mecanicista del universo físico: todo lo material se reduce a una materia extensa que lo ocupa todo y una determinada cantidad de movimiento. Ambos causados por Dios. El universo se parece a un complicado mecanismo, como un reloj,  Todo en la naturaleza está determinado: el orden puesto por Dios en el mundo es necesario e inmutable, lo que lo hace predecible .No hay una verdadera diferencia entre los seres vivos y los inertes: en los seres vivos no hay automovimiento, ni unidad, ni finalidad, no hay naturalezas distintas fuera de la extensión. El análisis causal se limita a las causas material y eficiente, prescindiendo de la formal y la final.  Descartes las siguientes leyes de la Física: Conservación del movimiento:La cantidad de movimiento que Dios confirió al mundo permanece constante. La distribución puede ser distinta, pero la suma total es constante. Inercia: Cada cosa permanece en el estado en que se encuentra si nada la cambia Tendencia al movimiento rectilíneo: Todo lo que se mueve tiende a moverse en línea recta.  La concepción cartesiana del hombre es dualista, el cuerpo (res cogitans) y el alma (res extensa) son dos substancias independientes y autónomas que no se necesitan la una a la otra. Son de naturaleza dsitinta y tienen propiedades dsitintas: el alma es libre, el cuerpo no lo es.


T.I D: a teoría del conocimiento de Descartes se enmarca en el contexto del llamado “problema crítico”. Para D  la filosofía se basa a menudo en argumentos de autoridad y carece de un método fiable como el de las ciencias. La renovación de la filosofía exige dejar de confiar en la tradición y en los argumentos de autoridad. No hay nada por evidente o cierto que parezca que no sea materia de controversia para alguno.  la filosofía – y todo el saber humano- necesita un método que haga posible encontrar verdades que tengan una razonable evidencia externa, verdades aceptables por todos. Y ello es posible porque la realidad es comprensible, podemos llegar a conocer cualquier cosa: Debido a la naturaleza del pensamiento: somos inteligentes Debido al orden y  conexión de las cosas: el mundo es inteligible Por lo  tanto, “no hay cuestión (problema) tan lejana de nosotros que quede fuera de nuestro alcance, o tan profunda que no podamos llegar a conocerla” (Discurso del método) Supuesto que utilicemos perseverantemente el método correcto.  Descartes toma las matemáticas como modelo de ciencia por la claridad y la fuerza de convicción de sus demostraciones y analiza los operaciones cognoscitivas que realiza el matemático. Luego, se inspirará en las matemáticas para proponer un método aplicable a toda ciencia, a toda investigación.  Hay dos caminos que conducen a la evidencia matemática: la intuición y la deducción. Intuición es “la concepción (intelectual) de una mente atenta tan clara y distinta que no admite dudas”. . La deducción: es “el proceso en el que por un movimiento continuo del pensamiento extraemos de lo que conocemos con certeza las conclusiones que se derivan necesariamente de ello.” De la naturaleza de la intuición y la deducción, Descartes deduce las reglas del método:1-Evidencia: no aceptar nada como verdadero si no es una idea clara (presente a la mente) y distinta (diferente de otras de otras)2-Análisis: analizar un problema (proposición, hipótesis, etc.) en sus partes y aplicar a ellas la regla anterior.3-Síntesis: reordenar nuestros pensamientos desde lo más simple hasta lo más complejo, hasta llegar al todo que habíamos descompuesto. Este proceso tiene que ser también evidente en todos sus pasos.4-Enumeración: hacer un recuento completo de todos los pasos dados para asegurarnos de no haber omitido nada.  Descartes hace un recuento de todos los motivos por los que debemos desconfiar de nuestro conocimiento:Los sentidos a menudo nos engañan En ocasiones no podemos distinguir la vigilia del sueño,La fabilidad de nuestro conocimiento en general, El argumento del genio maligno.- La evidencia sensible no es fiable porque a veces: Malinterpretamos lo que nos dicen nuestros sentidos, Encontramos difícil distinguir lo que percibimos de lo que imaginamos, Los datos de los sentidos son engañosos. La duda en Descartes no es espontánea sino:metodológica, provisional,voluntaria ,hiperbólica. Es un instrumento para reconstruir el conjunto de los conocimientos humanos sobre sólidos cimientos.  Su fin es dotar al saber de una organización sitemática total que lo haga inmune  a los ataques de los escépticos.


 que lo haga inmune  a los ataques de los escépticos. Descartes expone tres pruebas de la existencia de Dios: Una basada en mi propia imperfección, Otra basada en mi idea de perfección, Otra basada en mi idea de Dios como ser omniperfecto: el argumento ontológico.Una vez demostrado que Dios existe como ser omniperfecto, su veracidad es garantía de que nuestras ideas claras y distintas –no todas nuestras ideas, sino las que nos resultan evidentes una vez aplicado el método- son verdaderas. De los cuatro motivos de duda desaparece el último, el genio maligno, pero no los otros tres primeros. Tipos de ideas: Adventicias: ideas que provienen de los sentidos, dudosas por los motivos antes mencionados Ficticias: ideas que yo produzco usando la imaginación, sin valor de verdad. Innatas: ideas claras y distintas que encontramos en nuestra mente sin poder determinar su origen, porque las tengo desde siempre pero no son producto de mi imaginación, ni provienen del mundo exterior. Ideas simples que no se distinguen de la facultad de pensar y se van explicitando a medida que se desarrolla la inteligencia. Podemos confiar en nuestra ideas innatas si son realmente claras y distintas, pero sigue siendo verdad que los sentidos nos pueden engañar y que podemos cometer errores al razonar.  La demostración de la existencia de Dios permite a Descartes ampliar el campo de lo conocido y aceptar la existencia de lo material, lo corpóreo: la res extensa, pues es una idea innata garantizada por la veracidad divina. Pero Descartes incurre en un círculo vicioso: aplicando su método consigue demostrar la existencia de Dios, pero luego es Dios quien garantiza que el método no permite tomar por verdaderas ideas que no lo son (como la idea de lo extenso). Parece que el problema crítico sigue siendo insoluble


Comparación Hume-Aristóteles sobre la moral:


coincidencias entre ambos pensadores: la importancia que otorgan a la filosofía práctica, a la moral y la política, por su impacto en la concordia social. El hombre es social por naturaleza, tiende naturalmente a vivir con otros, necesita de los demás, y la convivencia y cooperación entre los miembros de una sociedad, depende, en gran medida, de la moral. Hume es muy crítico con las éticas, incluida la aristotélica, que incurren en la llamada “falacia naturalista”, que consiste en deducir del “ser” el “deber ser”; es decir, del análisis de la naturaleza humana -el ser-, las reglas morales que nos dictan cómo debemos ser, cómo debemos vivir. Efectivamente Aristóteles propone una ética en la que la guía de nuestra vida es la razón. Una ética teleológica y eudemonista, que afirma que el fin último del hombre, aquel al que debemos ordenar nuestros actos es la felicidad. Pero ¿cómo alcanzamos la felicidad? Para responder a esta pregunta Aristóteles hace un análisis de aquellas capacidades o funciones que son propias de la naturaleza humana, pues entiende que, en su correcto ejercicio, en su perfeccionamiento se halla la felicidad. Ahora bien, de todas las capacidades humanas, el hombre alcanzará la excelencia (areté) como hombre, especialmente en el ejercicio de aquella función que le es propia y exclusiva, aquella que le distingue del resto de los animales. Y esa función específica del ser humano es la razón. Luego es la vida según la razón la que otorga al hombre la felicidad. Vemos pues cómo Aristóteles deduce del ser el deber ser. Un error según Hume, pues no es la razón sino el sentimiento quien nos ayuda a distinguir el bien y el mal moral. El fundamento de la moral no se encuentra en la razón, según Hume, por los siguientes motivos: Todo lo que conocemos es o bien relaciones entre ideas, o bien cuestiones de hecho. Las distinciones morales no son relaciones entre ideas, no puedo deducir del ser el deber ser porque el hecho de algo sea de determinada manera no implica en absoluto que deba seguir siendo así. Nuestras percepciones derivan en último término de impresiones. Pero la cualidad moral de un acto, su bondad o maldad, no es algo que pueda captarse por los sentidos. No es objeto de una sensación. En un asesinato, por usar un ejemplo del mismo Hume, podemos captar muchas cosas a través de los sentidos: sangre, gritos, etc., pero no podemos percibir la maldad moral del crimen. No es un color, ni un sonido, ni un olor. Por lo tanto, las distinciones morales no son tampoco una cuestión de hecho. Además, aunque la razón pueda ayudarnos a juzgar si un comportamiento es aconsejable, lo que no puede hacer es impulsarnos, motivarnos a llevarlo a cabo. Es el deseo, la pasión, la que nos mueve a obrar, no la fría razón. Hume concluye, en franca oposición a Aristóteles, que el fundamento de la moral no hay que buscarlo en la razón. El papel de la razón en la moral es un tanto secundario y auxiliar. Se limita a ser “esclava de las pasiones”, es decir, una vez que el deseo o pasión



Se limita a ser “esclava de las pasiones”, es decir, una vez que el deseo o pasión busca un objetivo, la moral nos ayuda a elegir los medios más adecuados para conseguirlo; puede también la razón instruirnos acerca de qué tendencias o acciones resultan perjudiciales o útiles, y con ello tal vez excitar el sentimiento moral apropiado, pero no lo causa. VirtudesHume considera, al igual que Aristóteles, que en el terreno de la moral, lo importante no son los actos aislados sino los hábitos, las costumbres, lo que entendemos por virtudes y vicios. Un solo acto bueno no es suficiente para alcanzar la felicidad, dice Aristóteles, “una golodrina no hace verano”. También Hume entiende que, lo que suscita nuestra aprobación o admiración no son actos buenos puntuales, sino el hábito de hacerlos. Así que para ambos, la virtud supone una repetición de actos buenos, pero, en consonancia con lo expuesto anteriormente, lo que hace bueno a un acto y, en consecuencia a un hábito, es algo objetivo en el caso de Aristóteles, y no es sino algo subjetivo, “un sentimiento de agrado o aprobación” en el caso de Hume. Difieren también en el modo de clasificar las virtudes, que pueden ser intelectuales o morales según Aristóteles, y útiles o agradables, naturales o artificiales en el caso de Hume. Aquí vemos también lo opuesto de los planteamientos de ambos filósofos. Pues para Aristóteles el concepto de “virtud artificial” no tiene sentido, toda virtud supone un perfeccionamiento de la naturaleza humana y tienen un valor universal, para toda cultura, para todo tiempo. Sin embargo, para Hume son precisamente las virtudes artificiales -las que encontramos en una sociedad y pueden no ser tan valoradas en otra-, las más importantes para el buen funcionamiento de la comunidad, y por eso las define y analiza con detenimiento.